Ya habían pasado tres años desde aquella vez, en la que Naruto se había unido a Fairy Tail. En ese momento las cosas estaban muy tranquilas, aunque eso se iba a acabar pronto.

-¡Ya hemos vuelto!- exclamó Natsu al entrar de una patada al gremio.

-Aye sir- dijo un gato azul.

A su lado estaba una chica de pelo blanco cortado a tazón. Una chica también de pelo blanco en una coleta, el estómago al aire y mirada feroz se acercó.

-¿Qué tal la misión?

-Nada fuera de lo normal- dijo Lissana, la albina del pelo corto- esta vez solo hemos usado la tercera parte del dinero en las reparaciones.

Mirajane soltó un silbido sorprendida.

-¿Cómo es eso posible?

-Creo que hizo un reto con Naruto.

-Ya...

-¿Dónde está Naruto?- preguntó Natsu en voz alta mirando a todos lados.

-Se fue a una misión esta mañana- respondió Gray que, como no, estaba en ropa interior.

-¿Se fue solo?

-No, se fue con Rioko- dijo Gray. Rioko era el Exceed de Naruto, era gris y de ojos verdes y, al contrario que Happy, no era infantil, sino más bien maduro.

-Pero me dejó aquí- dijo Natsu deprimido.

-Seguramente fue para no tener que pagar tus destrozos.

-¿Cómo dices pervertido?

-¿A quien llamas pervertido antorcha humana?

Ambos se pusieron de pie y chocaron cabezas haciendo saltar  chispas entre ambos. Y empezó la pelea. Aquello era una cosa normal en Fairy Tail. Primero Natsu y Gray empezaban a pelear, y pronto se unían Cana, Jet, Droy y Elfman acababa envuelto. Y entonces alguno sale disparado del grupo y tira la tarta de fresa de Erza, que obviamente se enfada y se mete en la pelea, y como Erza se mete Mirajane también y se empiezan a pelear todos. Ahora mismo ya estaban en ese punto en el que Erza se había metido en la pelea y el pobre Elfman que había sido quien tiró su tarta de fresa estaba en el suelo medio desmayado. Y así debido a los choques y el ruido no se dieron cuenta de que la puerta del gremio se había abierto. Naruto tuvo el tiempo justo para teletransportarse a un lado para esquivar una silla que iba directa a su cara, pero donde apareció era donde Gray iba dirigido. Impacto contra él tirándolo al suelo antes de volver a la batalla. Naruto suspiró, juntó las manos a su boca y uso un rugido del dragón del espacio-tiempo. Todo el mundo se giró para verle.

-¡Naruto! ¿Cómo te has podido ir a una misión sin mi? Me prometiste que me esperarías- dijo Natsu.

-Si yo no he ido a ninguna misión- respondió Naruto sorprendido- solo he ido a desayunar con Rioko.

-Pero si Gray me dijo que estabas en una misión- Natsu miró al mago de hielo, el cual negó con la cabeza.

-¡A mi me lo dijo Erza!

Esta se atragantó con el trozo de tarta que estaba comiendo.

-¿Y a mi por qué me metes? Yo solo digo lo que dijo Mira.

Todos miraron a Mira la cual respondió.

-¿Qué importa eso? Yo quiero luchar contra Naruto.

-¿Eh?

-Sí, yo también quiero- dijo Erza.

-Pero sería un dos contra uno- comentó Rioko.

-Yo iré con Naruto- exclamó Natsu- no por nada somos hermanos.

Naruto sonrió. Aquello era cierto, puede que no fuesen hermanos de sangre, pero si de corazón. Eso se remontaba a sus primeros días en el gremio.

FLASHBACK

Mirajane había estado presentando a todos los del gremio, entonces el chico que se llamaba Natsu se acercó.

-Solo quiero pedirte disculpas por mi comportamiento- dijo.

-No importa- respondió- entiendo que eches de menos a tu dragón. Yo estoy pasando por lo mismo.

-Ya, pero eso no justifica mis modales.

-Que no pasa nada, que no pasa nada- dijo Naruto mientras sacudía las manos quitando importancia al asunto.

-Deberías aprovechar, no son todos los días cuando Natsu se disculpa con alguien- dijo una chica de pelo blanco, la cual se llamaba Lissana.

-¡Eso no es cierto!

-¡Sí lo es!- gritó Gray desde la otra punta. Naruto se giró para mirarlo y se dio cuenta de que estaba solo en ropa interior.

-Esto...- dijo sin saber que decir.

-No te preocupes, es normal- dijo Mirajane- ¡GRAY! ¡PONTE LA ROPA!

Gray la miró, se miró a sí mismo, y al ver que estaba semi-desnudo empezó a buscar la ropa.

Y así pasaron los días. Naruto no tardó en adaptarse al gremio, pues pronto hizo amigos, en los que resaltaban Natsu, Gray, Erza y Mira. Ya había pasado casi un mes y Naruto estaba en lo alto de una colina, mirando el atardecer. Notó como alguien se sentaba a su lado y no tuvo que darse la vuelta para saber quien era.

