¡Hola a todas y a todos!

Bueno, este no será el primer fanfic que hago en mí vida, pero sí el primero basado en el universo de Dragón Ball. Más concretamente en Dragón Ball Súper. Así que les doy la más cordial bienvenida.

Hace algunos meses tenía la idea de hacer un fanfic acerca de esta serie. Un fanfic el cual iba a tener de protagonista a Pan. Y cuya pareja principal iba a ser TrunksxPan. Sin embargo, con el estreno del nuevo arco de Trunks del futuro y la incorporación de Mai del futuro, quedé completamente fascinado con esta nueva pareja. Me encanta la interacción que hay entre ambos, tanto en el futuro como en el presente. Así que luego de haber visto el capítulo 51 de Dragón Ball Súper finalmente me decidí hacer este mini fanfic dónde Trunks y Mai son la pareja protagonista.

Como ya lo mencioné antes, al momento en el que me encuentro subiendo esto, el último capítulo estrenado ha sido el 51, un capítulo bastante curioso dónde podemos ver al pequeño Trunks siendo consumido por los celos de su contraparte futura, debido a que al parecer Mai ha caído rendida ante sus pies. De modo que la historia de este fic comienza precisamente al término del capítulo 51, sin llegar tomar en cuenta el resto de los capítulos aún por estrenarse. Es una pequeña historia dividida en cuatro capítulos y que estaré publicando uno por semana.

Espero que les guste y sí les nace del corazón, pueden dejarme un comentario o review diciéndome qué tal les pareció. Sin más preámbulos, este es el primer capítulo. Una disculpa anticipada si llegan a encontrarse con algún error de ortografía. El autocorrector de Word me llega a traicionar a veces.

Dragón Ball Es una obra licenciada y animada por Toei Animation Inc. Todo lo escrito y expresado dentro de este Fanfic tiene como propósito principal el enriquecer al Fandom de la misma. Todos los personajes utilizados dentro de esta historia son una creación y propiedad original de la talentosísima y brillante mente e ingenio del mangaka japonés: Akira Toriyama. Nada será utilizado con fines lucrativos o comerciales. ¡Disfrútenlo!

Dragon Ball Súper Fanfic

"¡Nadie Toca a mi Mai! Trunks se Pone Celoso"

Capítulo 1

—¡Uff! Nunca imaginé que limpiar la máquina del tiempo nos llevaría tanto tiempo... ¡Vaya que estaba sucia! Bueno... No por nada llevaba ya tantos años en ese mismo estado. —Dijo el pequeño Trunks, secándose el sudor de su frente con el antebrazo, mirando con satisfacción el resultado de su arduo trabajo—. Ya terminé de limpiar y de pulir la cabina. ¡Quedó reluciente! ¿Cómo va todo por allá, muchachos? ¿Ya terminaron de limpiar su parte?

—¿Estás bromeando? —Sin tratar de hacer menos evidente su inconformidad, ni tampoco su enojo; el gran emperador Pilaf fue el primero en responder a las preguntas formuladas por el joven y amo de la casa—. Remover esta estúpida y gruesa capa de musgo no es tarea fácil. Hemos trabajado por casi cinco horas sin descansar y lo único que les interesa es tener lista esta máquina del tiempo para que tu "yo" del futuro pueda regresar a su época. Ya nadie nos respeta. —Tomó su pequeña gorra y la arrojó al suelo, mostrándose indignado y a punto de comenzar a llorar.

—¿Qué? ¿En verdad ya han pasado cinco horas? ¡Vaya! El tiempo sí que se pasa volando. ¡Un momento...! ¿Todas esas horas y aún no han podido terminar? —Alzó una ceja y se cruzó de brazos—. Yo lo hubiera hecho en menos de la mitad del tiempo—. Es más. Yo todavía no me siento cansado.

—Te recuerdo que los seres ordinarios como nosotros, no poseemos la misma energía, ni mucho menos la fuerza exagerada que tienen las personas tan extrañas como ustedes. Tan solo mira las deplorables condiciones de Shu. —Señaló a su propio compañero postrado sobre el suelo, con la lengua de fuera y con dificultades para respirar debido al cansancio extremo—. Nosotros no podemos volar, ni lanzar energía de nuestras manos, ni mucho menos teñir nuestro cabello de color rubio cuando lanzamos gritos al aire.

