—Apenas puedas mover tu trasero iras y me conseguiras ropa porque no pienso irme con eso! —Jestro exclamo mientras señalaba su pantalon sucio —. Y despues me llevas a casa como sea o la virginidad no sera lo unico que perderas hoy...! —lo ultimo lo dijo con su cuchillo en la mano y señalando su miembro todavia dentro de el. La amenaza de Jestro era clara.

Un escalofrío le recorrió al alfa, asintiendo con nerviosismo. No quería perder a la parte mas importante de su cuerpo —. Co-como digas Jestro...

Aunque era imposible doblegarse ante el cuando seguía en su interior... ¡Y cuando recién hace unos minutos estaba gimiendo para que, literalmente, lo partiera en dos! Jestro era demasiado bipolar a veces... Clay puso los ojos en blanco, mientras sus manos rodeaban su cintura.

—¿De dónde saco ropa...? —Clay pensó en voz alta, suspirando, iba a ser difícil... bastante.

—No se, tendras que areglartelas tu solo... —Jestro suspiro enojado y sonrojado. Se apoyo a descansar en su hombro, despues de todo eso le dolia mucho su cuerpo —. Trata de encontrar algo en las cosas perdidas por ultimo... Mientras tu haces eso yo llamo un taxi pero dudo que pueda caminar asi que nesecito que me lleves cargado hasta mi pieza... —sin saber porque se sonrojo mucho por eso, la idea de que Clay y sus fuertes brazos lo cargaran... Bah! Era solo la situacion en la que estaban y los efectos del celo...!

—Sí... —Clay suspiró.

Se quedaron así durante bastante, bastante tiempo, pero el nudo no quería bajar. Clay se ponía mas nervioso, entre más tiempo estuviera dentro de Jestro, más posibilidades de embarazo habían. Una vez que sintió su miembro más flojo, pudo salir. Dejó a Jestro en el baño, él se arregló la ropa lo mejor que pudo y salió a mojarse la cara, dios mío, parecía un tomate. Cuando salió, como se lo esperaba, la escuela estaba vacía. Caminó con aparente normalidad hasta el almacén, en donde había una sección de prendas perdidas y repuestos.

Al quedarse solo Jestro solto un largo suspiro nervioso y empezo a limpiarse con el confort del baño, suerte que no habia nadie mas a esas horas, asi se le hacia mas facil poder limpiarse y algunas veces soltar un gemido de dolor. Luego de llamar a un taxi espero a Clay alli.

La paranoia lo ataco en la espera y se levanto la polera mientras empezaba a tocar su estomago. Estaba nervioso. Y por la forma como tocaba parecia que este buscaba la mas minima señal de algun hijo o algo que fuera aparecer magicamente frente a el (o dentro de el)... Si, estaba tan nervioso que ya no se acordaba ni del proceso de 9 meses...

Un rato despues Clay caminaba de vuelta mucho más que nervioso. Ahora mismo, lo único que deseaba era que Jestro no le gritara... tanto. Lo único que había encontrado era un uniforme de mujer, pero no era tan malo... ¡Le llevaba hasta pantys!. Entró nuevamente al baño, encontrando a Jestro...¿Acariciándose el vientre?. Por un momento se lo imaginó haciendo lo mismo, pero embarazado de su cachorro, se sonrojó, volteando la vista hasta que se calmó.

—Traigo una buena noticia y una mala —le avisó al entrar—. La buena es que encontré un uniforme, pero la mala es que... -se lo mostró, era una falda... muy corta a su parecer.

—!!!!!???? —Jestro abrio los ojos y boca como platos y se puso colorado otra vez —. ESTO ES PUTA PUTA BROMA!!!!!!???? -rugio como nunca antes por la rabia y verguenza, casi llegando a sacudir todo el edificio —. Primero me violas, manchas mi ropa y ahora me vas a hacer usar eso!? Antes me voy desnudo...!

Pero la llamada del taxista de su telefono lo sorprendio... No podia irse asi y menos aun con su pantalon manchado. Gruño a todo pulmon y le quito la falda de las manos.

—Agradece que no me puedo mover porque o sino ya te huviera dejado sin desendencia... —Jestro gruño rojo mientras se ponia la ropa a duras penas por el dolor, para al menos llegar al vehiculo cubierto en vez de tener que ir todo el camino con eso —. Odio esto... —gruño y gimio avergonzado mientras se vestia. La falda apenas si cubria el bulto de su entrepierna y las panties eran muy incomodas. Se sonrojo de la verguenza por como se veia mientras seguia arreglandose.

—Piensa en cosas tiernas, piensa en cosas tiernas —susurraba Moorington, a punto de que se le parara el corazón... y otra cosa. ¿Por qué Jestro tenía que ser tan jodidamente sexy? La sangre se agolpaba en su nariz y amenazaba con salir disparada —. Y...Ya vamos...

