24_Vuelve ✔️

Chad

-¿Habéis drogado a mis guardias por unas hamburguesas? -río pero estoy cabreado. Intento mirar hacia otro lado porque su sólo rostro me estresa ¡no se que diablos hacer con ella!

-No nos ha pasado nada, puedes marcharte y llevarte a tus guardias, no los necesito -atrae toda mi atención ¿Qué mierda estas diciendo? Respira Chad.

-¿Qué me estás contando? -intenta escurrirse dentro de su casa pero lo evitó obstaculizando mi cuerpo con el suyo.

-Quítate -ordena.

-Te la pondré así, ¿mis guardias o vuelves a la agencia? ¡Eres mi responsabilidad! Y la de todos allí-me enervo, ver a Némesis es perder el control.

-No tienes poder sobre mi Chad, es mi vida -resoplo con disgusto. La ahorcaría sino me gustara tanto <<Aunque puedo ahorcarla de otras formas>> Chad concéntrate.

-Escucha... -si quiero que vuelva, tengo dejar mi brazo torcer, ponerme de su lado. -No dejaré que nada te pase ¿ lo entiendes? -suplicó. Necesito que vuelva, verla a mi alrededor aunque pierda el cabello de estrés, pero sobre todo, que esté bien. Si algo le pasa... yo.

-No volveré a tu agencia...a menos...-hago silencio. Todos nos han dejado solos en medio del pasillo.

-¿A menos qué Némesis? -pregunto con curiosidad <<Qué quieres agente>>

-Olvídalo Chad. Si tengo que pedírtelo no lo quiero -intenta pasar por su lado, pero una vez más la detengo sosteniendo su brazo y tirando de su cuerpo contra el mío. Muy cerca. Mi respiración se corta cuando nuestros cuerpos entran en sintonía y sus ojos comienzan a desviarse a mis labios.

-No lo haré - decreta mirándome fijamente a los ojos, entonces asiento conteniendo todo la rabia dentro de mi ser. No lo haré, bueno si, es por una causa justa ¿no? Respiro profundo. Esto es muy difícil. Yo no hago estas cosas, nunca. Pensemos en mi abuela y en mi abuelo, que estos días a estado insistiendo en que debo de hacer que Némesis regrese a la agencia, además no he aprobado su renuncia, ni siquiera nadie sabe que lo ha echo.

-Bien, entonces llévatelos, a tus guardias -se suelta de mi agarre de un tirón.

-Némesis... -cuestiono ¿ahora que quiere?

-Adiós Chad -pone un pie dentro de casa, sin embargo la detengo esta vez con mi voz.

-¡Vale Némesis vale! -camino de un lado a otro nervioso mientras toca el puente de mi nariz y cierra los ojos para hallar forma de decirlo. La veo a ella detenidamente y como contiene las ganas de reír ¿Enserio lo haré? -. Quiero que vuelvas, a la agencia. -esboza una sonrisa. -No lo hagas no sonrías -la señalo con un dedo.

-Umm... -duda.

-¡No, no es necesario que decidas ahora! Puedes pensártelo el tiempo que quieras... ¡tienes 24 horas! -espeto.

-Me lo pensaré -Mis palabras le hacen sonreír.

-Bien, eso es suficiente por ahora. Entonces... creo que... me iré -señalo el elevador y asiento <<no quiero hacerlo, quiero quedarme>>

Avanzo hasta el elevador, pulso el botón a la primera planta. Estoy agotado, quiero ir a casa y dormir un poco. Llevo 48 Horas sin pegar un ojo a causa de unos casos sin resolver y en constante miedo de que los alacranes puedan hacerle algo a mi familia y a Némesis. También por la rabia de no saber cómo empezar a resolver el secuestro y mucho menos cómo atraparlos y a su jefe en concreto.

