¡Hola increíble personita que está leyendo!

Éste libro está bajo edición, lo que significa que estoy arreglando ciertas cosas como:

◾La ortografía
◾Las descripciones
◾La trama

Todo para que puedas vivir la experiencia Bajo Ataque completa

Algunas cosas que vas a notar son:

◾Capítulos más extensos a cómo estaban antes.
◾Si estás releyendo el libro, algunos capítulos han cambiado.
◾Puede que por falta de tiempo haya dejado algunos caps "no conectados". ¿Qué quiero decir con esto? Pues que quizá al final de un capítulo pasé una cosa y al inicio del siguiente otra que no se relacione un poco. Haré lo que pueda para que ésto no suceda, de todas formas, si te encuentras con que el cap "x" termina en:

Jay fue al baño y descubrió que no había papel...

Y después, al inicio del cap "y", te encuentras con que Jay ya ni siquiera está en el baño:

Los ninjas volaron en sus dragones...

Es por esto mismo de las correcciones. A veces cambia tanto un capítulo que no termina igual a como era antes y por falta de tiempo no puedo editar el siguiente capítulo hasta después..... Eh, creo que ya me hice rollo yo sola XD espero que quedará claro.

Recuerda que los títulos de los capítulos con éste símbolo ⚪ son los que ya están editados.

¡feliz lectura!

-Krol

◾◻◾◻◾◻◾◻◾

Lloyd's POV.

-No.

Es la seca respuesta que recibimos por parte del Sensei Walter cuando le contamos nuestro plan de ir por Cole.

-¿No? -repite Mei, algo molesta-. Sé que él no te cae muy bien, pero nos necesita. Gracias a él no me capturaron a mí en el Corredor de los Concejales. Y pienso pagar mi deuda.

La castaña imprime una mirada de completa decisión, haciendo ver que será difícil hacerla cambiar de opinión. Tomo su ejemplo y pongo la misma expresión, incluso se me ocurre cruzar los brazos, pero en cuanto veo la expresión de seriedad en el rostro del sensei Walter termino indeciso. Cruzo los brazos, los dejo caer a los costados solo para volver a la posición inicial... Y termino sin saber bien qué hacer con ellos.

-También me preocupo por Cole, y por ustedes. ¿Qué creen que hará Cybermad si los descubre? ¿Quién creen que lo pagara?

Tragamos saliva. Mi mirada se desvía por no haber pensado en eso. A veces es más fácil tomar decisiones apresuradas que crear un plan en forma. Éste es un tema delicado, así que el sensei tiene razón, no podemos dejarnos llevar por nuestro instinto. El hombre de cabello entrecano lanza un suspiro.

-Si van a arriesgarse deben tener por lo menos un plan.

-¿Encontrar a Cole y salir vivos cuenta como uno? -pregunta Jay, con inocencia.

El sensei junta las cejas. Se lleva una mano al cabello, descubriendo las raíces oscuras. Lo vemos meditar un poco las opciones. Como no hemos sabido nada de mi tío, él es la única figura adulta a quien podemos consultar. Sin él, todas las decisiones recairían en mí, y justo ahora no me imagino capaz de saber qué hacer con exactitud.

-De acuerdo, vayan por él. Pero mientras tanto Rune y Lloyd irán a buscar el prisma de la magia. Gracias a Nya, Ronin y Dareth-más o menos- tenemos el prisma del magnetismo.

-¿En dónde estaba? -pregunta Kai

-Mira por ti mismo -su hermana extiende su brazo.

La gema color carmín encorona el accesorio de oro. Ha estado tanto tiempo con Nya que ni siquiera se me había ocurrido que podría ser algo más que una herencia familiar.

-¿¡El brazalete de mamá!?

-Sí, fue un caos intentar encontrarlo
-cuenta Ronin-. En resumen, estuvimos dando vueltas por todos lados hasta que reparamos en que el prisma había estado frente a nuestras narices todo éste tiempo. ¿Y saben algo? Dareth no paraba de intentar comunicarse con animales.

Vaya, pobres. Esperen ¿¡RUNE Y YO TENEMOS QUE IR POR EL PRISMA DE LA MAGIA!? Ay, no. Tengo un mal presentimiento sobre ésto.

Kai's POV.

Una vez que entramos nos damos cuenta de que éste lugar es más grande de lo que aparenta. En verdad es muy intimidante. Sólo basta con mencionar el gigantesco hangar que está justo en la entrada. No hay docenas, sino miles de vehículos. Si Ninjago se enfrenta a una invasión, sin duda no tendremos oportunidad.

