"Las noches eternas te dan la bienvenida, cuando y siempre estés preparado para dar tu vida. "

Alice se limpiaba los labios después de haber bebido la sangre de Fausto.

—Bien bebe de mi y vivirás eternamente. —Comenta Fausto con una sonrisa.

—¿me convertí en una vampira? —Responde Alice.

—¿que?... No digas estupideces, eres una sirvienta nada mas.

—¿Por qué yo?

Fausto quedo en silencio y se abstuvo de contestar. —Vámonos, no tengo toda la noche y hay mucho que explicar.

—Pero, ¿y el cuerpo?

—No te preocupes llamaré a un buitre después.

—¿buitre?

Fausto da media vuelta y abofetea fuertemente a Alice. —Vete acostumbrando a ver muertos porque es lo único que verás de ahora en adelante, ¿ok?, ahora si yo te ordenó algo lo haces sin pensar o yo mismo te mando hacer compañía a ese cadáver, ¿Entendiste? —Alice asiente con la cabeza, mientras soba su rostro por el golpe. —Bien, ahora vámonos.

Alice sigue a Fausto dejando atras lo ocurrido, no sin antes dar una última mirada al cuerpo de John, preocupándose de que alguien lo viera o peor aun que la culparan.

Ambos toman un taxi rumbo al centro de Nox, una vez dentro del vehículo los dos observan sus respectivas ventanas sin decir nada.

—Se que tienes muchas dudas, pero todo se responderá a su debido tiempo, solo espera. —Dice Fausto después de un rato y sin despegar su mirada de la venta, mientras que Alice no responde. —te aconsejó  aceptar esta nueva y cruda realidad, así todo será más fácil para ti, créeme. —palabras motivadoras pero con cierta nostalgia en ellas.

Alice se encontraba confundida al ver que todo su mundo se viene abajo, sin saber que es real y que no lo es, la actitud siniestra y agresiva de Fausto parecía lo único real dada a su naturaleza, pero al escuchar esas últimas palabras con cierta bondad de su parte, hace dudar de su naturaleza.

—Bien, llegamos.

Fausto paga el taxi por el viaje, mientras que Alice se baja.

—¿Me trajiste a un club nocturno? —Cuestiona Alice sorprendida. —¿Afterlife? Vaya nombre.

—Si, vengo por negocios, pero te servirá como introducción. —Responde Fausto.

—¿Introducción? ¿de qué?

—Me están cansando tus estúpidas preguntas, siento que estoy tratando con una idiota. —La pasiencia de Fausto se estaba acabando. —tu mundo se acaba de hacer más grande, ¿y aun no sabes de que te voy hablar?

—Perdon, voy a elegir mejor mis palabras. —Alice hace una reverencia mientras pide disculpa.

—Primera lección, no hagas esas cosas, nunca llames la atención, debes ser más discreta si quieres sobrevivir.

Alice se detiene al notar el tono de voz de Fausto, pues había seriedad en sus palabras, esto ya no era juego ni regaño, esto ya era una carrera para su supervivencia.

—Vamos entremos, necesitas un trago.

Ambos ingresan al lugar lleno de personas que bebían y bailaban, el ruido de la música electrónica era lo bastante alto como para bloquear las palabras; Se ubicaron en la segunda planta donde podían apreciar todo el lugar, donde se acerca un mesero para atenderlos.

—Bienvenidos al Afterlife, ¿Que gustarían de tomar?

—Una margarita por favor. —Dice Alice.

—¿Y el caballero?

—Una botella de plasma.

—De acuerdo. —Dice el mesero antes de marcharse por sus bebidas.

—¿Plasma? no imaginaba que podrías beber.

—No puedo, por eso pedí algo para mi gusto adquirido.

Alice comprende por lo que guarda silencio hasta que el mesero trae sus bebidas a cada uno.

—Bien has tus preguntas con confianza, aquí nadie no escuchara.

—Ok... ¿Que eres? y ¿Hay más de ti?

La risa Fausto se hace presente por las obvias preguntas de Alice. —Un vampiro, un cadáver chupa sangre, un monstruo candenado del infierno, dime como gustes pero el terminó correcto sería Vástago. En cuanto si hay más de mi especie, la respuesta es si, hay tantos que se ha tejido una sociedad atravez de las épocas llamada "La Mascarada" de la cual ahorita te explicaré a detalle.

—Entonces, ¿estas muerto? ¿eres inmortal?

