AU/Fix-it/ Domestic

No había ninguna luz encendida de aquella morada y no era necesaria en realidad, la luminiscencia del nublado día que entraba en los ventanales abiertos dejaba ver lo suficiente.

Una mirada color esmeralda apreciaba el exterior de aroma salado y el sonido de las olas. Sentada en la sofisticada silla en ese amplio balcón se perdía en ese relajante paisaje, como si estuviese tentada en sumergir sus pálidos pies sobre esas aguas frías y calmas. Más de solo pensarlo, no se sentía cómoda con aquello, no se sentía merecedora.

¿Por qué?

De imaginarse a sí misma yendo hacia esas olas, un par de rostros de asomaban en su mente y de hacerlo sus lagrimas amenazaban con salir. ¿Por qué se permitiría en disfrutar la tranquilidad si ese derecho se les fue negado al querer protegerla a ella? No era justo a su ver y si ellos no estaban para disfrutarlo, ella no lo haría.

Y así era cada día...

Se abstuvo desde su asiento y se sirvió una copa de vino para olvidar aquello que le afligía al menos por esos instantes. Aunque no pudo evitar, que un par de gotas tan saladas como el mar, resbalaran sobre sus mejillas.

En ese momento y sin preverlo, un cariñoso dedo evitó caer una de esas lagrimas hacia su pecho. La joven levantó la mirada y se encontró con un par de amatistas que la miraban fijamente con una sonrisa. Un rostro tan jovial y magnifico que le hacia tener paz, el joven la tomó de la mano como si este supiera leer sus pensamientos, su dolor...

-Disfruta los buenos momentos en su memoria, Trish. Además, si de algo te sirve; yo estoy vivo gracias a ti. – Comentó haciendo que la joven dejara caer más lágrimas. – Te amo. – Expresó con todo su corazón dándole un dulce beso.

Narancia era el nombre de aquel ángel, y si de algo tenía razón, es que Trish no permitió que este muriera a manos de su padre cuando este intentó salvarla de sus agudas garras demoniacas. Ella a pesar de ser alguien de ascendencia infernal, pudo sentir el miedo de perderle y gracias a eso, fue capaz de protegerlo como él lo llegó a hacer con ella luego de haber expresado su amor.

Un amor que no dejaba prosperar del todo por su propia culpa. Porque por no amar a los otros como lo profesaba hacía él, no pudo protegerlos.

La joven asintió dejándose llevar por el agarre de Narancia y casi en estado de trance. Permitió guiarse hacia aquellas olas, alejándose del suelo de madera de su casa y tocar la espuma de mar apenas llegando.

Al hacerlo se sintió en paz, ¿Cómo era posible? Pensó en que tal vez llegaría a sentirse peor. El tacto de Narancia le hacia verse en un panorama sereno y lleno de luz como nunca lo había visto, y es que él siempre era su mejor método para ver el lado bueno de las cosas, de su vida.

Miró hacia el joven quien estaba a unos pasos más adelante y al verlo más lejos, sintió una opresión en el pecho. De imaginarse una vida sin él, se sentiría el ser más miserable del mundo. Narancia solo era la prueba de que no debía negarse a la felicidad aun siendo un demonio de buen corazón.

En él vio la oportunidad de perdonarse y ser feliz por aquellos que dieron su vida.  

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Ahora sí, día 2 de la week <3 esta cortito, pero espero pueda expresar mucho. <3 Gracias por leer :3