-¿De donde saca tiempo Cybermad para inventar nuevas máquinas malvadas? -pregunta Mei, en voz baja.

-Ojalá supiera -respondo. Me sorprende que haya podido hacerlo, porque sé me ha formado un nudo en la garganta.

Zane estaciona el Invizable en una línea de vehículos del "mismo modelo".

Caminamos hasta el siguiente salón, y ninguno puede parar de mirar boquiabiertos nuestro alrededor. Éste lugar es mucho más grande de lo que aparenta. Por increíble que suene el calor que hace no es tan insoportable, y no creo que se deba sólo al hecho de que soy el maestro del fuego. Sin duda, siento las mejillas tibias, pero nada más. Vemos grupos de Cyborg pasar frente a nosotros, todos perfectamente organizados. Cuando vamos a atravesar a otra estancia aprovecho para tocar la pared de roca. Emite un calorcillo agradable, pero tengo que retirar la mano cuando siento que empieza a quemarme.

Hay un enorme grupo aglomerado alrededor de algo, o alguien. Nos acercamos para ver mejor y nos damos cuenta de lo que se trata. Un hombre forcejea con un guardia para escapar. Sus pesadas y enormes manos arremeten contra el aire. Una mole de ése tamaño sin duda resulta intimidante para cualquiera, y aún más porque se trata de Karloff. Pero, en realidad, el guardia parece estarse divirtiendo.

<<-La gente de aquí está loca, tanto calor debe afectarles el cerebro>>, pienso.

-¡Oye, tú! -el guardia que lucha contra Karloff me señala. Los Cyborg a mi alrededor se abren, haciéndose a un lado y formando un túnel para que quede a la vista.

-¿Yo? -pregunto, como si fuera tonto.

-Sí, tú. Ven y échame una mano.
Trago saliva y miró a Jay, Zane y Mei.

Sus miradas me sirven de consuelo. Tomo aire y doy pasos firmes hacía el frente. Agarro uno de los enormes brazos de Karloff "malvado" y el guardia el otro. Caminamos a otra habitación y pierdo de vista a mis amigos.

Zane's POV.

Vemos a Kai alejarse y perderse tras el muro de piedra. Karloff y el otro guardia van con él. Nuestro plan no incluía separarnos. Sea grande o no la guarida, debemos permanecer unidos. Es el código ninja.

-¡Ésto no está bien! -dice Jay. Lleva ambas manos a su cabeza. Notó su respiración irregular y el como sus ojos quedan fijos en algún punto lejano- ¿A dónde se llevan a Kai? Sé supone que estemos juntos ¿Cómo vamos a estarlo si se lo llevaron? Qué tal si se llevan a otro de nosotros y pasa algo malo ¡SIEMPRE PASA ALGO MALO!

-¡Cálmate! -le pide Mei, dándole una bofetada para que reaccione. No es para nada habitual verla así, y por éso me sorprendo-. Estoy segura de que todo estará bien. Que no se te suba la marea.

-¡Siempre dices éso!

-Es porque es la verdad.

Me llevo una mano a la barbilla y analizo la situación. Toda la guarida parece seguir un orden en espiral, como un caracol, girando entorno al núcleo del volcán.

-¡Muy bien, regresen a sus puestos! -ordena una voz tosca. A nuestro alrededor los Cyborg se mueven de un lado a otro, en filas indias o pequeños grupos de cuatro o tres.

-¿Qué hacemos? ¡No tenemos puestos! -exclama Jay. Comienza a fastidiarme que grite tanto.

-Sólo hay que hacer lo mismo que los demás: movernos por la habitación sin un orden específico -dice Mei.

-¿Estás segura? -pregunto-. Pixal detectó un patrón en el orden en el que se mueven. No es aleatorio.

-Sí, estoy segura. No todo en la vida sigue un orden, Zane.

Miro alterado a Jay, esperando contar con su apoyo,pero él simplemente se encoje de hombros y avanza atrás de Mei. Sin otra opción, hago lo mismo.

Kai's POV.

Llevamos a Karloff a través de un largo pasillo, algo estrecho. Me pone muy nervioso. Siento la necesidad de ayudarlo, de liberarlo y escapar, pero no puedo hacerlo. No importa a dónde corra, en cada esquina hay un secuaz con visor de titanio esperándome. Cuando pasamos al lado de unas escaleras de piedra, el guardia se detiene sin avisar. Casi termino cayendo con mis propias piernas, pero consigo recuperar el equilibrio.

-Ve por ahí -me ordena, señalando con la cabeza las escaleras-. Sigue con tu protocolo asignado.

-¿Y qué hay del... prisionero? -preguntó, deteniéndome en la palabra "del" antes de poder llamarlo por su nombre.

