-La fría corriente de agua que fluía suavemente comenzó a empapar lentamente el cuerpo de un niño pequeño, cuyo corazón roto alberga las pesadillas y los tormentos de todos sus miedos. El húmedo laberinto de de tubos y hierro oxidado lentamente apareció a la vista una vez más cuando Naruto abrió los ojos, su cuerpo casi completamente sumergido en el agua que ahora amenazaba tragarlo.

-Yo ... ¿estoy aquí de nuevo? -Naruto tragó saliva, levantándose del suelo. Naruto tomó un breve momento para mirar alrededor de la habitación empapada, solo para ver la misma jaula de hierro que había visto en sus sueños antes.

-Yo ... ¿me pregunto qué es este lugar? ¿Por qué sigo viniendo aquí? -Luego, el niño comenzó a caminar hacia las barras de hierro para mirar el símbolo que estaba frente a él. Tenía que tratar de entender lo que decía, era la única forma de dar sentido a lo que estaba sucediendo.

-Mientras caminába lentamente a través del agua hasta las rodillas, un gran gruñido resonó por toda la habitación, proveniente de lo más profundo detrás de las barras de hierro. Naruto se congeló en sus pies cuando el agua tembló y se onduló a su alrededor, su corazón se llenó con el terror de un niño asustado. Cualquiera que fuera el sonido era definitivamente malo, no había ninguna duda al respecto. Naruto trató de sacudirse sus miedos, dejándolos a un lado para continuar. Era solo un sueño después de todo ... O eso esperaba.

-Naruto comenzó a inclinarse lentamente una vez más, sus piernas temblorosas las llevo a su pecho mientras cada vez más cercaba de su objetivo. Apretó sus manos fuertemente y las sostuvo contra su pecho, tratando de sacudirse del frío que se filtraba en su cuerpo. Justo cuando comenzó a aumentar su ritmo una vez más, el agua a su alrededor comenzó a moverse violentamente, elevándose por todo el pequeño cuerpo del joven rubio. El chico se congeló en su lugar una vez más y bajó la mirada hacia el amenazante avance, su miedo a ahogarse comenzó a emerger una vez más.

-¡No no! -Naruto gritó de terror cuando la corriente de agua comenzó a tragárselo rápidamente. El niño ya no podía sentir el suelo a sus pies y pronto estaba tratando desesperadamente de mantenerse a flote, agitando sus brazos en pánico.

-Después de unos breves momentos de lucha, su cabeza finalmente se hundió bajo la superficie del agua mientras tomaba una última y desesperada bocanada de aire. El aire en sus pulmones lentamente comenzó a arder mientras instintivamente se aferraba a cualquier cosa para ayudarlo a mantenerse a flote, su mente se tambaleaba por el puro terror de su terrible experiencia.

-(Iruka-sensei, ¿dónde estás? ...) -Pensó para sí mismo mientras el frío lo consumía. En ese momento, otro gran estruendo sonó en todo el agua y en los oídos de Naruto. El chico abrió los ojos y miró el oscuro abismo que ahora comenzaba a tragárselo. Miró más allá de la jaula de hierro que contenía el gruñido de una bestia gigante, solo para ver dos enormes ojos rojos oscuros que se abrían lentamente detrás de las barras de hierro oxidado, brillando en la eterna oscuridad más allá. Una voz terrible y maliciosa pronto siguió después.

-Entonces ... Eres débil. Ser gobernado por temores como estos es una debilidad que solo un niño divulgaría. Me has causado un gran problema con estas patéticas emociones tuyas.

-Naruto cerró sus ojos otra vez cuando la voz sonó a través de las profundidades del agua, perforando su vulnerable corazón con toda su malicia y crueldad. Esperaba desesperadamente y rezaba para que esta pesadilla terminara pronto. En ese momento, como para responder a un deseo no dicho, los ojos de Naruto se abrieron de nuevo, revelando la cálida seguridad de su dormitorio. El chico miró hacia el techo sobre él, jadeando por aire mientras trataba de sofocar sus pulmones ardientes.

-Si ... si fuera solo un sueño, entonces ¿por qué siento que mis pulmones todavía están doloridos? -Naruto murmuró para sí mismo, agarrando su pecho con su mano. Su cuerpo aún temblaba por el frío que se había hundido en él.

-Naruto trató de quitar la imagen de esos terribles ojos rojos oscuros de su mente. Estaban llenos de tanta malicia y odio que era suficiente para romper el alma de una persona. Para Naruto, era solo otro recordatorio de los mismos ojos que siempre lo vieron con tanta crueldad y enojo. Su alma ya estaba destrozada en pedazos desde hace mucho tiempo y lo único que le impedía perder lo poco que le quedaba era la amabilidad de cierto chunin.

-El resto de la mañana transcurrió sin más incidentes. Naruto hizo su habitual costumbre de ducharse y vestirse para prepararse para ir la academia, antes de desayunar con Iruka. Él no mencionó ni una vez la pesadilla que tuvo mientras se sentaban el uno con el otro. No quería hacer que su sensei se preocupara más de lo que ya lo hizo. Naruto sabía que tendría que resolver esto solo. Cualquiera que fuera ese sueño, parecía jugar siempre con todos sus miedos más profundos. Primero, el ataque de su guardián y la traicion Mizuki, junto con la crueldad de los aldeanos y ahora su temor recién formado de ahogarse. Luego estaba la cuestión de quién, o lo que fuera, le había hablado desde detrás de esos barrotes de hierro. Naruto estaba empezando a sospechar de qué se trataba, pero aún no quería llegar a ninguna conclusión.

-Después de terminar el desayuno, los dos salieron de la casa y se dirigieron a la academia para comenzar la nueva semana. Iruka podía sentir una mezcla de emociones viniendo de Naruto mientras sostenía al chico en sus brazos, pero cuando preguntó al respecto, Naruto forzó una sonrisa y le aseguró a su sensei que no pasaba nada. Iruka podía sentir por el toque de Naruto que obviamente era una mentira, pero no presionó más. Si Naruto quería hablar con él sobre eso, eventualmente surgiría más tarde. Quizás algún ramen de Ichiraku aflojaría la lengua del chico. Una vez que los dos estuvieron finalmente en la seguridad del edificio de la academia, llegaron al salón de clases y Naruto se sentó en su asiento, evitando las miradas glaciales de los estudiantes que ya estaban allí.

