4_Madre ✔️

Némesis

Salgo de la casa luego de vestirme en el salón, no puedo creer lo que acaba de hacer ese imbécil.

FlashBack

-Necesito un cigarrillo -sonríe mientras retiro mi cabeza de su agitado pecho. Hace mucho calor y creo que debo de irme antes de que me eche y eso no pude pasar o sino pasaré hacer otra chica más del montón.

-Y yo necesito irme -anuncio buscando mis pertencias por el suelo.

-Cierra la puerta cuando salgas -su voz sale cargada de enojo ¡bien hecho Némesis! Has cabreado al imbécil.

Agarra su pantalón y saca de su cartera dos billetes.

¿No lo hará?

Arroja estos a mi cara. La rabia sucumbe mi cuerpo y antes de él poder emitir cualquier sonido una cachetada vuela hasta su rostro dejando a Chad un poco aturdido.

-Más puta será tu señora madre - agarro mi vestido y zapatos saliendo desnuda de la habitación.

Fin del FlashBack

¿Acaso me vio cara de prostituta? ¿Creé que necesito su asqueroso dinero? ¡Uyyyyy¡ siento mi cuerpo hervir sólo de recordar lo que acaba de pasar.

El frío golpea mi rostro y me doy cuenta de que no tengo como llegar a casa. Sólo me queda llamar a Atenea la que en menos de diez minutos ya está aquí. Espero impaciente fuera de la sucia casa de el sucio Chad. Como le odio al muy maldito.

Subo al auto en cuento aparece mi hermana y cerrando este de un ruidoso portazo y acto seguido se pone en marcha.

-¿Estuvo tan mal? - levanta sus cejas refiriéndose al sexo.

-Es lo que menos me interesa ahora mismo ¿Sabes lo que hizo ese imbécil? -Yo me estreso y ella niega.

-¿Que hizo? -Pregunta.

-¡Él muy imbécil arrojó dinero a mi cara como si fuera una prostituta! -protesto.

-¿Qué? ¿Él hizo eso? ¡Juro que acabaré con ese imbécil? -chilla golpeando el volante del auto-. Mi madre tiene que sacarte de esto. Yo lo haré por ti -sentencia.

-No, yo lo haré. Esto se volvió algo personal. Esta vez me humilló a mi. Acabaré con el por mi dignidad y por la de esas cientos de chicas que humilló e hizo sentir basura.

¡Maravilloso Némesis! Te lo tiras por una venganza y hablas de moral!

Mi voz interior me cabrea aún más, literalmente estoy soltando humo por los oídos.
El auto frena frente a un edificio de lujo que nunca antes vi. Mi hermana baja de este y yo tras ella.

-¿Que hacemos aquí? ¿Por qué no vamos a casa? -Pregunto con el ceño fruncido.

-Mamá te explicará -anuncia mi hermana, ella no estaba muy de acuerdo con el plan de mamá, pero a nuestra madre nadie le dice que hacer y menos Atenea o yo.

Nos adentramos en el elevador divisando dentro de este a una pareja que literalmente están teniendo sexo dentro del mismo.

Atenea preciosa el botón hasta la planta número veinte y el elevador se pone en marcha.

Trato de concentrarme en lo que le diré a mamá pero unos gemidos silenciosos por parte del chico al cual su novia le está tocando su miembro, provocan en mi unas cosquillas en el estómago al recordar los gemidos de Chad cuando agarré su cabello. Su cara cuando terminó dentro del condón fue......¡Fue una mierda! ¿Qué hago pensando en ese imbécil de Benson? El carrasco de la garganta de Atenea me hace volver a la realidad. El elevador ya ha llegado a nuestro destino y aún yo estoy inmóvil dentro de este mientras mi hermana me hace señas para que salga.

-¡Némesis! ¡Sale de una vez! -Mi hermana tira de mi fuera del elevador.

-Lo, lo siento -balbuceo.

-¡En que diablos pensabas! -su pregunta agita mi corazón pero por suerte se mentir muy bien.

