Esleirin.

Me sentia frustrado, molesto, irritado. Me dirigí a la oficina de mi hermano y cerré la puerta casi en un azote, él me observo y se sentó con tranquilidad, sabia que habria una discusión.

-¿Por que le dijiste eso?- pregunté lo mas calmado que pude.

-No es cómo si no fuese cierto, te casaste con ella por simple lástima.

-Eso fue al principio.

-Pero no quita el hecho que lo hayas hecho, tal vez ahora estes perdidamente enamorado de tu esposa, pero no quita el hecho que lo que hiciste al principio fue egoísta.

-Hablas como si tu fueras perfecto- comente molesto.

-No lo soy, pero al menos no soy un idiota egoísta... Yo no abuse de su situación tan solo para llenar un vacío dentro de mi.

-Tu no sabes nada- dije mientras cerraba los puños.

-No Esleirin, tu eres el que no sabe nada, jamás te pusiste a pensar en ella y ahora que tratas de hacerlo, crees que no tendrá consecuencias por tus acciones pasadas, tu debiste pensar en ella desde un principio y en como se sentiría si se llegara a enterar, tu debiste pensar en como ella..

-¡Ya basta!- grite-  ella es mi esposa y no me gusta que hables de ella como si supieras todo de ella, tuviste la oportunidad de elegir y la desaprovechaste.

-Yo no desaproveche nada, por que nosotros no teníamos porque haber escogido por ella- dijo mientras se levantaba- tu y yo habíamos llegado a un acuerdo y lo rompiste, si ella supiera toda la verdad ten en cuenta que yo no seria al unico a quien detestaria.

-Ella jamás me detestaria, ella me ama.

-¿Estas seguro?- pregunto mi hermano en forma de reto- ambos sabemos quien hizo las cosas mal, si realmente la amarás tu..

-Si tu realmente la amarás no la hubieras lastimado- lo interrumpí- crees que diciéndole la verdad todo se arreglara y que ella no saldrá lastimada.

-Es mejor que hacerla vivir entre mentiras.

-Y es por eso que no pudiste callarte, dime Brayan, ¿que crees que hubiera pasado si yo no hubiese llegado a tiempo?, huh, ¿creiste que diciéndole que tu la querías todo se solucionaría?.

-No- respondio seco y guardo silencio- se que nada pasara si yo le digo lo que en verdad siento... Pero sabes si tu no le dices nada, se que saldrá mas lastimada. Desde que éramos niños ella siempre fue muy sensible, no la hagas sufrir Esleirin.

-¿Que crees que e estado haciendo?- pregunte con un toque de molestia.

-Ilucionandola, eso es lo que creo que has estado haciendo, solo la estas ilucionando.

Mi hermano suspiro con pesadez, tomo una cosas y se abrió paso hacia la puerta.

-Me ire a Japón, cuando vuelva espero que tengas las cosas solucionadas, solo te dire una cosa y es que si vuelvo a ver otra oportunidad no la voy a desaprovechar.

Contesto mi hermano, yo no aguante mas le di un puñetazo, observe como su nariz comenzó a sangrar él solo comenzó a reir mientras se tocaba la parte donde lo habia golpeado, se limpio la sangre con la manga de su traje y me sonrió.

-Aterrado, hermanito.

Dijo y salio de su oficina, yo solté un grito de frustración. El maldito nisiquiera me habia regresado el golpe ahora me sentia un poco culpable.
Pero no pensaba seguir perdiendo tiempo aqui, por lo que me fui para ir a casa.
Mire al cielo mientras bajaba del auto, lo que parecía un buen dia se estaba viviendo horrible, parecia que se avecinana una tormenta.
Al llegar observe a Nicole acostada en la cama, me sente a su lado y la oi suspirar con pesadez.

-Te dije que no queria verte, por un rato.

-Ya paso mucho tiempo.

Ella volteó a verme molesta.

-¿Consideras mucho tiempo una hora?.

-Demasiado.

Respondi pensando en sacarle una sonrisa, pero ella solo me dio la espalda. Me dolía su desprecio, me levanté de la cama y me coloqué enfrente de ella, trate de tocarla pero ella me inmediato me rechazaba.

-¿Que quieres de mi?.

-Tu amor- conteste de inmediato- quiero que me ames.

Ella me miro unos segundos y observe como sus ojos se volvieron cristalinos.

-¿Por que?- pregunto- ¿Por que quieres algo como eso? Tu nisiquiera me amas.

Esas palabras me rompieron el corazón, sentia como mis ojos amenazan con llorar.

-Te amo Nicole y nose como hacer para que me creas, sabes puedes desconfiar en mi de lo que quieras, pero jamás del hecho de que te amo, te amo que me duele y el tan solo verte asi y el decir algo como eso me lastima, dime que tengo que hacer para que me creas.