Al llegar a bajo. Me encuentro con los guardias a los que Némesis mandó a dormir y su relevo, todos a mi espera. -Ustedes, quédense abajo, revisen el edifico y vigilen a la agente de cerca, sin que se dé cuenta -hablo al relevo y estos asienten poniéndose en marcha. -Y ustedes. Desaparezcan de mi vista.
Subo al auto donde me esperan Matthew y los demás agentes para ir a la agencia a continuar el trabajo. Mi amigo me observa con curiosidad, querrá saber si pude convencer a Némesis de regresar a la agencia incluso hicimos una apuesta. Obviamente gané y tendrá que hacerme un gran favor.

Apenas llegamos a la agencia bajo del auto directo a mi oficina para tomar mi ropa y poder darme una ducha, aún no me acostumbro a estos uniformes tan apretados y calurosos. Cuando tengo la ropa entro al baño a ducharme, el de mi oficina que no comparto con nadie. Soy muy quisquilloso con mis cosas por eso yo mismo me asombro de haber llegado tan lejos con Némesis, la primera chica que fue a mi casa y la única, a usado mi baño, mi ropa e incluso mi cama ¡mi cama! No solo en mi depa sino también en casa de mis abuelos. No se que me está pasando, pero esto tiene que parar.

Dejo que el agua caliente relaje la tensión de mis músculos y que recorra todo mi cuerpo,sin embargo, viene a mi mente la última vez que la tuve desnuda frente a mi y automáticamente se me pone dura viéndome obligado a dejar de pensar en ella, no voy a jalármela en su nombre ¡Jamás! Esa bola de fuego no puede tener tanto poder sobre mi.
Cabreado por todo lo que causa pensarla salgo de la ducha para secarme y colocarme la ropa a toda prisa y así poder continuar con el papeleo del caso de hoy.
Carlos Medina, un mexicano residente en el país, acusado de violación, asesinato, narcotráfico y tráfico de personas. Un hombre bastante escurridizo, pero que gracias a la labor de todos mis agentes lo logramos capturar el día de hoy. A este asqueroso le esperan unos cuantos años en prision y como depende de mi, jamás volverá a ver La Luz del sol.

La puerta se abre de un ruidoso empujón y por un momento pienso que se trata de Némesis, sin embargo, un cabello rubio me dice que mi pensamiento es erróneo. Me pongo de pie de inmediato.

-¿Por qué diablos entras sin llamar? ¿Es esta tu casa? -protesto.

-Llevo semanas intentando hablar contigo. Semanas detrás de ti para que me des una maldita respuesta Chad, eres un cobarde de mierda y un jugador -gruñe cabreada la rubia.

-Sheyla...

-¡cállate! ¡Estoy harta de que pases de mi!...

-¡Basta!... Nunca te di esperanzas. Fui sincero, no me gustan las ataduras y lo sabes mejor que nadie ¿Qué esperas? ¿Que me case, que tengas hijos contigo solo porque nos acostamos un par de veces? Por favor Sheyla.

-¿Con ella si? -

-No entiendo nada de lo que hablas -me veo obligado a darme la vuelta y ver la cuidad desde el ventanal a mi espalda. Nunca me había fascinado tanto como ahora.

-¡Mi padre me lo ha dicho. La has presentado a tu familia como tú novia. He estado contigo siempre. Llega ella y en un segundo todo desaparece y me haces a un lado como algo desechable. Estoy harta Chad! ¡Harta!

-¿Cómo te has enterado de eso? -interrumpo su discurso. Odio estas cosas, estas escenas absurdas. Juro que me ponen muy mal.

-En el hospital, tu abuelo se lo ha dicho a mi padre -me voy al quirófano por unas horas y cuando vuelvo a despertar mi abuelo a contado toda mi vida ¡Será posible!

- Lo nuestro era sexo ya nada más -Es la verdad y aunque me cueste admitirlo sé que la cagado, pero eso no se lo diré. Sus ojos se llenarán de lágrimas.

-Lo se Chad ¿Era solo sexo? ¿Cierto? -Ya no lo soporto más.

- Por favor, no quiero pelear, no he tenido un buen día -suplico.

-Nadie ha tenido un buen día, pero está bien, no insistiré más. El karma existe, se lo dejo todo a el. Solo espero que nunca te enamores -son sus últimas palabras antes de marcharse y dejarme confundido en la oficina.

