Vuelta a clases

(Wikipedia)

Cualquiera que entrase al Colegio Oren pensaría que lo más extraño es que los estudiantes hacen sus propias reglas del salón o que hay diferentes grupos internos donde se escoge si estás en la cima de la cadena alimenticia o en el escalón inferior. Pero no, lo más extraño eran los apodos. Estos eran los que te identificaban justo cuando entrabas. El primer día del colegio estableces tu reputación dependiendo de con quién te juntas, qué haces o cómo te comportas. Las reglas y leyes del colegio son demasiado extrañas y esto lo he sabido desde que entré a este colegio. Más específicamente, al salón de sexto grado de primaria del Colegio Oren.

Todo esto comenzó hace veinte años. Popular Guy o The Creator, el líder del equipo de Yudo del colegio —del cual nunca se reveló el nombre—, empezó un juego junto a sus amigos y varios clubes, donde ellos crearían unas reglas internas para su salón las cuales nadie debería desobedecer; también que dependiera de con cual club te sentabas tendrías más o menos privilegios —esta regla sí ha cambiado un poco— y finalmente, que no se revelaría el nombre real de nadie. Brillant, líder del consejo estudiantil aprobó la idea, y también pidió a su padre que para tomar lista usasen un método diferente: colocar la imagen de la persona, si no estaba allí se le colocaba ausencia y si estaba, pues estaba.

Hoy era el primer día de clases. No saben la emoción que me daba el volver a clases. No era la más popular en la escuela, pero en cuanto a mis compañeros de aula, ellos me consideraban buena amiga. Siempre creí que todos los años serían iguales... Pero este no lo fue, y lo iba a aprender por las malas. Ingresé al colegio, veía nuevas caras y otras conocidas que me saludaban.

— ¡Ey, Wikipedia!

—Hola, Wiki

— ¿Qué tal, Wikipedia? ¿Preparada para este año?

El apodo que me había ganado era Wikipedia, aunque antes que este, me precedía el apodo de "Robora", gracias a mi gran desempeño en informática y robótica. O el primer año que llegué al cole: "Patata-sensei". Claro que en todos los años me he sentado con los populares. Pero como dije, nunca he sido la más genial y cool que se pueda ver. Abrí la puerta de una manera en la cual todos pudiesen ver que había llegado al establecimiento, y obviamente, no pasó desapercibido. A pesar de no tener tanta fama, todos me conocían como la Líder del Club de Informática.

— ¿Qué onda, Wikipedia? ¡Hace tanto que no te veía! —saludó Edificio, el más alto del equipo de baloncesto, y también el más rápido de sexto. Era uno de los únicos contra los que competía en velocidad.

—Bueno, si hablamos de no ver, creo que Chicken Little era muy diminuto —bromeé.

— ¡Oye! —exclamó Chicken Little en clara señal de protesta— ¡Tú eres casi de mi tamaño!

—Sí, pero soy unos centímetros más alta que tú —señalé orgullosa—. Bueno, ¿ha llegado alguien nuevo? ¿Quién se encargará de ellos? —...— Ah, por cierto, bien ¿y tú?

—Bien —respondió Edificio—. Hoy vendrán un total de cinco nuevos, hemos decidido que tú te encargarás de este —. Me entregó una carpeta color amarilla, la cual abrí y observé. Regla uno: nunca decir el nombre real de alguien, solo podían hacerlo los profesores—. Chicken Little, Hijo de Uniceja, Barbilla Roja y yo nos encargaremos del resto.

—Genial, lo haré con gusto. Por cierto —agregué—, Chicken Little, ¿seguirás en el club de informática este año? —pregunté— ¿O entrarás en el de baloncesto? Te recuerdo que no podemos tener dos clubes a la vez.

—Este año estaré en el de baloncesto, creo que me desempeño mejor en ese deporte —mencionó—. Además, eres demasiado perfeccionista.

Sentí como me dirigió una mirada dura y penetrante. Yo contraataco. La guerra no finaliza hasta que alguien entra y todas las miradas se dirigen hacia ese alguien. La guerra termina. Un chico de tez extremadamente blanca y cabello azabache ingresa al salón tímidamente. Y ahí me doy cuenta, de que es al que me toca guiar; por lo tanto, me acerco a darle una bienvenida medio fría y medio cálida.

