»Déjenme sola«

Ya ha pasado una semana desde que me reconcilié con mi mamá, todo va bien y me encanta saber que ahora puedo contar con ella en lo que sea que tenga que hacer, es reconfortante saber que tengo todo su apoyo. En el instituto solo quedan dos semanas para terminar e irnos a nuestras tan deseadas vacaciones así que hoy iré a hacer unos exámenes y volveré a casa.

Ya estando en el auto de mi madre, ella coloco música en el radio a bajo volumen y se giró hacia mí.

— ¿Segura que quieres ir al instituto hoy? —cuestionó con una mirada preocupada.

—Sí, estoy segura. —respondí brindándole una sonrisa.

—Cualquier cosa, sabes que puedes contar conmigo. —comenta sin dejar de plantarme la mirada.

—Lo sé, todo estará bien, no te preocupes. —le resté importancia, aunque sé dentro de mí que es un poco arriesgado asistir hoy al instituto.

—Bien de todos modos le diré a Adam que esté al pendiente de ti. —rodé los ojos y asentí, ella se giró y puso el auto en marcha.

Aunque me encanta que ahora mi madre está más al pendiente de mí, a veces se vuelve un poco tediosa con sus paranoias, pero la amo y dejo a un lado ese pensar mío, ella se preocupa por mí y eso es algo que siempre he estado pidiendo. El auto empezó a disminuir la velocidad, me di cuenta que ya estábamos llegando así que tomé mi mochila y me la puse, al estacionar mi madre salió del auto tomó mis muletas y me ayudó a bajar, no tardó ni cinco minutos en aparecer Adam a prestarme ayuda también.

— ¿Cómo estás hermosa? —inquirió Adam sonriéndome alegremente.

—Bien... —dije dándole una sonrisa de boca cerrada y me adentré al instituto con él.

—Te voy a hacer una pregunta y necesito que me respondas con total sinceridad. —lo miré, tenía un brillo de preocupación en sus ojos.

—Si claro, pregunta lo que sea. —respondí ahora nerviosa.

« ¿Será algo tan serio para que esté así de preocupado?»

—Si llegas a ver a Hannah hoy, ¿Qué harías? —preguntó clavando su mirada en mí.

—No lo sé Adam, la verdad no espero encontrarme con ella y si es así trataré de hablar con ella. —digo como si fuera la respuesta más normal del mundo en estos momentos.

— ¡¿Estás loca?! —exclamó Adam con total asombro.

—No, no lo estoy. Es solo que si me la encuentro, no le voy a hacer un escándalo, solo quiero hablar con ella de lo sucedido, no me quedaré de brazos cruzados así como así. —sigo insistiendo con mi respuesta.

—No creo que sea buena idea, pero tampoco puedo obligarte a no hablar con ella. Así que por favor si piensas hablar con ella dime a mí y yo te acompaño, ¿Sí? —musitó completamente con nerviosismo.

—Claro Elenor Grayson, te diré. —dije en broma y él rodó sus hermosos ojos verdes. Luego besé su mejilla para entrar a mi salón.

No pude evitar notar como todos me miraban de una manera extraña, lo cual me hace sentir mucho más extraña de lo que me siento. Me senté delante de Alisa para que después ella me ayude a levantarme, cuando me senté Alisa me pasó un papel que decía "Hannah vendrá a clases hoy, ¿Qué harás?", y de nuevo con la pregunta, ya me estoy irritando un poco. La verdad no quiero encontrarme con Hannah pero de ser así solo pienso hablar con ella.

Cuando salimos a almorzar, al caminar por los pasillos todos nos seguían mirando extraño y más a mí, lo cual es más irritante, claro si tú mejor amiga de la nada te traiciona y es parte de una golpiza que te dan, pues hasta yo misma me vería muy extraña.

Estaba con Eiden, Allan, Alisa, Daniel un amigo de Adam, y Adam sentados en una banca de la cafetería, cuando vi esos ojos grises a los cuales ahora no miro como antes. Hannah me miraba con odio y de manera seria mientras pasaba por el lado de nuestra mesa, ella estaba con Lindsay y Roxy pero no había rastros de Megan, lo cual me alarmó, deben de estar planeando algo más en mi contra.

— ¿Morgan? —me llamó Eiden.

— ¿Sí? —dije prestándole atención.

— ¿Qué harás si Hannah se acerca? —okey, ya me harté, hasta aquí.

—Abrazarla y darle un beso en la mejilla —digo con sarcasmo—. ¡¿Paren de preguntar eso?! Desde que llegué solo he escuchado "¿Qué harás si Hannah se acerca?", ya dejen de preguntarme eso, Hannah me importa una mierda. —espeté furiosa.

— ¿Qué sucede? —preguntó Adam confundido, uniéndose a la conversación.

—Por favor, déjenme sola. —solté aun furiosa.

— ¿Por qué? —cuestionó Alisa con los ojos como platos, casi que entrando en pánico, como si al alejarse de mi podría caerme un meteorito y morir, o algo así.

— ¡Déjenme sola! —espeté por lo alto.

—Bien, pero cualquier cosa me llamas Morgan, no quiero que nada te pase. —me reprocha Adam porque él sabe lo que pretendo hacer.

