Una basura...

Esa ha sido la descripcion de toda mi vida, una y otra vez no fui más que un estorbo para los demás acabe siendo lo peor.

No pude proteger a mi querido hermano, ¿alguien me perdonaría? A causa de mi murieron cientos de personas, Shinobu, Muichiro, Genya, a cambio de protegerme y ese ser no me absorbiera dieron sus vidas...

Perdónenme, perdónenme, lo lamento Onii-chan, no podré volver a casa...

Quizás volvería ser humana a causa de la medicina, pero mi querido Onii-chan ahora mismo era el Rey de los Demonios.

Solo podía morder mi labio y sentir un sabor amargo en la boca ¿Por qué?, No lo comprendía ¿Por qué todo se nos ponía en contra? Acaso...

¿No éramos merecedores de ser felices?

A consecuencia de mis heridas ocasionadas por mi hermano solo di un último suspiro, quise al menos decirle mis últimas palabras...

Todo lo que llevaba en el pecho, lo iba a expulsar, nosotros solo éramos una familia que vendíamos carbón, daría lo que fuera con tal de volver a ese tipo de vida.

Sin el temor de algún momento morir...

-Onii-chan... – Llamaba Nezuko.

Solo recibí como respuesta unos gruñidos de mi hermano y mientras intentaba zafarse de mi agarre, lo abrace entre lágrimas quería abrazarlo al menos una última vez.

-Onii-chan... confío en ti... se que algún día me perdonarás, no importa que forma adopte o a donde vaya, siempre seré tu hermana..., tu y yo siempre estaremos juntos, da igual cuantas veces nazca, estoy orgullosa de haber sido tu hermana...

Tanjiro empezó a recuperar la conciencia frente a sus ojos pasaron toda su vida, sus recuerdos junto a Zenitsu y Inosuke, su promesa hacia Rengoku, a todos los que dejo atrás...

Quienes perdieron la vida en la guerra final contra los demonios....

El solo temblaba se dio cuenta de lo que había hecho, Tanjiro recuperaba el control de su cuerpo...

-Te lo dije aquel día Onii-chan no hay nada a que temer mientras estemos juntos, porque confío en ti, confiaba en que alguien con tus principios nunca lastimaría a personas inocentes.

-Ne...zu...ko... nez... yo – Decía Tanjiro al mismo tiempo que sus ojos volvían a su color normal.

Solo hace unos momentos Kanao utilizo el último frasco de medicina que le encargo Shinobu, en un último movimiento se lo inyecto a Tanjiro, pero muy tarde Nezuko poseía heridas...

-Gracias Onii-chan, muchas gracias por haberme permitido ser tu hermana, eres mi mejor hermano y el único que he tenido... se que pronto iremos al mismo lugar, a donde sea que vayas seré tu hermana fiel y contigo estaré...

-Ne...zuko?

-Nada esto es culpa de los demás... así que no te culpes por mi muerte solo tome mi boleto al más allá antes, venir aquí... fue mi decisión...soy feliz - Dio una última sonrisa pura y dulce cubierta de sangre y su atuendo rasgado.

Solo fue cuestión de tiempo y dejó de tener vida, Nezuko Kamado había abandonado el mundo de los vivos...

Tanjiro volvió a ser humano pero ¿A que costó? El precio fue la vida de su única familia y ahora la perdió, siento su cuerpo perder calidez y era frío, miro sus manos cubiertas de la sangre de Nezuko....

No podía creerlo ¿Qué hice?

-No...no....no...

Se negaba a creerlo sus ojos le decían que ella ya estaba muerta pero su alma lo niega absolutamente todo.

-¡¡NEZUKOOOOOO!! No... puede estar pasando esto... ¡Por favor dios no me quites a mi hermana, te lo suplico, no me la arrebates! ¡Llévame a mi, pero no a ella! ¡Todo menos a Nezuko! ¡Ya me lo quitaste todo! ¡Qué más quieres de mi dios!

¿Por qué tenia que ser a ella, y no a mi? Tal vez yo debía morir y no Nezuko, soy de lo peor, un fracasado, un verdadero perdedor...

No puedo ni moverme, ¿Qué será de mi? Una vida sin mi hermana, no soportaría seguir viviendo, ganamos la batalla contra Muzan....