-No me corresponde a mí y menos a ti.

-¿Entonces a quién?

-Haces demasiadas preguntas, debes ser un novato. Te sugiero que te ocupes en tus asuntos y mantengas la boca cerrada, si no quieres meterte en problemas.

Aprieto los labios y el guardia sonríe.
Como se me queda viendo no tengo más opción que hacer lo que me dice. Subo las escaleras de roca volcánica. Rayos. Creí que si lo ayudaba con Karloff me llevaría al lugar en donde tienen a Cole.

Me cubro los ojos con una mano. Una luz sale desde arriba, en donde debería haber un techo, pero no lo hay, sólo están las nubes y el sol que me irrita los ojos cuando lo miro directamente. Regreso la vista al frente y subo el último escalón. Estoy en lo que debería ser un borde peligroso de piedra. Es algo estrecho, a penas y cabe una persona cómodamente. El camino se extiende pegado al volcán, como una espiral que sube y sube y seguro llega a la boca, donde emite una pequeña humarola

Lo que evita que me caiga es un muro algo grueso, completamente de piedra. Miro por encima de él. Sólo veo el extenso desierto de piedra. Miro por encima de él. Sólo veo el extenso desierto que conduce a la ciudad. Yo puedo verlos, pero ellos a mí no. Por éso nadie lo ha descubierto. La vista te engaña, creyendo que el muro es parte del volcán, que no hay nada detrás, pero sí lo hay. Unos quince Cyborg haciendo guardia a lo largo del camino serpenteante.

¿Cuántas veces pasamos por aquí y no lo vimos? Siento un nudo en la garganta, pasé por aquí y nunca lo imaginé.

Camino un poco y me recargo contra la pared, mirando por sobre el muro. Me pregunto cómo le estará yendo a Lloyd y Rune. Tal vez se estén peleando, como hacen desde que se conocen. Me pregunto si desde aquí podré ver el bosque al que fueron....

-¿Descansando en el trabajo, cadete? -una voz femenina me sobresalta, provocando que despegue mi espalda de la pared.

-¡No es lo que parece! -exclamó, rojo de la cara. La chica se ríe.

-Descuida, a mí también me gusta observar todo desde aquí.

Me vuelvo hacia la persona detrás de mí. Su cabello rosa palo se mece con el viento, y es lo que la vuelve inconfundible. Debe ser la única Cyborg en éste lugar con el cabello de ése tono. Mis ojos se fijan en el visor de titanio que ocupa el lugar de uno de sus ojos. Me pregunto qué se sentirá ser un Cyborg. Mitad máquina, mitad hombre.

-Jinx.. ¿Puedo preguntarte una cosa?

-Lo que quieras, guapo.

Pongo los ojos en blanco e ignoro el comentario.

-¿Cómo es que te volviste secuaz de Cybermad?

Regresa la vista al horizonte. Su expresión de torna seria. Jinx demora un poco en responder y cuando lo hace su voz es ronca y casi inaudible.

-A mí me contrataban para deshacerme de bichos gigantes. Treehorns -sonríe-. Era divertido, no los hería, pero los alejaba de los pueblos con el estruendo de bombas -hace una mueca y baja la mirada, al muro-. Hasta que ustedes llegaron.

Recuerdo todos ésos fines de semana en los que íbamos a los bosques y ahuyentábamos a los treehorns. Siempre creí que ayudábamos a la gente al hacerlo,jamás me cruzó por la cabeza que heríamos a alguien. A Jinx.

-Perdí todo -añade, con la voz ligeramente ahogada, pero luego frunce el entrecejo.

-Lo siento.

Sé encoje de hombros, como si no hubiese sido nada. Pero su expresión me hace creer que le importa en verdad. Es duro perder algo que amas, algo por lo que has trabajado duro. Ésas cicatrices no se curan con facilidad.

-Entonces... -empiezo, intentando cambiar rápido de tema, algo incómodo-. Todos los que están aquí... nos odian.

-Seh -responde,asintiendo con la
cabeza, luego me mira y pone los ojos en blanco-. Pero yo no te odio a ti, ahora sé que eres lindo.

-¿Gracias?

Pienso en todos los Cyborg. Son muchos, cientos. Y todos nos odian, cada uno tiene su propia historia, su propia razón por la cual quiere deshacerse de nosotros. En verdad vivíamos en la ignorancia. Tal vez somos más odiados que necesitados.

Jay's POV.

Después de estar un rato dando vueltas sin sentido empiezo a marearme. Miro de reojo al Cyborg que parece supervisarnos, me sobresalto al darme cuenta de que nos mira fijamente.

