Más allá del vínculo


Wang YiBo no era conocido por ser exactamente el mayor ejemplo de cordialidad. Amaba a su familia y muy a su manera se preocupaba por ellos, pero la única persona que según su criterio merecía recibir su completa atención y su obvia adoración, era Xiao Zhan, su parabatai desde que tenía 10 años y su pareja desde que tenía 18.

Aún podía recordar la atípica forma en la que le pidió al mayor que aceptara ser su parabatai y posteriormente su novio.



Flash back
Yibo observaba atentamente cuando una pareja de cazadores de sombras salía de la oficina de sus padres acompañados de un niño mayor que él, el niño estaba cabizbajo y tenía vendajes cubriendo múltiples heridas en su flacucho cuerpo, se sorprendió porque nunca había visto a nadie tan malherido antes.

Notó que el niño era un nephilim al igual que él, y le llamó la atención que nadie había usado una iratze para curarlo de sus múltiples heridas, las cuales se veían dolorosas.


Le dio curiosidad y decidió seguir a los adultos y al niño pelinegro de ojos bonitos y pudo escuchar de boca de sus propios padres que el niño se quedaría a vivir en el instituto con ellos y se sintió feliz, ya que se sentía muy solo. Yibo era muy tímido y le costaba acercarse a los demás y los otros niños parecían tenerle miedo.


Se acercó al adolescente larguirucho y lo tomó de la mano entrelazando sus dedos, el niño mayor se sobresaltó porque no escuchó a Yibo acercarse, pero lo enterneció la mirada inocente del menor. Xiao Zhan sin pensarlo siquiera, le acarició el cabello y le dió lo que YiBo hasta el día de hoy describiría como: la sonrisa más hermosa del mundo.


-No te preocupes, gege. No estés triste. Yo sé usar una estela, curaré tus heridas y te protegeré. Seré tu parabatai -Xiao Zhan no pudo hacer otra cosa más que asentir, el pequeño niño le había derretido el corazón completamente.

Ocho años tenía Wang Yibo cuando decidió que Xiao Zhan sería la persona más importante de su vida y su parabatai.
Fin Flash back



Ambos cazadores de sombras llegaron al instituto donde una muy preocupada Xia los estaba esperando, los miró a ambos con los ojos entrecerrados, como buscando algo y suspiró antes de hablar.

-A-Zhan, BoBo... los he estado esperando por horas. Tenemos visita desde Idris y hemos tenido que recibirlos solos. -YiBo hizo una mueca de fastidio y rodó los ojos y Xiao Zhan disimuladamente le dio un golpe en el estómago.

-Lo siento, tía. Me tardé mucho en encontrar a este tonto.

Yibo apenas podía contener la risa.

-Ni modo. No sé qué haré con ustedes. A-Zhan, tus padres enviaron a alguien para que la conozcas. La joven es descendiente de los Trueblood y te está esperando en el recibidor.

Yibo frunció el ceño ante las palabras de su madre, Xiao Zhan por su parte lucía tan sereno como siempre. Inmutable, como si no hubiera escuchado lo que Wang Xia acababa de decir.

-No estoy presentable, tía. Mis padres deberían avisar cuando piensen hacer este tipo de cosas.

La voz de Zhan no dejaba ver nada, pero Xia lo conocía lo suficiente como para saber que el chico estaba molesto.

-Tonterias, te vez como el príncipe encantador que eres. No hagas esperar más a la señorita y por favor asegúrate que mi tonto hijo se comporte. Sé que irá contigo aunque le diga que no lo haga, sólo tú puedes controlarlo.


Xiao Zhan asintió e hizo una reverencia.

-A-Zhan... Recuerda que no tienes que hacer nada que no quieras, esta es tu casa y aquí siempre habrá un lugar para ti.

-Gracias, tía.

Ambos siguieron caminando juntos hasta que perdieron de vista a la madre de Yibo, sólo hasta entonces el menor habló.

-Este debe ser otro intento de tus padres por buscarte una esposa, Zhange.