Los demás estaban heridos Giyuu miraba horrorizado no fue capaz de impedir que Tanjiro se volviera un asesino y en consecuencia perdió a su hermana, Inosuke dejaba salir lágrimas por su máscara, Zenitsu era cargado por un Kakushi y no lo creía...

¿Cómo una chica tan dulce y honesta como Nezuko había perdido la vida? Su personalidad bondadosa, nunca más volvería a ver esa sonrisa y ni podrá casarse y tener la paz juntos que tanto todos anhelaban....

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En un lugar vacío sin nada a si alrededor ¿A dónde he ido a acabar? Era mi pregunta, mire a diferentes direcciones sin hallar a nadie...

-¿Dónde estoy? ¿Es el infierno? EHHH!! Infierno!! – Se asusto la joven y casi se le salieron los ojos.

-Bienvenida Nezuko Kamado has tenido una corta y trágica vida, pero si has fallecido.

-¿Quién eres? – Pregunto Nezuko aún confundida.

-Mi nombre es Eris soy una Diosa que te guiará a partir de ahora ¿Deseas escuchar lo que tengo que decir?

Era una joven de cabello largo plateado y con un vestido de Diosa con adornos dorados, solo me sonrió y su sonrisa daba entender que era una chica honesta, comprendí que no era una mala persona...

-Si claro! Mi nombre es Nezuko Kamado es un honor conocerla Eris-san.

-Pareces ser una chica bastante alegre y bondadosa.

-No hay problema estoy súper bien! – Dijo Nezuko agitando ambos brazos.

-Me temo que me he tomado bastantes descansos... ¿Te encuentras bien? Tu he...

-¡Estoy perfectamente bien! ¿Descansos? Descuida yo dormí durante dos años no hay problema...!

-Entiendo... ahora mismo tiene dos opciones, reencarnar en un nuevo mundo o pasar toda tu vida en el cielo.

-EH!! ¿Tengo que elegir?

-Tranquila tomate tu tiempo.

-Yo... quisiera volver a casa – Respondió Nezuko de forma decaída.

-Lo lamento pero no puedo hacer eso, te tengo un trato.

-¿Un trato? – Se pregunto la pelinegra.

-En ese mundo hay un rey demonio si lo derrotas los dioses te recompensaremos con un deseo, podrás elegir cualquiera.

-Ohh!! Enserió! ¿Puedo pedir volver con mi hermano?

-Si, claro.

-¡Daré mi mejor esfuerzo!

-Es probable que te encuentres con otros reencarnados de otros mundos, quienes también tienen la misión de derrotar al rey demonio.

-De verdad!

-Si, mi compañera Aqua envió hace unos días a un joven llamado Kazuma y bueno...

-Mmmmh.

-Acabo siendo enviada a ese mundo junto a él, intenta no meterte en problemas – Dijo Eris sonrojada.

Nezuko no era para nada tonta sabia darse cuenta de la situación...

-¿Te gusta ese chico? – Pregunto la pelinegra.

-Eh! ¡¿Yo?! No, no, claro que no, los dioses no tenemos permitidos tener relaciones con humanos – Decía la peli plateada aún más sonrojada.

-Mmmmmh lo tengo!

-Uhhhg?

-Buscare a ese chico y le diré lo que sientes por el, animo Eris-san puedes estar con el, yo también tenia a alguien enamorado de mi – Dijo la ojirosada sonriendo recordando a cierto rubio.

-EHHHHHH!! C... Claro que no!! Aunque me le declarará seguro me rechazaría.

-Animo, hay muchos peces en el agua – Dijo Nezuko dándole palmaditas en la espalda a la Diosa.

-Me siento mal al ser consolada por alguien más joven que yo.

-Pues... ¿Cuántos años tienes? ¿17 o mejor aun 18?

-Es un secreto...

-Oh! Entiendo yo se guardar bien secretos!

-Algo me dice que esta muchacha es demasiada inocente e ingenua – Pensaría Eris con una gota de sudor.

-A mi me encanta mucho dormir porque así no me da hambre – Dijo la chica sonriendo con dulzura era una auténtica Diosa.

-Ohh! Es hermosa – Pensaría la peli plateada sonrojada.

-Uhh? Eris-sama... ¿Tiene fiebre? – Pregunto la chica con inocencia.

-No, no, no, no bueno si!

-Ummmh! Esto...

-Si, dime.