—Clínicamente estamos muertos, no late nuestro corazón, no respiramos, no necesitamos comida. Pero nos movemos, pensamos, planeamos y cazamos. Pará conseguir sangre y alimentar esta inmortal artificial, es verdad que somos inmortales por lo que no podemos morir por causas naturales o enfermedades, pero si nos puede matar, un proceso bastante difícil debo de agregar.

—¿Son cómo los que vemos en las películas?

—Es verdad que tenemos cierto parentesco con lo que han visto en el cine, pero la mayoría sólo son mitos, pero si haces referencia a crepúsculo te destripare justo ahora.

—¿Si muerdes a alguien  se convierte en vampiro?

—Falso, ¿te imaginas que eso fuera verdad? El mundo estaría atestado de vampiros y nos quedaríamos sin alimento.

—Entonces ¿Cómo?

—Es sencillo, debes vaciar la sangre de la victima al borde de la muerte y luego el vampiro le da un poco de su sangre y así se volverá cómo un no-muerto.  A este acto se le conoce cómo "El abrazo"

—¿y si recibe sangre la victima sin ser vaciada?

La pregunta de Alice es muy astuta al tratarse de su caso, por lo que Fausto vuelve a reir por su jugada.

—Fácil, la persona se transforma en un Ghoul, que generalmente son usados cómo sirvientes de los vastagos.

La respuesta agobia a Alice pues da entender que dejó de ser humana y peor aún atada a él.

—No todo es malo, ya que nuestra sangre les brinda larga vida y algunos poderes... Claro para que nos sirvan y protegan.

—¿Protegan? Entonces si pueden morir.

—Ya te había dicho que si, el sol y el fuego es lo mas letal que hay para nosotros.

—¿Que hay de las estacas, el ajo, el agua bendita y las cruces?

—El ajo y el agua son sólo mitos, las estacas en el corazón no nos mata pero si nos paraliza hasta que esta sea removida y las cruces o cualquier símbolo sagrado depende de la fe del portador.

—Vaya es todo muy distinto a lo que creía.

—Bien, ahora quiero que veas hacia aquella esquina y veas a la pareja, más específicamente al hombre. —Dice Fausto mientras señala la dirección.

Alice enfoca su vista y nota algo raro en el hombre, entonces lo ve perfectamente y a gran detalle, observando el rostro desfigurado del caballero con  grandes protuberancias y dientes totalmente deformes. —¡Oh por dios!

—Guarda silencio, ahora observa a la chica que está con él.

Alice la ve y nota cómo la chica sonríe y denota cierto placer en su rostro mientras el vampiro bebe la sangre  de su cuello.

—Eso que ves, se llama "Beso", es cuando un vampiro bebe sangre de un mortal, el beso provoca un extasis a quien lo recibe. —Dice Fausto mientras le da un trago a su copa. —Por eso el rostro de la chica se encuentra en placer, las heridas provocadas por nuestros colmillos pueden ser cerradas con la simple saliva de nuestra boca, de esa forma no dejamos marca.

—Pero, ¿cómo es que la chica no ve su apariencia deforme? ¿Tu tambien luces así?.

—No todos lucimos así, solo el clan Nosferatus, ellos tienen una maldición en su sangre lo que provoca la deformidad en su raza, pero para eso están la diciplinas.

—¿Diciplinas?

—Son las técnicas o habilidades de los vampiros, hay una gran cantidad de diciplinas las cuales todas tienen un costo para ser usadas, la sangre obvio, un motivo mas que la convierte de gran valor.

—¿Por qué tantos términos? ¿no lo entiendo?

—Es un léxico moderno, te sorprenderias el arcaico, pero todo es para ocultar nuestra sociedad.

—Comprendo.

—Debes de entender que nuestro principal objetivo es estar ocultos para asegurar nuestra seguridad.

Alice asiente con la cabeza, pero en eso una voz sale de la oscuridad. —Miren nada más que tenemos aquí. —El par voltea y ven a una chica de pelo rosa con un estilo punk acercarce a ellos.

—H-hola —Saluda Alice tímida.

—Fausto ¿quien es esta bella criatura del señor? —Comenta la misteriosa chica, mientras manosea a Alice con cierta lujuria.

—¿Se conocen? —pregunta Alice paralizada.

—Ella es Rosa Ludwig, la dueña del club.

—Sep esa soy yo, pero dime Fausto ¿a que has venido? —Pregunta Rosa mientras  pasa su lengua sobre el cuello de Alice.

