Ciudad de Axel...

Pasaron los días Nezuko aprendía nuevas cosas de esta realidad y con ayuda de Kazuma adquirió nuevas habilidades, solo con tocarlo de la mano, ya sentía un aroma a lujuria...

Lo deje pasar por alto y solo le seguí el juego, día a día era la misma rutina a mi alrededor solo escuchaba los murmuros de los aventureros "Hermosa chiquilla" "Niñita adorable" "Bella doncella" Entre otras...

Íbamos de camino al gremio y Aqua tenia puesto su brazo en mi hombro.

-Hip! Hip! Hip! Siento que estoy flipando, o no? – Dijo Aqua.

-Ahhh? No se de que hablas, pero te apoyo Aqua sama – Apoyaba y animaba Nezuko con una pequeña sonrisa.

-Huh!! Idiota, no le vayas contagiar tu estupidez a Nezuko-chan! – Se quejaba Kazuma.

-Whuaaaaaaa!! ¡Eres malo Kazuma, yo soy muy inteligente! ¡Deberás!

-... repítetelo mil veces hasta que te lo creas.

-Whuaaah! ¿Por qué me miras como si fuera una cosa miserable? Maldito Hikikomori!

-Yo estoy bien con eso!

-Que!! – Dijeron Kazuma y Aqua al mismo tiempo.

-Bue...bueno... a mi me agradan ambos tal y como son, no es necesario que peleen mejor hablemos mientras bebamos te – Dijo Nezuko dándole una gran sonrisa.

-Es... es... una Diosa!! – Grito Kazuma sin querer.

-Hey! La verdadera diosa esta aquí!! – Llamaba la peliazul.

-¡¿Soy una Diosa?! – Se pregunto Nezuko asimisma.

-Ah...creo que mejor no le diré nada más, si eso es Kazuma cálmate y respira hondo, no le hagas perder su inocencia a una chica – Pensaría Kazuma.

Llegamos al gremio de aventureros y como era de esperarse Aqua trataba llamar la atención del muchacho, y Kazuma se limitaba a evitarla, y oía hablar a la pequeña Nezuko...

-Espera... demonios?, ¿Esas cosas realmente existen? Creo que debí traer agua bendita, deberé rezarle a Kami sama – Dijo Kazuma.

-¡No hay problema yo te protegeré!

-¡Enserió! ¡Gracias, pequeña Nezuko! Espera... me siento como una basura al ser defendido por una chica.

-Mmmmmh ¡Descuida, soy super fuerte! Nezuko es muy fuerte – Dijo la pelinegra agitando los brazos.

-Si definitivamente soy una basura y aun estoy soltero y virgen – Dijo Kazuma llorando cómicamente.

-Tranquilo, hay demasiados peces en el agua, de seguro hallarás a alguien – Animaba Nezuko.

-Enserió?

-Si, claro, te apoyo más que nadie Kazuma san – Dijo Nezuko tomando de ambas manos al chico.

-Eh!

Por alguna Kazuma perdió la razón y su rostro se enrojeció al 100% era la primera vez que tenía tanto afecto femenino, más aún si se trataba de una chica linda.

-AAAAAAAH!! ¡¡Estoy en el cielo!! – Pensaba Kazuma sonrojado al 100%

-Oh! Kazuma-san tienes fiebre? Mmmmh ya se te echaré algo de agua.

-N...no es necesario... solo es que me dio la garrotera – Decía Kazuma creando una mentira – ¡Imbécil, piensa en una mejor mentira! Por poco y me desmayo – Pensaría.

-Animo, animo Kazuma-san, ya se ¿Quieres un abrazo? – Pregunto Nezuko.

-Eh!!! No... gracias... creo que ya estoy bien.

-Oh! Anda un abrazo, un abrazo – Insistía Nezuko.

-Si tanto insistes, esta bien, gracias.

Kazuma quiso acercarse y en un momento sintió que no estaba bien aprovecharse de una chica tan dócil y honesta, Nezuko lo recibió en sus brazos, en abrazo duro unos, segundos.

Sentí la calidez de su cuerpo y como sus suaves y pequeña manos me acariciaban el cabello, no se sentía nada pervertido, era como si Nezuko no me generara lujuria ni excitación...

Nos separamos y Kazuma solo sonrió quizás un abrazo de ella era lo que necesitaba, Nezuko le regalo una sonrisa tierna y luego lo tomo de ambas manos...