Era una frágil doncella tan bella sonrió con dulzura, su voz suave calmaba cualquier corazón adolorido y sanaba las heridas emocionales, pues es una chica dócil y honesta.

-Quería agradecerle por haber hecho tanto por mi – Agradeció Nezuko.

-No, no, para nada... soy una Diosa es parte de mi deber ayudar a los humanos.

-Oh! Pero mi corazón me dice que debo agradecerte jeje.

-No tiene remedio, esta niña es muy bondadosa – Volvió a pensar Eris.

-Ah! Casi se me olvidaba ¿Qué clase de persona es ese Kazuma? – Preguntaba Nezuko con curiosidad.

-Creo que lo mejor será que lo averigües tu.

-Claro! – Le volvió a sonreír la chica.

-Bien, ya es hora no te muevas mucho Nezuko-chan, lo olvide los dioses permitimos que conserves tu Arte Demoniaco y inmunidad al Sol... te lo mereces por ser buena persona.

-No hacía falta, soy súper fuerte.

-¿No, quieres llevarte algo mas?

-Ummmmh, ¡Unos dulces!

-Eh? Cla...Claro.

Solo cuestión de minutos se le concedió el deseo y luego fue envuelta en un círculo mágico esperando ser transportada, Eris solo se despedía con la mano.

Le daba tristeza enviar a una chica tan bondadosa y honesta hacia ese clase de mundo, en toda su vida nunca conoció a una muchacha que le hiciera sentir ese sentimiento.

-Cuidate mucho...Nezuko-chan.

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Sentí mi cuerpo arder a la vez un cosquilleo, mi apariencia volvió a ser a cuando tenia 14 años idéntica, luego de los dos años que pasé dormida en casa de Urokodaki-San, me desperté y aparecí en otro lugar.

Era un pueblo bastante tranquilo y normal, no había nada de peligro ni a que temer, me hacía cuestionar si realmente hay un Rey Demonio, empecé a caminar sin querer di vueltas a la ciudad.

Y no se me notaba nada cansada, solo con un rostro de chibi.

-Ummmmh, ¿Qué debería hacer?

Y era curioso que en la parte derecha de mi rostro colgaba el Bambú que siempre llevaba conmigo, la gente a mi alrededor me miraba y saludaba, algunos jóvenes me dijeron "Preciosa" "Linda" "Chiquilla"

No logre comprender a que se referían con eso, y solo les agradecería y mostré mi gratitud inclinando la cabeza.

-Ah! Recuerdo que Eris-sama mencionó gremio de aventureros... ¿Dónde?

Camine un poco más y me encontré con un cartel en medio de la ciudad, donde decía "Se compra carne de sapo gigante por 5.000 Eris" Eso me puso pensativa y me decidí ir, pregunte a algunos pueblerinos, y logre hallar el lugar...

Algunos minutos después.

Llegue y en amplios campos de césped habían animales de granja, algunos eran perseguidos por sapos Gigantes, pero me interponía para defenderlos, les daba patadas y rebotaba.

-Ummmh? Son suaves... debo hacer algo o se comerán a los animales, ya se usare mi Arte Demoniaco pero... lastimar a esos sapos seria muy cruel – Pensaría Nezuko.

Solo esquivaba los ataques de sus lenguas uno tras otro y le proporcione una patada que mandó a volar al sapo gigante, saque mis garras de demonio y lo lastime, corrí y le di otra patada a otro.

Luego de matarlos los cargue usando mis brazos no eran tan pesados como imaginaba quizás se debía a mi fuerza sobrehumana de demonio...

En cuestión de minutos halle el gremio de aventureros, y coloque los sapos en un rincón y me senté aún lado a descansar y una de las meseras me vio y saludo, preguntándome que se me ofrecía...

-Buenos días muchacha ¿Qué se te ofrece? – Pregunto la mesera.

-Ehh! ¡¿Yo?!

-Si, tu.

-Vengo a vender esta carne de sapo, la cace yo misma.

-Oh! ¿Lo hiciste todo tu sola?

-Si, disculpa sabes en que parte del gremio puedo venderla?

-Claro, por allá esta el mostrador y ahí hallarás a la recepcionista puedes hablar con ella y te dará la información, y puedes volverte una aventurera.

-Enserio!

-Sip.

-¡Trabajaré tanto como pueda! – Decía Nezuko.

