Capítulo cinco.
»Seamos amigos«
El día de hoy decidí levantarme temprano, quiero despertar de la mejor manera hoy.
Me duché, me vestí y bajé a desayunar un poco de yogur y cereal. Me vestí con una de mis prendas favoritas a ver si hoy puedo empezar bien mi día, no he cruzado palabras con mi mamá porque sé que si hablo con ella hoy, terminaremos peleando otra vez. Después de desayunar, Diego me llevó al instituto, él no sabe nada de mi pelea con Elenor, pero sé que lo sospecha.
Al llegar al instituto ya estaban mis amigos allí así que me despedí de Diego y me dirigí hacia donde estaban ellos, al acercarme todos me miran con una ceja alzada.
«Ay no...»
―Hola hermosos. ―hice una mueca a ver si reían, pero seguían serios y enarcando una ceja.
― ¿Seré que hoy si nos vas a explicar que te pasaba ayer? ―preguntó Alisa.
―Hola, ¿Cómo estás?, yo bien... ¿Y tú? ―digo sarcástica imitando hablar con alguien más.
Ali rodó los ojos y dijo rendida.― Bien... ¿Cómo estás?
―Pues mejor, ayer estaba mal porque pelee con mamá. ―expliqué y todos asintieron pensativos.
― ¿Otra vez? ―cuestionó Eiden, con una mueca de disgusto.
―Sí, me dijo cosas horribles y me hizo sentir muy mal. ―bajé un poco mi mirada y negué recordando.
―Bueno no estamos aquí para deprimirnos lindura ―Alisa tomó mi mentón y lo subió―, hoy vamos a divertirnos y reírnos como focas convulsionando. ―me dio una sonrisa amplia.
Después de hablar un poco más en los casilleros entramos a clases, el profesor dio una clase muy aburrida y mando algo de tarea para aburrirnos en casa, ¿Por qué los profesores tienen que ser tan crueles?
Luego de otras clases salimos a almorzar, fue todo risas, chistes y bromas, todo normal, bueno si a una Alisa riendo como caballo con neumonía se le llama normal, entonces sí, y sí, mis amigos y yo comparamos mucho nuestras risas con situaciones raras en animales. Cuando íbamos a clases nos dijeron que la profesora no había podido llegar y que podíamos irnos, bueno Hannah, Ali y yo, porque Eiden es un año mayor y tendrá sus clases.
Yo tenía que esperar a Diego para ir a casa, hoy no tendría que ir al estudio, así que hoy podré dormir un poco como la perezosa que soy. Estaba sentada en el pasillo cerca de los casilleros cuando escucho los pasos de alguien muy cerca de mí, levante la mirada encontrándome con Adam. Creo que últimamente me acosa y es algo irónico que yo me queje de eso cuando él es el que debería quejarse de mí, la verdad...
«Respira Morgan, no mueras, puedes hacerlo, tú puedes.»
―Hey, ¿Cómo estás? ―me saluda con una linda sonrisa.
― ¿Yo? Excelente... Em hola ¿Y tú? ―traté de dar mi mejor sonrisa, pero salió más bien como una mueca.
«Y a esto le llamo metida de pata señores.»
―Bien ―sonrió de lado mirándome con confusión―, ¿Te puedo hacer una pregunta?
«Mierda, seguro se enteró de que lo acoso y viene a reclamarme por eso. Listo, ya sabía yo que las cosas no podían ir muy bien.»
―Ya la hiciste. ―bromeo para tratar de calmar mis nervios y de cambiarle el tema.
―Además de esa claro. ―dice riendo un poco.
«Oh pero que puta risa tan bella»
―Claro.
― ¿Te gustaría acompañarme a un lugar? ―cuestionó el mirándome fijo a los ojos.
¡Dios Mío! ¿Cómo es que se respira? Creo que voy a morir...
―Mmm, ¿Cuál lugar? ―ahora me sentía un poco extraña.
«Él es uno de los chicos más guapos del Instituto Sur y el chico del que estoy enamorada desde mis inicios aquí pero...
¿Y si es un psicópata que quiere asesinarme?
¿O violarme?
Bueno si uno no se resiste no cuenta como violación ¿No? ...»
Me sonrojé un poco ante mis pensamientos y el pareció notarlo porque su sonrisa creció.
―Es mi lugar favorito en verdad y me gustaría que fueras conmigo. ―comenta con una sonrisa de boca cerrada calmada y serena.
« ¡Es una de las mejores cosas que me han pasado! Pero aun así tengo que tener cuidado, aun corro peligro de ser violada.»
―Okey, déjame enviarle un mensaje a mi hermano ¿Sí? ―y ahí estaba yo dejándome llevar por un chico que puede ser un asesino en serie y no podemos dejar la opción de violador.
Él asintió y empezó a dirigirse al estacionamiento. Lo seguí hasta el estacionamiento encontrándome con un Ferrari blanco, que me dejó impactada, es hermoso y moderno. Adam me hizo una seña para que entrara al auto, dudé un momento, pero igual me subí a su auto.