—Lo que sucede es que no están acostumbrados al trabajo duro. Deberían aprender de Mai. Ella nunca se queja. ¿No es así, Mai? —Trunks preguntó. Sin embargo, al no escuchar una respuesta proveniente de la niña, descendió de la cabina de la máquina de un solo brinco para ver lo que sucedía. Descubriendo así, que Mai aún se hallaba quitando y limpiando el musgo por debajo de uno de los tanques primarios de combustible, pero conservado una mágica expresión que podía decirlo todo. Sus mejillas se encontraban completamente coloradas, mientras que su mirada reflejaba incontables brillos invisibles que solo evidenciaban más su condición.

—Ehh... ¿Mai? —Pilaf se acercó, pasando su mano frente a los ojos de su compañera y ver sí así podía sacarla de su trance—. ¡Oye, Mai! ¿No me escuchaste? ¿Trunks te está hablando?

—Trunks... —Murmuró, sin dejar de sonreír hacia el infinito—. Él es tan... Lindo...

Tras escuchar esas breves, pero significativas palabras, el joven de cabello morado pudo sentir a la perfección como un profundo dolor se incrustaba poco a poco en su pecho, hasta llegar al punto de atravesar de lado a lado su corazón. Acto seguido, agachó la mirada y apretó los puños.

—¿Pero qué estás diciendo, Mai? Deja de fantasear y pon atención a lo que te están diciendo. Recuerda que mientras vivamos todos en la casa del amo Trunks tenemos que hacer todo lo que nos digan o nos echaran de aquí. No quiero volver a dormir bajo un puente.

—Pero sí usted fue el que se estaba quejando desde un principio, señor. —Dijo el canino ninja, con las pocas energías que le quedaban.

—¡Quisieras callarte, pedazo de inútil! —Lo reprendió, hasta que la voz de Trunks cambió el rumbo de la plática.

—No... Está bien... No pasa nada... Solo... Terminen de limpiar su parte.

A continuación, el pequeño Trunks se guardó las manos en los bolsillos de su chaqueta amarilla y dio la media vuelta sin decir palabra alguna. De esta forma, cabizbajo, se encaminó hacia una de las puertas corredizas en el fondo para tras ella luego de atravesarla, dejando muy confundidos a Pilaf y a Shu.

—¿Qué le habrá sucedido? —Se preguntó el marciano, antes de regresar a sus respectivas labores.

-o-

Luego de haber cruzado la puerta del baño más cercano, Trunks abrió la llave del agua para llenar la pileta y así proceder a lavarse la cara. En ese momento, el niño levantó la cabeza y se miró en el espejo, analizando cada una de sus facciones.

—¡Maldición! ¿Por qué me está sucediendo esto? ¿Acaso tengo algo de malo? ¿Será mi cara? ¿Es mi cabello? No puede ser que esté sintiendo celos de mí mismo... ¿Por qué...? No lo entiendo... Se supone que él y yo somos la misma persona. ¿O no? Debería estar feliz porqué finalmente Mai y yo sentimos lo mismo el uno por el otro... Pero... Aunque ella se ha enamorado de mí, no es precisamente de ese "yo" del que se debió de haber enamorado. Todo esto es tan confuso... Las cosas iban tan bien hasta que a mí "yo" del futuro se le ocurrió aparecer para que le solucionemos sus problemas. Ahora tenemos la amenaza de un nuevo enemigo encima y ese sujeto se está llevando toda la atención de Mai. Desde lo que sucedió hace unas horas en el jardín, me he convertido en alguien prácticamente inexistente para ella. ¿Pero qué puedo hacer? ¿Cómo puedo competir contra mí mismo? Esto es absurdo...

—¡Trunks! —Alguien llamó a la puerta—. ¿Trunks, estás ahí?

—Ehh... —Se sobresaltó por la impresión—. Sí mamá... Aquí estoy... ¿Qué sucede?

—Nada en especial. —Dijo Bulma—. Es solo que escuché una serie de maldiciones y por un momento creí que tu padre había tapado el baño otra vez. ¿Todo bien ahí adentro?