-Que sorpresa tienes muchos ánimos.

-Disculpa, tengo que irme, gracias por ser tan amable señorita – Agradeció la pelinegra y le regalo una sonrisa con dulzura.

-De nada, ¡Ten una buena vida!

Fui corriendo hacia el mostrador de no ser porque me tope con un hombre musculoso y con una pequeña armadura, su cabello tenía una forma peculiar, me llamo y fui a el.

-Oye... niña ¿Qué se te ofrece por aquí? – Pregunto el hombre.

-Ah! Eso, vengo a vender la carne de sapo y también a volverme aventurera.

-Enserio?

-Si enserio.

-¿No eres demasiado joven para ser aventurera...?

-Tengo 14 años – Informo Nezuko.

-Entiendo, con que eres una temeraria...

-Sip, quiero embarcarme en una aventura y derrotar al Rey Demonio, para volver a mi hogar.

-Ya veo... en todo caso ¡Bienvenida a la puertas del infierno! Puedes registrarte el mostrador de allá – Decía el hombre.

-Si señor! Muchas gracias! – Agradecía la pelinegra.

-Pero... que muchacha tan educada.

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Fui corriendo hacia el mostrador y me encontré con una mujer de apariencia voluptuosa quizás su edad rondaba por lo 20 años, la salude y ella hizo lo mismo.

-Pequeña ¿Qué se te ofrece? – Pregunto la mujer.

-Disculpa, he venido a vender esta carne de sapo, vi su afiche en la ciudad.

-Entiendo, por causalidad ¿Eres aventurera?

-Lamentablemente no – Dijo Nezuko con los ánimos bajos.

-Entonces lamento que no puedo ayudarte, solo los aventureros pueden realizar misiones y vender la carne de sapos.

-Eh! Quiere decir que trabaje gratis – Dijo la chica con rostro de poker.

-Pero sabes, puedes usar ese dinero para la inscripción y volverte una aventurera.

-Enserio! – Dijo Nezuko con los ánimos más levantados.

-Si.

-Genial!

-Adelante sígueme.

-Si señorita.

La seguí y guio hacia la recepción, vendí la carne y total termine ganando 15.000 Eris, siendo así 5.000 por cada uno, me explico lo que debía hacer y saco una tarjeta...

Me indico que debía colocar mi mano sobre una esfera y solo hice caso...

-Así? – Pregunto Nezuko.

-Si, mantenla así unos momentos más.

-De acuerdo.

Al terminar de medir mis estadísticas, todo quedo grabado en mi tarjeta de aventurera y la recepcionista se sorprendió al notar mis altas estadísticas.

-¿Sucede algo? Disculpe – Pregunto Nezuko.

-Es asombroso! Todos tu atributos son altísimos, pueden comenzar con cualquier clase avanzada archimaga, paladín, maestro de la espada, arcipreste.

-Ohh!! De verdad? ¡Estoy muy emocionada!

-Ten puedes verla por ti misma.

-Si, muchas gracias.

Aventurera: Nezuko Kamado

Fuerza: 20.000 Puntos.

Magia: 9000 Puntos.

Suerte: 4500 Puntos.

Poder: 18.000 Puntos.

Al verlo literalmente a Nezuko se le salieron los ojos y estaba algo avergonzada, llamó la atención de los aventureros alrededor, fue recibida de buena manera.

-Bienvenida al gremio de aventureros Nezuko Kamado, mi nombre es Luna y todos nosotros esperamos tus grandes progresos, rezamos que seas la que derrote al rey demonio.

-Daré mi mejor esfuerzo.

-Me alegra oír eso, contamos contigo Nezuko-chan.

Luego de eso Nezuko día a día continuaba con misiones diarias cazando sapos Gigantes, y subiendo de nivel e obteniendo puntos, de alguna forma extrañaba a su hermano.

Una aventura sin el, no la hacia sentir feliz sabiendo lo que el diría "Haz lo que te diga tu corazon, Nezuko, confío en ti"

No había tiempo para lamentos Nezuko siguió con las misiones e iba aprendiendo nuevas habilidades como magia de agua e incluso fuego, en las noches algunos aventureros la invitaban a beber y ella no aceptaba.

Beber no era lo suyo, hasta que cierto día dentro del gremio Nezuko estaba recostada en una mesa y con las piernas para arriba...