-¿Ya te sientes mejor, Kazuma-san? – Pregunto Nezuko.

-Sip! Mucho mejor.

-Me alegro mucho, pensé que Kazuma-san pasaría a la otra vida, aun así confío en ti, ayudar a otros no esta mal, a mi me gusta mucho ayudar a los demás sin importar su estatus.

-Eh... si, me sorprende que seas tan bondadosa.

-Oh! Lo soy?

-Hmmmmmh.

-Mmmmmmmm.

-Sip, lo eres.

-Oh! Que sorpresa, entonces Kazuma-san, también es bondadoso porque me ayudo – Dijo Nezuko con una pequeña sonrisa.

-A todo esto, ¿Te gustaría salir un rato conmigo? – Respondió Kazuma – Tonto, tonto, Nezuko esta fuera de mis posibilidades – Pensaría.

-¡Claro! ¡Me encantaría!

-¡Gracias! Digo... vamos.

Pensé que si tendría esta vez al menos una oportunidad y no de ser porque alguien a lo lejos me llamo...

-¡¡KAZUMA!!

-Mierda... la Diosa de los catástrofes – Pensaría el castaño.

-¡¡Ven aquí!!

-Espera un momento ¿Si? Nezuko-chan, atenderé ese asunto.

-No te preocupes te espero – Respondió Nezuko sonriéndole.

-Menos mal.

Kazuma se acercó y no se espero que Aqua lo tomaría del cuello y lo llevaría a una parte alejada, entre susurros hablaba.

-Kazuma... esta es una pregunta de suma importancia, escucha con atención.

-¿Y ahora que? Te hiciste popo en tu pañal o que? – Dijo Kazuma.

-No!! No es eso!!

-Anda di que es, desembucha.

-Escucha atento, que prefieres ¿Los pechos grandes o los pequeños? Responde cuidadosamente – Dijo Aqua.

-Que!! No me fijo en esas cosas, pero supongo que las grandes jejeje.

-Oh! Enserió! Perfecto.

Aqua se separo de mi y mirando a lo lejos a Nezuko hacia todo tipo de señas llamándola, pero la pelinegra se había quedado dormida en una banca.

-¡¡Nezuko!!

Y aunque no lo creía la pelinegra despertó por arte de magia y miró a donde estábamos algo confundida...

-Uhhh? ¿Sucede algo Aqua-sama? Oh! Kazuma-san! Hola! – Decía Nezuko saludando con la mano.

-Hola, pequeña Nezuko! – Respondió Kazuma y devolvió el saludo.

-¡¡Nezuko!! ¡Tienes Chance! ¡Chance! ¡Chance! – Llamaba Aqua.

-Que... ¡¡Te voy a matar Diosa de la porquería!!

Kazuma le proporcionaba golpecitos en la cabeza a Aqua y ella corría de por aquí y por allá intentando escapar, la pelinegra solo sonreía al verlos discutir no entendió la situación.

-Que curioso Jajaja – Dijo Nezuko riendo un poco.

Luego de una larga persecución Kazuma golpeó varias veces en la cabeza a Aqua, al calmarlos Nezuko empezó a cubrir con vendas los chichones que poseía Aqua...

-Whuaaaaaaa!! Kazuma-san ha sido demasiado cruel conmigo me uso de saco de papas.

-¡Tu te lo buscaste aprovechada!

-¡Es que soy una Diosa, deberías alabarme y mimarme!

-¡Jamás! ¡Ni aunque el cielo y la tierra bailaran ni te alabaré, no eres mi tipo!

-Wuaaaaah!! Insensible, Kazuma-san es un Insensible!

-Esta vez si te golpeó otra vez agradece que no lo haré tocándote el pecho.

-Oigan – Llamaba Nezuko sonriendo.

-¡¿Qué?! – Dijeron Kazuma y Aqua al mismo tiempo.

-Halle a una nueva integrante en el grupo, parece que tendremos otro día de trabajo, habrá sucedido algo...

-¡¡NOOOOO!! ¡Mi cita!

-¡Sip al fin mi anuncio de reclutar nuevos miembros funcionó!

-Anuncio que...? – Dijo Kazuma con una vena en la cabeza.

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Fuimos a donde nos indicó Nezuko y llegamos, no sin antes darle unos cuantos golpes en la cabeza a Aqua, y notamos que no había nadie y Kazuma regaño a su compañera...

