POV AUTORA:

Todos, con algunas excepciones, estaban boquiabiertos...¿cuando demonios llego el arcángel al mundo de las diosas?

Elizabeth: eh...no..no es que no nos alegremos de verte mael pero que haces aquí? Te creímos perdido después de lo que sucedió en la boda.-dijo acercándose un poco al peliplata

Meliodas: si, ni siquiera cuando elizabeth y yo viajamos por britannia buscando alguna solución para todo este caos te encontramos.-dijo mirando al hombre que alguna vez pensó que era su hermano menor.

Mael: de hecho elizabeth, meliodas, un día después del ataque viaje por toda britannia buscando el alma de isabella...no encontré nada así que pensé que podría encontrarla con el oráculo estelar que se encuentra aquí, vine hace algunos días por la puerta en el bosque del rey hada y ayer me encontré con la señorita jeriko.-miro a la mencionada con pena y esta le devolvió el gesto.-hay algo que debemos decirles...

Jeriko: nos equivocamos..-suspiro apretando los puños con impotencia

Merlín: en que?-preguntó con su característica curiosidad, aunque algo muy en el fondo le decía que serian malas noticias.

Jeriko: pues...sucedió anoche cuando fui a buscar al rey.-dijo comenzando a contar lo sucedido, claro que omitiendo un par de cositas.

Flasback...

POV JERIKO:

Apenas salí de la taberna seguí la ruta detrás de la cerda gigante, no creo que el rey se arriesgue a ir hacia adelante sabiendo que podrían haber mas riesgos, lo mas probable es que haya decidido ir hacia atrás, a la cascada que pasamos horas antes.
Camine intentando no caerme por todas las raíces que sobresalían del suelo, aunque no sirvió de mucho ya que igual termine en el suelo...es definitivo, la naturaleza me odia.

Gruñi cuando me levante y me apoye en un árbol para proceder a sacudirme la tierra que se me había quedado pegada, una vez lista seguí hasta llegar a la laguna de la cascada, bajo la luz de la luna era realmente hermosa pero lo que llamo por completo mi atención fue ver una sombra entre las aguas. Tal vez el rey decidió refrescarse un poco. Dudosa y manteniendo mi mirada en el suelo, lo ultimo que deceaba era ver al rey de camelot desnudo, baje las rocas que me separaban de la laguna y camine hasta la orilla desde donde podía ver la sombra pero...no era el rey...era otro hombre...
Afine la mirada para poder verlo mejor y estoy casi segura de que deje de respirar cuando lo vi.

Dios mio...

Debo estar alucinando...

No era un hombre, era un ángel...

Su desnudez era notoria, lo que me hizo mover de forma inconsciente el cinturon de la espada de isabella para que quedara detrás de mi espalda como sino quisiera que viera lo que yo veia, el agua del lago le llegaba a la cintura dejando al escubierno su ancha espalda medio cubierta por su cabello plateado, cada músculo de sus fortalecidos brazos eran suavemente recorridos por el agua y cuando se dio la vuelta...mi corazón se acelero...

Los mechones cabello caían con elegancia por su bello rostro y junto a la luz lunar era casi como una visión celestial, sus ojos yacían cerrados, obviamente disfrutaba de su baño, sus hombros se veían relajados y dios...se me seco la boca al ver su abdomen perfectamente marcado, seguramente por el rigor de sus entrenamientos, mael era lo mas bello que había visto en mi vida.

Jeriko: dioses...-suspire sintiendo mi cara arder

De pronto, toda la escena se rompió cuando el abrió sus ojos, esos ojos azules que hicieron que sintiera cosquillas en mi vientre pero que también me hicieron volver a la realidad...yo lo estaba espiando!! Jeriko idiota!!

Pero contrario a todo lo que imagine, el solo sonrió y me dio la espalda para ir dentro de la cascada, por respeto y vergüenza me quede tiesa en mi lugar y espere a que él decidiera salir.
Y así lo hizo pero, para mi desgracia, totalmente vestido con sus emplumadas alas a la vista.

Mael: buenas noches señorita, tu eres amiga de los siete pecados capitales, no?-pregunto con amabilidad, como si no supiera que me le quede viendo mientras se bañaba.

Jeriko: eh...etto yo..ah...-balbuceaba tontamente con la cara realmente roja. Concentrate jeriko!!

Mael: como te llamas, señorita?-pregunto tomando mi mano para dejar un delicado beso en ella. Tonto corazón acelerado.

Jeriko: je..je...jeriko! Me llamo jeriko y soy una caballero sacro de lionés.-me presente por fin

Mael: yo soy el arcangel mael, que estas haciendo aquí? Los pecados han venido tambien?

Jeriko: si, hemos venido a por isabella y la diosa suprema.

Mael: yo también. Pero mi pequeña isabella aun esta perdida en algún lugar de britannia, sin su alma no podemos hacer nada.-dijo con la mirada sombría. Pobre hombre.

Jeriko: no tienes de que preocuparte, mira!-le mostré la espada en mi cinturón.-aquí yace el alma de isabella, solo debemos hacer un exorcismo a la diosa suprema y ella volverá a su cuerpo. No debes sentirte mal, todo estará bien.-dije intentando animerle

Sorprendido el se acerco, lo que me sonrojo un poco, y tomo la espada para acercarla un poco mas a su rostro y verla con detenimiento.
Me extraño que frunciera el ceño y fue aun mas confuso cuando le vi suspirar.

Mael: siento decirtelo, señorita jeriko...pero esta espada no contiene el alma de isabella.-me dijo en un tono entre serio y desanimado.

No me gusta verlo así, no le queda. Seguro debe verse precioso riendo...

Esperen...

Jeriko: QUE QUEEEEEEEE!?-grite atónita.

Continuara...