Cap 47
XxX: -Disculpe ¿usted es visita?
Joy: -No, soy paciente pero es que el doctor se puso raro, venga a ver.
Guié a la enfermera hasta la habitación, abrimos la puerta y Fred seguía atado forzajeando para soltarse.
Enfermera: -¡¡Oh mi Dios!!
Fred: -¡Sácala! ¡Sácala ya!
Joy: -Yo lo atiendo, mejor vaya a atender sus asuntos- la enfermera salió yo cerré la puerta.
Fred: -Desátame ya, dije todo lo que me pediste.
Joy: -No te me pongas rudo porque no me quieres ver enojada.
Fred: -¿Qué debo hacer para que me sueltes?
Joy: -Así está mejor- desamarré sus pies.
Fred: -¿Sabes que te haré pagar cuando me sueltes, cierto?
Joy: -Sí, lo sé. Por eso mismo lo hago- lo solté por completo.
Fred: -Sé que te encanta ver a la gente con la sangre hirviendo, por eso mismo no lo haré- se pegó a mi, él seguía totalmente desnudo.
Joy: -Ponte algo de ropa, no vaya a ser que te dé frío- reí y salí de la habitación.
Fred: -No te vayas, debemos comenzar la terapia.
Joy: -Ah, osea que eso no era de mentira.
Fred: -Claro que no, yo sí estudie psiquiatría.
Joy: -¿Qué clase de contradicción es esa?
Fred: -Que sea un chico mal no significa que no sea inútil en el mundo, de algo me sirvió estar interno un año en Inglaterra.
Joy: -Si, se nota.
Fred: -A tí sólo te sirvió para enamorarte del guardia.
Joy: -¿No te bastó lo que te hice hace rato, verdad?
Fred: -La verdad es que me encantó- dio un mordisco en el aire a dos centímetros de mi cara.
Joy: -Sí, se notó por los quejidos...muy sexys por cierto.
Fred: -Igual que tú...noté que Fazbear no perdió el tiempo y te hizo suya antes que alguien más lo hiciera.
Joy: -No puedo decir lo mismo de tí, no podría nombrar a la lista de nombres que traes tatuada allá abajo.
Fred: -Tú las borrarías todas- me tomó de la cintura.
Joy: -Lo haría pero...sería demasiado fácil y no quiero corazones rotos.
Benny: -¿Corazones rotos?- rio- ¿Quién dijo que tenía que ir involucrado el corazón? Conoces la regla principal de esto ¿No?
Joy: -No te enamores.
Fred: -No te la grabaste con Fazbear.
Joy: -¿Podemos dejar de mencionarlo en todo?
Fred: -¿Te pone mal?- me volteé.
Joy: -La terapia.
Fred: -Claro. Déjame vestirme.
Fred se vistió y me llevó a un salón donde al parecer se daban las terapias. Me recostó en un sofá y empezó.
Fred: -Te diré varias palabras y tú me dirás lo primero que se te venga a la mente.
Joy: -Faje.
Fred: -No he comenzado.
Joy: -Ok, comienza.
Fred: -Denise.
Joy: -Perra.
Fred: -Bien- anotó algo- Fiesta.
Joy: -Alcohol.
Fred: -Felicidad.
Joy: -Se me viene la imagen de Las Vegas de noche.
Fred: -Necesidad.
Joy: -Cagar.(cdr)
Fred: -Wow- rio.
Joy: -Continúa.
Fred: -Libertad.
Joy: -Paloma.
Fred: -Vulgar.
Joy: -Fred.
Fred: -Me refiero a que eres vulgar no a que se te viene a la mente con la palabra vulgar.
Joy: -¡Es que no especificas!
Fred: -¿Por qué crees que pierdes la paciencia tan pronto?
Joy: -Es que...siento que... ¡Que te importa!
Fred: -Cuéntame.
Joy: -Siento que me siento débil si tengo compasión.
Fred: -¿Nunca te han devuelto las ofensas?
Joy: -Sí, pero siempre termino ofendiendo más.
Fred: -Sabes, si te muestras como eres frente a todo el mundo luego tus planes no te salen bien.
Joy: -¿Te refieres a que tengo que ser doble cara?
Fred: -Es la manera de conseguir lo que quieras.
Joy: -Yo lo consigo todo a mi modo.
