Custodia #6

Tenía al bebé en las piernas, sus manos seguían en la pantallita. En el trabajo, muchos de sus compañeros lo cubrían para que el bebé no se separara de su único cuidador, su única familia. El cachorro no llevaba otro juguete que no fuese un peluche pequeño, algo silencioso, traía su mantita y su chupete, como es de esperarse. Se bajó de las rodillas para ponerse a jugar en el suelo, justo debajo del escritorio, por lo que al mayor no le preocupó. Trazaba códigos y analizaba la información para llevarla a una posible teoría en un documento y luego volver a investigar; su oído estaba atento por sí escuchaba pasos de su líder o algún sonido fuerte por parte del bebé, la última sonaba muy probable ya que escuchó la puerta abrirse, miró sobre su hombro y vió cómo la criatura entraba en la cocina del recinto. Se levantó casi de golpe y corrió antes de que un frasco cayera sobre el niño curioso, lo apartó a tiempo pero el estruendoso y quebradizo no pudo ser detenido, comenzó a maldecirse en voz baja mientras se agachaba sin soltar al niño e intentaba recoger el desastre pero cuando aclararon la garganta, el reploid paró y miró hacía arriba mientras se levantaba.

- S-Señor... - llamó asustado, aún sosteniendo de manera evidente al niño.

- Buenos días.- dijo seco y serio. Su miraba ambár cayó en la criaturilla que se asustó y chillando se escondió en el hombro del mayor cubriendo los costados de su rostro con las manitas.- ¿Qué es esa cosa?.

-...

- ¿Qué es?.- repitió molesto su líder.

- U-Un bebé, se-señor...

- Exacto.- bufó con rabia. Aún mirandolos con autoridad.- ¿Por qué has traído un bebé a está Sede? Sabes que no permito otra cosa que no sean mis soldados dentro de está institución, ¿no?.

- S-Señor...

- Haz hecho un acto que rompe el protocolo.

- Pero...

- Cómo tú líder debes seguir mis órdenes.

- Es que...

- ¡Basta!.- escupió molesto provocando que el cachorrito se escondiera más.- ¡Te ordeno que regreses esa cosa con su familia, inmediatamente!.

- Él... él no...

- ¿Qué?.

- Él no tiene familia.- declaró bajando la mirada y abrazando al bebé, dandole seguridad.

- ¿Ni la madre?.- le negaron.- ¿Padre?.- un gesto parecido.- ¿Algún representante?.

- No, señor está solo.

-... Entonces no tienes custodia legal sobre la cría.

- ¿Qué?.

Un par de soldados entraron al seguir una seña ligera por parte del alto reploid, el adulto con el bebé en brazos retrocedió con un temor brillante en sus ojos. Protegió con sus brazos al niño y se trató de aferrar al bebé cuando escuchó a su líder gritar que tomaran al bebé y lo llevaran a cualquier asqueroso orfanato. Le arrebataron a la criatura de las manos e inmediatamente ésta comenzó a llorar, alargando sus brazitos en dirección a su cuidador, unos tres soldados inmovilizaban al mayor que hacía infinitos esfuerzos por alcanzar a su bebé mientras las lágrimas volaban de su rostro y gritaba suplicas que pedía de rodillas que se lo devolvieran, que no se lo llevaran pero el líder dió la vuelta para salir junto al otro soldado que traía a la escandalosa criatura. El cuidador seguía gritando con la esperanza de ser oído e incluso logró liberar uno de sus brazos, intentando alcanzar al niño antes de que lo perdiera completamente de vista.