-Muy bien, hoy vamos a estar trabajando en sus niveles de resistencia y agilidad. Quiero que todos salgan al patio de entrenamiento de inmediato para comenzar los ejercicios -La niña de cabello rosado conocida como Sakura rápidamente se puso de pie en señal de protesta.

-Pero Iruka-sensei, pensé que teníamos una prueba de campo en las formaciones de batalla avanzadas. ¡Estudié todo el fin de semana para eso! -Iruka solo irradió una breve sonrisa.

-Recuerdo que dije que podría hacerte una prueba puntual, pero finalmente decidí no hacerlo. Era demasiado problema y estaba cansado.

-Si las miradas pudieran matar, lo que en algunos casos "como el de Naruto" ciertamente pueden hacer, entonces Iruka sin dudas ya estaría muerto. Era algo bueno que Sakura no tuviese ningún dōujutsu secreto, de lo contrario, el chunin podría haberse encontrado dándose un gran susto. Sakura siempre fue una de las que aprovechó la oportunidad para demostrar lo inteligente que era. Ella prácticamente se regodeó con la posibilidad de tomar una prueba de clase por lo que esta intrusión de su autoproclamada justicia fue una gran espina en el costado de la kunoichi.

-El chico de cabello rubio y de ojos azules, sentado delante de ella, soltó una risita en su asiento, obteniendo un guiño bien sincronizado de cierto chunin con cicatrices. El joven Inuzuka sentado a su lado casi saltó de su asiento cuando escuchó el risa poco familiar. Nunca había escuchado a Naruto reír antes, y era bastante inusual escucharlo. Incluso Akamaru ladró sorprendido.

-Después de unas pocas quejas más de la kunoichi de pelo rosa sobre el entrenamiento y algunos suspiros aburridos de Shikamaru que murmuraron algo acerca de que las chicas estaban locas, la clase eventualmente salió de la sala para hacer su entrenamiento. Naruto esperó pacientemente hasta que todos los demás se hubieron ido y luego se levantó de su asiento. No quería irse con el resto del grupo y arriesgarse a la crueldad de los agresores de la clase, sin mencionar el riesgo de tocar a alguien mientras caminaba entre la multitud. Iruka colocó su brazo sobre el hombro del chico cuando llegó al frente de su escritorio y los dos comenzaron a salir juntos.

-Anko Mitarashi era una mujer con un propósito. Decir que ella era una de las más ... entusiastas kunoichi en Konoha sería una subestimación masiva por parte de nadie. La mujer prácticamente se deleitaba en los confines de la batalla, siempre dispuesta a aceptar una misión peligrosa si eso significaba que podía soltarse y derramar la sangre de otra persona. Algunos solo pensaban que estaba loca y delirante, que había heredado el espíritu de su antiguo sensei, pero el tercer Hokage sabía la verdad detrás de su vena aparentemente sádica. En realidad, la joven mujer era similar a lo que uno llamaría un muerto viviente.

-Ya no había vida real en el cuerpo que llevara su espíritu desolado. Hace mucho tiempo que su alma había sido destrozada por su antiguo sensei, la serpiente sannin conocida como Orochimaru, y desde entonces se había transformado en algo que ahora odiaba por completo. Hoy en día, el jounin de cabello violeta siempre acepta incluso las misiones más suicidas sin perder un latido del corazón. Era casi como si estuviera buscando la muerte, esperando una liberación de los atormentadores recuerdos de sus crímenes pasados. Hoy, ella estaba de camino a la torre Hokage para buscar una de esas misiones.

-Mientras avanzaba por las polvorientas calles de Konoha, la joven vio un campo verde abierto con un río que corría cerca. Era uno de los campos de entrenamiento más aislados en el pueblo, normalmente reservado solo para los miembros más prestigiosos del clan para que puedan proteger de forma segura sus técnicas secretas de las miradas indiscretas. Anko nunca había notado realmente antes. El jounin especial lentamente se dirigió hacia la suave y verde hierba y caminó sobre su superficie. Era muy evidente que su superficie casi nunca había sido perturbada porque casi no había signos visibles de interferencia humana.

-Bueno, supongo que unos minutos de paz no me harían daño hace mucho tiempo que no tengo un descanso -pensó en voz baja.

-No era frecuente que se tomara el tiempo para relajarse y disfrutar tranquilamente, de hecho ni siquiera podía recordar la última vez que se tomó el tiempo para mirar las nubes que pasaban. Oh, claro, siempre parecía estar sonriendo y riendo sádicamente por fuera, pero eso era solo una máscara bien concebida, una que usaba para esconder sus verdaderas emociones del mundo que la rodeaba. Ella no quería ser aprovechada nunca más y poner un frente intimidante ayudó a evitar que alguien hiciera exactamente eso. Orochimaru había usado su estado de vulnerabilidad para atraerla a una situación comprometedora y nunca permitiría que eso volviera a ocurrir. La confianza ahora era algo que no le venía fácilmente a la mujer y había muy pocas personas a las que consideraba amigas.

-Mientras Anko se dirigía lentamente al borde del río, su cuerpo comenzó a tensarse mientras sus pies hurgaban en la suave hierba verde. Era casi como si pudiera sentir el dolor remanente de otra alma que había caído en desgracia , el mismo tipo de dolor que sintió cuando fue rechazada por quienes la rodeaban después de la traición de Orochimaru. Ella conocía muy bien ese tipo de tristeza y no le resultó difícil detectarla.

-Alguien ... alguien ha estado llorando aquí. Alguien como yo ... -Anko tragó saliva, sus ojos se maravillaron con la tranquila escena, pero su belleza solo ocultaba las cicatrizadas emociones de otra alma torturada como la de ella -Quizás ... no debería estar aquí -El jounin podía sentir los últimos vestigios de dolor y sufrimiento en el aire a su alrededor y decidió que no era una buena idea quedarse atrás por mucho tiempo. Anko giró sobre sus talones y estaba a punto de abandonar el campo de entrenamiento cuando vio a un halcón mensajero que viajaba por el cielo hacia ella.

-¡Ooohh! ¡Alguien me quiere! Por lo general, aun que nunca recibo mensajes -Anko saltó arriba y abajo en el lugar con alegría al instante olvidando su breve momento de angustia. Aunque sin duda era una petición para una loca misión suicida, ella todavía disfrutaba la perspectiva de que alguien la buscara activamente. Significaba que la necesitaban, que la querían, incluso si solo se necesitaban sus habilidades.

