Capítulo 10 *Campamento familiar*

Es un hecho innegable que perdimos más que a nuestra bebé. Perdimos nuestra paz mental, perdimos la confianza y estamos a poco de perder el amor que decimos sentir el uno por el otro.

- Zack ya está durmiendo – me he recuperado satisfactoriamente del atentado, aunque he perdido a mi hija, estoy aún viva, y eso es lo importante. Pero Sebastian

- Gracias _______ - asentí y me fui a mi apartamento. Decidimos darnos un tiempo... ya ha sido casi un año.

Solo hablamos lo necesario y tenemos un trato con respecto a Zack. Nos comportamos como una pareja cuando estamos los tres juntos.

- ¿hay un retiro de padres e hijos en la escuela?- preguntó Sebastian

- Si, es una semana completa, al parecer es una clase de campamento y eso – bebí un poco de té que había preparado – Zack parece entusiasmado por ir, muchos de sus amigos quieren que el vaya – dejé la tasa en la mesa de centro y agarré el libro que estaba leyendo.

- Eso implicaría ir los tres juntos – Sebastian se acomodó en la silla - Yo tengo tiempo suficiente, no sé si...

- Si es sobre Zack, tengo todo el tiempo del mundo – dije interrumpiendo cualquier barbaridad que fuese a decir Sebastian. Últimamente se había vuelto muy cruel con sus palabras. – nos comportaremos como una familia por Zack y luego, volveremos a la normalidad.

- Gracias ______- asentí

- Lo hago por mi hijo – bebí el último trago de té.

- Aún sigo sin entender el porqué lo haces – suspiré y lo miré fríamente

- Confórmate con saber que amo a ese niño más que a mi vida – Sebastian me miró por unos momentos y se fue en silencio sin decir una sola palabra.

- Debe ser doloroso ¿no? – asentí, tragándome una vez más mis lágrimas. Louis me miró y me abrazó.- ¿por qué tendemos a enamorarnos de las personas que más daños nos hacen?

- Porque somos humanos, somos por naturaleza masoquistas- dije tratando de ocultar mi rostro en el pecho de Louis.

- Solo recuerda, que a pesar de que no me veas como algo más que un pañuelo para llorar, estoy aquí para ti _______

- Lamento hacerte siempre lo mismo Louis – presioné mi rostro contra su pecho

- Eso tiene solución – alcé mi rostro y el sonrió tiernamente – eres un desastre andante

- ¿cuál solución? – Louis acarició mi cabello y me dio un beso en la frente

- Se mía ______ Graham

Llegó el día del campamento, era hora de fingir por el bien de Zack.

- Mami te ves linda – sonreí y apreté las mejillas de Zack y besé su nariz

- Y tú estás muy guapo- Zack rió

- Ya conseguí un lugar para armar la tienda de acampar – asentí, agarré la mano de Zack y caminaos hacia Sebastian. Su rostro cambió drásticamente al verme. Rodé los ojos y me acerqué a su oído

- Por lo menos por una semana pretende que no me odias o por lo menos que me soportas- me sentía enojada, demasiado. – después de que pase la semana, solo tendremos el contacto necesario. Sebastian se veía diferente. Se veía cansado, ojeroso y ciertamente muy amargado.

- Mira mami, son mis amigos – Zack corrió al encuentro de tres chicos que lo esperaban con una gran sonrisa

- ¡Wow Zack! ¿ella es tu mamá?- dijo un chico de cabello rubio y ondulado

- Es muy bonita – dijo el de cabello castaño claro

- Me voy a casar con tu mamá – dijo el pelirrojo

- No puedes. Mami está con papi – dijo Zack con los brazos cruzados hasta que vio hacia la izquierda – ahí está mami, es ella – miré hacia la dirección que señalaba Zack y vi una chica de cabello ondulado y saltando

- Es muy bonita Zack – dije sonriendo

- Me quiero casar con ella – reí

- Aún eres muy pequeño para pensar en esas cosas cielo- agarré la mano de Zack- ven, tenemos que armar la carpa- Zack asintió y se despidió de sus amigos

Sebastian se había adelantado y estaba de brazos cruzados frente a la carpa.