-Idiota! ¡No hay nadie! Aqua te volvieron a engañar.

-Yo?!

-Si tu, ahora prepárate te daré otro golpe.

-¡¿A mi?!

-Si, a ti.

-No por favor.

-Y agradece que esta vez que de Yapa te daré uno extra.

-NOOOOOOO!! Hare lo que sea pero, no me golpees.

-Kazuma... no deberías golpear tanto a Aqua-sama, mejor vayamos a comer dulces y beber algo de te y relajémonos, a mi me encantan los dulces – Dijo Nezuko.

-Bueno esta bien... supongo que no nos vendría mal algo de eso.

-¡¡Qué!! ¿Dulces? ¡Si y también alcohol por fa – Decía Aqua con los ánimos levantados.

-Oye Aqua!! Nada de alcohol Nezuko esta muy peque para eso!

-Que va, ustedes pueden tomar un vaso de leche tibia y yo una botella de licor caro! – Dijo Aqua empezando a correr al lugar.

-Es una miserable... nadie nos manda a beber leche.

-Kazuma san animo que podría salir mal, oh!

-¿Qué sucede?

-Esa creo que es la que vio el anuncio esa chica.

-Uhhhhh?

-¡¡Si es ella!!

-Entonces le pegue a Aqua para nada.

-Ahora le debes una disculpa.

-Pero...

-Kazuma san, debes disculparte con Aqua-sama, anda vamos de seguro es buena chica – Dijo Nezuko.

-Si... no hay duda Nezuko es demasiada ingenua – Pensaba Kazuma.

Fuimos a donde nos guio la pelinegra solo fue cuestión de tiempo para llegar, no se me notaba cansada ni mucho menos agitada, Nezuko iba tomada de la mano de Aqua.

-Oigan... y esas manitas tan juntas? – Pregunto un confundido Kazuma.

-Eh! ¡En que cosas perversas piensas, Kazuma-san! – Se quejaba Aqua.

-Huh!!

-Ya tranquilos, Aqua-sama se sentía algo temerosa y quise tomarla de la mano para calmarla – Explico Nezuko con una clara y dulce sonrisa.

-Enserió!! Yo...yo... también tengo algo de miedo, Nezuko-chan por favor tómame de la mano – Decía Kazuma rogándole.

-Uhhh? Claro! – Aceptaba Nezuko con una pequeña sonrisa.

-Ni de chiste! Atrás Kazuma yo la vi primero! – Se negaba Aqua.

-Hah!! Ahora si deberás preguntarte quien podrá defenderte – Dijo Kazuma alistando su puño y se trono algunos dedos.

-NOOOOO!! Todo menos eso, no me vuelvas a golpear eso es abuso, abuso contra las mujeres!

-Mmmmmmmh! Ya dejen de discutir.

-EH! ¡¿Nezuko?! – Dijeron Kazuma y Aqua al mismo tiempo.

-Mejor intentemos llevarnos bien, nada de peleas ¿Si? – Dijo Nezuko con una notoria y dulce sonrisa.

-¡¡Es bellísima!! – Pensó Kazuma con los ánimos levantados.

Con el paso del tiempo iban conociendo más a la chica, a Nezuko le gustaba ayudar a otros sin importar su estatus, ella iría a donde sea a dar una mano, y sus temas favoritos eran la música suave, sobre todo del Sashimisen...

Le traía recuerdos de cierto chico rubio.

Sus temas menos favoritos eran la guerra y los demonios, no le agradaba recordar su vida pasada...

Nezuko era cargada en la espalda de Aqua y no tuvo objeciones con dejarla subirse en ella, todos estos acontecimientos le traían nostálgicos momentos con su hermano...

Llegamos y nos sentamos en una silla y Aqua fue directamente a buscar alcohol, algo me decía que eso nunca va a cambiar.

-Si van hacer mis días en esta mierda de mundo, mejor hubiese estirado la pata con ese tractor – Pensaba Kazuma notoriamente fastidiado.

-¡Kazuma-san! ¡Kazuma-san! ¡Mira...mira! – Llamaba Nezuko.

-Eh? ¿Ahora que paso?

-Hice esta corona con flores que recogí del jardín, a mi me parecen muy bellas.

-Enserió las hiciste tu sola?