-Fue entonces cuando vio a un segundo halcón mensajero acercarse desde la dirección opuesta, también se dirigió hacia el jounin ahora completamente atónito.

-¡Huh! ¿Dos mensajes? Debo haber encontrado mi camino en la lista de los más buscados de Konoha de repente.

-Decir que Anko no estaba sorprendida cuando vio a un tercer halcón acercándose sería como decir que Jiraiya no era un pervertido y que Kakashi dejaría de leer sus novelas sucias. El jounin solo podía observar con asombro mientras las tres aves rapaces descendían lentamente hacia ella. Las ágiles aves se percataron mutuamente del acercamiento y rápidamente se enfrentaron una a la otra, cayendo en un grupo de plumas y garras justo en frente del sorprendido jounin.

-Los halcones mensajeros fueron entrenados para interceptar e involucrar a cualquier otro mensajero que encontraron en sus viajes, y aunque también fueron entrenados para amistosos reconocidos, todavía eran agresivos con sus competidores. Anko, que se dio cuenta de lo que estaba a punto de suceder, rápidamente se sentó en el suelo y sacó milagrosamente una caja de dango de un escondite desconocido. "Quién sabe de donde saldría esa caja de dangos 🍡". Ella procedió a masticar los sabrosos bocados, viendo el entretenido espectáculo frente a ella mientras los pájaros procedían a despedazarse unos a otros.

-(¿Quién ... alguna vez pensó que ... los halcones mensajeros podrían ser tan ... competitivos?) -Anko pensó para sí misma, riéndose mientras la pelea de pájaros continuaba frente a ella -¡Esto es genial, deberíamos hacer esto más a menudo! Incluso podría tener un anillo de apuestas y ganar algunos Ryōs también.

-El jounin no se había divertido tanto desde que vio los últimos exámenes Chunin. ¿Quién alguna vez pensó que los estúpidos pájaros podrían poner en una pantalla tan entretenida. Después de unos minutos más y unas cuantas plumas más se extendieron por el suelo, Anko finalmente comenzó a aburrirse un poco del espectáculo y ahuyentó a los pájaros. Luego agarró los mensajes que quedaron en el suelo y abrió cada uno para leerlos, arqueando las cejas con curiosidad.

-¿Eh? Esto es realmente interesante. Hehehe, creo que es hora de ponerse algo ... más tentador, pero primero voy a visitar a ese anciano y tal vez darle una hemorragia nasal. Es muy divertido verlo retorcerse su silla.

*En otro lugar*

-Naruto apoyó su cuerpo con las manos sobre las rodillas mientras jadeaba desesperadamente en busca de aire, sus pulmones estaban ardiendo por la falta de oxígeno debido a los fuertes estímulos de entrenamiento en los que acababan de participar. Toda la clase tuvo que correr una compleja carrera de obstáculos que consistía en un gran numero de desafíos, incluyendo desde una sección de equilibrio de troncos, a una sección de arrastre sobre el barro debajo unos alambres de espinas y muchos otros peligros precarios. El cuerpo del niño ahora estaba lleno de arañazos y manchas de barro. Curiosamente, y para gran amargura de algunos de sus otros compañeros más desagradables, Naruto lo había pasado muy bien. De hecho, había vencido a la mayoría de los otros tiempos en su grupo excepto a unos pocos seleccionados, incluyendo a Menma, Sasuke y Kiba, quienes aún tenían una agilidad superior.

-Iruka sospechaba que era su escalada de árboles y ejercicios de caminar sobre el agua lo que aumentaba mucho la velocidad del niño. Ese fue el objetivo original detrás de esos métodos de entrenamiento en primer lugar. Pudo ver que Naruto estaba orgulloso de su logro, pero también podía ver las miradas resentidas de algunos de sus compañeros de clase. La clase kunoichis, por otro lado, ya se encontraban en un completo escándalo por su simple presencia que para ellas el sobraba allí. La mayoría de ellos hicieron muy mal tiempo, esforzándose demasiado para evitar ensuciarse en lugar de concentrarse en la tarea que tenían entre manos. El propio Naruto maldijo en silencio el hecho de que llevaba una camiseta blanca. Todo su cuerpo estaba ahora completamente lleno de barro y hojas e incluso su rostro estaba bien dotado con una gran cantidad de suciedad y mugre que cubría su cara pero parecía que esto era gracioso para el chunin que miraban la escena con una sonrisa.

-Después de que todos hubieron completado su turno en la pista, Iruka puso fin a las normas impuestas especiales de entrenamiento y los llevó de regreso a los vestuarios para que se lavaran solos. Afortunadamente, trajo una muda de ropa extra para Naruto, sabiendo lo que harían ese día. Mientras bajaban por los pasillos de la academia, Naruto se apartó del grupo de estudiantes y silenciosamente se acercó a su sensei. Iruka vio su rostro lleno de barro y sonrió al verlo. Esto a su vez causó que Naruto soltara una gran sonrisa mientras cerraba sus ojos una sonrisa ya típica de el una sonrisa que haría eclipsar un mal día a cualquiera que la hubiera visto, causando que Iruka se riera. Ver esos ojos azules y brillantes dientes blancos que se escondían detrás de una pared de tierra era en verdad el espectáculo, pero esto solo hizo solo molestarse aun mas a cierta azabache que miraba la escena con ciertos celos ya que desde hace tiempo la Uchiha no paraba de observar al rubio.

-Jejeje, vamos a tener que quitarte esa porquería de lo contrario se secara el barro en tu cara -La expresión de Naruto inmediatamente cayó en una expresión de preocupación.

-Es... ¿Eso realmente sucederá Iruka-sensei?

-Jajajaja ... ¡no Naruto, realmente no sucederá! -Iruka se rió, divertido por la naturaleza inocente de su estudiantes -Tú ... jaja ... debería haber visto la expresión ... ¡en tu cara!

-Naruto comenzó a hacer pucheros, dándose cuenta de que acababa de ser engañado por su sensei de nuevo. Iruka solo se rió para sus adentros al ver su expresión fangosa y luego puso su brazo alrededor del hombro del chico, acercando al chico a su lado. La cara de Naruto comenzó a relajarse otra vez cuando cerró los ojos, apoyándose contra el costado del chunin con la cabeza. La cara de bigotes de los niños emanó con la calidez de su sonrisa mientras se acurrucaba contra el chaleco de su sensei.