-¡Ustedes!

Oh-oh. Ya nos cachó.

Nos detenemos. Giró la cabeza en dirección al hombre barbón que nos escruta con la mirada. Está de pie sobre un punto alto, analizando todo con la afilada mirada de un halcón.

-¿Sí? -pregunta Zane.

-¿Por qué no están siguiendo el orden?

-¿Hay un orden? -murmura Mei.

Me vuelvo hacia ella con una expresión algo molesta. Mei sonríe ampliamente, como pidiéndome que le reste importancia.

-Deben ser los nuevos... Argh ¡Sólo diríjanse a la sala de ensamblaje de vehículos!

Caminamos, de regreso al hangar, evitando las miradas burlonas de los demás secuaces.

-Te dije que había un orden -le dice Zane a Mei con una sonrisa y en voz baja.

-Ya mejor no me digan nada -farfulla Mei, algo triste.

Kai's POV.

Camino dando pasos largos, con dirección al hangar. Mis botas se mueven deprisa sobre el suelo de piedra oscura. Siento mi pulso acelerado y una oleada de escalofríos estremecer mi carne. Ya busqué a mis amigos por toda la estúpida guarida. Entré en sitios donde tal vez no debí. Cada vez que abrí una puerta, en las salas de computadoras y ensamblaje, los Cyborg me dirigieron miradas asesinas. Me sentí devuelta a mi infancia, cuando quería jugar con otros niños del pueblo y sólo me miraban con desaprobación.

<<-Debí decirles que no llamaran la atención>>, me reprendo a mí mismo. Cierro los ojos y aprieto el paso al divisar al hangar más adelante. <<¡Qué estúpido! Si los han capturado va a ser todo mi culpa...>>

Cuando llego al hangar, freno usando mis pies. Los Cyborg aquí están muy ocupados reparando vehículos como para fijarse en mí. Recorro cada esquina con la mirada. Busco rasgos familiares, con desesperación. Un chico que parece más nindroide que humano, un par de brillantes y desafiantes ojos agua marina, o un pecoso pelirrojo que no pare de hablar. Zane... Mei... Jay... ¿¡En dónde están!?

Entonces, los encuentro. Dejó salir la tensión con un sonoro suspiro de alivio y me acerco a ellos con aire casual. Como si hace unos segundos esos tres no hubiesen estado a punto de provocarme un susto terrible.

-¡Chicos! -exclamo, sin importarme el volumen de mi voz. Hay tanto ruido de cierras cortando metal y llaves y herramientas golpeando cosas que a penas y me escucho a mí mismo-. ¡No van a creer lo que descubrí.

-¿¡Encontraste a Cole!? -pregunta Mei, con brillos en los ojos, saltando de su lugar con tanta rapidez que casi tira a Jay con su brazo.

-No...

-Oh... -regresa a su posición, recargada en el vehículo, y baja la mirada.

Espero que lo que les voy a decir la anime un poco.

-En realidad averigüe que todos los secuaces de Cybermad nos odian.
Zane, Jay y Mei fijan sus ojos en mí, sin decir nada.

-¿Eso es todo? -gruñe Jay. No me extraña que si alguien fuese a hablar primero fuera él.

-Sí.

-¿A penas te das cuenta de éso? -pregunta Zane.

-Kai, por lo general, cuando las personas quieren destruir a alguien es porque lo odian -me explica Jay, haciéndome sentir tonto.

-Creí que los láser que casi nos rostizan en el Corredor de los Concejales lo había dejado claro -comenta Mei, con media sonrisa.

-¡Sólo digo que el sensei Wu jamás nos dijo lo odiosos que éramos para algunos!

-Tal vez porque no quería que nos conportáramos como lo haces tú ahora -dice Zane,provocando la risa de Jay. Emito un sonido gutural y frunzo el ceño.

-Kai, en lugar de éso deberías averiguar en dónde tienen a Cole -me regaña Mei.

-¡Eso es! -exclama Zane tan de repente que nos asustamos-. Kai y Mei irán a buscar a Cole,mientras Jay y yo vigilamos el Invizable.

No me sorprende que a él le haya tocado lo más fácil.

-Entonces, nos veremos aquí -dice Mei-. Todos juntos.

En otras circunstancias habríamos puesto nuestras manos al centro y gritado: "¡Ninja-go!",para después hacer Spinjitzu, pero ahora, pueden ser los nervios o el temor a ser descubiertos que hacen que cada quien time su puesto.

