Capítulo 10
-No esperaba menos de ti.-Dijo Doflamingo.-Tan eficiente mi niña.
(Tn) se encontraba de pie frente a Doffy quien la alababa por su victoriosa llegada, había cumplido su cometido y le había entregado a Law.
-Creí que éramos amigos.-Escuchó al ojigris hablando bajo sus pies, pues lo había atado y de brazos y piernas y ella posaba con un pie sobre su espalda como si hubiera ido de cazeria y Law fuera un venado al que atrapó.
-Yo no vine a hacer amigos, yo vine a ganar.-Dijo ella bajo sus grandes gafas negras. Metió la mano en su chaqueta y saco un habano, se lo llevo a la boca y Doflamingo se lo encendió.
-Gracias guapo.-Dijo con algo de rubor en sus mejillas.
Doflamingo se hizo hacia atras volviendo a acomodarse en su trono, a ambos costados de este se encontraban los demas miembros de la familia Donquixote mirando a (Tn) orgullosos, algunos, como Buffalo, con lagrimas en los ojos.
El rubio se relamío los labios y hablo:
-Lo prometido es deuda.-A (Tn) se le iluminaron los ojos, estuvo esperando ese momento por largos meses.-El trono de corazones te pertenece.
Un reflector iluminó un trono que se ubicaba en el medio de la sala sobre una plataforma.
-¡Mierda!, ¡Es hermoso!.-Exclamo la chica.
El trono tenia un respaldar alto, era enteramente rojo y de cuero, del lado del respaldar opuesto habia una gran cantidad de puas y en uno de los posabrazos tenia un cenicero.
-Pero.-la detuvo antes de que corriera a sentarse.-la unica condicion que tengo para que lo puedas ocupar.-Se levanto de su lugar con expresión seria y se acercó a (Tn) en dos zancadas, se puso en cuclillas para estar a la misma altura. Rozó con la yema de sus dedos la mejilla de la joven y le acomodo unos mechones de cabello tras su oreja para colocarle una rosa, vaya a saber de donde carajo la había sacado.-Mi condición para ser la reina de corazones es que te cases conmigo, (Tn).
Ahhh, la chica sintió que se le paraba el corazón.
-¿S-s-su esposa?.-logró susurrar, estaba perpleja. Doflamingo asintio.
-Por favor, se mia, sólo mia.-la tomo de las manos.-Rey y reina, juntos hasta que la muerte nos separé.
-¡Oh, Doffy!.-Dijo en un suspiro volteando la mirada, se habia ruborizado antes tales palabras.-¡Por su puesto que me caso contigo!.
Todos a su alrededor excepto Law dieron una grito de alegria.
-¡La boda sera hoy!.-Exclamó Doflamingo tomando a (Tn) en brazos y cargandola como si estuvieran recién casado, cosa prácticamente cierta.
-¡Te amo mucho!.-Dijo ella rodeando su cuello con sus brazos, unas pequeñas lagrimas de felicidad se le asomaban por los ojos.-¡No sabes cuanto espere este momento!.
-¡Oh pequeña (Tn), siempre te he amado!.-Se acercó a su rostro para darle un beso pero se detuvo. Soltó una carcajada, ella lo miro confusa.-¡Casi se me olvida!.-la dejo en el suelo y le tendió un hacha.
-¿Y esto?.-Pregunto, ¿Para que diablos le daba un hacha?.
-Hazme el honor de matar a Law.
Esas palabras cayeron sobre ella como agua fría. Volteo a ver a Law y este ocultaba su rostro bajo su gorro.
-Te lo dije (Tn)-ya, es un monstruo.-Lo oyó decir en un tono tan bajo que sólo ella pudo oírlo.
-Adelante niña, hasta que el trabajo no este hecho no podremos festejar nuestra boda.
-N-no lo quiero matar.-Dijo ella aún con la hacha en su mano.-Él no es malo.
-(Tn), ¿Acaso importa si es bueno o no?.-Hablo en un tono mas serio el rubio.-Me estoy aburriendo aquí, quiero ver un espectaculo, arrancale el corazón.
-No.-Dijo ella tirando el hacha al suelo.-Yo no soy una asesina.-El estómago le dolía, sentia como toda la felicidad de hace un rato era vacía.
-Bien.-Camino hasta ella y la empujó hacia un lado para tomar el hacha.-Entonces lo haré yo, y tendre que matarte a ti también.-Empuño el arma y corrió hacia Law apuntandole a la cabeza.
-¡No!.-Gritó, y el rostro pálido de Law fue todo lo que pudo ver antes de despertar.
Tenia la respiración agitada, los labios le temblaban levemente. Miro a su alrededor, aún estaba en el barco, se pregunto cuanto tiempo había estado dormida, por la ventana podia ver el amanecer, un hermoso amanecer.
Se puso de pie y noto que ahora tenia puesto una camiseta vieja, si no se equivocaba la habia visto en la habitación de Bown, debía ser de él.
Una sonrisa torcida se formó en el rostro, se imagino a Law viendola en ropa interior con cara de idiota y se enojo.
-Law.-Soltó al aire, y corrio hacia su habitacion a buscarlo.