—Sí... Descuida, mamá. Todo está bien...

—Bueno, ya que estás ahí adentro... ¿Podrías hacerme el favor de darte un baño?

—¿Un baño? ¿Para qué?

—Bueno... Ya que tu "yo" del futuro está aquí, pensé en organizarle una pequeña fiesta de bienvenida. Con todo lo que el pobre ha sufrido últimamente a causa de ese horrible Black, creo que es bueno que al menos tenga un momento de diversión antes de partir hacia la batalla ya que haya terminado de reparar esa otra máquina del tiempo.

Tras escuchar la propuesta de su madre, Trunks giró los ojos y su expresión se deformó hasta alcanzar una mueca de desacuerdo.

—¿Y por qué tenemos que hacerle una fiesta?

—¿Cómo que por qué? —Frunció el ceño—. Te recuerdo que ese pobre muchacho es una versión futura de ti mismo. Por lo tanto, él sigue siendo mi hijo. Tal y como ya lo escuchaste, él ha pasado por grandes dificultades para apenas escapar con vida de ese futuro tan espantoso en el que vive, en el que te recuerdo que yo fui asesinada. Lo menos que podemos hacer por él, es asegurarnos de que se sienta lo más cómodo posible durante su estancia. Además, creo que sería una muy mala idea cancelar la celebración, luego de que el señor Bills insistiera en quedarse más tiempo para probar cada uno de los platillos que se servirán. No quieres que la tierra sea destruida por un tonto descuido... ¿Verdad?

—No, mamá... —Suspiró—. De acuerdo... Me bañaré...

—Sabía que podía contar contigo, hijo. Te alegrará saber que ya invité a todos nuestros amigos, así que podrás jugar con Goten todo lo que quieras. Asimismo, tenemos que aprovechar que tanto tu padre, cómo Goku están en la tierra. Quién sabe cuando tengamos la oportunidad de volver estar todos juntos de nuevo, ahora que tienen la misión de partir hacia el futuro a confrontar ese tal Black. Y por cierto, Trunks... —Sonrió de forma suspicaz—. Ya que Mai y sus dos amigos se quedarán para la fiesta... Tal vez quieras ponerte algo más refinado para la ocasión. Tal vez podrías causarle una muy buena impresión a esa niña. ¿No crees?

Trunks no comprendió a la perfección a qué se estaba refiriendo su madre, la cual se retiró una vez dichas esas palabras para dejarlo solo y continuar con los preparativos de la improvisada fiesta.

—Sin duda... Esta será una larga noche... —Dijo, luego de llenar la tina de agua y meterse dentro de ella aún con la ropa puesta, manteniendo fresco el recuerdo de Mai en su cabeza.

-o-

La tarde había caído finalmente sobre la capital del oeste, bañando con sus tonos rojizos la sede principal de la Corporación Cápsula y la mayor parte de los edificios en la distancia. El reloj marcaba las seis y media y los primeros invitados comenzaron a llegar al lugar de encuentro. Siendo estos la vasta familia conformada principalmente por Gohan, Videl y Pan, anexando al campeón del mundo Mr. Satán y a Majin Buu. A los pocos minutos, arribaron al lugar Número 18, cargando entre sus brazos a la encantadora Marron. Casi de forma inmediata, Ox Satán y Milk hicieron acto de presencia, trayendo consigo al pequeño Goten, a quién no se le había permitido el dejar a un lado los libros durante el trayecto a la casa de Bulma. Por último pero no menos importante, el equipo conformado por El Maestro Roshi, Ten Shin han, Chaos, Yamcha y Puar también llegó al sitio. Una vez reunidos todos, Bulma los invitó a pasar al extenso balcón trasero de la Corporación, parte adjunta dónde se encontraban largas mesas llenas de toda clase de comida, siendo tempranamente asaltadas sin piedad por el siempre hambriento dios de la destrucción y su leal asistente Wiss.