Mei y yo avanzamos entre un pasillo que parece interminable. A mi derecha veo salas con computadoras y a mi izquierda un arsenal con toda clase de aparatos. Ninguna cosa buena. Cualquier cosa aquí puede estar diseñada para borrarnos del mapa. Es como una casa del terror para ninjas.

Mientras caminamos a paso veloz acomodo mi casco de hule espuma. No se me ocurre cómo es que a Cybermad le pareció buena idea ponerle cascos a sus uniformes. Por fortuna el de nosotros Ed muy liviano. Que bueno que Dareth tenga ésos amigos cineastas...

Al final del pasillo divisamos unas escaleras de metal. Gracias a nuestros aliados Cyborg sé que ésas escaleras conducen a un grupo de celdas y en una de ellas debe estar Cole.

Mei's POV.

Descendemos las escaleras con brincos. Debemos aprovechar que no hay moros en la costa. Kai se dirige a un tablero con muchos botones. Ésa máquina debe controlar las celdas..

-Cuando encuentres la celda de Cole, avísame -me dice.

Yo asiento. Camino entre lo que podrían ser veinte celdas, cada una diseñada para contener a un maestro elemental diferente. Una de ésas celdas debe tener mi nombre...
Paso una celda tras otra. Vacía, vacía y vacía. No sé si es algo bueno... o malo. Encuentro una celda con una puerta grande de hierro. Me asomo por una rendija, tal vez aquí esté Cole, es decir, es el tipo de celda que se usaría para atrapar a alguien con súper fuerza.

-Cole... ¿Estás aquí? -murmuró.

No hay respuesta desde el interior.

-¿Está todo en orden? -pregunta una voz, detrás de mí.

Puedo sentir como todos mis músculos se tensan y un escalofrío recorriendo mi nuca. Me doy la vuelta con todo el esfuerzo del mundo, como si tuviera plomo en las botas. Un tipo con una máscara ninja me mira, con las cejas arqueadas. Bajo la mirada para no verlo a los ojos.

-Tú no deberías estar aquí -me dice-. Nz21.

¿Nz21? Arqueo una ceja, antes de poder evitarlo.

-¡Ah, sí! -exclamo, antes de arruinarlo todo-. Nz21, ésa soy yo...

-¿Y bien? -la voz de éste extraño es como... No, no puede ser.

-Yo... Estaba buscando el baño -miento.

-Seguro que sí. Bueno, tu división es en los pisos superiores. Creí que ya lo sabrías.

-Sí, es que... recién me reclutaron...

Vaya. En verdad soy un asco mintiendo.

-Bueno, pero que no se repita. Te cubriré por ésta vez.

El sujeto extrañamente amable se marcha. Escucho sus botas golpeando contra los escalones de metal. Su voz aún está impregnada en mi mente. Me arrepiento de no haber visto su cara, tal vez así no estaría tan conmocionada en éstos momentos...

-¿Mei? -es la voz de Kai. Me doy la vuelta.

-Cole no está aquí.

Zane's POV.

Espéramos en la entrada a que Kai y Mei regresen, pero no lo hacen. Me pregunto si algo habrá pasado. De repente, siento un impulso de ir a buscarlos. En ése instante, cuando estoy por decirle a Jay que iré a ver si todo está bien, un chico alto entra a la estancia. De inmediato todos los Cyborg se dirigen al centro del lugar. Supongo que debemos hacer lo mismo, así que jalo a Jay del brazo y nos acercamos. Desde donde estamos puedo ver perfectamente que aquel chico no es un Cyborg, y éso me extraña.

-Oye, Zane ¿Ése no es...? -me pregunta Jay, pero no puede terminar la frase.

Miro al chico, perplejo. Temo no poder responderle a Jay,pero lo hago.

-No podría estar más seguro.

Kai's POV.

-¿Cómo que Cole no está? -pregunto- ¿Entonces en dónde está?

-¿Y cómo se supone que voy a saberlo? -responde Mei-. Todas las celdas están vacías.

-Esto... no tiene sentido... ¿Qué significa?

Mei se encoge de hombros.

¿Acaso Cybermad sabría que vendríamos? ¿Ésto es... una trampa? ¿En dónde está Cole? Tenía la esperanza de que al venir aquí obtendría más respuestas que preguntas... pero no es así, es lo contrario. Cole no pudo desaparecer, tiene que estar por aquí, tiene que.

-Vamos a buscar al piso superior -le digo a Mei.

Justo cuando terminamos de subir las escaleras nos topamos con otra sorpresita: Cryptor.

-¿Qué están haciendo aquí? -nos pregunta.

Mei va a abrir la boca para responder, pero la interrumpo antes de que use su excusa de "buscar el baño".