Fred: -¿Qué quieres conseguir en este momento?- se levantó y se sentó sobre mis piernas.
Joy: -Salir de aquí.
Fred: -¿Dónde quieres ir? ¿A Londres?
Joy: -¿Quieres que te responda sinceramente o que evada tu pregunta con una respuesta inteligente?
Fred: -Sorpréndeme- alzó una ceja.
Joy: -Quiero ir a Londres a fajarme a Freddy pero mis padres me quitaron los papeles para salir del país.
Fred: -Muy sincera la niña.
Joy: -Como ya dije soy lo que soy.
Fred: -¿Y te han salido bien las cosas a cómo eres?
Joy: -Llega al punto, doctor.
Fred: -Escapémonos.
Joy: -¿Qué?
Fred: -Escapémonos.
Joy: -Ya sé lo que dijiste, intentaba que me lo explicaras.
Fred: -No hay nada que explicar, simplemente larguémonos.
Joy: -Estás loco.
Fred: -Ambos estamos en un manicomio.
Podía decir que esta era la oportunidad perfecta para huir pero a quien engañaba, si aceptaba era únicamente porque si este papasito se fuera al fin del mundo yo iría detrás de él.
Joy: -No tengo papeles.
Fred: -Nadie dijo que saldríamos de Las Vegas, aquí tenemos todo lo que necesitamos para divertirnos.
Joy: -Prosigue...
Fred: -Tus padres viven de viajes y confían en mí, no llamarán y aquí no preguntarán porque te llevo ¿Qué dices?
Joy: -Con tal de no estar aquí.
Fred: -No hay tiempo que esperar, larguémonos.
Fred me tomó de la mano y salimos del centro, subimos a un auto y nos fuimos.
Joy: -¿Y mis maletas?
Fred: -Creéme, lo que menos necesitarás es ropa- sonrió.
Luego de conducir quince minutos llegamos a esto
Joy: -Un hotel ¡Qué romántico!
Freddy: -Baja del auto, no me hagas bajarte del cabello- bajé del auto y me asomé por la ventana.
Joy: -Baja del auto, no me hagas bajarte de las bolas- él sonrió y se bajó.
Era tan increíble cómo me entendía con este chico, no se asustaba de mis expresiones ni me reprendía, éramos exactamente iguales, cortados con la misma tijera.
Entramos al hotel y nos registramos, subimos a la habitación
Fred: -Acuéstate.
Joy: -Acuesta esto- le mostré mi dedo.
Fred: -¡Que te acuestes!
Joy: -¿Bromeas?
Fred: -No voy a violarte, sé que mueres porque lo haga pero no es eso lo que haré.
Joy: -No me interesa lo que harás. Seguro algo cursi.
Fred: -¿Qué piensas que voy a hacer algo ridículo? No te creas.
Joy: -Quiero ir a nadar, te dejo para que te entre tengas con tu mano.
Intenté salir pero Fred presionó un botón y la puerta se enllavó.
Fred: -Acuéstate.
Joy: -¿Sabes qué?- lo tomé del cuello de la camisa y lo aventé a la cama- Acuéstate tú.
Fred: -Pero tú vienes conmigo- me haló y caí sobre él.
Su respiración tibia me entraba por los poros, el olor de su rostro me estaba volviendo loca, sus ojos y sus labios delicados me insinuaban a devorarlos, fui débil, me lancé sobre ellos y los besé con pasión, Fred me correspondió el beso.
Fred: -Joy Quiero proponerte algo.
Joy: -Habla.
Fred: -Dejémonos de infantiladas ¿Si?
Joy: -A ver, te escucho.
Fred: Yo te gusto, tú me gustas y es todo. Hagamos algo....finjamos que te curaste, muestras como si lo hiciste, luego vas con tus padres y le cuentas lo nuestro. Nos largamos juntos y hacemos que esta vida sea más que eso.
La propuesta que me daba era tentadora, moría por pasar más días con Fred, sentirlo conmigo y divertirme con él sin corazones rotos ni ilusiones, ya que ambos éramos idénticos y ambos sentiríamos exactamente lo mismo. Sobre todo sabía que él podría sacarme del corazón a Fred, era la verdad. Fred no iba a regresar y yo no podía morir por él mientras tenía la oportunidad de pasarla bien con alguien igual a mí. Era seguir o quedar estancada llorando por algo que ya no podía ser.
Joy: -Acepto.
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