Chad

Mientras me muevo lentamente sobre Némesis, poseyendola, aún no creo que casi dije esas palabras. La sensación es... indescriptible. Es que con ella todo son sensaciones, desde que agarré su mano esta mañana ocurrió eso, eso que intento ignorar, no Chad, eso de sentir no va contigo. Estoy siendo delicado con ella mientras la follo solo porque intento experimentar. Nunca había sido así con ninguna chica, yo soy rudo, busco mi disfrute.

Mierda, ando experimentando primeras veces con Nemesis, ya esto me está asustado. Me pongo tenso, ella lo nota.

- ¿Sucede algo?- la pregunta salió mezclada con un suave gemido.

La miro a los ojos, es tan hermosa, odiosamente perfecta. No quiero que sea así, porque me atrapa, y a mi nadie me pone riendas o limita mis acciones. Ella contornea sus cadenas debajo de mi, eso da un sacudón a mi polla dentro de ella y la fricción envía corrientes por mi cuerpo.

- Vamos Chad, muévete - medio suplica. No hace falta que lo haga más.

Vuelvo a embestir y no se por qué coño sigo siendo delicado. Creo que ver su rostro contrayéndose con suavidad y emocion me hace querer ser así con ella.

Ay Némesis, no se que me haces, pero en el fondo se que me gusta, y mucho.

Mi abuela como siempre es un amor con Némesis, no para de halagarme por tener una "novia" tan bonita, carismática y cautivadora. Por cada palabra que sale de los labios de mi abuela a favor de ella, más ancha se hace mi sonrisa y mis ojos sobre ella.

Estamos cenando todos juntos. Mis tíos, primos, sus hijos, esposas y esposos, en fin, toda la familia Benson está aquí celebrando los felices 40 años de matrimonio de mis abuelos.

- Y dinos Némesis -habla el tío Robert, esposo de Andrea, hija menor de mis abuelos-. ¿Cómo es que Chad logró que una chica como tú se fijara en un pedazo de mierda como él? -todos se ríen. A mi no me da ningún tipo de gracia.

Entre Robert y yo siempre ha existido cierta rivalidad. No acepta que yo siendo nieto asuma el negocio de la familia. Él era el brazo derecho de mi abuelo cuando dirigía la oficina, esperaba su ascenso cuando el viejo se retirara, pero nadie contaba con que el mando de todo sería dejado en mis manos, ni yo esperaba tanto. Mi abuelo siempre me preparó para esto, pero esperaba que el viejo Benson se diera por vencido y me dejara vivir mi juventud, pero, obviamente tenía que obligarme a ser responsable.

Desde los 14 años recibí preparación física y militar, con 16 años ya sabía disparar y otro tipo de explosivos. A los 17 ingresé en la academia militar de Estados Unidos mientras estudiaba una carrera universitaria en Contabilidad y finanzas. Con 21 años tenía mi primera carrera, luego llegó otra y otra, todo para complacer a mi abuelo, solo que después si me gustó lo que hago.

- Bueno, digamos que tengo otras armas que pondría a rogar hasta a tu propia hija - digo con sarcasmo. Mi abuela me reprende con la vista, mi abuelo sonríe.

- Tu retorcido y sádico humor no cambia - comenta.

- Si sabes cómo soy, limítate a dirigirme la palabra. - estoy molesto y lo hago saber. La mano de Némesis se coloca sobre la mía. La miro a los ojos y me hace un gesto para tranquilizarme.

- Bueno, respondiendo a tu pregunta - habla la Némesis erguida y con seguridad. - Su sobrino, además de ser un hombre exitoso tanto en el sentido personal como laboral. Es encantador y tiene muchas cualidades que me harían elegirlo por encima de todos.
Nuestros ojos se encuentran. Estoy inmóvil, solo la veo a ella. Me sonríe y mierda, parece sincera, pero, se que todo es parte del show que estamos montando, así que, la reacción de mi cuerpo me sorprende.

- Que lindas palabras Némesis. Estoy muy feliz de tu llegada a la vida de mi nieto - mi abuela sonríe con añoranza. - Los veo y me recuerdo en mis años de juventud, cuando conocí al abuelo de Chad. Toda la familia conoce la historia. - Ay no, ahí vamos otra vez.

Mientras mi abuela cuenta la historia de su vida con mi abuelo, como fueron obligados a casarse por conveniencia familiar y de como se enamoraron con el paso del tiempo (aunque asegura que mi abuelo se enamoró de ella a primera vista), yo me retiro junto a mi abuelo hacia su despacho. Los ojos de la pelirroja me siguen pero decido no deparar en ellos e ir con mi abuelo.

- Estuve revisando algunos archivos de la oficina. Más de 30 casos sin cerrar en los últimos 2 meses Chad. - es severo. Con lo que respecta al trabajo siempre es así.

- Lo se abuelo. Pero el equipo está trabajando fuertemente en ello. Además, tenemos el mérito de la captura de Sokolov.

- No te quedes con solo ese merito hijo. No pasé los mejores años de mi vida creando nuestra agencia para que pierdan el respeto que hemos conseguido en todos estos años al ver el poco desempeño de nuestra compañía. En los últimos 25 años esto nunca había pasado. ¿A caso te queda grande el puesto?

