C26. Trapos sucios

Una vez instalados en las celdas, con sus respectivos sellos y cadenas para que no utilizaran sus jutsus y habilidades para escapar, ambos fueron a sentarse en el suelo, a la espera de que les notificaran qué día sería el juicio. En cuanto los ANBU se marcharon, Sasuke suspiró rendido.

—Ya echaba de menos mi celda...—habló con sarcasmo. Naruto soltó una carcajada ante la broma de su ex compañero y el Uchiha frunció el ceño al mirarlo. No entendía su risa, menos cuando acababan de meterlos allí y podrían decidir penarlos a muerte—. ¿De qué te ríes?

—No estoy acostumbrado a tu sarcasmo ¿sabes?—sonrió divertido—. Ni siquiera estoy a gusto con que nuestros papeles en la historia cambiaran tan drásticamente. Sasuke-Ex vengador-Uchiha quiere salvar a su amigo Naruto-Criminal buscado-Uzumaki...—dijo con tono burlesco mientras reía—. Sinceramente, hace 3 años ni siquiera habría pensado que estaríamos en esta situación. Seguramente sería un pesado con la obsesión de sacarte del camino de la oscuridad... y ahora es al contrario.

Sasuke desvió la mirada, sabiendo que el rubio tenía toda la razón y no podía contradecirle. Aun así, le mosqueaba que se burlara de sus buenas intenciones. Se burlaba de que lo hubiese ido a buscar.

—Supongo que no me darás las gracias por intentarlo... Usuratonkachi—gruñó.

—¿Me las diste tú en el Valle del Fin cuando intenté pararte? No. Me intentaste matar. Y de alguna forma lo conseguiste, teme.

—¡Si hubiera querido matarte lo habría hecho! ¡Pero no lo hice! —gritó furioso, en un contraataque— No es mi culpa que Akatsuki te raptara en el momento en el que te desmayaste.

—¡Es tu culpa desde el momento en el que decidiste marcharte de la aldea para seguir a Orochimaru! Nuestras acciones tienen consecuencias, Sasuke. Deberías saberlo—habló Naruto con ira, sin comprender por qué Sasuke no lo entendía.

—Y tú deberías dejar que las personas hagan su vida, no obligarles a pensar igual que tú—reclamó Sasuke aprovechando para sacar los trapos sucios—. Quise irme para tener más poder y vengarme de Itachi. ¡Tú no me dejaste! Si me hubieseis dejado marcharme en paz, ahora podría haber vuelto después de mi venganza. Y por culpa de una equivocación, estuve tres años encerrado en esta cárcel por supuestamente haberte matado. Incluso yo creí que lo había hecho, y me culpé por ello.

Naruto intentó controlarse para no saltar y empezar a rebatirle bastantes cosas. Alterado y furioso por la conversación, dio un puñetazo a la pared para descargar su ira, provocando que sus nudillos comenzaran a sangrar por no poder utilizar su chakra.

—Si pudieras entender... la envidia que te tenía por tener todo lo que yo una vez quise...—susurró Naruto dando la espalda a Sasuke—. Tú te quejabas de que yo no sabía qué era lo que se sentía cuando pierdes a alguien querido, porque nunca había tenido a nadie...

Sasuke escuchaba atentamente, intentando adivinar qué era lo que quería decirle. El rubio apoyó su frente a la pared y respiró hondo.

—Pero estabas equivocado, Sasuke. Iruka-sensei, Kakashi-sensei, Sakura... tú... os convertisteis en mi familia. A pesar de los regaños de Sakura, a pesar de tus insultos, a pesar de todo... os quería. Verte en aquellas condiciones, lleno de odio, buscando venganza contra tu propio hermano, rechazándonos a todos... me dolía, porque tú te habías convertido en alguien importante para mí. En el momento en el que decidiste dejarnos... sentí un vacío enorme. Nos dejabas para sustituirnos por ese camino de oscuridad, en el que no te veía salir si no era con ayuda. Y sí, fui a ayudarte, peleé contigo porque pensé que necesitas descargar tu ira... para convencerte de que volvieras... de que no nos dejaras...