Su aburrimiento era notable y noto a un grupo de chicos problemáticos que hacia demasiado ruido.

-Ummmmmh? – Pensaba Nezuko.

Eran dos jóvenes un chico de cabello castaño vestido con ropa deportiva verde y una mujer de cabellos azules y con un hagoromo azul, ambos discutían y solo pude poner un rostro de poker.

-¡¿Ya ves lo que hiciste?! Tu dijiste que eres una Diosa, no un vegetal! Esos sapos te comieron y tuve que salvarte el trasero – Dijo el castaño.

-¡¿Por qué no hiciste algo para salvarme?!

-Te dije que no tengo poderes!

-Era de esperarse de un Nini Hikikomori, soy una Diosa y nadie puede negarlo.

-Si... claro, la Diosa de los estúpidos.

-Huh!! Tenle más respeto a mi la gran Aqua-sama!

-Ni de coña haré eso – Respondió el castaño.

-¡¿Por qué?!

-Para empezar no tengo tantos tornillos zafados en la cabeza, y no me compares contigo Diosa borracha...

-Wuaaaaah!! Como te atreves muchos matarían por tener a una bella arcipreste.

-Y ese muchos, no soy yo.

-¡¡WUAAAAAH!! Kazuma ni se te ocurra abandonarme.

-Oh si! Por fin tienes una buena idea Aqua, abandonarte y quedarme con todo el dinero.

Con esas palabras que intercambiamos parecíamos una pareja de recién casados, Aqua seguía haciendo lloriqueos y por su parte Kazuma la ignoraba, hasta que vieron a cierta niña.

-Oye Aqua... y eso.

-Wuaaaah!! Kazuma quiere abandonarme!! Llamen a los oficiales!

-Tarada harás que me detengan!

-Pues eso quiero – Dijo la peliazul sacando la lengua.

-Eres una hija de...! Olvida lo que dije, ¿Vale? Dejando de lado eso ¿Y esa niña en aquella mesa?

-Debe ser nueva no recuerdo haberla visto por aquí.

-No crees que...

-Lo dudo.

-No me dejaste terminar de hablar...es una niña que hará por estos lugares sola.

-Ya se!! Robémosle todo su dinero!! – Grito Aqua.

-Sere un Nini Hikikomori y un Otaku, pero jamás le robaría a una señorita, iré a hablar con ella, tu si quieres quédate aquí.

-Eh!! Espérame Kazuma yo también voy no me deje sola aquí.

Fuimos corriendo hacia donde estaba aquella niña y vimos que portaba un Bambú en la boca vestida con un Kimono rosado y un Haori café, su piel blanca como la porcelana, era hermosa.

Kazuma fue el primero en hablar y temía que esta chica fuera otra demente como las demás chicas que ha conocido aquí.

-¡Hola mi nombre Satou Kazuma! Soy un aventurero y un temerario.

-Ummmm? – Murmuraba Nezuko.

-Eh? Disculpa no te entendí – Dijo Kazuma con una gota de sudor.

-Ni te molestes este tarado con aires de héroe es Bazuma – Diría Aqua.

-Oye!! Idiota me haces quedar mal frente a una chica!!

-Ummmmmmmh!!

-Ah! Lo lamento que puedes sacarte ese Bambú, no te entiendo.

-Ummmmmmmh!! – Decía Nezuko.

Me quite el bosal que cubría mi boca intente articular algunas palabras, eso solo aumentaban más la atención de Kazuma, frente a el y la luz del día.

-Bue...bue... ¡Buenos días! – Dijo Nezuko dándole una sonrisa angelical.

-Eh...es hermosa, una chica tan bella no se encuentra en 100 años...calma Kazuma, piensa no está afuera de tu alcance – Pensaría el castaño.

-¿Estas bien? – Pregunto Nezuko.

-Si estoy bien! Disculpa perteneces... a algún grupo de aventureros?

-Hmmmmmh!

-Kazuma ya olvídalo una chica tan bella esta fuera de tus posibilidades... es obvio que un Nini nunca lo logrará.

-Ka...Ka...Kazuma!

-Si ese soy yo!

-No... no pertenezco a ningún grupo, ando en solitario.

-Enserio? ¡Hurra! Di...digo lo lamento.

-Oh! Estas cansado? Si lo deseas puedo ordenarte comida y algo de beber – Propuso Nezuko.