-Nos perdimos -respondo, encogiéndome de hombros.

-Tú -señala a Mei-. Por ahí, y tú -me toma de la playera-. A la sala de entrenamiento.

Me quedo mirando a Mei, ella también está perpleja.

-¿Tengo que hacer todo yo mismo? -masculla Cryptor, y me arrastra lejos. Lo último que veo antes de doblar la esquina son los ojos dudosos de Mei.

Mei's POV.

Entro a una sala de computadoras en dónde todos los Cyborg traen puesto un uniforme púrpura, como yo. Ahora lo entiendo, el color tiene un propósito, aún no sé cuál, pero sí que cada color pertenece a una división distinta.

Examino, asombrada, el lugar. Hay una isla holográfica en el centro con el mapa de Ninjago y a su alrededor Cyborg trabajando en computadoras individuales. Alzó la vista y me quedo perpleja. Hay pantallas alrededor de todas las paredes. En cada pantalla hay una imagen distinta de Ciudad Nueva Ninjago. Borg no exageraba al temer a Cybermad. Realmente tiene ojos por todas partes. Nos ha estado vigilando todo el tiempo.

Kai's POV.

Cryptor me avienta, literalmente, al interior de una estancia muy amplia.

-¡Vas a dar quince rondas! ¿Oíste, debilucho? -me grita y me cierra la puerta en la cara.

¿Debilucho? ¿¡DEBILUCHO!?

-¿¡A qué te refieres, chatarra ignorant....!? -me detengo en seco al darme cuenta de que todos los ojos están puestos en mí-. Je,je, sólo bromeaba.

Camino sonrojado y muy avergonzado. Wow, nunca había visto algo como ésto. Una pista para correr y toda clase de aparatos de ejercicio ultra modernos. No me extraña que el ejército de Cybermad este en tan buena forma. Tengo que recordarme que él es el enemigo, para no emocionarme demasiado con ésto.

-¿Kai? -una voz familiar pronuncia mi nombre.

-¡Oh, es él! -exclama otro sujeto de voz cavernosa.

Me vuelvo hacia el lugar de las voces. Antes de poder reaccionar de cualquier forma, Clyde, el Cyborg grandulón me abraza y casi me rompe todos los huesos.

-¿Clyde? ¿Ben? -pregunto, cuando puedo respirar de nuevo.

El chico pelirrojo se acerca con una mueca extraña, la cual asumo que es una sonrisa.

-¡Mira éso! Aun estás con vida, debo admitirlo, no los creía capaces.

Hago una mueca.

-Ja-ja -digo, sarcástico- ¿Qué es éste lugar?

-La sala de entrenamiento -responde Clyde.

Vuelvo a mirar a mi alrededor. Los Cyborg aquí están verdes con ropa muy ligera: shorts y blusas en tonos grises, rojos y naranjas. Miro mi "ropa de unicel" y deseo que al menos pueda portar alguna de ésas prendas más cómodas... y costosas.

-Ben, tienes que ayudarme con algo -le pido, concentrándome.

-¿Y ahora qué? Como di enviarles el
mapa de la guarida no bastara...

-Bueno, necesito que me ayudes a encontrar a Mei y a Cole.

-¿Capturaron a Mei? -pregunta, sorprendido.

-No. Pero Cryptor la llevó a quién sabe dónde.

Sus cejas descienden con una expresión que parece decir "ah".

-... ¿De qué color es su uniforme?

-Morado -respondo. ¿Acaso éso importa?

-Debe estar en espionaje. Y tu amigo Cole, cuarta puerta a la izquierda.

-¿Qué? ¿El color significa algo?

-Claro: rojo y naranja fuerza, azul inteligencia y morado espionaje.

-Ah.

Jalo un extremo de mi blusa. De haber sabido aquello mejor los cuatro hubiésemos elegido el mismo color para evitar que nos separasen.

Miro a mi alrededor. Tengo que descubrir cómo salir de aquí para reunirme con Mei y encontrar a Cole.

-Una cosa más... -añado, con una sonrisa forzada.

-Déjamelo a mí -gruñe- ¡Oye, Chuck!

El guardia que está parado en la puerta se vuelve hacía él.

-Ésta máquina tiene un problema.

Aprovecho que el guardia se distrae para salir de ése lugar. Hago una lista mental de las cosas que tengo que hacer. Ir por Mei, encontrar a Cole y salir de aquí cuanto antes.

Mei's POV.
Me quedo en donde estoy sin poder despegar la vista de las pantallas. Una incluso apunta directamente al Dojo de mi familia. Trago saliva. ¿Desde cuánto hace que vigila la ciudad?... ¿Desde cuándo nos vigila a nosotros?