—Naruto...

—Así que de alguna u otra forma, me alegré de enterarme de que estabas encerrado en una de las celdas y no buscando a tu hermano sediento de venganza. De alguna forma... estabas controlado y me reí al saber que, irónicamente, había sido yo el que te había devuelto a Konoha. Cumplí mi promesa de llevarte de nuevo a Konoha, fuera como fuera. Y cuando me enteré de la verdad sobre la Masacre Uchiha... me alegré aún más de que estuvieras encerrado. No me quiero imaginar cómo hubieras reaccionado si te enterabas de la verdad luego de haber matado a Itachi. Tu hermano pensaba que seguramente irías a destruir Konoha.

Sasuke bajó su mirada hacia sus manos, que estaban encadenadas haciéndole recordar todos esos años en los que estuvo ahí metido. El discurso que le estaba dando el rubio lo había dejado sin palabras y no sabía qué responder. 

—Aún no me habéis contado todo... Hay cosas que no entiendo del todo.

—El que tiene que contarte es Itachi, no yo. Con suerte se recuperará de su enfermedad cuando Sakura y Tsunade le den un tratamiento y lo hará. Tenéis mucho que contaros en realidad... 

Sasuke asintió y seguidamente el lugar quedó en silencio. Por el momento ya se habían dicho todo lo que tenían que decirse, así que no esperaban hablar mucho más. Los días pasaron y el día del juicio más próximo. Ambos hablaron lo justo y necesario, pero más allá de eso, esperaron hasta el día esperado.

Dos semana después de haber llegado, un ANBU les anunció que estuvieran preparados en un par de horas, puesto que se iba a celebrar el juicio en la tarde. Los dos estaban nerviosos por saber qué sentencia les iban a dar, pero Naruto no podía dejar de pensar que se merecía cualquier sentencia. Fuera cual fuera, la aceptaría.

Una vez llegada la hora, cuatro ANBU los escoltaron hasta una Sala de Reuniones lo suficientemente grande para albergar no solo a los más importantes de Konoha, sino también a otros Kage y jefes de otras aldeas. Entre ellos, se encontraba Gaara, quien Naruto creía muerto. Una sensación de alivio lo inundó al saber que no era así y que se había salvado. Al conectar sus miradas, no pudo expresar más que arrepentimiento.

Sasuke, sin embargo, se dio cuenta que, entre los acusados también se encontraba Itachi, algo mejor, Kisame y Konan. Por lo que, al llegar hasta ellos, Sasuke se dispuso a sentarse junto a su hermano y Naruto tras él.

Cuando Tsunade se levantó, dio unos cuantos golpes en la mesa lo suficientemente fuertes como para que se oyeran en toda la sala, pero sin romperla. Al estar todos callados, ella procedió a comenzar el juicio.

—Ya que estamos todos, comenzamos el juicio contra Konan, de Amegakure; Kisame Hoshigaki, de Kirigakure; e Itachi Uchiha, Sasuke Uchiha y Naruto Uzumaki de Konohagakure. Los juicios se harán en ese mismo orden y todos los que deseen acusar o defender al correspondiente acusado se le escuchará en función de testigo. No permitiré críticas no infundadas.

Todos estuvieron de acuerdo y Tsunade comenzó llamando a Konan, que dio unos pasos hasta colocarse delante de la Hokage.

—Konan, de la Aldea de la Lluvia. Acusada de pertenecer a la organización criminal Akatsuki y estar implicada en la destrucción de Konoha hace unas semanas junto a Pain, quien fue derrotado por Naruto—la peliazul asintió de acuerdo y Tsunade siguió—. ¿Tienes algo que decir en tu defensa?