-Tengo una pregunta- dijo Natsu. El rubio no contestó, pero al pelirrosado no le importó, pues siguió hablando- ¿Por qué no tienes apellido?

Naruto se giró para verlo.

-Es decir, todos tienen un apellido, por ejemplo, yo me apellido Dragneel, Gray, Fullbuster, Erza, Scarlet..., y así todos. ¡Hasta el maestro tiene un apellido! Pero tú no. Te presentaste como Naruto, pero no dijiste como te apellidabas.

Naruto dirigió su mirada al frente meditando. Había estado ya tiempo en el gremio, era hora de decir la verdad.

-Está bien- dijo- ya es hora- Natsu lo miró sorprendido.

-¿Qué quieres decir?

-Es hora se que sepáis quien soy en realidad.

-Ya sabemos quien eres. Eres Naruto, un dragón Slayer y un miembro de Fairy Tail.

Naruto sonrió con tristeza.

-Me refiero a antes, antes de conocer a Zu.

Natsu lo miró con intriga, pero el rubio no añadió nada más. Bajaron al gremio y se lo encontraron en caos total. Algo normal. Naruto tomó aire y exclamó.

-¡TENGO ALGO MUY IMPORTANTE QUE DECIROS!

Todos se callaron y le miraron curiosos.

-¿Qué tienes que decirnos?- preguntó el maestro con voz amable.

Naruto suspiró, se preparó mentalmente y empezó a contar. Les explicó de donde venía, que eran los ninjas, su antigua familia y la razón por la que se escapó de casa. Cuando terminó un silencio inundaba la sala, algo extraño en Fairy Tail. Makarov avanzó un paso.

-Esos... esos no son padres. Y eso no es una familia. Un dragón fue tu verdadero padre, y nosotros somos tu verdadera familia.

El gremio entero empezó a gritar y apoyar las palabras del maestro. Naruto sintió que sus ojos se humedecían y antes de lo esperado estaba llorando, y su nueva familia abrazándolo.

-Dragneel- dijo Natsu.

El rubio de mechas lo miró confundido.

-Naruto Dragneel, ese es tu nombre ahora, pues somos hermanos- dijo Natsu sonriendo.

Naruto jamás había estado tan feliz.

FIN DEL FLASHBACK

Salieron afuera para la batalla, todo el gremio estaba allí, haciendo las apuestas, la mayoría eran para Erza y Mira, pues, aunque Naruto era fuerte, Natsu era muy infantil.

-Podéis comenzar- dijo el maestro.

Los cuatro combatientes se miraron decidiendo quien iba a atacar primero y, como no, fue Natsu. Envolvió su puño en fuego y se lanzó para golpear a Erza. Todos los magos presentes suspiraron, sabiendo que aquel era un ataque precipitado. Por eso solo Makarov se dio cuenta de que Naruto sonreía.

-Impulsivo- dijo Erza al tiempo que levantaba su espada. De repente, Naruto apareció detrás suya y le dio un puñetazo. Erza lo vio venir y lo detuvo, pero perdió el equilibrio, lo que permitió a Natsu golpearla. El rubio se apartó de la trayectoria haciendo que Erza chocase con una mesa. Los miembros del gremio abrieron los ojos sorprendidos. "Ha golpeado a Erza" fue el pensamiento de la mayoría.

-¿Un plan?- preguntó Mira mientras la pelirroja se levantaba.

-Más bien improvisación- respondió el rubio encogiéndose de hombros.

-Ese no es tu estilo. Siempre tienes una estrategia o un plan.

-Ninguno funciona si lucha Natsu.

El mencionado asintió satisfactoriamente hasta que se dio cuenta de lo que realmente querían decir.

-¡Eh! ¡Eso no es cierto!- reclamó.

-Sí lo es- respondieron todos los del gremio a la vez.

-Oye, la pelea no ha acabado- comentó Mira disgustada.

-Ah, es que tú también quieres un golpe- se burló Naruto.

-Ya verás- dijo mientras entraba en su forma Satan Soul. Al mismo tiempo Erza usó re-equipamiento, haciendo aparecer dos espadas, aparte de una armadura y un casco plateados. Natsu envolvió sus puños en llamas, y Naruto se quedó quieto, mirando a sus oponentes mientras planeaba su próximo movimiento. Y como si lo hubiesen previsto, los tres rivales saltaron a la vez para pegarse mientras el rubio sonreía. Estaban a punto de golpearse cuando Naruto apareció en medio, detuvo los ataques de Erza y Mira, y agarró a Natsu, lanzándolo hacia las otras, quien recibieron los puños de fuegos. Ambas chicas se chocaron contra el suelo, se levantaron jadeando y, antes de que pudiesen hacer nada, hubo un temblor que sacudió la ciudad.

-¿Qué pasa?- preguntó Naruto confuso.

Un rubio con una cicatriz en el ojo, Laxus, quien no había demostrado tener un mísero interés por la batalla, se acercó

-Gildarts- dijo solamente.