—Sí, ya déjenme. —dije y ellos se levantaron.

Ya cuando estuvieron lejos, no pude contenerme más. Me levanté con sumo cuidado y empecé a caminar en dirección a Hannah, esto no se puede quedar así y menos sin que yo haya dicho algo para defenderme o insultarlas, no es que sea una busca pleitos solo quiero tratar de enfrentar todo esto de una vez y dejar de ser una cobarde como ya he escuchado susurros sobre mí.

—Hey, Hannah. —llamé su atención cuando ya estaba cerca.

— ¿Qué quieres estorbo? —su voz totalmente fría me hizo fruncir más el ceño.

—No me hables así Johnson, no te conviene, recuerda que puedo levantar cargos cuando se me plazca, por la golpiza que me dieron. —espeté de manera seca, ella me miró y apartó su mirada de mi para ve a otros lados, posiblemente nerviosa.

— ¿Ah sí? —Preguntó irónica, alejando el miedo de su mirada—. Bien, dime lo que tengas que decirme, me molesta que estés aquí parada respirando el mismo aire que yo.

— ¿Cuál es tu problema conmigo Hannah? ¿Por qué me hiciste esto? ¿Acaso yo a ti te he hecho algo tan horrible para que tú me hicieras esto? —indagué refiriéndome a mi tobillo.

— ¿Quieres que te diga la verdad? —se acercó a mi desafiante.

—Para eso vengo niñata.

Los alumnos del pasillo nos miraban asombrados y se susurraban cosas entre ellos. Idiotas.

—Hice todo esto porque siempre fui un cero a la izquierda para ti, mientras tú estabas con tu rara obsesión por Adam, yo siempre lloraba por las noches y trataba de convencerme de que podía tener alguna oportunidad contigo alguna vez —soltó sin rodeos y mirándome fijamente—. Y pues ahora me doy cuenta de lo zorra que puedes llegar a ser. —le solté una bofetada y se calló una de mis muletas, al instante vi correr a Adam, Alisa, Daniel, Allan y Eiden, hacia donde yo estaba.

— ¡No vuelvas a llamarme zorra! ¡El hecho de que no pueda corresponderte de la manera que quieres no te daba ningún derecho a hacerme esto! —le grité muy enojada.

— ¿Cómo quieres que te llame después de todo lo que me has hecho? —indicó y vi como corrían algunas lágrimas por sus ojos y también vi por el rabillo del ojo como se acercaba Lindsay y Roxy a nosotros, claramente con la intensión de defender a Hannah.

— ¡¿Qué te hice?! ¡Si fuiste tú la perra que me golpeó y me ha hecho la vida de cuadritos! —no pude contenerme al gritar eso.

— ¡Si te golpeé!, pero no sabes el motivo ni las razones. —susurró lo último.

—Pero... ¡Mierda! Dime lo que fue que pasó, yo aún te considero parte de mi vida Hannah, aun en el fondo sigues siendo esa amiga para mí, y me gustaría saber, ¿Porque me trataste de ese modo?, porque para serte sincera, aunque no te odie tampoco quiero que regreses a mi vida —ella levantó la mirada llena de lágrimas y me miro.

—Lo hice porque ya estaba cansada de que no me prestaras atención... —suspiró para luego continuar—. Desde pequeña supe de mis preferencias sexuales y la verdad nadie más me llamaba la atención, si no tú. En más de una ocasión traté de decírtelo, pero siempre me salías con el tema de Adam y me dolía cada vez que me hablabas de lo guapo, agradable y gracioso que era, me dolía Morgan... y mucho. —terminó de decir con una mirada triste.

No, simplemente no puedo sentir compasión por ella ahora mismo, luego de todo, yo era su amiga y no hubiera tenido ningún problema en que me lo dijera, quizás no cambiaría el hecho de que no le correspondo el sentimiento, pero al menos al saberlo hubiera sabido cómo ayudarla a superarme, la hubiera apoyado, no me hubiera alejado, pero ahora todo está vuelto un asco y yo simplemente no puedo justificar nada de lo que hizo, no encuentro como.

Miré a los chicos que estaban junto a nosotras expectantes y no noté en qué momento Adam había recogido mi muleta— ¿Y porque decías que te gustaba mi hermano? —logré preguntar después de detallar el lugar.

—Solo era una fachada, pensé que Alisa y tú me verían distinto si les decía. —bajó la mirada.

—No debiste pensar nada de eso, éramos tus amigas, no debiste suponer cosas que sabes perfectamente que nosotras no haríamos. Ahora todo se complicó Hannah y no me veo como tu amiga en un futuro muy cercano. —dije firmemente.

—Lo sé. —musitó por lo bajo.

No tenía más ganas de hablar con ella así que le pedí a Adam que me llevara a casa. Esto es una mierda y todo está decayendo, yo solo quiero estar sola por un tiempo y alejarme de todos estos problemas a ver si así se resuelven o simplemente empeoran, no lo sé, pero ahora no tengo fuerzas para luchar contra la marea.

***

Nota de la autora: Hola rikuras!

¿Que les pareció todo este caos?

¿Creen que en algún momento resolverán todo o que empeorara?

Espero sus respuestas...

Betzabeth A.