Las piernas de Jestro se veían a la perfección, la falda dejaba ver su trasero y más encima era un uniforme apegado al cuerpo, se sentía como un maldito fetichista... pero no podía despegar su mirada hasta que, por respeto (y para proteger sis partes intimas), tuvo que mirar al frente.

—¿Nos encontraremos a alguien en tu casa? —la pregunta, específicamente, era «¿Estará Monstrox en tu casa?»

—No. Monstrox no viene en toda la semana. Asunto de negosios... —suspiro todavia sonrojado pero ahora parecia triste por alguna razon —. El siempre hace eso, pero al menos tengo toda la casa para mi solo...

Jestro estiro los brazos para que Clay lo levantara. Su sonrojo aumento igual que su mueca de verguenza y disgusto.

—S-Solo date priza que ya deve estar afuera el taxi! Y toma mi ropa y mochila del suelo... Y-Y si pregunta soy una chica ok!? —tartamudeo nervioso

—Como digas... ¿Jessica? —Clay alzó la ceja, pensando y resibiendo un gruñido de odio del otro mientras recogia las cosas del otro.

¿Cómo se llamaría Jestro si fuera mujer? Jessica quedaba bien, bueno, ahora no importaba. Clay tomó a Jestro tal princesa y comenzó a caminar hasta la salida, claro que ignorando la mirada asecesina y avergonzada que este le daba.

—Estás plana... —Clay le molestó un poco, intentando subirle el ánimo. Hasta donde sabía, gritar podría subirle el animo a Jestro pero solo logro sobresaltar y hacer sonrojar mucho mas —. Dicen que masajeando los pechos crecen más~ —aprovechó de dar información que nadie quería ni necesitaba.

—¡! —Jestro se puso rojo. Luego le enseño el cuchillo y se lo puso cerca de la cara con la mirada asesina de antes. Clay trago saliba un poco nervioso —. O cierras la boca te corto el...

—¿Pidieron taxi chicos?

Jestro escondio el cuchillo apenas vio al taxista y al auto, suerte que el no vio el cuchillo. Le saludo y le dio la direccion, tratando de actuar lo mas femenino posible mientras forzaba una sonrisa.

—Si, se nos paso la hora y me da algo de miedo irme sola con mi... novio aunque sea tan fuerte~ —Jestro dijo con una voz suave y femenina que reprimia todas las ganas de matar a Clay y su fuerte sonrojo en ese momento.

El taxista sonrio convencido de que eran una joven pareja y los invito a pasar con educacion. Pero claro sin ver la mirada perpleja y mejillas rojas de Clay, por dentro en chico se derretia por lo adorable que Jestro habia a sonado, sobre todo porque lo llamo novio.

—Estos jovenes de hoy -el chofer se rio y se sentó en el asiento de conductor -por cierto hacen una bella pareja~

Clay se sonrojó bastante mas, dio un pequeño "gracias" con una sonrisa tímida, esperando que Jestro no lo haya notado, si no estaba muerto. Quizá podía provechar, tomó la mano de Jestro "casualmente". Se sentía de alguna manera comprometido con el omega.

—Amor... ¿Vamos a tu casa? —Clay le miró, fingiendo.

—S-Si.... mi amor... —Jestro le miro con odio pero forzo una sonrisa. El taxista parecio no notarlo otra vez, bueno era un hombre de edad avanzada asi que se entendia.

El hombre rio y se fue a por la direccion dada. Apenas el taxista les quito la mirada de encima Jestro alejo su mano bruscamente y se cruzo de brazos. Miro por la ventana todo el camino con enojo, evitando ver a Clay pero su sonrojo seguia intacto, hasta estaba tratando de tirar su falda mas abajo para cubrirse mejor...

Clay suspiro desanimado y miro al otro lado desilucionado. A decir verdad no entendia a Jestro, estaba molesto porque el habia hecho todo lo que el le pido... Realmente era un jodido bipolar... El bipolar que le gustaba de hecho...

El taxista se detubo frente una gigantesca y enorme mancion. Casi parecia un castillo por el tamaño. Tenia hermosos jardines en la parte de al frente con muchas plantas lindas, sobre todo al contraste con lo elegante que se veia la mancion. El taxista y Clay miraron sorprendidos pero a Jestro no le importo y solo pago dandole las gracias al chofer.

—Vamos Clay que no tengo todo el dia... —Jestro suspiro mientras extendia sus brazos para que Clay lo llevara cargado. Todavia se sonrojaba pero una parte de el le gustaba... Sacudio la cabeza rojo como tomate ¡Maldita sea todo era culpa del celo! ¡A el no le gustaba Clay, es mas lo encontraba irritante y ahora un jodido pervertido!

~~~Fin del Cap~~~~