-Sólo pienso en Chad a dos metros bajo tierra -miento y ella sonríe mientras caminamos por los pasillos.

Nos detenemos frente al departamento 480 y mi hermana nos abre paso abriendo la puerta. Ya dentro una silueta en el oscuro salón me pega un gran susto y esa sólo puede ser mi madre. La luz se enciende y esta camina hacia mi con su rostro sin expresión alguna. Trago saliva y me paro firme. Mi madre se detiene frente a mi y me da una sonrisa ¡Ha sonreído!.

-Sabía que lo harías bien -su mano derecha viaja al broche de oro que hay en el bolso que lleve a la fiesta y lo retira ¿Un micrófono?.

-¿ Has colocado un micrófono en mi bolso? ¿Por qué? ¡¿Acaso me creistes incapaz de hacer esto?! -espeto con rabia.

-Tenía que hacerlo, siempre has sido una chica muy sensible para estas cosas y para ser honesta. No te creí capaz -sus palabras me rompen el corazón. Tuve que dejar que ese imbécil me humillace para que al final nada de esto sea suficiente para ella.

-Una madre no le hace eso a su hija. Una madre de verdad siempre va proteger a su hijos sea como sea. Tu eres una muy mala madre y mi padre debe de odiarte por eso -su mano cae en mi rostro dejando este colorado y ardiendo.

-Tengo que recordarte quien eres ¿Quieres salirte ahora y regresar a ese sitio? -Sus uñas se entierran en mi brazo dándome mucho dolor-. ¿Responde?.

¡No llores, no lo hagas o será peor!

-¡No! ¡yo acabaré con Chad Benson y la agencia del abuelo será nuestra como siempre debió de haber sido.

-¡Bien! -sus uñas soltaron mi piel dejando este sangrando-. Esta será su nueva casa, evitará que nos relacionen -hace una pausa -Y les advierto, si se equivocan volverán a su lugar favorito.

Tras su salida por la puerta mi hermana corre a mi y me envuelve entre sus cálidos brazos.
Ella no dice nada ni yo tampoco, simplemente lloramos. La venganza a vuelto a la señora Anderson un monstruo y no, no queremos volver a ese lugar, a ese infierno.

La mañana llega sin previo aviso y el sol que se cuela entre los espacios de las cortinas me obligan a despertar treinta minutos antes de la hora prevista. A penas abro los ojos él viene a mi mente, una película con las escenas de ayer en la noche me perturban. Mi corazón se agita y involuntariamente muerdo mi labio inferior y sonrió.

¡A que está bien bueno el Chad! ¡Quieres probar ese bombón de nuevo cierto!

-¡cállate! -me pongo de pie y corro a la ducha, necesito ya un baño con urgencia.

Minutos después tomo del armario un pullover blanco ajustado, unos jeans y chaqueta de cuero negro acompañado de mis botas de tacón alto del mismo color. Ya vestida recojo mi moño en una coleta alta, pinto mis labios de rojo sin dejar atrás mi delicioso perfume afrodisíaco que no puede faltar para que Benson caiga otra vez.

El auto aparca en el estacionamiento subterráneo del gran edificio. Nos bajamos de este y tomamos el elevador hasta el último piso donde está la oficina general y el gran despacho del imbécil.

¡Imbécil Benson! ¡Linda frase! Se ha vuelto mi favorita.

Cinco minutos después me encuentro frente a la oficina del imbécil en espera que su secretaria Kelly me indique que puedo entrar a la última entrevista. Aunque no es que haga mucha falta esta, pues yo soy algo así como un traslado.

La gran puerta de la oficina de Benson se abre y la secretaria sale por esta indicando que puedo pasar.

-Ya puede pasar a su última entrevista, el señor la espera.

-Muchas gracias -le doy una sonrisa y antes de poder entrar mi corazón se agita y el tiempo va en cámara lenta hasta que lo veo ahí sentado creyéndose un Dios.

¡Es un dios¡ y bien que lo sabes.

A veces quisiera dejar de hablarme a mi misma pero me resulta divertido, sobre todo porque mi yo malvado tiene buenas ideas.