-Sip, puedo hacerte una.

-Eh...paso, ¿Tienes experiencia en costurera?

-No se de que hablas, pero un cabeza de Jabali me regalaba coronas de flores, son hermosas, no tengo recuerdos de ello.

-Oh! No sabía que los Jabali tenían dos piernas y dos brazos, hmmmmh – Hizo una pausa - ¡Eso es imposible! – Grito Kazuma.

-Anda, te haré una.

-Ya te dije que no.

-No te preocupes me aseguraré que esa corona de flores quede lo más varonil posible – Dijo Nezuko riendo levemente.

-Bueno supongo que viniendo de ti, no suena mal al fin y al cabo eres una chica muy honesta.

-¿Soy honesta? – Se pregunto una confundida Nezuko.

-Siii lo eres, y también eres mona.

-Oh! ¿Soy linda? No me había percatado, pensé que creías que yo era fea – Dijo Nezuko con una pequeña sonrisa.

-¿Fea? – Menciono un confundido y desondetario Kazuma.

-Uhhhhhh?

-Si, esta chiquilla es demasiado ingenua y eso la hace encantadora, pero... no soy un salvaje para aprovecharme de una bella doncella – Pensaría Kazuma.

-¡Kazuma! ¡Kazuma! Mira ya termine la corona de flores.

-Ah!! Te dije que no la quería.

-Anda póntela escuche que los tréboles de cuatro hojas dan buena suerte.

-¿Trébol de cuatro hojas?

-Sip, esa corona tiene uno.

-¿Qué? Yo pensé que era una de esas tonterías o un mito que los idiotas se inventaban.

-Mmmmmmh, sabes yo creo que te queda estupendo – Dijo Nezuko dando una gran sonrisa y tomando de las manos al chico.

Quizás Nezuko no sentía nada de nervios ni atracción a este muchacho, pero Kazuma al contrario no dejaba de sorprenderse, nunca imagino que existiera una chica tan honesta y sobretodo hermosa.

Kazuma de inmediato soltó sus manos seria descortés de su parte aprovecharse de la situación.

-¡Kazuma-san! Esa corona te queda genial, déjame ayudarte a darle unos toques finales.

-EEEEEH!! No gracias! Agradezco mucho tu amabilidad, sabes Nezuko eres muy amable y bondadosa y creo que eso no cualquier chica tiene – Dijo Kazuma intentando recuperar la compostura y se calmaba.

-Oh! No hay problema si quieres puedes tomar un descanso en mi regazo! – Dijo Nezuko con una sonrisa pura y inocente.

-... eh! Creo que mejor paso, no quisiera ser descortés con una chica tan amable, sabes tu presencia y compañía es agradable.

-¡No es nada! Nezuko es fuerte muy fuerte! Demasiado fuerte – Decía Nezuko agitando ambos brazos y dando una sonrisa.

-Si ya lo creo – Dijo Kazuma con un rostro de poker.

-No te desanimes Kazuma-san hay muchos peces en el agua, de seguro hallarás a la persona indicada... aunque yo tampoco la encontré.

-Si entiendo – Respondió Kazuma con los ánimos bajos.

-Mmmmmmmm?

-Aquí voy Kazuma no te acobardes, si lo haces me cortaré el... el... ¡AAAAAH! Mejor me quedaré sin comer – Pensaba Kazuma – Nezuko-chan... yo quería preguntarte ¿Cuál es tu tipo de chico? – Añadió.

-Mmmmmmh, mi tipo no suelo revelarlo pero Kazuma-san me agrada mucho bueno veamos un Hisha una pieza de ajedrez equivalente a una torre que se mueva horizontal y verticalmente – Dijo Nezuko.

Si definitivamente esa chiquilla esta fuera de su alcance, era claro que no se fijaría en alguien como el, pobretón, cobarde, sin agallas, pervertido, el saber que Nezuko mencionara que le agrada tal y como es...

Abría una pequeña esperanza en Kazuma Satou.

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-¡Estoy aquí! – Llamaba una chica.

Nos confundimos por eso y al darnos la vuelta se veía a una joven chica de cabello castaño con traje rojo carmesí, y portaba un sombrero y parche, dio su maravillosa presentación.

-He visto su anuncio de reclutamiento, disculpen, me presento soy una archimaga de magia avanzada y controladora de la magia explosiva, mi nombre es Megumin.

