💀 Capítulo 81: Todo se queda 💀
Esta oscuro, ¿Porque todo esta oscuro?...
—¡¡¡Hana!!!.. ¡¡¡Hana!!! ¡¡¡Haaaa!!!..
¿Esa es su voz?. Suena como la de una niña. ¿Por que grita?. Suena desesperada, triste, suplicante…
—Hana.. –ahora suena mas triste, ¿Porque suena tan triste?..
Hay poca luz, un foco ilumina tenuemente la cueva. El ecenario cambia, ya no es su voz gritando en nombre de Hana, ahora es el de ella gritando el suyo, la cueva desapareció, ahora estaba en una celda llena de mugre y oscuridad…
—Sakura.. –dijo aliviada Hana, una adolecente de dieciséis años. Sakura parpadeo confundida– ...gracias a Kami-sama, pense que hibas a morir..
—¿Otra vez?.. –intento bromear, pero la castaña sólo la miro confundida, ella tambien estaba confundida–
—¿Que quieres decir?.. –Sakura movió la cabeza, tratando de disipar lo que dijo– …¿Hum? Tal vez la camara de aislamiento te afectó..
—No lo sé.. ¡¿Donde esta Bongo?!.. –salto alarmada al no sentir la presencia de su tío en la celda–
Hana bajo la mirada angustiada, ¿Cómo decirlo sin hacer sentir mal a la menor?. Sakura esperó la respuesta pero Hana no hablaba, insistió un poco mas con la mirada, ella y su tío eran sus bienes mas preciados en aquella sucia celda…
—Él tomo tu lugar..
Sakura trato de levantarse, pero solo terminó en el suelo, la debilidad en sus piernas la llevo a dar contra el suelo…
—¡No! Hana, tenemos que ayudarlo..
Sabia lo que se sentía estar en aquella caja, sola, sin nadie. Sin el sonido de fuera, sólo podia escuchar el latir de su corazon y la sangre fluir por sus venas. Era horrible, no podia dejar que su tio sufriera aquello…
—¡Hana!..
Nuevamente, y sin importarle mucho la debilidad de sus piernas, se levantó del suelo y trato de caminar hacia la puerta. Las paredes de piedra se movieron, esta vez Hana no pudo sostenerla, cayó de cara contra el suelo.
…
—Ten, dale esto lentamente.. –¿Quien hablaba? ¿Porque su voz suena triste?–
—¡Sakura!..
No fueron minutos, estuvo inconsciente por seis horas, horas en las cuales el mayor fue arrojado a la celda y posteriormente curado por la castaña…
—Maldita mocosa, casi me matas del susto..
La menor sonrió, aunque fue mas una mueca adolorida. Su tío y Hana se veían bien, o por lo menos lo que sus pequeños ojos podían alcanzar a ver. Hana aun tenía el soporte en su brazo izquierdo, a causa de una fracturada, y su tío lucia como una momia por tanta venda, sólo se podían ver sus avellanados ojos y algunos mechones cortos color azul de su cabeza…
—Toma renacuajo, te ayudara con el hierro..
Sus delgados dedos tomaron el cuenco con sopa fría, era gris y desprendía un olor, no nauseabundo pero nada apetecible…
—Oji-baka dice que el musgo de las paredes tiene vitaminas..
…
—Oji-san, ¿Te duele?..
Los tres residentes de la celda estaban sentados contra la pared y dándole la cara a la puerta. El mayor estaba en medio, siendo de almohada para la castaña, y un reconfortante y cálido calentador para la menor.
Los minutos pasaron, la normalidad con la que escuchó hablar a la menor lo dejo absorto, trataba de grabar cada una de sus dulces palabras para estar preparado para la próxima vez, aunque con tantas sesiones duda que pueda con cinco más…
—Duele.. Duele mucho…
El dolor siempre se prolongaba despues de cada sesión, su cabello y uñas volvían a crecer, pero los trozos de carne que extrajeron la ultima vez fueron demasiado para su cuerpo, aun podia sentir el dolor recorrer toda su espalda y culminar en su zona baja. El no era tan importante para los científicos del lugar, despues de todo ya habían exprimido cada investigación posible sobre la raza pura, Hana y Sakura eran lo que le preocupaba, ¿Que harían cuando el ya no pueda soportar una sesion mas?.
Trató inútilmente de borrar eso de su mente sacudiendo su cabeza de lado a lado…
—Hare un Bongo de canelo, con bayona de ciprés, y las aguas del Estero, desde campu cruzare.. –sus ojos se movieron a la menor, ella al igual que la castaña estaba totalmente dormida– ..En ese bongo ligero, a la niña iré a traer.. –terminó de cantar, pero el tarareo se prolongó por unas horas más, sólo unas horas más..
