23
Durante los agitados días que fueron antes, durante y después de...
Bueno, todo.
No tuve el tiempo mental como para recordar que el cumpleaños de Bella se acercaba conforme diciembre se alcanzaba.
Un secuestro, Patronus, juicios, aliadas sorpresas y muchas cosas más pasaron tan rápido que me hizo sentir en tercer año cuando Sirius casi que nos arrastró a la casa de los gritos.
El recuerdo del cumpleaños de Bella no llego con el día después de su liberación en dónde lo único que hicimos fue estar en cama.
Admito pensé que haríamos algo más... "Activo" pero para una nueva sorpresa lo único que Bella quería era dormir. Se aferró a mi cuerpo y dejo que los días en la celda se borrarán en una tarde donde a lo mucho bajamos a cenar.
No, fue cuando llegó una lechuza de Narcissa anunciando una reunión en la casa de Andrómeda Tonks para celebrar el cumpleaños de Bella.
Un día entero pase tratado de convencerla de siquiera asomarnos para saludar, tuve que sobornarla con contratar un canal de Rugby. Deporte que al parecer le encanta pues dice es igual de probable quedar idiota de un golpe como en el Quidditch.
-No quiero entrar- pide Bella mirando la casa. Una casa color crema de dos pisos, un jardín lo suficientemente grande como para dar unos cinco pasos antes de llegar a la puerta principal, a los lados más casas parecidas de diferentes colores, pero siempre repitiéndose el patrón estructural y algún que otro árbol o colado en la vista junto a los autos.
-Es tu familia, quieren pasar tiempo contigo-
-Lo sé... ¡Vámonos!-
-¿Por qué no quieres ir?- pregunto tomando su mano y dando un paso a la puerta color rojo.
-Antes del juicio hablé con Andrómeda, no quedamos ni bien ni mal-
-Entonces es una oportunidad-
-No, no Hermione-
-Bella- doy otro paso seguido por ella. Me detengo y sostengo sus dos manos -¿Me dirás?-
Ella aparta la mirada dejándola en una casa vecina. Cierra los ojos, niega y suspira apartando sus manos para "acomodar" el cuello de la camisa que tomo del closet de papá (debo admitir se ve bien en un pantalón Negro y camisa blanca arremangada... ¡No es momento para eso!)
-Deje sin madre al nieto de Andrómeda. Mate personas importantes para ella y él, ¿Con qué cara puedo ir y saludar como si nada?-
-Tal vez eso es lo que ella quiere- digo acomodando finalmente el cuello, con mi mano "plancho" el costado de este y dejo mi mano ahí -Que veas lo que hiciste, pero no creo con un sentimiento de venganza. Puede, y eso lo digo desde toda la esperanza posible que me queda... Puede, quiera que vea no está solo al igual que tú. Puedes ser parte de la vida de ese niño y reparar tu error, o puedes tomar mi varita y huir a casa- Bella no responde, pero si me regresa la vista. Me apartó dando otro paso a la casa, cada vez más cerca de esta.
Bella se queda quieta, mirando hacia el frente.
Da un paso, mira ahora su alrededor incluso dando una vuelta para ver las casas tras ella
Da otro paso, y otro, y otro.
Hasta que toca la puerta.
Esperamos, toma mi mano y suspira.
-Bien hecho- festejo. Ella enseña la lengua cuando el mismo como odioso Draco Malfoy abre la puerta con un pedazo de pizza en la mano.
-Oh, hola- saluda abriendo más la puerta -Mamá y la tía Andrómeda están en la cocina- nos dice cerrando -Que bueno verte Hermione-
-¿No más "Sangre sucia"?- pregunto divertida. Viendo como se trata el pedazo de pizza.
-No, yo quiero cambiar muchas cosas. Además...- señala a Bella con la mirada la cual está viendo la decoración de la sala.
-Ah... Dime tía-
-Obvio no-
Miro el alrededor admirando una que otra pintura con movimiento, fotos mágicas las cuales saludan a una inexistente cámara y unos zapatos botados cerca de la entrada.