-Ah... yo te llamare explosiones – Dijo Kazuma con rostro de chibi.

-Eh!! Apenas nos conocemos y ya tengo un apodo.

-¡¡Hurra!! – Festejaba Nezuko.

-Oigan...

-¿Qué pasa niña rara?

-¡No soy rara! Pero su amiga tiene un Bambú en la boca eso si es raro...

-Que!! ¡¿Nezuko?! – Pregunto un confundido Kazuma.

-Uhhhhh? Soy rara? – Dijo Nezuko.

-Sip – Afirmó Megumin.

-Grrrrrr! Nezuko no es rara – Respondió Kazuma con rostro decepcionado – Y por cierto estas tuerta? – Pregunto el chico.

-Ah!! Eso es aun más grosero – Dijo Megumin.

-Toma!

La pequeña pelinegra le coloco una corona de flores en la cabeza a Megumin y fácilmente combinaba con su color de cabello, ella se sorprendió y no evito enrojecer sus mejillas por lo linda que era.

-Es... es... muy adorable!! – Pensaba Megumin sonrojada al 100%.

-Oye... de verdad usas magia avanzada – Pregunto Kazuma.

-Si eso dije, quieren que les muestre mi poder, la grandiosa y poderosa magia explosiva!

-Si, esta tipa es otro bicho raro, otro cliché más, a decir verdad solo la recepcionista y Nezuko son las únicas normales, las demás tienen muchos tornillos zafados – Pensaba Kazuma.

-Snif Snif Kazuma ¿Por qué me miras como si fuera una inútil? – Pregunto Aqua.

-...Olvídalo oye tu archimaga pue – No termino el chico.

Al darse cuenta Megumin cayó rendida al suelo y Nezuko la ayudaba a levantarse, sin entender lo que sucedía, escucharon el sonido de un estómago sonar, quizás no comió en días.

-Kazuma san... ¿Podemos invitarla a comer? Por favor – Dijo Nezuko.

-Eh? Bueno si tu lo dices creo que esta bien, oye Aqua apúrate y deja de esconderte.

-¡Por quien me tomas! No me escondo solo tengo miedito.

-Como quieras, ve a echarle un ojo si viene alguien más, de no ser por tu anuncio no hubiera sucedido todo esto.

-¡¿Estas diciendo que yo la gran Aqua-sama venerada por el culto de axis soy una buscapleitos?!

-Solo ve a echarle un ojo ¿Si?

-¡Sácate me quedo tuerto!

-Ya ni me sorprende su nivel de estupidez – Pensaría Kazuma.

-Hey! Te hablo!

-Buaaaaah – Bostezaba Kazuma.

-Hey no me des el trasero! Mírame cuando te hablo! – Insistía Aqua.

-Blabla blabla.

Luego de eso fui a acompañar a la archimaga y Nezuko, ordenamos comida y bebida, ella trataba todo sin descanso parecía no haber comido en semanas, Nezuko le daba palmaditas.

-Oye... Nezuko ¿Estas segura que debemos reclutarla? – Pregunto Kazuma.

-Yo creo que si me agrada, sabes hace un tiempo mi hermano me dijo algo.

-Y que es?

-Cuando ayudas a alguien tarde o temprano esa buena acción será bien recompensada, me gusta mucho, por eso quiero a mi hermano – Dijo Nezuko con una sonrisa pura y honesta.

-Enserió dijo eso? Bueno dudo que alguien como yo pueda ser así, se me da fatal ayudar a otros.

-Cuentas con mi apoyo Kazuma, anda yo te ayudare, ayudémonos uno al otro al avanzar – Dijo Nezuko riendo levemente.

-De verdad? Tanta fe tiene en eso?

-Si, aunque en algunas ocasiones no soy muy inteligente.

-Para eso me tienes a mi – Hizo una pausa y se sonrojo – Eh! Digo... aquí me tienes tu fiel amigo – Dijo Kazuma sonrojado.

-¡A mi me encanta dormir mucho! Así no me da hambre!

-Es una Diosa... ¿Una deidad? ¿Una Diosa de los olimpos? Quiero casarme con ella, pero esta claro que esta fuera de mis posibilidades – Pensaría Kazuma.

-Uhhh? Kazuma-san, ¿Te encuentras bien? Estás rojo...Oh no! Te vas a morir! Ayuda!

-¡¡QUE!! No, claro que no estoy bien!!

