Hoseok 

Acepto la ayuda de Yoongi muy a mi pesar, necesito que la tarea esté lista a tiempo y de hacerlo yo solo, nunca terminaría, decir que estoy escribiendo a velocidad de la luz es poco para describir la rapidez con la que intento copiar las respuestas que me da mi compañero de trabajo.

Lo que me sorprende en realidad es que no me haya molestado o intentado sobajar en cada oportunidad, parece que está dispuesto a ayudarme cordialmente y olvidar cualquier disputa existente entre nosotros...

De sólo pensarlo me estoy haciendo del baño porque vamos, somos el agua y el aceite, Lavagirl y Elsa...¿se entiende?.

Cuando terminamos de escribir mando la tarea justo antes de que el sistema cerrara las aceptaciones, nunca había olvidado una tarea tanto tiempo y eso que soy tan despistado.

— Gracias Yoongi — le digo —en verdad me salvaste de un apuro.

Yoongi hace un asentimiento de cabeza y una pequeña sonrisa sale de su rostro. Es ahí cuando comprendo, Min Yoongi nunca me iba a ayudar tan fácil, su sola sonrisa hace que piense y compruebe que en su mente hay cosas malévolas. Ay no.

— Creo que me debes una Hoseoki — responde.

Vale, si le debo una, ¿Qué querrá Yoongi de mí? que me eche en la borda, que le haga las tareas por un año...

— Necesito que... 

Yoongi no logra decir nada porque JungKook y Jimin entran como si nada a la sala de descanso, ambos están sudados y van directamente al refrigerador mirándonos.

JungKook tiene una pequeña sonrisa de burla en su cara y Jimin sigue buscando alguna cosa en el refrigerador, cuando lo encuentra mueve su trasero y lo cierra. Aparentemente la llegada de esos dos ha callado lo que quería Yoongi y nadie habla.

Entonces el susodicho se gira y sale por la puerta, con la típica expresión aburrida, sin decirme nada.

— ¿Interrumpimos algo? — dice Jimin, viendo como abandona la sala.

Niego con la cabeza — No, sólo me ayudó a hacer un trabajo de la escuela.

— Parece que discutían algo más — dice JungKook, con un tono de voz que inmediatamente hace que mis mejillas se vuelvan rojas. 

¿Qué me intenta decir?, si sé, pero no comprendo por qué me he puesto como un tomate maduro por la sola insinuación de que entre Min Yoongi y yo exista algo... Así. Hasta parece chiste.

— En verdad, no pasó nada — me defiendo, palpando mis mejillas — mejor díganme, ¿ya te acostumbraste a ser activo Jimin?.

Jimin suelta una risa extraña y niega con la cabeza, sus ojos se achican más y más — No cambies el tema, ¿Te estás liando con Yoongi? — le niego — vaya, porque no parecía nada contento con nuestra llegada.

El resto de nuestro descanso me la paso esquivando los chistes que hacen sobre cómo Yoongi me pediría algún favor sexual o que le gusto, yo sólo digo la corriente, porque intentar negarlo hará que se vuelvan locos.

Cuando termina mi jornada de trabajo es de madrugada, muchos de los pasajeros aprovecharon la lleva de estrellas para salir y quedarse hasta tarde, al llegar a mi camarote me encierro y me arropo entre las sábanas después de bañarme y cepillarme lo debido. Y justo antes de que quede dormido la puerta suena con fuerza.

Probablemente sea Jimin o JungKook tratando de escapar del otro, talvez incluso alguno de sus juegos sexuales haya salido mal, como la vez que una bola china quedó en el trasero de Jimin (traumatizante, por cierto) así que ignoro el ruido, pero sólo se vuelve más estridente, así que me levanto y voy a abrir.

— Cualquiera de los dos, si es algo derivado de su sexualidad dejen de moles...— me detengo al abrir y ver que es Yoongi el que está detrás de la puerta.

El levanta su ceja en señal de sorpresa, pero pronto vuelve a su seriedad de siempre.

— No sé que estabas pensando que era pero, no es derivado de mi sexualidad — dice, entrando — sólo vengo a pedir mi favor.

— ¿A las 12:00 de la madrugada? — digo, confundido — me lo pudiste decir hace horas, si no te hubieras ido.

— Te lo iba a decir, pero tus amigos ruidosos son realmente frustrantes —se defiende, hablando de Jimin y JungKook.

—¡Oye! — le reprendo, nadie puede venir a mi camarote a insultar a mis amigos — tan sólo dime lo que quieres y vete, no entiendo que puedes querer a las horas de la madrugada.

— Sólo pido que — dice, aunque no termina porque un gran ruido tapa lo que pide y nos mueve.

Ambos nos vamos hacia un lado, Yoongi me detiene antes de que caiga poniendo una mano en mi cabeza. Por lo regular hay varios movimientos en altamar, pero este ha sido muy fuerte.

— Gracias

— Shh — dice, siempre tan educado — hay que salir de aquí, tengo el presentimiento de que esto no es bueno, toma algo de valor.

🌞🍍

Holi, después de tiempo otra vez vuelvo con mi veraniega historia, pronto subo la otra parte porque lo bueno se viene asies. 💚

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