…
Decir que tenia miedo quedaba corto, estaba llorando, suplicando inútilmente a un dios superior que la ayudará. Sola en aquella sala, junto con "esos" dos doctores. El sonido hueco e irritante de los instrumentos siendo colocados y retirados, una y otra vez de la bandeja, la dejo con los nervios crispados. Gemia contra el caucho, con los dientes mordia la correa, y con los ojos maldecia a los doctores. Luego.. Luego sintió como una de sus extremidades crujia.
Yalika.. Kohaku.. Prushka..
Recordaba una y otra, y otra, y otra vez los nombres de sus compañeros, los tres hermanos Haimaru, como un mantra que le permitía mantener la poca cordura que le quedaba. Dolia como el infierno, y aun así podría decir que ni el mismísimo infierno se sentia así. Creía ya no poder resistir toda aquella tortura, era demasiado para cualquier persona…
—Sujeto No.987; se han encontrado celulas positivas en su antebrazo derecho, se practicó la extracción con éxito..
¿Que quiso decir con extracción?¿Por que no podia mover sus dedos?.
Trago grueso cuando entendió, casi ahogándose con el objeto de caucho, pero hizo todo lo posible para tragar.
Lo sentía, sabia que todas las sesiones tarde o temprano llegarían a más. Si sus cuerpos ya les dieron el suficiente conocimiento era hora de subir el nivel, o al menos eso recordaba de aquel bastardo afeminado, cuando todos sus "hijos" fueron reunidos en la sala de juegos…
El click de la puerta la hizo voltear hacia dicha dirección. Hablando del Rey de Roma, aquel sujeto serpenteo hasta estar cercas de ella…
—Ho mi querida Hana-chan.. –siseo acariciandola como una pequeña mascota– …Siempre supe que eras mi hija mas fuerte, es hora que termines de ayudarme..
Poco pudo recordar de ese día; sólo una jeringa con un líquido morado, su sangre siendo drenada, el horrible dolor de fuego en sus entrañas, y la fría oscuridad.
Al fin podria ir con sus hermanos y sentir la paz, si no es que terminaba hecha una plasta en el suelo con la mentalidad de un caracol.
…
—Traga esto, Hana.. te ayudara con las nauseas.. –la castaña rechazo la bebida y continuó intentando vomitar–
Sakura veia todo con preocupación, pensando que quizas la sesion fue demasiado para ella o que quizas estaba agonizando. No, se negaba a pensar que este iba a ser la ultima vez que pudiera estar con la castaña. La incertidumbre la golpeó cuando escucho una nueva arcada.
¿Que hicieron ellos para merecer esto?¿Por que nadie los ayuda?
Simples y estúpidas preguntas, pestes con habilidades especiales. Humanos como ello sólo son armas para el gobierno.
.
Sus tripas se contrajeron y aquel objeto que habia tragado fue vomitado en el suelo…
—Es hora de irnos.. –sonrió de lado. El mayor sonrió debajo de las vendas, una sonrisa de lado a lado que mostraba esperanzas hacia las menores, aunque muy dentro de él sentia miedo e incertidumbre–
Sólo un poco más, solo un poco mas y podrían ser libres.
…
Tal vez corrieron por horas, no recordaban sentir el pasar del tiempo correr tan rápido fuera de las rejas. La menor sonrió por lo bajo, mirando nuevamente la luna y sus estrellas, oliendo el rocío que se formaba en el pasto que sus piesitos descalzos tocaban, disfrutando cada segundo de libertad. El mayor cargaba con la adolecente, corría hacia enfrente y evitaba mirar a atras.
Todo quedó atras, aquel lugar que fue su lugar de tortura se redujo a cenizas. Quienes trabajaban ahí fueron asesinados bajo un ataque de ira. Explotados, acuchillados y mordidos, un desahogo muy bien merecido. Las paredes se tiñeron de rojo carmin. La satisfacción corrió por sus rostros.
Solo Sakura fue la unica que no participó en aquella matanza. Sus ojos fueron cubiertos bajo un pañuelo rojo, sus manitas cubrieron sus oidos y, para no escuchar, cantó, canto para ocultar los gritos de dolor y las risas estridentes de su tío.
…
—¿Como te encuentras?..
—La mitad de mis organos están siendo licuados, ¿Tu que crees?.. –el sarcasmo su mejor amigo, la burla en sus ojos enmascara su propio sufrimiento– ..y tu??
—Esa maldita cosa que me inyectaron sigue bloqueando mis poderes..
—Bueno, tampoco es como si sirvieran de mucho..
—¡¡¡OYE!!!
¿Que acaso la risa no es la mejor medicina?.
Quiso creerlo, pero ella sabia que pronto perdería a su amiga. Fue así como aquella noche rió y lloro al mismo tiempo, su adormilado rostro reflejaba un rastro de lágrimas pero sus labios pintaban una linda sonrisa.