—Hola, chico nuevo —saludé—. Antes que nada, no digas tu nombre —. Él me mira extrañado—. Yo soy Wikipedia, te guiaré esta primera semana para que te adaptes a la manera en que hacemos las cosas en la escuela. Por ahora te llamaré Atún, ¿porqué? Porque puedo —. Ahora me observa muy confundido —. ¿Y si primero te instalas y luego me encargo de enseñarte cómo sobrevivir aquí?

—Cla... Claro —tartamudeó confundido.

De un momento a otro siento un peso en mi hombro, una mano, es nada más y nada menos que Barbilla Roja, quien me observa con una sonrisa burlona solo para decir:

—Ya lo asustaste —menciona—, idiota.

—Veamos qué tal te va con quien te tocó, perdedor de pacotilla —. Insulto maestro infiltrado—. De todas maneras tienes músculos, pero esos de nada te servirán.

—Tú tienes mucha inteligencia, pero eres horrible en cuanto a deportes.

—Ustedes pierden —. Entra en la conversación Chicken Little—: yo estoy equilibrado.

Creo que eso no lo podemos refutar. Chicken Little es bueno en absolutamente todo, desde la materia de inglés hasta la de artes —su arte sería vendida a billones—, no entiendo porque no es el favorito de los profes...

—Bueno, ya —dirigí una mirada al chico que me tocaba guiar— ¿Listo?

—Sí...

—Bueno, sígueme, te enseñaré todo lo que debes de saber sobre este colegio. Cálmate, no es mucho —dije al ver que puso sus ojos en blanco.

Ambos empezamos a caminar por el colegio, mientras varias miradas interesadas en el chico nuevo se intensificaban. Lo habían visto con la legendaria maestra de las computadoras, amiga de Chicken Little y de Edificio. Pronto empezaron a cuchichear y otros a seguir con lo suyo. Perfecto. Ganó puntos.

—No te asustes si empiezan a susurrar. Están diciendo cosas buenas —mencioné al ver lo nervioso que estaba—. Este colegio tiene un ambiente diferente a cualquier otro: en este instituto te escogen un apodo los primeros días de clase, y con ese seguirás hasta el próximo o los próximos años. Por eso te dije que no dijeses tu nombre, eso no es de mi incumbencia ni de la de ningún otro estudiante, Atún. En este colegio hay muchas rivalidades y tipos de grupo.

—¿Tipos de grupo? —interrogó.

—Seh, son unos cinco; no, son seis. Tribus, clanes, clubes, parties, grupos de salón y grupos de salón internos —terminé de decir, aunque quedó con una cara totalmente confundida —. Sígueme mientras te explico, en breve debemos ir al gimnasio. Las tribus son grupos de más de diez personas de diferentes salones, un ejemplo son los Bafuba, son todos deportistas de distintas aulas; yo estoy en los Ciarin, un grupo de "cerebritos", según algunos matones. Informática, ciencias y artes son mayoría de los que entran —. Miré hacia atrás para asegurarme de que me estaba siguiendo—. Muchos ignoran que uno de los más populares estuvo en este pueblo.

—¿Y los demás? —. Le miré— Los otros tipos de grupo.

—Ah, bueno. Los clanes son familias, además de su nickname, usan un apellido clave. Como los Y, mi familia. Mi otro nombre aquí es: Chipie Y, o Wikipedia Y. Los clubes son típicos de cualquier lugar: artes, fútbol, baloncesto, etcétera. Las parties son compañeros con los cuales trabajarás todo el año, pueden ser hasta de cuatro, aunque también son equipos temporales. Y los grupos de salón son como el grupo de sexto, mientras que los internos, son grupos que luchan entre sí internamente en el salón de clases.

—Entiendo...

—Mira, ya hemos llegado —dije—. Ubícate donde desees, yo me retiro.

—Bien —respondió el chico.

Me dirigí hacia la parte trasera del escenario, donde esperaban los líderes de los clubes y los miembros del consejo estudiantil. Hasta que comenzó el característico discurso de los directores —de los cuales sí sabíamos los nombres—, Iralda Creta y Julián Creta.