— Dale un aplauso a mí colección, frente a ti, los seis bakugan más poderosos de cada atributo. —Alabó Hydron bebiendo de su cáliz, entre tanto la albina solo miró su propia copa en silencio.

— Entonces.. ¿Alguien puede decirme porque hay solo cinco? —Se quejó al momento que lanzó su cáliz al suelo. —¡Spectra!

Una pantalla con la imagen del rubio enmascarado apareció frente a ellos.

— Así que, Spectra. Ya has derrotado al Dragonoid y aún no está en mí colección, ¿Cómo explicas esto?

— Mis disculpas, Principe Hydron.

—Eres él mejor peleador de Vestal, Sal allí y demuestralo.—Exigió.

— Lo haré pero comprenda que estas cosas toman tiempo, no le fallaré.

— Eso espero, no sería prudente decepcionarme.— Habló mientras rizaba su cabello con los dedos. —¿Sabes? Te prestaré a "The Queen" de nuevo para que te ayude a obtenerlo mucho más rápido, ¿verdad que soy amable?—Sonrió.— Al fin y al cabo. Acaban de hacerle un ajuste y sería bueno probarla.

— Sí. Muchas gracias, Su Alteza.—Despidió Spectra antes de que la pantalla desapareciese.

— Rosse.—Llamó Hydron ganándose la atención de la chica.—Parece que tendrás trabajo antes de tiempo.

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— Ese niño malcriado.—Gruño él rubio.

— Acepto toda la responsabilidad, mis fallas han causado su desaprobación.— Se disculpó Gus.

— No es así, hemos ganado mucho. El simple hecho de tener a "The Queen" de nuestro lado nos da una ventaja absoluta.— Explicó.— Él Príncipe solo esta haciendo una rabieta infantil, quiere su juguete nuevo.

— Tenga cuidado, Maestro Spectra. Nunca se sabe quién escuchará.—Advirtió Gus.

— Que escuchen. Anda, tenemos que ir por ese Dragonoid.

— Sí, maestro.