-Buen día Chad Benson -anuncio con una sonrisa en el rostro y sus ojos atrapan los míos llenos quizás de rabia, confusión, deseo.

Observa el expediente que yace sobre su escritorio tal vez para comprobar que no está soñando.

-Buen día Némesis Anderson. Puede pasar y tomar asiento para iniciar con la entrevista -Finge indiferencia y con su mano me señala la silla frente a él.

-Nunca me imaginé que me enviarían a este lugar -Hablo mientras mi vista recorre la habitación.

-¿Estas segura? No será que quisiste seducir al jefe para que te acepte en el puesto. Eso es típico en las chicas como tú -hago un intento de reír ¡te mataré estúpido!.

-Si lo crees así entonces será mejor que me vaya -me pongo de pie dispuesta a irme pero su cuerpo me impide el paso.

-Sabes que no puedes hacer eso, una vez que entras aquí ya no puedes salir
- alardea.

-¡Me importa un mierda! ¡¿Crees que fue bueno?! ¡¿Crees que en realidad sentí algo ayer en la noche?! ¡Te la das de folladios y no eres más que un imbécil incapaz de hacer sentir a una mujer! Ya olvida lo que pasó entre nosotros, no fue más que....No Fue nada -mis palabras lo dejaron en silencio, sus ojos están rojos, llenos de furia y con una pizca de creerse lo que le acabo de decir.

¡¿Se siente feo Benson?!

Una sonrisa se dibuja en su rostro y camina hacia mi hasta acorralar mi cuerpo con una blanca pared. Escalofríos recorren mi ser y trago saliva al sentir su respiración chocar contra la mía.

-¿Nerviosa? -comenta con una sonrisa.

-¿Por tu causa? ¡Imposible! -exclamo pero es peor el remedio que la enfermedad ya que sus labios están sobre los míos en un frenético beso del que no puedo soltarme.

¿Por qué no puedo?

Su mano derecha se mete bajo mi pullover y atrapa uno de mis senos con esta, lo aprieta hasta que con mi mano tiro de su cabello entonces suelta mi gemela para pasar su mano por dentro de mi pantalón mientras su boca recorre mi cuello. Zafa la cremallera y desliza su mano por dentro de mis bragas, con su dedo juega con mis sexo sin introducir este, mandando espasmos de calor por todo mi sistema ¿Quiero que me hagas venir? Su dedo entra en mi vagina dando suaves y precisas embestidas. No se porque diablos se siente tan bien cuando lo hace él. Sus dedos ágiles entran y salen con mayor rapidez ahora llevándome a la locura ¡Estoy a punto de correrme !Un gemido se escapa de mi boca y antes de poder llegar al orgasmo este saca su mano dejándome con ganas de más

Mi pecho sube y baja descontroladamnete y él solo respira agitado frente a mi mostrando una evidente sonrisa de victoria.

Acabas de arruinar todo por caliente pero ¡Eso estuvo genial! Ahí tienes para un mes y así ya no tendrás que hacerlo tu sola.

-Esto muestra -me enseña su mano mojada de mi -. Que tus palabras de hacen rato no tienen validez y lo que respecta a tu trabajo. Tienes tres meses de prueba -¿Qué? Sólo quiere joder mi existencia.

-¡Pero! ¡Yo....! -no me deja acabar.

-Tu sólo vístete que te esperan para tu entrenamiento -enojada me dispongo a irme pero su voz me detiene-. ¡Némesis! Sólo arreglaste un poco el cabello.

Toco mi alborotado cabello y la rabia vuelve a mi.

¡Ahhhh¡ ¡Acabaré contigo! Tanto que no tendrás ganas ni de reír .Vas a sufrir: Chad Benson.

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Holiiiii!!!!!🔥🔥🔥

¿Qué les pareció este capítulo?

¿Qué ocurre con la madre de Némesis?¿ Tienen alguna idea?

¿Quién es su protagonista favorito?

👆Él imbécil Benson
O la calenturienta Némesis

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Donde estaré dejando avances y contenido de la historia.

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