-Dime la verdad- la oi decir- por favor, tan solo cintestame con la verdad... ¿te casaste conmigo por simple lastima?.

Yo senti un enorme nudo en la garganta, asenti con la cabeza mientras lograba reunir el valor para hablar.

-Si- dije al fin- si me case contigo por esa razón, pense que, pense que todo estaría bien, tu no parecias tener ningún interés en mi y pense que estaría bien vivir un matrimonio solo por simple interés, pero me equivoque. Todas las mañanas te veo con una hermosa sonrisa, tus lindos gestos, tu risa tan dulce como una melodía, el ver como te esforzabas por lograr algo, eres tan adorable. Yo simplemente me enamore de ti y queria que tambien sintieras lo mismo, por eso me esforcé por ser un buen esposo, tan considerado, amable y humilde, pero soy todo lo contrario soy tan egoísta y celoso, que nisiquiera puedo ver como te llevas mejor con mi hermano que conmigo.

-¿Estabas celoso?.

-Si- confese.

Al cabo de unos cuandos segundos la oi reir.

-Realmente se te meten ideas tan locas, primero te cases por simple lastima ahora me idealisas con tu hermano, creo que mas bien eres un idiota.

-¿Acabas de llamarme idiota?- pregunte sorprendido.

-Si- contesto con una breve sonrisa.

-Al menos dime que soy tu idiota.

Observe cómo ella fingió analizarlo, despues me dio una sonrisa.

-Si.

Yo comencé a reir sin dejar de observarla a los ojos, sin pensarlo la tome de la nuca para atraerla a mi y comencé a besarla con desesperación, de alguna forma necesitaba sacar toda mi frustración, me levante de mi lugar y me coloqué encima de Nicole con cuidado, me aleje un momento y la observe con atencion, se veia tan indefensa, me acerque nuevamente y llene su rostro con besos.

-Aun sigo molesta contigo- la oi decir-pero lo dejare pasar por ahora, cuando terminemos de hacerlo me darás una larga explicación.

Yo sonrei sobre la piel de mi esposa, la mire de reojo con un enorme deseo. Ella me habia dado luz verde para pasar por fin a algo mas intimo.

-Lo que ordene mi mujer.

Dije antes de quitarle la camiseta, observe cómo su pecho subia y baja sin parar, me acerque nuevamente a ella para besarla mientras la acariciaba.
Me separe un momento de sus labios para bajar hasta su cuello, le mordí levemente y oi un pequeño gemido, de inmediato voltee a verla.

-Lo siento- dijo tímida- no pude contenerme.

-No lo hagas, déjalos salir.

Dije antes de volver a lo mio, senti como sus manos recorrían mi espalda, ella comenzó a quitarme el saco, una vez fuera desató mi corbata y comenzó a desabrochar mi camiseta.

-Pareces ansiosa- dije con burla.

-No tanto como tu.

Me dijo mientras miraba hacia mi mano que sostenía su sostén.

-Touche.

Dije antes de volverla a besar con pasión, cuando pensaba quitarle los pantalones un irritante sonido comenzó a hacer presente, trate de ignorarla pero mi teléfono no dejaba de sonar.

-Deberias contestar.

-No hace falta.

-Puede ser importante-  dijo Nicole.

Yo hice una pequeña mueca de molestia, me levante y tome mi teléfono solo para oir a Jessica en pánico, habia olvidado por completo mi reunión con los accionista y Brayan ya se habia ido al aeropuerto por los que no podria cubrir, al colgar mire a Nicole.

-Lo entiendo- la oi decir- podemos terminar cuando regreses.

Yo la mire con una sonrisa coqueta.

-Realmente sabes como convencerme para llegar temprano a casa.

Oi como su linda risa se hizo presente, tomo sus cosas y procedió a vestirse yo hice lo mismo.

-Te amo Nicole.

-Lose.

Contesto con una sonrisa Nicole, yo la bese y salí de casa corriendo hasta llegar a mi auto. Nisiquiera me habia dado cuenta cuando comenzó a llover.
Mientras conducía apenas y podia observar la carretera, estaba comenzando a pensar que debí mandar a los accionistas al demonio y haberme quedado en casa con mi esposa.
Desvíe la mirada un momento para observar la cuando volví  a mirar al frente observe un auto, iba demaciado rapido como para tratar de frenar por lo que gire el volante bruscamente, oi el chirrido de las ruedas, en un intento desesperado trate de deterner el coche pero acabe estrellandome contra algo, maldije en mis adentros, desabroche el cinturón de seguridad para observar el estado de mi coche, al abrir la puerta oi el fuerte sonido de claxon, alce la mirada y vi una luz que se acercaba a mi, de un segundo a otro todo se volvió oscuro.