—Todo por lo que me acusan es cierto y aceptaré cual sea que sea mi condena, Tsunade-sama. Sin embargo, y no por ello espero que ésta disminuya, me gustaría contarles cómo comenzó todo...

Konan fue contando las consecuencias de la guerra en Amegakure, el momento en el que Yahiko, Nagato y ella se conocieron, cuando Jiraiya comenzó a entrenarlos y luego se marchó, dejando que ellos comenzaran su propia historia. El momento en el que Hanzo Salamandra y Danzo Shimura atentaron contra ellos y Yahiko murió, provocando que Nagato, bajo las influencias de Madara, siguiera el camino de la oscuridad y se convirtiera en Pain. Y finalmente, su decisión de ayudar a Naruto después de la muerte de Nagato y expiar sus pecados ayudando a derrotar a Madara y disolver del todo Akatsuki.

En cuanto ella contó su historia, Jiraiya confirmó que él los entrenó, pero que él creía que todos ellos habían muerto en la Tercera Guerra Ninja. Kisame, Itachi y Naruto confirmaron su parte en Akatsuki y añadieron que ella siempre acompañaba a Pain, además de que no solían salir de Amegakure ni de la guarida a no ser que fuera una misión importante, generalmente se dedicaban a liderar la aldea, manejar la organización por influencias de Madara y entrenar a Naruto. Mientras que Naruto también confirmó el momento en el que luchó con Pain y ella estaba con él hasta el momento en el que Nagato se arrepintió y terminó por resucitar a todos aquellos que habían muerto en las batallas.

Otros, sin embargo, la acusaron de atacar Konoha sin miramientos y destruirla completamente matando a muchas personas y de liderar una organización criminal que también había matado. Ella asintió de acuerdo con todo lo que decían y Tsunade, terminando su juicio, la hizo sentarse.

El siguiente fue Kisame, quien, al igual que su compañera, se levantó dando unos pasos hacia Tsunade.

—Kisame Hoshigaki, renegado de la Aldea de la Niebla. Acusado de traicionar a tu aldea y derrocar el anterior gobierno de Kirigakure, pertenecer a la organización Akatsuki y matar a una gran lista de personas, en los que se encuentra Roshi, jinchuriki del Yonbi. ¿Algo que decir en tu defensa?

—No. En todo caso, me gustaría que fuera Kirigakure quien eligiera mi sentencia.

—Se tendrá en cuenta tu petición—habló Tsunade, observando a la actual Mizukage—. ¿Alguien quiere declarar algo en su contra?

Lo usual, lo acusaron de matar y de pertenecer a Akatsuki, y como se repetía continuamente, Tsunade decidió interrumpirlos para pedir argumentos mejores y, al no haberlos, terminar finalmente su rápido juicio.

Kisame se sentó de nuevo y fue el turno de Itachi levantarse, pero Tsunade lo interrumpió.

—No hace falta que te levantes, Itachi. Haremos un descanso, ¿está bien?

El Uchiha asintió y suspiró cansado, notando cómo su hermano y Kisame lo observaban preocupados. Sabía que el siguiente era él y no se salvaría de las acusaciones del consejo y de muchos de los aldeanos. Solo esperaba que se acabase ya, de una vez por todas.


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Nuevo capítulo, comienzan los juicios y Naruto y Sasuke se echan en cara muchas cosas... Esto se pone intenso, sólo quiero acabar de narrar los juicios de Itachi, Sasuke y Naruto. Y como ya comenté, habrá un salto temporal (no muy grande), para los capítulos finales.

Espero que os esté gustando, la verdad. No sé si sabéis que las parejas al final no las voy a hacer, que cada uno piense lo que quiere y se los imagine. No habrá romance. Ya está dicho. Sólo quiero que por eso, no dejéis de leer y que lleguéis hasta el final.

Gracias por seguir leyendo, y por su atención. Nos vemos en el siguiente capítulo, Bye!

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