No sabia cuanto habia dormido y era desconocido para ella saber si el joven se habia marchado. Corrio torpemente debido a su debilidad hasta la habitacion y se detuvo en el marco de la puerta al verlo dormido, este se movio sobre la cama, los pasos fuertes de (tn) sobre la madera vieja lo estaban despertando. La chica utilizo su habilidad para no generar ningun ruido y suspiro aliviada, por un segundo creyo que el habia escapado.
"Sera mejor que le vuelva a colocar el collar, por si acaso" pensó "¿Donde diablos lo habrá dejado?". La verdad era que el paradero del collar era desconocido para ella, no sabia siquiera si aún continuaba dentro del barco. Comenzó a buscar en los alrededores de la habitación, no había mucho por revisar, era un espacio pequeño y casi vacio.
Se estaba a punto de ir del lugar para continuar con su búsqueda en otro sitio cuando vio, junto a la almohada de Law, un den den mushi. Sintio felicidad y terror al mismo tiempo, por un lado por fin, despues de tanto tiempo, iba a poder hablar con Doffy y por otro, seguramente la tripulación de Law estaba de camino para cortarle la cabeza. Tomo el aparato y salió corriendo antes de que el doctor se despertase. Llego a su habitación y cerro la puerta, Creo una burbuja. Para aislar el sonido y marco a Doffy.
-Hola.-Se oyó la voz seca y gruesa del rubio, a (Tn) se le derrito el corazón imaginandoselo.
-Doflamingo, señor. Soy (Tn).-Dijo algo nerviosa hacia mucho que no le hablaba. Escucho la risa del rubio y se llevo una mano a la mejilla haciendo una expresión de puro encanto.
-Mi pequeña (Tn).-Dijo dulcemente.-Hermosa, hermosa mujercita, ¿Donde diablos estas?.
-Estoy temporalmente en una isla.-comenzó diciendo.-Disculpe que me reporte tan tarde, mi salud no es la mejor y estoy realmente mal, he pasado los últimos días recuperandome...
-Luego me cuentas de eso.-La interrumpio.-¿Tienes a Law?.-Aguardo la respuesta, pero ella no le respondía, seguia hablando sin parar.-¿(Tn)?.
El rubio trataba de llamar su atención del otro lado de la linea pero esta seguia hablando de lo enferma que se había puesto y lo débil que estaba entre alguna y otra insinuación de que lo extrañaba.
-¡(Tn)!.-Gritó desquiciado, la chica paró en seco, sintió miedo de la forma en la que le estaba hablando.-¿Por que crees que me interesa saber de tu enfermedad?, ¡me importa un bledo lo que hayas estado haciendo!, ¡sólo contestsme de una puta vez!.-(Tn) se quedó helada, era la primera vez que Doflamingo le hablaba así, un nudo se le formó en la garganta y recordó su sueño.
-Doffy...
-¿¡Lo tienes o no!?.-Le volvió a gritar.
Ella estaba perpleja, dolida, le dolían aquellas palabras, el amor de su vida no se interesaba en lo mas mínimo por su bienestar.
-Lo tengo justo en frente de mi.-Mintió.-Me comunicare con usted dentro de unos días cuando ya esté cerca de Dressrosa para informarle sobre mi llegada, esta noche lo capturare y zarpare rumbo a casa.
-Bien, espero tu llamada entonces.-Dijo y noto algo de tranquilidad en sus palabras.-No me falles, o lo lamentaras pequeña y linda (Tn).
Ella iba a despedirse con un sincero adios pero la llamada se corto, ni la decencia de despedirse tuvo el señor Donquixote, cosa que a (Tn) le rompió el corazón.
Se sentia completamente descartable. A Doffy no le importaba si la chica moría con tal de tener a Law. ¿Acaso el no pensaba en ella cómo ella lo hacía con él todos los días?, ¿No se preocupaba por ella?, ¿Por saber si había estado comiendo bien?, ¿Por sus heridas?, ¿Por su salud?. Se sintió una idiota por creer que un hombre tan maduro e importante como él se fijaria en alguien como ella, una mocosa prácticamente. Las lágrimas que se le venían acumulando en sus ojos vieron la oportunidad de escaparse cuando ella parpadeo, realmente le dolía el comportamiento del rubio. No tenía a nadie, no tenía ni amigos ni familia, sólo tenia a Doflamingo, la unica persona que creia que se preocupaba por ella, la unica persona que le había demostrado el mínimo de aprecio que necesitaba para poder seguir en pie. La había utilizado, todo este tiempo la había utilizado como peón para que cumpliera sus caprichos. No había ni una sola pizca de interés real en ella, simplemente le era de utilidad.
Agradeció estar encerrada en su burbuja, de otro modo Law habría despertado al escuchar su ruidoso llanto.
Tenía el estómago repleto de nervios causados por el incesante llanto, se sorprendió de que no le doliera la zona del balazo que había recibido dos noches antes de conocer a Law.
Se levanto la blusa y noto que ahora la costura que había sobre su herida era mucho más prolija y limpia, no como esa que le había hecho el viejo de la cantina.
Su cerebro y su corazón comenzaron una batalla que parecia no tener fin. Una batalla entre el rubio y el ojigris.
Las lagrimas no dejaban de caer por los ojos de (Tn), quien aún no comprendía nada de lo que le estaba pasando, era como si ese concepto que tenía ella de realidad nunca hubiera existido.
-¿Por que no me cuida como Law lo hace?.-Se pregunto a si misma.-¿Law por que haces esto?
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