—Necesito que mandes un buitre a la Biblioteca Baker, la que esta en el Parque Bell.

—Y ese Buitre, ¿tiene que ver con esta chica?

—Ella es Alice, trabaja en la biblioteca y es mi ghoul personal.

Rosa se aleja rápidamente de Alice. —Que asco, ya contaminaste su cuerpo con tu sangre.

—Y más de una forma —Agrega Fausto con cierto descaro.

—Eres un cerdo.

Alice se sonrojar totalmente al recordar la noche de la masacre, cuando se sumergió en placer entre todos esos cuerpos.

—Bien mandare un buitre, mientras tu te encargas de esto. —Rosa le entrega un papel a Fausto.

Alice se intriga del contenido del papel, pero no alcanza a ver que dice. —Bien, yo me encargo. —Fausto se levanta y ve a Alice. —Alice esto todo por hoy, mañana continuaremos con todo esto.

—De acuerdo.

Fausto se detiene a unos cuantos pasos y voltea con Rosa. —Sobra decir que si le haces algo a mi propiedad, no dudaré en matarte.

—Eres un viejo gruñón como siempre, ya largo de aquí.

Fausto se va dejando sola a Alice con Rosa. —Dime cariño, ¿que sientes al servirle a tu jefe?

—Es mi primer día, espera ¿dijiste Jefe?

—Así es, él es Fausto Baker el fundador de la biblioteca en que trabajas.

—¿Que? Pero si sólo es un niño .

—¿Eres estúpida?

—¿por qué todos me dicen así? —Se cuestiona Alice así misma con cierta tristeza.

—El es más viejo que tu, recuerda  que él es un vastago.

—Es verdad, solo que aún no me creo todo esto. —La tristeza de Alice aumenta.

—Tienes suerte que fuera Fausto, ya que si hablamos de lealtad, Fausto es único en su especie.

Mientras Rosa explica un poco de Fausto a Alice, él es encontraba en unos apartamentos haciendo el encargo de Rosa.

—Fausto es un vampiro de foco, voluntad pura, leal a su gente, algo que los vástagos actuales conocen muy poco, debo de admitir.

Fausto se encuentra parado frente a una puerta, voltea a ambos lado para ver que nadie lo esté observando y con solo dar un paso hacia adelante atraviesa la puerta con si fuera una cascada de agua.

—Lo llaman Baskerville —Comenta Rosa.

—¿Baskerville?

Fausto sin hacer ruido avanza por el departamento el cual se encontraba cubierto de sangre,  acompañado de ruidos extraños que retumban en él mientras caminaba, al llegar a la sala ve a un hombre devorando un cadáver, mientras que en el fondo se observa a una mujer de apariencia elegante. —¿y tu quien eres? —La mujer se altera al ver a Fausto en la habitación, mientras que el recién nacido ataca a Fausto cómo una bestia poseída.

—Así es, Baskerville el sabueso del diablo. —Replicó Rosa.

El joven vastago consumido por el hambre de un recién nacido ataca con  gran furia a Fausto, quien esquiva con facilidad los torpes ataques de la cría, con agilidad coloca el dedo en el pecho del vastago, para ser perforado con la uña que llega hasta el otro lado del cuerpo, matando al joven de un solo ataque.

—¡Tu bastardo! —Grito la elegante vampira mientras observa cómo su cría se vuelve cenizas.

—Procrear sin permiso, va encontrá de la mascarada.

—Tu... ya se quien eres. —Señala la Vampira. —Eres el maldito Caitiff que trabaja para Rosa, el sabueso de mierda. —Ríe la vampira tras sus palabras.

—Rosa es tu Sire y tu le faltaste al respeto rompiendo la mascarada mala agradecida, por lo que debes de compartir el mismo destino que tu cría.

—Quiero ver cómo un sin clan va a lograr eso... ¿Eh?

Fausto perforó el pecho de la vampira con todo su brazo antes de que esta se diera cuenta.

—No quiero escuchar eso de una Neonato cualquiera. —Dice Fausto mientras las cenizas de vampira se disuelven en el aire.

El trabajo de Fausto había concluido, mientras que Alice se encontraba sorprendida en el Afterlife, al conocer un poco de Fausto.

—Alice te daré un consejo, confía en Fausto, ahora él es tu Sire y tu eres su ghoul si llegas a dudar de él lo lamentaras de muchas formas.