Ghosting

(Cuando una persona decide esfumarse de repente sin dar explicaciones de una relación amorosa, afectiva, familiar o de cualquier tipo)

Todo había comenzado con un "Registrarse" en una app para conocer gente, que Jonathan, su mejor amigo, le había recomendado. Néstor estaba muy aburrido, ningún alma aparecía en su oficina, por lo que hartó de sólo ver cómo el gato de una de sus compañeras y mejores amigas entraba a su oficina a sólo jugar con una de sus plantas, descargó la aplicación.

Al hacerlo dudo mucho, pero comenzó a conocer gente y de distintos lugares, sin planearlo fue haciéndole promoción a su trabajo de wedding planner y además comenzó a hacer amigos, hasta que un día, un tal "Chris B." Le mandó un "Hola 👋🏼". Ese mensaje iba a cambiar por completo a ambos.

Comenzaron a platicar unos minutos al día, después se convirtieron en horas, unas largas horas, dejaron de hablar por la app y se trasladaron a WhatsApp, donde se mandaban notas de voz, hacían llamadas y hasta videollamadas

Sin darse cuenta ya conocían casi todo del otro, Néstor supo que Christopher era de Ecuador, pero vivía con su madre en Nueva Jersey, además le encantaba el skate y cantar, en el momento que comenzaron a hablar no tenía trabajo, pero mientras pasaron los días lo consiguió nunca le dijo de que trataba y tampoco preguntó.

Un día, dejaron de ser amigos. Christopher le había pedido que fueran novios, todo con un detalle muy bonito, le mando un ramo de rosas y una caja de dulces, en el arreglo florar venía la tan esperada pregunta "¿Quieres ser mi novio?". Néstor no lo dudo ni un segundo, tomó su celular y le llamó

—Hola —escuchó al otro lado

—Sí —contestó

—¿Si qué? —no lo veía, pero Vélez sonreía

—Si quiero ser tu novio

—¿En serio? —cuestionó emocionado

—Claro

—No te vas a arrepentir por esta oportunidad, te lo juro

—Yo sé que no

—Ahora con mayor razón voy a ahorrar lo necesario para ir a verte

—Eso me parece increíble, igual yo lo haré

Los meses pasaron, cada día se mostraban más enamorados, ¿Quién podría dudar de el amor que se tenían? Lo malo para Aguirre era que Christopher muchas veces se desaparecía de la nada, no le contestaba los mensajes ni llamadas, pero lo veía en línea, lo que lo ponía un poco tenso ¿Qué había hecho mal? ¿Ya no eran novios? ¿Estaba enojado? ¿Ya no lo quería? Muchas preguntas que, sin dudarlo, se las hacía a Christopher, pero nunca se las contestaba, prefería esquivarlas y ya no insistía.

El día que se vieron en persona por primera vez fue inevitable derramar unas lágrimas, de felicidad, obvio, fue una semana en la que la disfrutaron a más no poder, lo llevo por un tour en la CDMX, Vélez quedó encantado, Néstor nunca fue a visitar a Chris, pues este decía que no iba a poder pasar mucho tiempo con él por su trabajo. De nuevo, volvía a desaparecer sin dar una explicación, dejaron de ser días a convertirse en semanas, eso terminaba en desesperación a Néstor ¿Qué era lo que pasaba?. Aquello coincidió en que fuese contratado en la empresa del padre de su amiga Romina, intentaba concentrarse en su trabajo, sin embargo era inevitable no pensar en su relación, sus amigos le decían que debía terminar eso, pues no le daba una estabilidad, pero Néstor nunca los escuchó y se arrepentía de aquello.

Christopher volvió como si nada y más amoroso que antes, no paraba de decirle "Te amo" "Ya quiero verte" "Te extraño demasiado", le mandaba detalles.

Acordaron otra visita, Néstor estaba emocionado, feliz de poder tener en sus brazos a su novio, lo llevaría a conocer la nueva empresa, ya tenía todo planeado, pero el día que Christopher tenía que llegar desapareció, no volvió a saber de él, le llamó y nunca contestó, envió mil mensajes a sus redes sociales y no obtuvo respuesta. Néstor estaba preocupado "¿Y si le había pasado algo malo?" se preguntaba cada minuto. Estuvo por meses sufriendo por su ausencia y más sin saber si estaba bien.

—¿Nada? —cuestionó Romina, entrando a la oficina

—No, ni una maldita señal, parece como si se lo tragó la tierra —echó la cabeza hacia atrás

—¿Qué hay de sus redes sociales?

—Desactivadas... Creo que Christopher Vélez fue producto de mi imaginación

—Pero si yo lo conocí—expresó con sorpresa y se sentó en una silla frente al escritorio— ¿Pero cómo que redes desactivadas?

—Mira —volteó la pantalla de su computadora— Ni facebook, ni instagram y menos twitter... ¿Romina, qué pasó con él? ¿Acaso hice algo mal?

—Enamorarte de él, eso fue lo que hiciste mal

—Es que nunca me dijo nada —miró un punto fijo— Sólo un día desperté y bloqueado de WhatsApp

—Ya olvídalo, lechera —lo tomó de la mano— Eres mucho para él

—No es fácil, Romy —la plática fue interrumpida por unos golpes en la puerta— Sí, adelante —la puerta fue abierta y José Enríquez, uno de los dueños de la empresa se asomó

—Nos espera la clienta, vámonos que quiere conocer a mis dos wedding planners estrellas —expresó con orgullo el señor Enríquez hacia su hija y amigo.

Néstor tomó su saco, celular y salió detrás de José, el teléfono de Cecilia, la "nueva" comenzó a sonar, tal vez sería su primer cliente, así que muy emocionada tomó la llamada.

—Buenas tardes, bienvenide sea a "EM Bodas y Eventos" ¿En qué podemos servirle? —esperó la respuesta—¿Podría proporcionarme su nombre? —sacó una libreta para anotar— Perfecto, Christopher Vélez, usted ha llegado al lugar indicado, nosotros haremos de su boda y preparativos algo inolvidable.