-A Iruka no le importó el hecho de que ahora estaba completamente lleno de barro, solo estaba feliz de disfrutar de las cálidas emociones que provenían del niño a su lado. Hubo algunas miradas curiosas de los estudiantes esparcidos por el pasillo, pero él simplemente se encogió de hombros. No le importaba lo que la gente pensara más de el, no le importaba si lo veían sosteniendo a Naruto en sus brazos. ¿Por qué no se le debería permitir al chico abrazar a alguien sin temor a las repercusiones o el juicio severo de quienes lo rodean? Simplemente no fue justo para Naruto.

-Después de ducharse y poder quitarse la mugre y ponerse una nueva muda de ropa, los estudiantes fueron despedidos por el descanso del almuerzo. Naruto se despidió de Iruka y luego se dirigió a los terrenos de la academia, buscando su lugar habitual en el mismo columpio en el que siempre estaba sentado. Después de salir, Naruto se abrió paso lentamente a través del pequeño patio de recreo, buscando a su alrededor mientras los otros niños formaban pequeños grupos con sus amigos. Shikamaru y Chouji estaban ocupados sentados debajo de un árbol cercano, disfrutando de la fresca sombra mientras Akamichi comía su almuerzo. Kiba y Akamaru corrían alrededor de la hierba abierta, persiguiéndose el uno al otro en un juego del tu la llevas mientras Shino observaba algunos insectos caminando a lo largo de una planta cercana con asombroso interés.

-Sasuke estaba ocupado abatido debajo de otro árbol mientras su club de fans lo observaba desde cerca. Hinata era la única chica que no parecía interesada en él, de hecho Naruto se sorprendió al encontrar a la chica de ojos blancos mirándolo. Intentó encogerse de hombros sabiendo que probablemente era demasiado bueno para ser cierto, después de todo, nadie quería estar cerca de él. Todos los demás tenían amigos con los que pasar el rato, para reír y jugar bajo la luz del Sol, pero Naruto estaba solo sentado solo un columpio de madera y sus propios pensamientos para hacerle compañía. El chico eventualmente volvió a enfocar su mente una vez más y se dirigió a su lugar habitual de espera, pero cuando vio su refugio temporal solo lo encontró completamente rodeado por los matones de la escuela local.

-(Maldita sea, supongo que están esperando que llegue. Probablemente todavía estén molestos porque supere sus tiempos en la carrera de entrenamiento) -Naruto estaba a punto de dar media vuelta y marcharse de nuevo, cuando uno de los chicos que esperaban impacientemente lo vio.

-¡Oye! ¡Allí está! ¡Vamos a buscar al pequeño mocoso! -El dicho rubio sintió que su corazón saltaba ante el sonido de sus palabras. Rápidamente se lanzó tan rápido como sus pies podían llevarlo, tratando de evitar la crueldad de los puños de los chicos que estaba seguro de encontrar si lo atrapaban.

-¡Vuelve aquí, pequeño inútil! ¡No te lastimaremos demasiado! -uno de ellos rió disimuladamente.

-Aparentemente, Naruto corría mucho más rápido de lo que pensaba, porque pronto había perdido completamente a sus perseguidores. Después de mirar por encima de su hombro para garantizar su seguridad, Naruto se dejó caer junto a un árbol cercano y se apoyó contra su dura superficie de madera.

-¡Uf! Eso estuvo demasiado cerca -Naruto suspiró, tratando de recuperar el aliento. Luego, el niño comenzó a aliviar sus emociones acumuladas en forma de lágrimas que le escocían en el fondo de los ojos, pero antes de que pudiera pensar siquiera en llorar, los sonidos frustrados de una voz cercana y angustiada llegaron a sus oídos.

-¡Maldición, les mostraré a todos!

-Naruto lentamente miró alrededor de la base del árbol contra el que se apoyaba, viendo a otro niño mientras conducía sus puños a un puesto de entrenamiento cercano. El armazón de madera estaba siendo demolido lentamente por el poder de sus golpes, mientras las astillas se incrustaban en sus puños fuertemente apretados. Llevaba una bata blanca, como camisa y pantalones, y su cabello negro brillaba de forma no natural a la luz del sol de la mañana. También tenía las cejas enormes para ser sinceros Naruto jamas había visto semejantes cejas en su vida.

-Naruto lo observó con gran interés cuando el chico, que parecía un poco mayor que él, siguió atacando a su objetivo, amortiguando breves palabras de frustración mientras derribaba los troncos con los puños desnudos.

-Les mostraré que puedo ser un gran ninja aunque solo sepa cómo usar taijutsu -Los ojos del niño lentamente comenzaron a llenarse de lágrimas mientras sus puños marcaban sangre y heridas frescas, pero sus heridas psicológicas parecían ser más profundas que las físicas. Naruto podía ver el dolor en sus ojos, era un tipo similar de dolor que veía cada vez que se miraba en el espejo. Sus ojos mostraban los sentimientos de rechazo que pesaban sobre su corazón.

-Casi tiene los mismos ojos que yo -Murmuró Naruto mientras miraba al niño continuar. El niño para desgracia de Naruto pudo escuchar las divagaciones amortiguadas a cerca de el, porque pronto se volvió para mirar en dirección a Naruto. Logró vislumbrar brevemente los ojos azules y el cabello rubio de Naruto justo antes de que el chico desapareciera detrás del árbol otra vez.

-No ... no debería haber dejado que me viera. ¿Y si quiere lastimarme como a los demás? -Naruto maldijo para sí mismo, golpeándose la frente con frustración ya imaginando lo que pasaría.

-Oye, ¿quién ... quién anda ahí? -el chico de cabello oscuro sollozó mientras se limpiaba las lágrimas de sus ojos. Luego, lentamente, comenzó a caminar hacia donde Naruto se escondió, caminando alrededor del árbol para ver al niño acurrucando pegado al árbol abrazando sus rodillas contra su pecho. Naruto estaba temblando mientras se sentaba firmemente contra la superficie del árbol, sus ojos estaban llenos del miedo y el pánico de estar tan cerca de alguien que no conocía, alguien que podría lastimarlo solo por ser quien era. Si el chico de cabello oscuro pudiera hacer eso en un puesto de entrenamiento, ¿qué podría llegar a hacerle a el?

