Parte XXII: Te amo

Me quedo helada, analizo lo que me acaba de decir.

Te amo

Eso jamás me lo habían dicho.

-¿Grace? –me llama.

-¿Hablas...en serio?

-Sí, te amo, joder, te amo.

-No puedo creerlo.

-¿Tú...tú me amas?

-Sí.-susurro.- te amo.

Adam sonríe.

-Entonces... ¿quieres ser mi novia?

Lo miro un momento y le doy un pequeño beso en los labios. Asiento con la cabeza y sonrío.

-Creo que eso respondió a tu pregunta.

-Creo que sí.- ríe.- Te amo de verdad, esto...es extraño...nunca lo había dicho. Creo que jamás había amado a alguien de esta forma...contigo...todo es tan diferente. Eres tan especial.

Cada palabra que sale de su boca hace que mi corazón se acelere y que sienta más cosas por él. Se acerca lentamente, atrapa mi rostro entre sus manos y me besa con mucha ternura. Este beso es tan diferente, es cuidadoso. Lo amo, estoy segura. También estoy segura que él me ama a mí, lo puedo ver en sus ojos. Es increíble. Adam Driver, el mujeriego Adam Driver me dijo 'te amo'. Es realmente increíble, pero cierto.

-Gracias...-me susurra.

-¿Por qué?

-Por hacerme feliz.

Sonrío y lo vuelvo a besar.

-Tenemos que ser cuidadosos.

-Lo seremos.

-Adam, esto es una locura, sí James se entera...

-No pasará.-me interrumpe.- confía en mi preciosa.

-Está bien.-sonrío.

Adam vuelve a besarme con la misma ternura, pero está vez me acaricia, al igual que yo. De pronto, ya está sobre mí. Me siento nerviosa, llena de escalofríos, pero al mismo tiempo llena de deseo por él. Me encanta tenerlo tan cerca de mí, sentir su respiración y sus caricias. Pero, repentinamente, Adam para, deja de besarme y se sienta a mi lado. Me levanto y lo miro confundida.

-Creí que...

-No sé si sea buena idea...no quiero obligarte.

-Pero...sí quiero.

-Además, James llegará en cualquier momento.

-Es cierto.

-Te deseo...muchísimo, en verdad...-sonrío.- Tengo una mejor idea.

-¿Cuál?

-Ven.

Adam se acuesta y le da unos leves golpes al otro lado de la cama para que me acueste a su lado. Lo obedezco y recargo mi cabeza en su brazo. Levanto la mirada y me da un pequeño beso. Después de un rato, ambos nos quedamos dormidos.

Se escucha como alguien toca la puerta de mi habitación, despierto y reacciono. Adam aún sigue dormido, lo agito un poco y comienza a abrir los ojos.

-Adam.-susurro.- es James.

-Joder, ¿Qué hacemos?

-Escóndete o algo.

Adam bufa y se levanta de la cama. Mira a todos lados y por fin decide esconderse en el closet. Me dirijo a abrir la puerta, como lo suponía era James.

-¿Qué pasa?-pregunto.

-Lo lamento, ¿estabas dormida?

-Sí, no importa.

-¿Dónde está Adam?

-No lo sé, quizá en su habitación.

-Bien.-suspira.- lo buscaré.

-De acuerdo.

James se aleja y cierro la puerta. Comienzo a reír y Adam sale de su escondite.

-Estuvo cerca.-comenta.

-Sí, vamos vete, quizá pueda venir de nuevo.

-Está bien.- se acerca a mí y me besa.- te amo.-me mira a los ojos.

-Yo a ti.-le devuelvo la mirada.

Abro la puerta de la habitación y Adam sale. Sonrío y acaricio mis labios con mis dedos. Doy un suspiro y vuelvo a la cama.

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