-¿Mei? -me vuelvo y miró a la chica de pelo rosado.

-¡Jinx! -exclamo-. Necesito tu ayuda, ¿Sabes dónde está Cole?

-¿El fantasma apuesto?

Frunzo el ceño.

-Sí...

-Cuarta puerta a la izquierda. A cambio de éso quizá puedas organizarme una cita con Kai.

-Seguro -respondo, extrañada.

Salgo de ése lugar del terror. Una, dos, tres... cuarta puerta. Coloco mi mano en el picaporte, tratando de ganar fuerzas. Mi latido se ha acelerado y necesito respirar por la boca. ¿Qué es lo que voy a encontrar tras ésa puerta?... ¿Estaré lista para éso?

Jay's POV.

No puedo despegar mis ojos de ése sujeto. Pensé que mu mente me estaba jugando trucos, pero Zane también lo sabe. Ése sujeto es el mismo que peleó contra Karloff en el restaurante,el mismo que estaba hablando con Kai como si lo conociera desde hace tiempo.
¿Quién es éste? ¿Por qué conoce a Kai?

-Escuchen todos -dice, dirigiéndose al público Cyborg-. El plan ya se está poniendo en marcha. Permanezcan atentos ante cualquier otro anuncio.

Volteo a ver a Zane. No necesita hablar para saber que está igual que yo. ¿Quién es?

-Disculpe, general Lar. Hay rumores de que el plan se está complicado -dice un Cyborg, al fondo.

-Descuiden. Todo está saliendo a la perfección, que no se les suba la marea.

Al decir ésa última frase casi parece que es Mei quien lo dice.

Kai's POV.

Camino por el pasillo, en busca de mi hermano. Cuando paso tres puertas me detengo en la cuarta. ¿Ben dijo izquierda... o derecha? ¡Bah! El lado derecho siempre ha sido mi favorito, seguro está ahí.

Mei's POV.

Giro el pomo de latón pulido. Cuando la puerta se abre es como un soplo de aire nuevo, casi como un vuelco de sentimientos que no deberían sentirse al mismo tiempo, como miedo y felicidad. El chico de pelo negro se da la vuelta al escuchar la puerta abrirse.

En verdad que soy sentimental porque lágrimas de felicidad amenazan con salir.

Cole se queda perplejo al verme y veo que duda entre ir hacia mí o no, como si aún no creyera que estoy aquí, con él.

-¿Mei? -pregunta, aún sin creérselo.

-Vamos a sacarte de aquí, Cole -le digo, con una sonrisa.

Entonces, su expresión cambia.

-Salgan de aquí -me pide, con algo de miedo.

-No te vamos a dejar.

-Mei, no lo entiendes...

-Claro que sí. Venimos aquí por ti y saldremos contigo.

Cole me mira con suma tristeza.

-Déjame estar aquí para ti, como lo has estado tú para mí. -le pido, él se acerca a mí y me abraza. Siento que ése gesto se lleva todo mi miedo y preocupación, como si sólo estuviésemos él y yo. Entonces se aparta y me mira a los ojos. Tiene miedo, pero también siente algo más. Nos quedamos un rato así y veo que él duda, como si quisiera... no lo sé. Tal vez sólo me lo estoy imaginando. Entonces, se da la vuelta y baja la cabeza.

-No, puedo, Mei -murmura, con tristeza-. Tienen que irse de aquí...
sin mí.

Kai's POV.

Lo que encuentro detrás de ésa puerta no es Cole, pero deja la misma huella en mí. Es el Sensei Wu.

Está recostado en una cama metálica y es como si se hubiese sumergido en un sueño eterno. Me acerco a él, temblando. ¿Él estará....? No, aún respira. Noto que está en calma, no parece herido de alguna forma. Veo como su pecho sube y baja y éso me tranquiliza. Es una señal de vida a la que puedo apegarme.

-Sensei -susurro, y muevo su brazo un poco.

No abre los ojos.

Empiezo a desesperarme, lo muevo con más fuerza.

<<-Despierte, despierte, por favor...>>, pienso, cada vez más desesperado.

Al fin, sus párpados tiemblan un poco y abre los ojos. Bosteza y me mira, somnoliento, como si acabara de despertar de un sueño de mil años.

-¿Kai? ¿Regresaron de la Isla de Chen? ¿Encontraron el diario de Clouse?

Me muerdo el labio. No lo recuerda. El sensei se incorpora y mira a su alrededor. Su mirada se vuelve sombría y todo el estrés y preocupación regresan.

-Esperaba que sólo fuese una pesadilla -murmura.