-Hola ... mi nombre es Lee ... -El chico murmuró, acercándose lentamente a Naruto -Es ... algo malo? No voy a lastimarte -Naruto retrocedió aún más contra la superficie de madera detrás de él, sin querer tocar a otro extraño involuntariamente.

-Lo ... lo siento mucho ... estaba ... solo estaba mirando, lo prometo ... -Murmuró Naruto, su voz temblando de miedo. Todavía tenía miedo de que el chico fuera a lastimarlo por entrometerse.

-Oye, no hay necesidad de disculparte, no estoy enojado. Déjame ayudarte -Lee extendió su mano para que el chico se aferrara, pero Naruto simplemente se alejó aún más. Los nudillos y dedos del niño todavía estaban rojos con las marcas de su "entrenamiento".

-Lee comenzó a fruncir el ceño con incomodidad, nunca había visto tanto miedo dentro de los ojos de otro como el que vio en Naruto. Quería decir algo más, para tranquilizar al chico diciéndole que no iba a hacerle daño, pero antes de que pudiera abrir la boca, las crueles risas del perseguidor de Naruto sonaron detrás de los dos muchachos.

-Ahí debe estar, ¡vamos a buscar al pequeño mocoso! -Naruto gritó de pánico al acercarse los otros chicos. Rápidamente se puso en pie y salió corriendo tan rápido como pudo. Lee observó con completo shock mientras los otros, claramente más grandes, lo perseguían.

-¿Es ... es por eso que se estaba escondiendo? -No siendo una persona sin justicia, no iba a dejar que tales injusticias no reciban respuesta, Lee comenzó a perseguirlo también. No iba a dejar que un chico fuera intimidado cuando podía hacer algo para evitarlo.

-Naruto continuó corriendo por los terrenos de la academia, tratando desesperadamente de crear cierta distancia entre él y sus perseguidores, pero incluso él solo no podía ir tan lejos. El chico finalmente se encontró corriendo hacia un callejón sin salida entre las paredes de la estructura de la academia, su escape estaba completamente cerrado por todos lados. Naruto se giró para ver las miradas crueles de sus compañeros de clase cuando entraron tras él.

-Supongo que pensaste que eras muy inteligente haciéndonos quedar mal en nuestro entrenamiento -uno de ellos rió disimuladamente -No sé cómo un Dobe como tú te las arreglaste tan bien, pero después de que terminamos contigo te aseguro que no habrá una segunda vez -Naruto retrocedió lentamente contra la pared detrás de él.

-Por favor ... no lo haré otra vez, lo prometo. Solo déjame en paz -Los niños simplemente ignoraron el comportamiento de Naruto y se acercaron al chico.

-Oh, sabemos que no lo harás, de hecho, nos vamos a asegurar de eso- El corazón de Naruto comenzó a latir fuertemente en su pecho mientras su cruel destino se cernía sobre él. No era la primera vez que se encontraba con estos matones y nunca terminó bien para él, esto no sería diferente de antes. Pero antes de que pudiera siquiera cerrar los ojos cuando el instinto lo exigió, una voz llamó desde detrás de sus atacantes.

-¡Oye, dejar a ese chico en paz! -Los otros tres chicos se dieron vuelta para enfrentar a su nuevo rival, solo para ver a Lee, de aspecto extravagante, parado frente a ellos.

-Escoger a alguien que es inferior en número y más pequeño que tú es de cobarde, no puedo simplemente esperar y permitir que lo lastimen - Naruto sintió que su corazón latía dentro cuando el chico de cabello oscuro apareció a la vista. Los otros niños simplemente rieron al ver su nuevo objetivo.

-Jajaja, ¿qué vas a hacer con nosotros? Apuesto a que ni siquiera podrías herir a una mosca si lo intentaras - Lee simplemente ignoró sus burlas y cayó en una postura taijutsu, preparándose para los ataques de sus oponentes.

-Entonces, ¿realmente se toma en serio pelear contra nosotros? Bien, me ocuparé de este fracasado -decía con pura arrogancia en su voz.

-Uno de los muchachos se arrojó hacia Lee que simplemente esperaba en su posición, lanzando su puño en un ataque brutal contra su oponente más pequeño, pero el chico ni siquiera se movió de su posición de pie. Naruto observó con completo asombro cuando atrapó el puño en su mano. Antes de que el otro chico supiera lo que estaba pasando, Lee se enroscó debajo de su brazo, haciendo que se doblara en una posición bastante peculiar y dolorosa. Luego giró en un barrido golpeando sus pierna, haciendo que el chico más grande se estrellara contra el suelo con un ruido sordo, sacudiendo el aire de sus pulmones.

-Los otros dos muchachos rápidamente se adelantaron para atacarlo, pero ambos se encontraron en el extremo receptor de sus poderosos golpes. Ninguno de los dos pudo siquiera bloquear los asombrosamente rápidos movimientos de Lee y pronto se retiraron de la batalla con su amigo todavía sin aliento, lanzando maldiciones hacia el chico rubio que todavía estaba asombrado.

-No puedes esconderte detrás de tu amigo para siempre. ¡Te atraparemos eventualmente! -Lee vio como los atacantes de Naruto se perdían de vista, estremeciéndose ante la palabra 'dobe' como si la hubiera escuchado muchas veces esa palabra dirigida hacia el. Luego se volvió y vio al rubio niño acurrucandose en el suelo con un temblor lleno de miedo.

-Oye, ¿estás bien? -Lee caminó lentamente hacia el niño y se arrodilló frente a él. Extendió su mano para agarrarlo, pero Naruto sintió su avance y se alejó.

-No ... por favor ... no me toques, cada vez que la gente me toca, las cosas malas siempre parecen suceder -El chico de cabello oscuro a regañadientes obedeció y retiró su mano. Naruto aún temblaba de miedo por el desastre que acababa de evitar. Odiaría pensar qué hubiera hecho Iruka si volviera a la clase en un lío. No quería que su sensei pensara que también estaba siendo intimidado en la escuela, eso solo lo pondría en mas problemas. Empezó a limpiar las nuevas lágrimas que le hacían escocer los ojos y luego los abrió una vez más.