-Lamento las molestias, y si estoy cansando.

-Enserio estas cansado? No hay problema yo estuve durmiendo por dos años enteros – Decía Nezuko riendo un poco.

-Eh... claro, ¿Estas segura que quieres invitarnos a comer? – Pregunto Kazuma.

-Si, no hay problema siempre ayudo a quien lo necesito veras... como gano dinero en las misiones uso ese dinero y ayudo a los pobres y casi siempre visito las tumbas de los muertos y les rezo.

-No...no puede ser... ella... ella...es una buena persona – Pensaría Kazuma sonrojado al 100%.

-Hahaha, ¿Por qué estas rojo? Kazuma-san, ¿Tienes fiebre? Si quieres puedo ordenarte hielo.

-No... es nada, solo que me sorprendió el buen corazón que tienes.

-Ah! Era eso, descuida me gusta mucho ayudar a otros.

-¿Por qué eres tan buena?

-Bueno... es una larga historia – Respondió Nezuko riendo.

Así fue como Nezuko fue con aquellos jóvenes a una mesa y ordenó comida y bebidas, mientras comíamos les conté una parte de mi historia que perdí a mi familia....

Y también a mi querido hermano, y que venía de un lugar lejano, omití la parte de los demonios y que era una reencarnada, tal vez eso los confundiría...

-Entiendo viniste de una tierra lejana, ¿No tienes ningún familiar? O alguien que cuide de ti?

-Ya no me queda nadie.

-¿De verdad? Que mal... disculpa esto no quisieras unírtenos.

Cuando me percate Aqua le estaba haciendo cosquillas en el cuerpo a una pequeña Nezuko, en tan solo poco tiempo y se llevaban bien, Kazuma solo pudo sonreír felizmente por la pelinegra.

-Nezuko-chan! Nezuko-chan! Nezuko-chan! Vamos ríe – Decía Aqua haciéndole cosquillas por todo el cuerpo.

-Ehhh? – Pensaba Kazuma.

-¡Kazuma!

-Desembucha de una vez.

-¿Qué tal si adoptamos a Nezuko-chan? – Dijo Aqua.

-Pensé que te oponían a eso, ¿No dijiste que no serias una niñera?

-Pos ya cambie de opinión.

-Ummmmh!!

-Vale, Nezuko-chan ¿Te gustaría formar parte de nuestro grupo? Por el momento solo somos la Tarada esa y yo.

-Claro, encantada de ayudarlos! – Dijo Nezuko sonriendo angelicalmente.

-Es bellísima – Pensaba Kazuma – Espera un segundo... Nezuko será legal? – Volvió a pensar.

-Kazuma... hasta aquí percibo tu olor a lujuria, degenerado – Dijo Aqua.

-No es eso! Como Hikikomori es difícil conocer a una bella chica – Se quejaba Kazuma.

-Que asco, que te gusten más jóvenes...

-Seras...! – Dijo Kazuma.

-Oh! Kazuma-san esta enamorado?! Quien es la gran afortunada – Se preguntaba Nezuko.

-Esto merece un Oscar – Dijo Aqua sacando una hoja con un 10 escrito y puso rostro en chibi.

-Hey! Que significa ese 10? – Exclamaba Kazuma.

-Es la calificación que saco Nezuko chan – Dijo Aqua.

-10? ¡Hurra! – Festejaba Nezuko.

-Haz oídos sordos a esa idiota, Nezuko ¿Quieres unirte a nosotros? Tenemos pensado derrotar al Rey Demonio.

-No te preocupes soy muy fuerte! Puedo con lo que sea! ¡Bum! ¡Rum! ¡Bum! ¡Rum! – Dijo Nezuko moviendo los brazos.

-Eh?

-No habrá problemas con gusto me uniré a ustedes Kazuma-san, señorita Aqua, pero... ustedes no parecen fuertes.

-Veras...

-No pasa nada, estaré encantada de ayudarte Kazuma Satou... a mi me gusto mucho dormir así no tengo hambre – Respondió Nezuko sonriendo con dulzura.

Por alguna razón la sonrisa de aquella chiquilla le traían recuerdos a Kazuma, es tan inocente y honesta, ni se molesta en mentir, el corazón de Kazuma latía al 100%, ella era su chica ideal...

Continuará...