-Menos mal, no quiero que nada malo le pase a mis amigos ni a otra persona.

-Siempre pones la vida de otros antes que la tuya ¿Por qué haces todo eso? – Pregunto Kazuma.

Sin darnos cuenta Megumin termino de comer y su estómago había crecido.

-Oh! Megumin-san esta esperando un bebé?! – Dijo Nezuko.

-No... creo que no, ¿Acaso no sabes como se hacen los bebes? – Decía Kazuma.

-Sip, ¿Los traen las cigüeñas, verdad?

-Maldito seas mundo de mierda, no me veo capaz de hacerle perder su inocencia – Pensaría Kazuma.

-Estoy llena, muy llena ahora si no deberé comer en semanas – Habló Megumin sobándose el estomago.

-Hey tu!

-¿Quién yo?

-Si tu, archimaga.

-La comida no era gratis.

-Que!!

-Ahora ven conmigo.

-¡Idiota no caeré sin pelea si deseas hacer aquello primero tendrás que vencerme! ¡Y con ese mechón pareces emo!

-...Me veo triste, pero no soy emo.

-Wuha! – Dijo Megumin colocándose en una pose de pelea.

-Tienes que mostrarnos tu magia archimaga, Aqua ya reviso tu tarjeta de aventurera y para seserciorarme te pondremos a prueba.

-Que!! Digo claro!

-Que maldita seas, estabas malpensando?

-¡Hora de cazar sapos Gigantes! – Festejaba Nezuko.

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Llegamos a un campo abierto inmediatamente los sapos Gigantes aparecieron y Kazuma usando una simple espada peleaba con ellos, mientras Megumin conjuraba su hechizo.

Nezuko saco sus garras de demonio y hirió a algunos de los sapos, y haciéndose un corte los baño en sangre usando su Arte Demoniaco, hizo el tiempo suficiente.

Megumin lanzó su hechizo de magia explosiva cubriendo una gran área destruyendo todo a su paso, dejando solo un cráter en el suelo, y se desplomó quedando inmovilizada...

Resulta que Megumin solo puede usar su hechizo una vez al día.

Y si era otra inútil...

Nezuko usando sus garras salvo de ser tragada a una Megumin agotada, y luego tomo a Kazuma llevándolos a una zona segura, poniéndolos asalvo.

Los sapos Gigantes los persiguieron un largo rato porque la explosión despertó a algunos que dormían bajo tierra, Nezuko les dio una patada mandándolos a volar lejos de ellos.

Y de nuevo uso su Arte Demoniaco quemándolos, ella dejaba pasar por alto si la humillaba o se burlaban de ella, pero si alguien se atrevía a herir a sus amigos Nezuko los defendería con su vida...

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Terminamos la misión y vendimos la carne de sapos ganamos 40.000 Eris gracias a la ayuda de Nezuko y ahora cargaba en mi espalda a la archimaga...

Al final termine cediendo debido a las súplicas de Nezuko acabe aceptando a la archimaga.

-Siendo sincero no me parece buena idea tener más bichos raros en el grupo – Dijo Kazuma.

-Oh! Enserió piensas eso? – Preguntaba Nezuko.

-Pero como me lo pides tu supongo que no habrá problemas.

-No hay problema Megumin es una buena chica, intentemos llevarnos bien, yo los defenderé Jajaja.

-Oye... como prendiste en llamas a ese sapo?

-Oh! Eso, es mi Arte Demoniaco.

-Arte Demoniaco? No se que sea eso, pero te viste genial.

-Enserió crees eso? Yo también creo que Kazuma es genial – Dijo Nezuko con una pequeña sonrisa.

-De verdad? Bien daré mi mejor esfuerzo!

-Sip, ¡Y yo te ayudare!

-Enserio?! ¡Genial!

-Kazuma Kazuma Kazuma! Tengo buenas noticias otra persona se quiere unir al grupo! Ven aquí rápido!

-Oh! Que bien! ¿No lo crees, Kazuma-san? – Dijo Nezuko.

-Que, no mames... tiene que ser una broma, si me dan la oportunidad de reencarnar en otro mundo, elegiré uno que no sea este, y que sea junto a Nezuko – Pensaría Kazuma.

Hay algunas cosas que casi nunca cambian en Kazuma Satou y su camino junto a sus terribles aliadas...

Continuará...