Draco señalas estos y se acerca dejando que Bella se siente en el sofá azul rey que adorna la sala.
-Son de Tonks- susurra con lo que creo es una pizca de pena -No tiene mucho que mamá supo eso, creo lo hablaron cuando fue a ver a la tía Bellatrix en la celda-
-Aún hay muchas luchas, ¿No lo crees?-
-Bastantes- responde tocado su brazo -Supongo queda seguir, con suerte cambiar-
-¿Qué le pasó al Malfoy que conocía?-
-La realidad lo golpeó varias veces-
Le dedico una sonrisa antes de guiarme a la cocina con las demás dejando a Bella mirar la colección de VHS que tienen. Al verme Andrómeda me abraza y Narcissa tiende su mano aceptando con gusto el agarre.
-Veo un gran futuro político, señorita Granger-
-Si con "futuro" se refiere a vender mi alma a Rita Skeeter- digo con bilis en la garganta y veneno en la boca -Diría que si-
Se me ofrece una copa de vino, bebo gustosa acercándome a la cuna que está en medio de esta cocina (la cual admito con celos es más amplia a lo que tengo)
Jugueteando con un oso de peluche Teddy Tonks saluda alzando los brazos al aire. Con su inocente sonrisa el cabello cambia de colores, pasando de rubio a verde y después a un castaño oscuro.
-Es como Tonks- dice Andrómeda con nostalgia en voz.
Un par de pasos toscos se acercan a la cocina, volteó para ver a Bella detenida mirando la cuna.
Trata de hablar, abre la boca, pero no sale nada de ella.
Mudes. Solo eso puedo decir de como Bella al parecer trata de buscar palabras con las cuales empezar, Narcissa camina hacia su hermana mayor, toma su mano y la acerca lentamente a dónde Teddy sigue jugando.
Me alejo apenas unos pasos, al lado de Draco. Alza sus cejas y bebo con ahora nervios.
-Él es Teddy- presenta Narcissa. Bella mira a Andrómeda, como sí esperara confirmación -¿No es lindo?- pregunta.
-Velo- pide Andrómeda. Bella asiente, temblorosa mira dentro de la cuna.
-Hola- susurra acercando un nervioso dedo al bebé. Teddy se queda quieto haciendo que Bella se asuste, toma el dedo, sonríe y el cabello castaño se volvió totalmente negro -Hola- dice Bella comenzando a llorar. Sus lágrimas caen, pero con una sonrisa, con un suspiro pausado entre una tosca risa de emoción -Hola- repite besando la cabeza del niño -Soy tu tía abuela, Bella-
Su voz se paga ante sus pocas palabras. Teddy sonríe y trata de morder el dedo de Bella lo cual la hace reír.
Las dos hermanas se acercan, cada una pone una mano en el hombro de la mayor.
Draco señala la salida de la cocina y dejamos que las tres hablen.
-No te diré tía- dice sentándose en el sofá -Todo... Esto, aún no me acostumbro, para nada-
-¿Lo dices por qué estoy con tu tía de forma sentimental y así, o...?-
-No. Poco me importa si te soy honesto, ¿Sabías que la tía Bellatrix me torturaba? Cuando me enseñaba Oclumancia, incluso para "resistir" un Cruciatus-
-Draco...-
-No confundas, Hermione. De cierta forma no creo poder perdonar a la tía Bellatrix, al menos por un tiempo, pero... Bueno. Si algo he aprendido es que hay más que blanco y negro-
-Lo siento, pero. No sé a dónde vas, si quieres que recapacite mi relación quiero que sepas que sé lo que ha hecho Bella. Y si bien no lo aplaudo, lo entiendo y vivo con ello. Ella ha cambiado-
-Y lo vi, cuando la llevaron a juicio y mamá se movió como loca o cuando el trío de idiotas de Hogwarts andaba anunciando mil cosas sobre ella junto a Longbottom. Alguien que vive en igualdad con la persona que le lastimo y continua en esos modos, bueno. Poco o nada habrías hecho por ella. Pero esta... "Sospecha de cambio" cedió justo ahora que vi a la tía Bellatrix con Teddy-
-Suenas como Rita Skeeter- digo con una carcajada -¿Contento, Malfoy?-
-Bastante, Granger-
Una vez terminada nuestra plática y algunos llantos de las hermanas Black, la fiesta continúo.