-Oye Lee ... gracias por ayudarme. Pero no tenias que hacer eso no quiero que te lastimen como a mi, pero lo aprecio -Lee solo sonrió mientras miraba al rubio.

-Yosh ... no fue problema -Exclamó Lee, forzando una sonrisa en su rostro -Simplemente no podía esperar y ver a alguien más lastimarse, especialmente cuando no ha hecho nada malo. Oh, espera, todavía no sé tu nombre -Naruto levantó la vista del suelo y respiró hondo.

-Es Naruto ... mi nombre es Naruto Uzumaki.

-Encantado de conocerte, Naruto-kun, mi nombre completo es Rock Lee, pero puedes llamarme Lee -Fue entonces cuando Lee notó los ojos dorados mirando hacia él.

-Oye, Naruto ... ¿no eran tus ojos azules antes? -Naruto gritó ante el sonido de las palabras del chico.

-Oh no, se suponía que no deberías ver eso. ¡Maldición! Ahora todos me odiarán aún más -Lee vio como Naruto sostenía su cabeza con angustia, sacudiéndola de un lado a otro mientras continuaba maldiciendo, de un momento a otro se detenio y miro al chico de grandes cejas- Lee, por favor, no puedes contarle a nadie sobre mis ojos, de lo contrario me van a hacer daño ... por favor, prométeme que no dirás nada.

-Lee no entendió de qué estaba hablando Naruto. No podía entender por qué alguien lastimaría a Naruto solo por sus ojos, pero no era alguien para discutir. Si pudiera evitar que el chico sufriera algún daño, eso es exactamente lo que haría.

-Bien, Naruto-kun, prometo no contarle a nadie sobre tus ojos- Naruto sintió una profunda sensación de alivio sobre él.

-Gracias ... realmente lo aprecio.

-Mientras los dos jóvenes hablaban una azabache se acercaba a ellos con cierto semblante estoico asta estar frente a ellos- ¿Oye dobe te molesta si me siento con vosotros? -La chica miraba al rubio que rápidamente se movió con una agilidad envidiable detrás de Lee mientras temblaba.

-Lee miro el gesto con una gota de sudor ya que conocía a esta chica sabía que junto a Shio Namikaze la hija del Yondaime Hokage eran las chicas mas fuertes y bellas de la academia pero parecía que esto no importase al rubio por que de igual manera la temía con puro terror- No parece que le agrades Satsuki-san... Si no te molesta podrías retirarte no parece estar cómodo en tu presencia y le entiendo -dijo el cejas pobladas con cierta amabilidad y cortesía.

-La chica miraba al joven rubio detrás del pelinegro que usaba como escudo, esto logró un suspiro pesado de la azabache a la vez que colocaba sus brazos en jarra y negaba con la cabeza- No... No me iré este chico me interesa por alguna razón su presencia me recuerda al bastardo de mi hermano mayor y no puedo entenderlo

-Naruto se asomo por un costado de Lee mientras miraba a la bella chica a la vez que negaba con la cabeza- probablemente te estés confundiendo ... Así que por favor no te me acerques ya que ... -traga saliva y mira al club de fans de chicos y algunas chicas de Satsuki mirarlo con puro odio y eso le aterraba, pero algo aun mas hizo asustarse aun mas al rubio, unas rubia de ojos azules se acercaba a ellos tres con una gran sonrisa parecida a la del rubio sacando una mueca de molestia a la Uchiha.

-¡Hola Satsuki-chan! -gritaba rubia de ojos azules corriendo hacía los tres mientras sacaba una venita en la frente de la Uchiha que la miraba murmurando cosas sobre Namikazes molestos.

-La chica rubia llegó donde estaban los tres hablando así mirando a Lee y a Naruto detrás de el- ¿y quien es el cejotas y el chico rubio? -hablaba felizmente mientras empezaba a mirar aun mas al rubio- (Ese chico se parece mucho a mi y a Menma-Nii... Esto es raro) ¡¿Oye chico cual es tu nombre'Ttebayo?! -dijo señalando al rubio mientras sonreía.

-Satsuki suspiro aun mas mientras miraba a Shio con una gran gota de sudor cayendo por su nuca- (¿Y se da cuenta ahora de la existencia de Naruto?... Shio tienes un serio problema) -pensó la Uchiha mientras se giraba para esperar la respuesta del Uzumaki.

-Naruto se escondió detrás de Lee mientras intentaba hablar murmurando cosas a la vez que tartamudeaba- Na-Naruto... Me llamo Naruto Uzumaki -decía sin mirar a ninguna de las chicas.

-¿Uuuh eres un Uzumaki? -decía con cierta incredulidad mientras se acercaba a Naruto mirando detras de Lee encontrándose cara a cara con la Namikaze- Es raro encontrar a o....

-En ese momento, sonó la llamada para su descanso y Lee se puso de pie -Bueno, supongo que es hora de regresar a la clase. ¿Te veré después Naruto? -Naruto asinto con la cabeza mientras Lee luego se volvió para mirar al niño sentado en el piso. Naruto todavía estaba mirando en silencio al suelo con sus brazos alrededor de sus rodillas. Sus ojos eran ahora una vez más los mismos océanos azules que eran antes, pero todavía estaban llenos de miedo y ansiedad.

-Naruto, si quieres, puedo llevarte de vuelta a tu clase primero -Naruto miró al otro chico con anhelo y ojos agradecidos.

-E ... eso sería genial.

-Naruto luego se puso de pie y dejó que una breve sonrisa emanara de sus labios sorprendiendo a las dos chicas de la bella sonrisa del rubio. No era frecuente que un completo extraño le ofreciera su ayuda en lugar de simplemente atacarlo a la vista. Los dos chicos se dirigieron hacia el edificio de la academia y hacia la clase de Naruto siendo seguidos y observados por ambas chicas. Una vez que llegaron, Lee despidió al chico con una enorme sonrisa y luego se dirigió al pasillo hacia su propia clase. Naruto dejó escapar un profundo suspiro de alivio y luego entró a la seguridad de su salón de clase, dirigiéndose a su asiento mientras Iruka lo miraba desde detrás de su escritorio.

