Ahora soy un pirata

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Hace dos años en una Isla...

Una niña de trece años caminaba tranquilamente pasando y mirando de vez en cuando los puestos de fruta que habían en ese pequeño pueblo. Caminó con mucha cautela acuclillada por debajo de un puestesillo de sandías, su objetivo estaba a la orilla del mesón y la tomo con delicadeza así finalmente deslizando la fruta hacia abajo. El vendedor estaba semidormido así que no se dio cuenta que aquella fruta fue robada, Sakura río satisfecha de su robo y se propuso a alejarse pero al levantarse y darse la vuelta choco contra algo y callo al suelo junto a la sandía, la cual por el impacto en el suelo terminó destrozada...

—Mocosa, no creo que eso que estás haciendo sea bueno... –Sakura miró a aquel peliblanco con una cara de "¿Que?". El hombre la sujeto de atrás de su camiseta roja y la elevó hasta su propia cara, inhaló de sus dos puro y soltó todo ese humo en la cara de la chica– ...ve con ese comerciante y pídele disculpas...

Sakura simplemente infló sus mejillas de forma tierna y miró la sandía que se encontraba en el suelo, o simplemente miró lo que quedaba...

—No voy a pedir disculpas por tomar algo que llenaría mi estómago!! –grito molesta moviéndose a todas partes pues quería ser liberada. El hombre nuevamente exhaló humo en la cara de la chiquilla a lo cual ella tosió y lo miro con mala leche– ¡¡Deje de exhalar humo en mi cara!!

—Es la última vez que lo diré, ve y pide disculpas niña... –el hombre la reto con la mirada más Sakura no se quedó atrás y lo miro de igual forma, ninguno iba a seder, era una verdadera guerra de miradas donde solo uno ganaría y por supuesto Sakura no lo sería–

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Sakura refunfuñaba mientras barría el suelo enfrente de aquel puesto de sandías. Miró al hombre de los dos puros e infantilmente le saco la lengua luego siguió barriendo hasta que pudo haber saldado su cuenta por la sandía. Su estómago gruñía y no sabía con qué calmarlo, esa sandía habría sido su comida de la semana pero por culpas de ese canoso no podría comer en un buen tiempo...

—Hey mocosa!! –le llamo el canoso, Sakura volteó hacia el molesta– ...aún tienes hambre?? –la sonrisa de Sakura se ensanchó–

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No paraba de comer ya que todo estaba buenísimo!!. El hombre de los puros la miraba impresionado, como era posible que esa pequeña pelirrosa podía comer tanto?? Ahora se lamentaba, ya no tendría suficiente dinero para la semana...

—Oe viejo no vas a comer?? –pregunto con algunos huesitos de pollo en su boca–

—Come tu, parece que no has comido desde hace una semana...

—Esa sandía habría sido mi comida desde hace dos semanas... –la chica no le tomo mucha importancia pero las cejas del hombre estaban bien arribas–

—Como te llamas, he mocosa rosa?? –Sakura, después de beber de golpe toda una jarra con limonada suspiro satisfecha y miró al hombre con una sonrisa mostrando todos sus dientes–

—Mi nombre es Sakura, y el tuyo??

—Smoker...

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Una gran tormenta adorno a aquella ciudad que vio la ejecución del antiguo rey pirata.

De pronto un gran relámpago dio contra la plataforma de ejecuciones donde aquel ¿payaso? de nariz roja iba a cortar la cabeza del sombrero de paja, vaya eso le recordó a su tío. Smoker soltó a Sakura de su humo y la puso en un lugar donde ninguno de esos piratas la atacara. Con toda esa confusión la pelirrosa salió corriendo hacia donde sus nakamas habían escapado, más a mitad del camino se perdió y tubo que correr aún más para encontrar el camino correcto. Ya algunos metros cercas de ella se podía ver a su capitán y al cocinero...

—Hey Luffy!!! Sanji!!! –grito atrayendo su atención, ellos voltearon dejando ver qué aún más delante de ellos se encontraba aquel canzador blanco–

Sakura dio media vuelta despistando que les había gritado y prefirió meterse en otros problemas...

—Sakura!!! –grito alegre el capitán, Sakura siguió caminando tratando de no ser vista lo cual fue realmente inútil ya que los tres de ahí ya sabían quién era–

—Qu-Que sucede Luffy-san?? –pregunto nerviosa ya dando la cara. El cazador blanco miró a la chica con mala leche–

—Ve con Sanji!!! Todos esperan en el barco! –dijo semi-serio pues estaba claro que iba a pelear con Smoker–

—Hey! Mocosa rosa... –dijo lúgubre Smoker. Sakura comenzó a sudar realmente nerviosa. En cuanto al cocinero y el capitán, bueno ellos no entendían nada, aunque uno estaba molesto– ...me puedes explicar todo esto...

Todo pasó demasiado rápido. Sakura corrió hasta sus nakamas y tomo a Sanji del brazo, corrió pasando de largo al cazador blanco, volteó hacia atrás y mientras sonreían con todos sus dientes grito muy fuerte...

—Perdon viejo Smoker!!! Ahora soy un pirata!!!

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Neko se despide 👋