-Vamos, sensei -digo, pasando su brazo por encima de mi hombro-. Hay que ir por los demás.

El sensei no responde, pero asiente
con la cabeza. Lo ayudo a levantarse, salimos de ésa habitación y abrimos otra puerta, ésta vez, la correcta.

Cole's POV.

¿Qué rayos acabo de hacer? Selle un trato con el malo, un trato que ni siquiera recuerdo. Me muevo nervioso por la habitación vacía, hasta que me desespero. Me siento en el único sillón de la estancia, con los codos en las rodillas y mi cabeza entre las manos. Mis amigos ¿Qué les acabo de hacer? Si tan sólo pudiese recordar algo de lo que dije o hice...

Me pongo de pie, nuevamente y miro la pared contraria. Es de un cristal parecido a un espejo, por lo que puedo ver mi reflejo. ¿En qué me convertí? Soy un monstruo... o lo seré. Les fallé a mis hermanos, a Mei. No me sorprendería que me abandonaran aquí, yo lo haría.

<<-No van a volver, Cole. Tal vez es mejor así,para todos. Ni siquiera puedes recordar una palabra de lo que le dijiste a Cybermad...>>.

En éso, la puerta se abre.

Tardo un poco en darme la vuelta. Después de todo,sólo puede ser Cybermad, o Lar. Cuando me doy la vuelta por completo no puedo creer lo que veo. Es Mei. Está disfrazada como un Cyborg, pero reconocería ésos ojos donde fuera. Es ella, volvió, por mí.

-¿Mei? -pregunto, temiendo que sólo me lo esté imaginando.

-Vamos a sacarte de aquí, Cole -me dice, con una sonrisa que me hace sonreír también, por un momento.

Tienen que irse de aquí. Están en peligro. No sé por qué, pero lo están.

-Salgan de aquí.

-No te vamos a dejar.

Ya sabia que diría éso, peto tengo que hacer que se vayan, antes de que sea tarde.

-Mei, no lo entiendes...

-Claro que sí. Venimos aquí por ti y saldremos contigo.

Aún después de lo que hice, éso que ni siquiera sé qué es.

-Déjame estar aquí para ti, como lo has estado tú para mí -me dice.

Mis pies reaccionan, al igual que mis brazos. La abrazo, como si al hacerlo pudiera despejar todas mis dudas, como si así pudiese asegurarme de que ella es real, que... siento algo. La única emoción real desde que soy fantasma, y es más fuerte que nunca.

Me separo de ella y mis ojos se encuentran con los suyos. Inclino un poco mi cabeza. Siento que las mejillas me arden, que mi corazón salta. Pero, me detengo, al ver mi reflejo en sus ojos. Soy un fantasma, ésto no puede ser así, no quiero lastimarla. Yo viviré por siempre... pero ella... No podemos estar juntos.

-No, puedo, Mei -le digo, dándome la vuelta y bajando la cabeza, porque si la sigo mirando a los ojos...-. Tienen que irse de aquí... sin mí.

-No, Cole -responde, con firmeza.

La puerta vuelve a abrirse.

-¿Kai? ¿¡Sensei Wu!? -escucho a Mei exclamar.

Me doy la vuelta. El primero en quien mis ojos se fijan es Kai. Después... miró al sensei, recargado en uno de sus hombros. Tiene una expresión desafiante en el rostro, como si estuviese listo para enfrentarse a lo que sea.

-¡Cole! Estás bien -Kai quiere venir
hacia mí, pero no puede por el Sensei, quien se apoya en su hombro.

-Tenemos que salir de aquí -dice éste.

Alguien me toma del brazo.

-Todos juntos -añade Mei, y sin mirarme me jala fuera de la habitación.

(***)

Todos caminamos hacia el hangar, intentando evitar a los Cyborg, quienes extrañamente han desaparecido. Subimos cuanto antes al Invizable y los Cyborg ni siquiera intentan detenernos.

Ni siquiera lo intentan. Justo como temía. No sé cómo, pero logramos salir de ése lugar. No despego la mirada del vidrio en todo el camino, temiendo que sea sólo una trampa, que Cybermad realmente pueda aparecer en cualquier momento con su armada Cyborg detrás. Pero no lo hace, y éso es peor.

Miro a los chicos y al sensei. Todos están muy aliviados, como si la adrenalina se hubiese ido y en su lugar dejara calma. Pero no deberían estar tan felices., y ahora sé porque. El arma real no está en ése volcán. No, está aquí.

<<-Lo lamento>>, pienso.

Sólo espero que puedan perdonarme por lo que estoy a punto de hacer.