-Probablemente -Suspiró- estoy tan harto de que sigan insistiendo con lo mismo. No pierden las esperanzas de que regrese y tome control del instituto de Chongqing.

-¡Tú no necesitas una jodida esposa! -La voz de Yibo estaba cargada de ira.

-Obviamente no, ya tengo un esposo. Sin embargo eso es algo que no puedo decirles a menos que quieras que nos separen para siempre. Mientras yo no lleve una runa matrimonial, para ellos sigo siendo soltero.

-Por supuesto que no quiero que nos separen. Tampoco es como si pudieran hacerlo, a donde vayas yo iré contigo y dónde te entierren allí seré enterrado. No sólo eres mi jodido marido, también eres mi parabatai. Mi lugar es contigo. Yo soy tuyo y tú eres mío, nuestras almas se pertenecen.

-Entonces sino quieres que terminen separándonos o algo peor, déjame manejar esto a mí, hemos roto demasiadas reglas, Yibo. Nos hemos estado comportando como mundanos y no lo somos... somos nephilims y no se supone que tú y yo seamos algo más que parabatai. Además tampoco quiero que le arranques la cabeza a la pobre chica, ella no tiene la culpa de la situación de mierda en la que nos encontramos.

-No prometo nada. Si se acerca mucho a tí, no puedo asegurar su integridad física, Zhange.

Ambos jóvenes entraron en el recibidor, donde una chica muy bonita pero de rasgos duros esperaba. Tenía facciones europeas, cabello castaño rojizo y unos impresionantes ojos grises, los ojos más hermosos que Xiao Zhan había visto en su vida, aunque él seguía prefiriendo los ojos café de Yibo.

La chica era bonita, le daría eso.

-¡Xiao Zhan! -la castaña se puso de pie evidentemente emocionada. Mucho se hablaba en la clave sobre la belleza de Xiao Zhan, pero ella jamás lo había visto en persona. Ante sus ojos, Xiao Zhan era fácilmente el hombre más atractivo que sus ojos hayan visto.

Pasó totalmente de Yibo y se colgó del brazo del pelinegro más alto.

-Compórtate -Xiao Zhan le susurró a Yibo, quien parecía a punto de atacar a la muchacha.

-Es un placer conocerla, señorita Trueblood. -saludó Xiao Zhan educadamente.

-Oh, por favor. Llámame sólo Evian.

-Tiene nombre de agua embotellada -Yibo susurró y rió, ganándose una sonrisa de Xiao Zhan. Evian no alcanzó a escucharlo.

-Por el momento no me siento cómodo con tales informalidades, espero y me comprenda. Por cierto, le presento a mi parabatai, Wang Yibo.

La chica miró al castaño por primera vez, lo miró de pies a cabeza y luego decidió que no valía darle una segunda mirada.

Xiao Zhan apretó los dientes.

-Ya había escuchado sobre ti, YiBo... tu reputación es bastante conocida en Idris. También te ví una o dos veces en reuniones del consejo.

-¿Reputación? ¿Le importaría explicarse? y por favor no lo llame con tanta familiaridad, a mi BoDi le molesta "y a mí también" lo último lo pensó.

La chica se quedó sorprendida por el tono hostil en que Xiao Zhan le había hablado, pero no le dio demasiada importancia.

-Bueno, no es un secreto la fama de rebelde sin causa que lo precede. Será un cazador de sombras talentoso, pero su carácter y falta de disciplina dejan mucho que desear. Nadie entiende como es que un cazador de sombras como tú, Xiao Zhan, alguien decente y guapo, pudo hacerse parabatai de un desastre andante como lo es él... sin ofender, YiBo.

Era oficial, Xiao Zhan quería despellejarla lentamente.

YiBo por su parte estaba a punto de perder la compostura, bastó un toque y una mirada de su parabatai para que se controlara y dejara a Xiao Zhan manejar la situación.

-BoDi...

-Mnn...

-¿Me permites un momento con la señorita Trueblood? Me gustaría invitarla a dar un paseo por los jardines traseros del instituto.