-El chunin notó las lágrimas secas en la cara del niño y comenzó a preocuparse profundamente. Empezó a darse cuenta de lo que podría haber sucedido cuando algunos de los chicos mayores en la parte posterior de la clase lanzaron miradas asesinas a Naruto mientras se reían entre dientes. El cicatrizado chunin rápidamente se aclaró la garganta para llamar la atención de las clases "y alejar esas miradas de Naruto" y luego continuó enseñando las lecciones restantes del día.

*Dos horas después*

-Eran las dos de la tarde y los estudiantes de la academia estaban saliendo lentamente de la clase y volviendo a sus casas. Naruto esperó pacientemente a que todos se fueran y luego corrió hacia Iruka como siempre lo hacía. Los dos salieron lentamente del terreno de la academia y hacia el campo de entrenamiento donde Kakashi y Kurenai estaban esperando. Los dos jounin saludaron con la mano en su acercamiento, Kakashi guardó su novela mientras lo hacía.

-Buenas tardes Naruto ... Iruka - Kurenai llamó. Kakashi solo saludó a los dos. Iruka todavía estaba sorprendido de que el jounin enmascarado llegara a tiempo por segunda vez en tres días. Naruto dio una de las sonrisas más grandes que pudo dar y corrió hacia el jounin de ojos rojos que esperaba con sus brazos abiertos.

-Es bueno verte, Kurenai-sensei -Él gritó, arrojándose a los brazos de la mujer. Kurenai sonrió mientras sostenía al niño en un abrazo. Podía sentir su emoción y sabía que tenía algo que ver con su entrenamiento.

-Es bueno verte y que estes bien Naruto.

-Iruka se les acercó poco después y los cuatro continuaron compartiendo sus saludos. Naruto incluso logró saludar a Kakashi en un tono más relajado que antes, para gran sorpresa y alivio del jounin, aunque todavía se refería a él en una expresión más formal. Después de que se habían calmado una vez más, Kakashi comenzó a iniciar su nuevo horario de entrenamiento.

-Bien, Naruto, quiero que uses la técnica que te enseñé ayer para convocar a dos clones tuyos -Naruto asintió con la cabeza y obedeció. El niño formó un sello único y comenzó a moldear su chakra.

-¡Kage Bunshin no Jutsu! -Después de un breve estallido de humo, habían tres Narutos de pie uno al lado del otro. El chico dejó escapar una gran sonrisa, disfrutando de su logro mientras convocaba a los clones. Recibió una pequeña palmada en la espalda de Iruka y una sonrisa de aprobación de Kurenai. Kakashi solo asintió con la cabeza y luego continuó.

-Bien, ¿ahora recuerdas lo que te dije sobre los clones de sombra y lo que te permiten hacer? -Los tres muchachos asintieron con la cabeza al unísono -Bien, ahora cada uno de ustedes entrenará conmigo, Kurenai o Iruka.

-Kurenai agarró rápidamente una de las manos de Naruto y lo alejó del resto del grupo, mientras que Kakashi tomó otro Naruto para su entrenamiento de dōujutsu. El último miró a Iruka con una mueca de frustración.

-¡Aww! ¿por qué soy yo quien tiene que estudiar? La lectura es muy aburridab-Iruka hizo una mueca de tristeza y ensanchó sus ojos tanto como fue posible, causando que Naruto gritara.

-Está bien, entiendo. No quieres pasar tiempo con tu sensei favorito. Iré solo a caminar y veré si alguien más quiere pasar tiempo conmigo- Naruto sintió que su corazón se rompía en el interior y muy pronto se encontró corriendo para abrazar a su sensei.

-¡No quise decir eso Iruka-sensei! ¡Por favor, no te enojes conmigo! -Iruka miró al chico con una sonrisa en su rostro. El puchero de Naruto había desaparecido hacía tiempo y su expresión ahora era de preocupación y remordimiento y sus ojos azules reflejaban preocupación. El chunin luego acarició el cabello del chico, ganando otra pequeña risita.

-Por supuesto que nunca estaría molesto contigo. Es difícil estar molesto con una cara así -Naruto dejó escapar un profundo suspiro de alivio antes de que los dos se dirigieran a un árbol cercano y se sentaran debajo de su sombra.

-Iruka sacó su material de lectura y comenzó a recitar cada palabra con Naruto repitiendo después de él. El niño todavía estaba luchando para recoger cada símbolo, pero lentamente estaba mejorando en eso. Los otros dos Narutos continuaron con sus propios ejercicios con un enfoque renovado.

-Al principio, Kurenai realizó algunos ejercicios de escalada de árboles, y luego siguió con algunos ejercicios para caminar sobre el agua, este último fue el que Naruto disfrutó a fondo. El chico no podía dejar de reírse cada vez que los dos daban un paso más hacia la corriente. Observó con completo asombro cómo un pequeño banco de peces nadaba bajo sus pies, a veces cosquilleando suavemente contra sus sensibles plantas. Kurenai solo se deleitó con su brillo radiante, permitiéndose perderse en su brillante sonrisa. Era una sonrisa que alentaría al mundo en un solo latido. Ella simplemente no podía entender por qué nadie más podía ver este lado de Naruto. ¿Por qué no podían ver al chico detrás del monstruo, un niño cuya alma había sido arrastrada injustamente por la crueldad y la ignorancia de quienes lo rodeaban?

-Kakashi, mientras tanto, continuó trabajando en el dōujutsu del niño, tratando de ayudarlo a aprender a activarlo y controlar sus habilidades a voluntad. Naruto todavía no era capaz de activar voluntariamente sus ojos dorados, pero lentamente se estaba acercando con cada intento de paso. De vez en cuando, veía un pequeño estallido de color y vida a su alrededor antes de perderlo tan rápido como llegó. Kakashi notó el pequeño destello de oro en sus ojos cada vez que el chico estuvo a punto de activar su dōujutsu.

-Era frustrante ver cómo desaparecía de nuevo tan rápido como parecía, pero el jounin sabía que era mejor no apresurar al niño para que avanzara demasiado rápido. De vez en cuando le daba consejos a Naruto, así como algunas palabras de aliento para evitar que su espíritu se cayera. No pudo evitar tener la sensación de que Naruto estaba acercándose lentamente hacia él, porque el niño sonreía brevemente cada vez que Kakashi lo elogiaba por su arduo trabajo.