- Se demoraron demasiado – rodé los ojos

- Zack estaba presentándome a sus amigos y a la chica que le gusta, Sebastian, ¿podrías ser más paciente con nosotros?- Zack hizo un puchero y yo lo cargué para besarle la nariz- y uno de ellos me propuso matrimonio- Zack rio y yo junto a el

- ¿al igual que Louis? – cerré los ojos

- No pienso responder ahora – Sebastian estaba demasiado extraño. Comportándose como nunca lo había hecho o quizás ¿este es el verdadero Sebastian?

Entre risas y cosquillas pasamos Zack y yo, mientras Sebastian se quedó sentado leyendo.

- Hay una fogata de los niños a las siete de la noche, es para que los niños compartan juntos. Si quieres, puedo armar otra carpa para dormir allí mientras llega Zack- dije tratando de evitar el contacto visual con Sebastian.

- Esta novela es diferente a todas las demás que has escrito – me volví hacia Sebastian y lo miré. Su cabello le tapaba los ojos y tenía su mirada clavada en el suelo. Estaba sentado, con las manos puestas en sus rodillas, se veía diferente. – es melancólica, llena de dolor. Cuenta sobre una perdida

- Sé muy bien de que se trata MI novela Sebastian. Ahora si me disculpas – Sebastian se levantó y me agarró por los hombros

- Lo que me molestó, es que él la haya abandonado con todo el dolor que sentía en ese momento – solté una pequeña risa amarga

- ¿te trae recuerdos?- Sebastian se tensó – me vas a lastimar, quita tus manos de mis hombros Michaelis – obedeció sin rechistar.

- El escritor plasma sus emociones, sentimientos, su alma en lo que escribe. ¿así fue como te sentiste cuando...? – Escuché como tragaba saliva

- Fue muchísimo peor – sentí como las lágrimas amenazaban con salir y en cualquier momento mi voz se quebraría si me atreviese a hablar.

- Lo siento tanto – negué

- No tienes por qué disculparte – traté de irme nuevamente, pero Sebastian agarró mi mano

- Dime que no pasó nada entre Louis y tu esa vez en tu apartamento ____ - Sebastian, definitivamente se veía diferente

- Solo me acompañó a comer helado, ver una película y se quedó a dormir – Sebastian alzó su vista y juro, que por un momento, pude ver una lágrima en sus ojos. –No hubo sexo Sebastian – sentí como si esa simple frase le hubiese quitado un peso de encima. –debo ir por la carpa para dormir con Zack

- Duerme conmigo ______ -reprimí mis ganas de abrazarlo

- No puedo Michaelis – con cierto pesar dije – dejamos de ser algo desde hace muchísimo tiempo

- Podríamos volver a serlo – sonreí y negué

- Ya tuvimos la experiencia de ser algo oficial, no funcionó Sebastian-sus ojos rojos penetraban los míos

- Tenemos una semana para intentarlo nuevamente _______, estoy dispuesto a todo – negué

- No voy a poder rehusarme por más argumentos que tenga ¿cierto? – el asintió

- Ahora, debo hacer algo o creo que moriré –Juntó nuestros labios. Está explosión, está descarga de energía que sentía con solo juntar nuestros labios, no es algo que pueda sentir con cualquiera.

Lo extrañaba porque ¡por un demonio sí que lo hacía! , ese hombre se volvió en mi vida.

Entramos a la tienda, apagamos la lámpara que había dentro y Sebastian miró por la tela de la carpa y sonrió.

- No vamos a poder hacer demasiado ruido... así que – Sebastian agarró una corbata de alguna parte e hizo una mordaza, me la colocó y me besó el cuello – prométeme que no harás mucho ruido

Las amo :) puede que me demoré en publicar el otro capítulo, como puede que no. I am a Mistery (soy un misterio)