<<enamorarme>>Shuuii

No tengo cabeza para seguir trabajando, será mejor que vaya a casa. Me pongo de pie luego de haber estado casi dos horas meditando cada una de las palabras de Sheyla. Desde que Némesis apareció en mi vida todo ha cambiado, yo y mi forma de comportarme. Ahora todo a mi alrededor se ve distinto. Quizás Matthew tenga razón y el amor o lo que sea que estoy sintiendo es bueno y no hay que temerle. No hay que tener miedo de ser vulnerables de vez en cuando. Ya estoy pensando tonterías.
Cierro el ordenar y tomo mi chaqueta para ir a casa, mañana será un día largo, pero como esta noche ninguna. Eso lo tengo claro.

Como había imaginado la cama se siente como un nido de espinas y mi cabeza duele de tanto pensar. Miro el reloj a mi lado el cual marca más de la media noche. Se supone que debo estar durmiendo hace unas horas ¿Cómo haré para dormir a esta hora? ¡Matthew! Le llamaré, necesito hablar con él, quizás si me cuenta su aburrida vida consiga dormir.
Salto de la cama en busca de mi celular, el que por cierto dejé en la cocina. Aprovecho para prepárame un café, se que será malo para mi insomnio pero me apetece. Así que mientras preparo el este marco a mi amigo.
Cinco timbres después lo toma.

-¿Qué hora crees que es? ¿Acaso eres idiota o te chupas el dedo del pie? -¡¿Némesis?! Escupo un poco de café cuando su voz irritante taladra mis oídos. Me despego el celular de la oreja y miro la pantalla ¿En qué momento pasó esto? <<Tu subconsciente>>

-Yo... yo no ¿Por qué gritas? ¡No grites! -ella me enfada y me hace balbucear y... y decir y un montón de veces. <<qué te pasa Chad Benson>> Se supone que eres el tipo duro, el crack, el que no tiembla con ninguna mujer y ahora estoy con el celular en la mano, la chica que me gusta del otro lado de la línea y no puedo decir otra cosa que no sea "y" ¿A donde fue el viejo yo, mi carisma y personalidad? ¿A donde fue el HP Benson?

-Son las dos de la madrugada Chad ¿A qué has llamado? -su voz se escucha algo somnolienta, pero ya no grita, ahora habla sutilmente <<Es bipolar>> Sin creerlo vuelvo a mirar la pantalla para convencerme de que no es un sueño. Y si, es ella. Vuelvo a llevar el celular a mi oído.

-¡Mañana te quiero en la agencia a primera hora agente Anderson! -suelto lo primero que se me ocurre.

-¡¿Por qué gritas otra vez?!.

-¡Has empezado tu!.

-¡Ya te vale ¿no me dejarás dormir?! -demanda.

-No, tengo insomnio -una risa se hace presente. -¿De que te ríes?

-Chad Benson tiene insomnio y me ha llamado, bien ¿Qué te traes entre manos? ¿Enserio crees que caeré en tu labia otra vez? No lo sueñes Benson. Ya tuve suficiente.

-Vuelve, quiero que regreses a la agencia -confieso dejando un espeso silencio entre ambos que dura unos segundos.

-¿volverá hacer como antes?.

-Eso no te lo puedo asegurar, pero...

-Volveré con algunas condiciones -propone captando toda mi atención incluso la que no tenía para dormir.

-Te escucho -voy con la taza de café hacia el sillón del salón. Necesito estar cómodo para lo que viene, presiento que será una bomba.

-La primera, no me tocarás ni un solo pelo Chad, a menos que yo quiera -Umm, vas a querer Némesis, lo harás. Incluso me suplicarás por eso. -dos, no seré tu criada y tres, no soportaré tu horrible actitud ni malos tratos... ¿Qué dices? -. Suspiro profundamente luego de beber un sorbo de café.

-Bien, acepto ¿Algo más que quieras agregar? -pregunto por si se le queda algo.

-nos vemos mañana Chadi - comenta con sorna ¡será! Cuelga antes de que la pueda insultar.

Mañana será un gran día. Lo presiento y sobre todo para ti bola de fuego.

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