La música Muggle de finales de este siglo cubrió la casa, al inicio Narcissa y Draco parecían confundidos a los ritmos o tal vez por una Bella que los seguía como sus pies podían.
Comida con un mejor sazón que las dos podemos hacer juntas (celos una vez más) se nos fue dada, las risas se daban constante a pesar de solo ser cinco personas en esa casa.
Un pastel de chocolate fue puesto frente a Bella la cual se quejó de las velas con el número 48, pues ella decía y juraba que cumplía apenas los 30.
Fotos en cada momento y segundo.
Andrómeda me mostró una foto de Bella cargando a Teddy en brazos con la promesa de dármela una vez la mandará a imprimir.
En si, fue un buen día después de todos estos agitados.
No parecía que ella estuvo encerrada durmiendo en el piso o que yo pasé casi tres días seguidos con apenas unas seis horas de sueño.
Llegadas las siete de la noche Draco se despidió dejando a las dos de las hermanas Black tratando de hacer un "karaoke" si es que todo el vino y cerveza las dejaba articular palabra alguna.
Bella se ofreció a acostar a Teddy subiendo al segundo piso de la casa.
Deje pasarán unos cinco minutos para poder seguirla (también escapando de las hermanas de Bella) Dando un paso hacia las escaleras noto un hechizo que priva el sonido, separando así lo que pasa en el primer piso para comodidad del niño (aunque espero solo sea por hoy)
Subo las escaleras viendo las fotos en movimiento de la familia Tonks como algunas en dónde aparece un nervioso Lupin al lado de Tonks.
Llegó al corredor escuchando como Bella tararea, entro en esa puerta entre abierta y la cierro lentamente.
Bella tiene su mano metida en la cuna de Teddy, mirándolo como puede desde el sillón al lado de este.
-Una duda- dice sin despegar la vista del niño -¿Tu cumpleaños, por qué y cuando?-
-Ya paso, solo... No creo correcto celebrarlo sin mis padres-
-Entiendo, supongo debemos encontrarlos, ¿No, qué hiciste en ellos?-
-Cambie sus memorias. Pensé en borrar estas, pero no sabía si la guerra sería de años o meses, no tome un riesgo así de grande-
-Sí...- busco dónde sentarme, Bella ofrece su pierna y niego revirando los ojos sentándome en una silla alejada en una esquina -¿Sabías que Voldemort decía que todo nuestro desastre era para las futuras generaciones?-
-Suena a algo que él diría-
-Muchas veces escucha que gente seguía en las filas por eso, para "heredar" un mejor lugar. Nos lavaron bien el cerebro, creo-
-Bella. Esas épocas ya pasaron, no digo que finjas no conocerlas. Pero si aprender-
-Teddy- dice acariciando el cabello del niño -Yo maté a tu madre... Lo siento- besa su cabeza y se aleja -Andrómeda dice que tarde o temprano lo sabrá, pero que hará lo posible para que él no lo sepa-
-¿Qué dijiste?-
-Que estaba mal. Él debe saber. Tiene que entender que el sacrificio de sus padres fue tal, que incluso alguien como yo puede vivir en paz-
Bella se levanta, estira los brazos y no deja de verme. Sonríe, camina hacia mí y besa mi frente.
-¿Cambie?- pregunta.
-Sin duda, Bella-
-¿Para bien?-
-Eso el tiempo y solo tú lo dirás-
-... Te amo-
-También te amo, Bella-
Sonríe, junta nuestras frentes y habla:
-Debemos encontrar a tus padres-
-Pero aún estás en casa, ellos-
-Nada de peros. Los buscaremos, los encontraremos y tendrás de regreso a tu familia-
-Si- digo tragando con fuerza la emoción en mi vientre.
Me levanta, ambas reímos y salimos de la habitación de Teddy. Bajamos para continuar con la fiesta, para tener un buen recuerdo después de estos amargos días.
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