…
Hoo~ como queria que su sobrina no sufriera aquello. Lo último que le pidio su hermana antes de morir fue cuidar de ella, pero no pudo hacerlo bien. A la primera fue capturado y encarcelado, ellos dos llevados con los demas conejillos de indias y puestos en una celda para comenzar a ser investigados…
—Sakura..
—¿Oji-san?.. –murmuro abriendo sus ojitos–
—Tenemos que seguir caminando..
—Vamos Sakura, corre.. –ánimo la castaña desde la espalda del mayor–
Aveces correr es la unica opción, cuando los problemas son mayores y no puedes con ellos sólo corre…
Error..
Las acciones cometidas en el pasado repercuten en el futuro. Correr no sirve de nada cuando inminentemente te alcanzará tu pasado.
…
—Sakura..
Habian vuelto, habían regresado al lugar donde todo comenzó. Todo bajo la inútil esperanza de encontrar una cura para Hana. Lo único que encontraron fue decepción mezclada con amargura.
Los poderes de tu tío habían sido bloqueados y sus piernas rotas. Aquellas criaturas los perseguían. Esos niños, que alguna vez fueron felices, ahora eran extrañas criaturas deformes que buscaban mas de ellos para estar completos. Unidos bajo un solo cerebro se movían como una colmena.
¿Acaso ese era el destino que le deparaba a Hana?¿Así seria su vida de ahora en adelante?. Ella no queria terminar como todos sus hermanos, no queria volverse una de ellos. Así fue como tomo la decisión mas dificil de su vida. Con lagrimas bajando de sus mejillas le suplico a la pequeña pelirrosa que acabara con su vida…
—Sakura.. Perdón.. –la niña se encontraba sentada en su vientre, con la cuchilla entre sus manos– ...no pude.. convertirme en la Reyna de los piratas..
—No Hana.. Hana.. Hana, podemos.. P-Podemos volver y-y encontrar un barco para navegar..
Tontas ilusiones de una niña. Esperanzas vacías para una joven moribunda. Lamentos silenciosos de un hombre impotente. Atrocidades hechas bajo la enferma mentalidad de un ser no humano…
—Corre, Sakura.. –una manera para afrontar la cruel realidad, patetica y cobarde decisión– ..acabalo, corre y se feliz..
No era una simple palabra, ella queria que tomara el camino fácil y avanzara.
La sangre salpico su rostro. Ojos vacios, respiración entrecortada…
—¡¡¡Haaaaaaa!!!.. ¡¡¡Hana!!!¡¡¡Hana!!!.. ¡¡¡Haaa.. Haaa.. HAAAA!!!.. –lloró, lloro lagrimas de tristeza– ..¡¡¡Hana!!!.. ¡¡¡Hana!!! ¡¡¡Haaaa!!!..
…
Y ahora estaba ahí, delante de un pequeño bribón quien se hacia llamar Kiba Inuzuka, hermano menor de Hana, su antigua amiga.
Todo se queda donde lo dejaste. El pasado es inminente, llega cuando menos te lo esperas…
—Tu eres Sakura, ¿Verdad?.. –preguntó el pequeño niño. Sakura parpadeo y asintió lentamente– ..¿Donde se encuentra mi hermana?..
Una ¿Enemiga?, un cachorro, un peluche de gato y un niño altanero. Que bonita forma de ser recibidos.
Ya habian zarpado de Arabasta y esquivando a la Marina cuando aquellos cuatro individuos se hicieron presentes. Zoro gruñó en respuesta tratando de atacarlos, no obstante fue detenido por el capitán. Este les explico como la azabache, Robin, le ayudó cuando fue envenenado, así disipando sus sospechas contra la morena.
Quienes no tenian justificacion alguna eran el perro, el gato y el niño. Esos ni como ayudarles, estaban a poco de ser rebanados por Zoro, sin embargo Sakura lo paro al ver aquellas singulares marcas en las mejillas del castaño. Fue así como el niño, despues del susto, se presentó ante los Mugiwaras con su nombre completo y el de sus amiguitos…
—¿Tu hermana?..
—Mi hermana, Hana Inuzuka..
El viento de mar acarició sus cabelleras…
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Chan chan chaaaaan!!!
Kiba aparece...
Todo va tomando rumbo.
Bueno, ya sabemos:
* Cómo Sakura paso su estadía en "aquel" lugar.
* Cómo murió Hana.
* Porque experimentaban con ellas.
* Hasta el momento Sakura no quería aceptar que mato a Hana. Ella libero a Hana. Y en cierta forma lo hizo. Ella aceleró el fallecimiento de Hana con su consentimiento para evitarle el dolor de unirse con sus hermanos. Para mí la eutanasia está bien, siempre y cuando se tenga consentimiento y la persona este desahuciada.
Lo que leímos:
* Ya apareció Kiba. Pero el era un bebé cuando Hana desapareció, ¿Porque la busca?.
* Robin ya pareció.
* Un gatito también.
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