Me molesta que me hable asi. Él sabe que me esfuerzo, que trabajo duro, que hago lo mejor para dirigir a mi equipo. Se que fue difícil posicionarnos, ser respetados y reconocidos por las autoridades del país. El surgimiento de nuestra agencia ocasionó mucha polémica en su época, su legalidad y desempeño estuvo muchas veces en tela de juicio y minimizado por las clásicas y reconocidas agencias federales que siempre han dirigido y velado por el orden del país tanto nacional como internacionalmente. Gracias al trabajo de mi abuelo en todos estos años logramos estar a la altura de esas agencias, de hecho, tener un lugar reconocido en la autoridad y cuidado del país. El orden está también en nuestras manos, nos asignan entre los casos más difíciles e importantes. Muchos de los criminales más buscados y peligrosos de Norteamérica han sido capturados por nuestro equipo en los últimos 25 años. Casos de peso internacional como la trata de Blanca y el propio tráfico de órganos, hemos logrado detener varias cadenas de años de actividad y prejuicios para la sociedad. Realmente estoy orgulloso de nuestro trabajo y lo que se ha logrado.

- Abuelo, te pido por favor que me dejes hacer mi trabajo sin interferir - trato de ser cortés

- Entonces, haz bien tu trabajo. - sale de la oficina.

Aprieto el puente de mi nariz mientras me acerco a su mini bar y me preparo un trago de coñac.
Complacer al viejo Benso es demasiado difícil. Me gusta mi trabajo, me esmero porque amo lo que hago, pero no dudo que lo que me impulsa a ello es ver el orgullo en los ojos de mi abuelo, siempre que nuestra agencia es mencionada y reconocida en los medios de comunicación, en congresos.

La puerta de la oficina se abre. Muerdo mi labio inferior al ver a la chica tan hermosa que me acompaña esta noche entrando. Es cautelosa y avanza lentamente hacia mi. En sus ojos veo el hambre y deseo. Aprieto mi puño a mi costado para contener los deseos de tomarla acá mismo sobre el escritorio de mi abuelo y con mi familia a unos metros de distancia.

- Me quedé esperándote - me dice cuando llega a mi lado.

- ¿ya me extrañabas? - digo con arrogancia.

- No, es que necesito irme. Mi hermana Atenea me necesita en casa.

- Dile a Atenea que tendrá que esperar.

- No te estoy pidiendo permiso. Solo vine a avisar que ya me despedí de tus abuelos y familiares -Odio su actitud. Siempre tiene que ser tan... ella. Dios, que molesta llega a ser cuando se quiere hacerse la feminista independiente y dueña de su vida.

- No te vas - demando. Ella se bufa.

- ¿Quién lo dice? - me desafía con la mirada.

- No estoy jugando nemesis. Dije que no te vas. Tengo planes para esta noche. - comienza a carcajearse.

- ¿Enserio te crees que tienes algún tipo de derecho sobre mi Chad? No sé si tu chip esté generando bien la situación actual, dejame y te explico. - llega a mi lado. - mete en tus entendederas que todo esto - hace señas al rededor con sus manos - Es fachada. No somos nada. Cuando más, solo nos follamos para pasar el rato.
La falta de interés en su voz me cabrea. La agarro a la fuerza y la beso. Ella se resiste al inicio pero su fortaleza es mínima junto a la mía. La inmovilizo y decide ceder. Ahora responde el beso, primero lentamente luego agrega su toque característico de frenesí. Aprieto su trasero mientras la dirijo a pasos torpes hacia el escritorio sin despegar nuestras bocas. Levanto ligeramente su vestido y cuelo una de mis manos en sus bragas.

《Mojadas》

Su mano se posiciona sobre la mía y cuando estoy a punto de darle un poco de entretenimiento a mis dedos ella me detiene. Detengo los besos y la veo sin entender.

- Tú no tienes el control Benson. - me empuja ligeramente para alejarme de ella.

Arregla su vestido y su cabello. Saca del interior de su pequeño bolso de mano un espejo con alguna mierda de maquillaje de esas que usan las chicas. Se observa en el y limpia el borde de sus labios donde hay rastros de labial. Lo cierra de golpe y sus ojos me buscan con tanta autoconfianza que me siento ¿intimidado? No, confundido, si, esa es la palabra.

- Nunca tendrás ese control sobre mi.

Besa su dedo anular y lo pega a mis labios antes de encaminarse a la puerta. Me quedo como bobo viéndola alejarse mientras contonea sus caderas provocativamente. Antes de agarrar el pomo de la puerta voltea a verme.

- Buenas noches señor Benson. Nos vemos en la oficina. Ah, y por cierto. - señala a mi entrepierna - Saludos a tu amigo por mi. Échale una mano - me guiña un ojo y se marcha.

Consternación

Confusión

Lujuria

Deseo

Enojo

Tantos sentimientos y emociones diferente se arremolinan en mi interior que no se cual de todo burbujea con más fuerzas por salir al exterior. Maldita niñata,es una caja de sorpresas, odio que sea así, que se crea que puede dirigir, poner pautas o hacer lo que le de la gana con lo que respecta a mi. Esta equivocada sí cree que la dejaré hacer eso.

No intentes disimular Némesis. Se que estas a mis pies. Tu fuego no podrá hacer leña de este roble, fuegos.