La chica sonrió radiante y le dedicó una sonrisa de triunfo y burla a YiBo. El castaño rodó los ojos y se fue, controlándose para no mostrarle el dedo medio a la insoportable mujer.

-Estaré en n... en mi habitación, Zhange. -el mencionado asintió.

Ofreció su codo para que Evian lo tomara, la castaña se colgó de él y no dudó en recostar su cabeza contra el hombro de Xiao Zhan lo que dificultaba un poco que se pudiera mover con libertad.

Cuando se alejaron lo suficiente como para que nadie los viera o los molestara, Xiao Zhan los envolvió en un glamour dónde nadie podía verlos o escucharlos, sin embargo Evian no lo notó. Tampoco vió los ojos de Xiao Zhan cambiar de cafés a rojo y luego volver a su color original.

-Señorita Trueblood, le pido que por favor me suelte. Quiero mostrarle algo y necesito mi brazo para hacerlo.

Sin esperar una respuesta, Xiao Zhan se zafó del agarre y empezó a desabotonarse la camisa que traía puesta, abrió los primeros botones y por debajo se podía apreciar su piel clara, mancillada por las runas desvanecidas y las que continuaban activas. Evian lo miraba estupefacta y sonrojada, miró hacia todos lados antes de empezar a hacer lo mismo con su blusa.

-señorita Trueblood... ¿Qué cree que está haciendo? Dije que quería mostrarle algo, no que se desnude. No tengo ni el más mínimo interés de verle los pechos.

-P- pero... creí que...

-¡Por el ángel, no! No estoy tan desesperado, mujer. Ponga atención a esto -señaló la marca grabada en su pecho, en el lado izquierdo, encima de su corazón.

- ¿Sabes lo que es, verdad? -preguntó brusco, dejando de lado la cordialidad y sus perfectos modales.

-Por supuesto. Es la runa parabatai

-¡Exacto! -aplaudió, su mirada se tornó seria y hasta cruel- ¿Y sabes por qué dejé que YiBo la grabará justo en este lugar... justo sobre mi corazón?

-N-no...

-Pues yo te diré el porqué.

La chica comenzaba a asustarse, Xiao Zhan se veía enojado y amenazante.

-Mi parabatai es la persona más importante en mi vida, mi vínculo con él está por encima de cualquier cosa o cualquier persona, eso incluye a mi supuesta futura esposa. No puedo, ni quiero tener cerca de mí a alguien que no respete a mí parabatai y se atreva a intentar menospreciarlo. Por lo que te pediré cortésmente otra vez, que dejes de llamarlo por su nombre... no te has ganado ese privilegio y cúbrete. Ten un poco más de amor propio, mujer.

La chica avergonzada lloró de rabia, acomodó sus ropas y trató de secar sus lágrimas con sus puños. Xiao Zhan la había humillado.

-No eres el príncipe perfecto que todos dicen y creen que eres.

-Nunca he dicho que lo soy, sólo no me he molestado en corregirlos. No todos son merecedores de mi amabilidad, si la quiere... gánesela.

Volvieron al instituto en silencio y cada cual tomó su camino, Xiao Zhan iba escribiendo algo en su teléfono mientras reía. Evian por curiosidad y terquedad decidió seguirlo, Xiao Zhan se dirigía hacia la habitación de Wang YiBo.

Se quedó sorprendida cuando vió la alta figura de YiBo esperando a Xiao Zhan en la puerta de su habitación, pero mayor fue su sorpresa cuando lo vió acariciar la mejilla del más alto y a Xiao Zhan levantarlo en volanda. YiBo envolvió sus piernas alrededor de la cintura del mayor y se besaron para después entrar y cerrar la puerta.

Sonrió abiertamente, Xiao Zhan y YiBo estaban violando la ley y ella tomaría ventaja de este hecho. A Evian Trueblood nadie la humillaba y se salía con la suya.

Que el ángel los proteja. Recibo comentarios, preguntas y tomatazos en esta sección.

¿Alguien más quiere pegarle a Evian?

¿Qué creen que hará la chica para vengarse por haber sido humillada?

Besos en la cola😘




Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top