-De vuelta bajo un árbol cercano, Iruka continuó leyendo junto Naruto que estaba a su lado. El chico hacía tiempo que había renunciado a apoyarse en el pecho del chunin, permitiéndose relajarse en la seguridad del costado del hombre. El brazo de Iruka paso por los hombros del chico y lo sostuvo con comodidad, mientras su otra mano sostenía el libro en su lugar. De repente, la perspectiva de leer no parecía tan mala para el niño, en realidad fue muy relajante para él sentarse en la comodidad del abrazo de su sensei, sintiendo la suave hierba verde bajo sus manos. Después de unas horas de lectura, los ojos de Naruto finalmente comenzaron a cerrarse lentamente, el cansancio de un largo día golpeó el pequeño cuerpo del joven rubio.

-Iruka notó el nuevo desarrollo y suavizó su voz para no perturbar el sueño del niño. Habían leído bastante en las últimas dos horas y media y Naruto se tomó un descanso. El chunin cuidadosamente guardó el libro una vez que la respiración de Naruto se había estabilizado y lentamente se colocó en una posición más cómoda, tratando de no despertar al chico mientras este dormia. Luego continuó mirando mientras Kurenai y Kakashi también llevaban a su entrenamiento, respectivamente. Los otros dos clones de Naruto rápidamente se disiparon y permitieron que sus recuerdos fluyeran en la mente del original, causando que el chico se estremeciera levemente al desaparecer en una nube de humo. Kakashi y Kurenai caminaron hacia donde Iruka y Naruto yacían bajo el árbol.

-Creo que el tuyo también estaba cansado -Kurenai se rió, mirando hacia abajo a la forma dormida en los brazos de Iruka. El chunin solo devolvió la sonrisa mientras pasaba sus dedos por el suave cabello de Naruto.

-Sí, parecía bastante cansado, pero creo que también puede tener algo que ver con lo que sucedió el día de hoy. Tuvimos un ejercicio de entrenamiento bastante intenso esta mañana, y cuando Naruto regresó a la clase después del descanso, pude ver algunas lágrimas secas en sus ojos. Creo que alguien pudo haber intentado lastimarlo, pero no había marcas en su cuerpo, así que debe haberse alejado de ellos.

-La cara de Kurenai se frunció. No podía entender por qué algunos niños podían ser tan crueles. Ella misma fue una vez el objeto de las otras chicas cuando se estaba entrenando en la academia. Su belleza natural y su comportamiento testarudo a menudo atraían las mayoría de la atencion de los chicos a su alrededor y pronto se encontró perdiendo a todas sus amigas debido a los celos. No ayudó que ella también fuera la mejor kunoichi en la clase, pero Naruto fue tratado cruelmente por una razón diferente. El odio que muchos de los adultos tenían hacia él se transmitió también a sus hijos, haciendo que el niño fuera rechazado tanto por las generaciones más viejas como por las más nuevas.

-Lo que realmente necesita es un amigo que lo vigile en la escuela- Kurenai reflexionó, mirando hacia abajo a la figura tranquilamente dormida -Desafortunadamente, ese es un lugar donde no siempre podemos estar ahí para él -Iruka asintió con la cabeza en acuerdo.

-Tal vez debería tratar de encontrar una manera de cuidarlo durante sus tiempos de descanso, o tal vez debería quedarse en la clase conmigo ...

-No -Kurenai lo interrumpió -No creo que sea una buena idea aislarlo más de lo que ya lo ha sido. Aunque es difícil para todos nosotros, él tiene que encontrar una manera de acercarse a quienes lo rodean, o al menos dejarse acercar. Es el solo la forma en que saldrá de este agujero solitario en el que ha sido forzado- Iruka dejó escapar un profundo suspiro.

-Supongo que tienes razón. Ojalá no tuviera que ser sometido a tanta crueldad todo el tiempo.

-Poco sabían los tres que ya había una alma tan amable preparada para cuidar al niño. Un niño cuyas acciones ya habían salvado a Naruto ese mismo día. Iruka tomó un breve momento para acariciar el pelo de su estudiante favorito y luego volvió su mirada hacia sus dos compañeros maestros.

-Entonces, ¿cómo está él con ustedes? ¿Todo va bien? -Kurenai permitió que una sonrisa jactanciosa emanara de sus labios antes de responder.

-Bueno, realmente está empezando a retomar los ejercicios de subir árboles y andar sobre el agua. Todavía necesita más tiempo para acostumbrarse al control del chakra, pero cada vez que lo intentamos, él sigue mejorando. Si continúa a este ritmo , podemos tenerlo dominado antes de lo que originalmente pensé posible. Entonces tal vez podamos pasar a un entrenamiento de genjutsu.

-La jounin de ojos rojos se veía como si estuviera estallando con una gran sonrisa llena de orgullo y con buena razón también. Para un estudiante de la academia avanzar tan rápido a través de un ejercicio tan difícil, definitivamente fue bastante impresionante. Iruka se preguntaba qué tan bien estaría el chico ahora si no hubiera sido tratado tan mal toda su vida, era una lástima que ese no fuera el caso. Luego, los dos se volvieron hacia Kakashi para escuchar su informe. El jounin enmascarado soltó un suspiro de cansancio antes de explicar.

-Naruto todavía está luchando para activar su dōujutsu a voluntad, pero creo que podría ser por la experiencia que tuvo ayer. Probablemente todavía tenga un poco de miedo de lo que pueda pasar si lo usa de nuevo. Aparte de eso, ha hecho excelente progreso hasta ahora y creo que nos estamos acercando a lograr nuestro objetivo.

-Una vez que terminaron de revisar sus resultados, los tres shinobi finalmente comenzaron a establecerse bajo el árbol una vez más. Recién habían empezado a relajarse por un momento cuando una gran bola de hierro salió disparada del cielo hacia el claro. Aterrizó en la hierba con un ruido sordo y estalló en una explosión de humo, causando que Naruto despertara de su trance de sueño.

-Los cuatro miraron con los ojos abiertos "excepto por Naruto, cuyos párpados todavía estaban cargados de cansancio" cuando la bruma comenzó a desaparecer, revelando la solitaria figura de una mujer de cabello púrpura que llevaba una camisa de mallas cubierta con una larga, gabardina de color crema. Ella estaba en una pose muy precaria para colmo. El breve momento de incómodo silencio que siguió momentáneamente después se hizo añicos rápidamente cuando la entusiasta figura abrió la boca para hablar.

-¡Anko Mitarashi se está preparando para su deber!