Él conducía en silencio y yo lo miraba de reojo cuando él no se daba cuenta, se ve más guapo de lo que es, serio y con el ceño medio fruncido. Condujo un poco lejos de la ciudad y mis dudas empezaron a crecer nuevamente, pude notar a lo lejos un lago muy bonito.
Empecé a sentirme un poco extraña, ¿A dónde me llevará?, pero luego el estaciono el auto junto a una valla, bajamos del auto y él me hizo una seña para que caminara con él, yo lo seguí como una garrapata –bueno no tan literal– y luego nos paramos junto a la valla y pude ver el lago de hace rato pero más cerca, la vista era hermosa y el ambiente muy calmado y pacífico.
―Es lindo, ¿verdad? ―preguntó mirando el lago igual que yo.
―Si en verdad es hermoso. ―respondí aun mirando el lago.― ¿Te puedo hacer una pregunta además de esta? ―cuestioné ahora mirándolo.
―Claro. ―sonrió de lado mirándome.
― ¿Por qué me invitaste a mí a venir aquí?, no es que no haya querido venir, es que me resulta extraño. ―estaba un poco nerviosa por hacer esa pregunta.
« ¿Y si tengo razón? ¿Si solo quiere asesinarme? ¿O violarme?
Calma tus locos pensamientos Morgan, ya deja de pensar que te va a violar, entiéndelo, ¡No te va a violar!»
Me reprocho mentalmente.
―Pues uno, porque este es un lugar especial para personas especiales y dos porque hubiera perdido la oportunidad de hacerte una propuesta. ―enumero todo con sus dedos y yo me sonrojé y me quedé con una pequeña duda.
― ¿Cual propuesta? ―pregunté frunciendo el ceño en confusión.
―Seamos amigos. ―su sonrisa calmada llenó todo el lugar.
― ¿Amigos? ¿Qué ganaría yo siendo tu amiga? ―enarqué una ceja y el rio.
Se acercó un paso a mí y mi respiración se entrecorto.― Ganarías a una persona que nunca se apartaría de ti.
Y ahí... justo ahí, sentí como mi corazón se revoloteaba como loco en mi pecho y me imaginaba abrazándolo justo ahora y diciéndole que no quería ser sólo su amiga.
―Bien. ―digo medio sonriendo y estirando mi mano como para sellar un trato.
El estrecha su mano con la mía y dice.― Entonces ya somos amigos. ―me da una sonrisa y luego gira su cara para seguir viendo el atardecer.
Hablamos y bromeamos hasta que se nos hizo tarde. En el camino de vuelta a casa, él puso algo de música e íbamos cantando a todo pulmón la canción de Rihanna Work, Adam canta muy bien y al parecer esa canción es una de sus favoritas porque la cantaba con muchas ganas, al igual que mencionó que Rihanna es su amor platónico.
Cuando llegamos a mi casa el me dio su número y luego se despidió y se fue. Cuando entré a mi casa salude a Elenor y a Leonardo que estaban sentados en el sofá de la sala, de ellos solo recibí un "Hola" de la manera más seca que se puede decir. Luego recibí un interrogatorio de parte de Diego preguntándome quien era Adam, me reí de él mientras me hacía cada pregunta y luego entré a mi habitación. Me duché, me puse el pijama y tomé mi teléfono para dedicarme a escuchar música, aun con palabras de Adam rondando en mi cabeza.
"Seamos Amigos"
Adam Petty.
―Así que ya cumpliste la primera parte de tu loco plan ¿no? ―musitó Daniel sonriendo con picaría y burla.
―Sip, ahora ya puedo acercarme más a ella. ―sonreí con suficiencia, de verdad que parecía todo un acosador.
― ¿Cuál será tu segundo paso? ¿Enamorarla? ¿Ilusionarla y después hacerle daño? ¿Te recuerdo lo que pasó con Lindsay? Ella aun cree que ustedes tendrán futuro. Siempre actúas como un imbécil cada vez que consigues lo que quieres. ―su mirada ahora era seria.
― ¿Por qué te importa tanto?, yo sé lo que haré y no sé si caiga cuando lo intente, pero seguiré siendo su maldito acosador. ―ahora yo estaba serio— Y te recuerdo que lo de Lindsay fue tu idea, yo jamás le di alas para nada más, era mi amiga, si no hubiera sido por tu estúpido juego de la botella nada hubiera pasado.
―En eso tienes razón, pero ahora es diferente. Te recuerdo que es la amiga de Eiden, ten cuidado. ―sonreí con burla.
Eiden, si tan solo todos supieran la verdad de ese chico, él y yo tenemos un secreto, y no, no es lo que creen, no somos gays, solo tenemos un secreto que debe permanecer en la oscuridad.
―No hay problema con Eiden y ya deja de ser negativo, ya verás que Morgan será mía. ―volví a sonreír con malicia, pensando en mi siguiente paso.
***
Si tienen alguna pregunta pueden hacerla y comentar que les parece la historia, si tienen alguna duda se las puedo aclarar, no duden en preguntar ;)
Betzabeth A.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top