—¡Vaya! Pero mira qué guapo estás. Deberías vestirte así más seguido. —Exclamó Bulma al mirar al pequeño Trunks, el cual vestía un elegante atuendo compuesto por un short azul, una camisa blanca y un saco de botones haciendo juego con el color de su vestimenta inferior—. No cabe duda de que eres mi hijo. Me da gusto que siguieras mi recomendación.

—Ehh... Sí... —Fingió una sonrisa, sintiéndose incómodo—. No veo porqué no tendría que hacerlo...

—Bien, ahora quiero que vengas conmigo. Voy a mostrarte algo y quiero que me des tu opinión.

Sin hacer más preguntas al respecto, Trunks levantó las cejas y siguió a su madre al interior de la casa, hasta llegar a una de las tantas habitaciones y aguardar en el exterior.

—¿Por qué nos detuvimos frente a una de las habitaciones que sirven como vestidores? —Cuestionó el muchacho, llevándose las manos hacia atrás de la cabeza.

—Muy pronto lo sabrás. —Bulma le guiñó un ojo y accedió a tocar la puerta—. ¿Cómo van las cosas ahí dentro?

—Todo en orden, señora. Saldremos enseguida. —Respondió una voz infantil y cómica.

Pasados unos segundos, la puerta de dicha habitación se abrió para dejar salir a una de las mucamas, siendo seguida de nada más y nada menos que del emperador Pilaf y a Shu, cada uno portando un formal smoking recien adquirido en alguna tienda de ultra lujo en la ciudad.

—¿Qué tal? ¿Verdad que se ven adorables? —Preguntó Bulma, señalándolos.

—Nunca había usado una prenda tan fina en toda mi vida. —Comentó el marciano, derramando lágrimas de felicidad al igual que su compañero.

—Me siento tan afortunado de seguir vivo. —Agregó el can antropomórfico.

—Mamá... No me digas que me trajiste hasta aquí solo para venir a ver sus nuevos trajes... —Torció la boca.

—¡Claro que no! Te traje porqué quería que dieras tu opinión acerca de cómo se ve ella.

A continuación, de la misma habitación, Mai hizo su consecuente aparición. Portando un hermoso vestido de gala de color verde y sin mangas. Ocasionando que Trunks sintiera el momento exacto en el que su corazón comenzó a acelerarse de manera incontrolable.

—Mai... Te ves... Te ves... —Tragó saliva, sin dejar de contemplar tanta belleza—. Radiante...

—¿En verdad? —Las mejillas de la niña se tornaron rojas—. Gracias, Trunks. Qué lindo de tu parte...

—Sabía que te gustaría. —Dijo Bulma, dándole un leve codazo a su hijo—. Ahora vayan a reunirse con todos y diviértanse. Y procuren no hacer enfadar a Bills o terminará destruyendo la tierra.

Una vez puestas las condiciones, la fiesta transcurrió sin mayores problemas, pero con una gran cantidad de sorpresas y novedades para todos los invitados. Destacando por sobre todo la presentación y el reencuentro del joven Trunks proveniente del futuro con sus ahora viejos amigos. Durante la velada, el viajero del tiempo tuvo la oportunidad de poner al tanto a los demás acerca de la complicada situación que se estaba viviendo en el futuro debido a la aparición de esa extraña entidad conocida como Black. A su vez, Trunks fue testigo de varias cosas que en su momento le hubieran parecido una completa locura. Destacando el matrimonio fructífero entre Krillin y la que alguna vez fue su más acérrima enemiga durante tantos años en el futuro, así como el hecho de volver a ver a la versión adulta de su antiguo y fallecido maestro Gohan, el cual ahora se encontraba alejado de los combates para hacerse cargo de su propia y creciente familia. Esto sin dudas, fue algo que lo llenó de entusiasmo. Ver como su maestro y mejor amigo había podido encontrar finalmente su lugar, luego de haber pasado tanto tiempo combatiendo ferozmente contra los androides 17 y 18 antes de encontrar su fatídico final a manos de estos; fue algo que lo motivó a reparar todo el daño causado por Black en su propia época y tal vez así comenzar a pensar en hacer su propia familia.

Por otra parte, el grupo de niños se encontraba sentado en una mesa apartada del resto. Mientras que Pilaf y su banda devoraban la vasta cantidad de comida servida sobre sus respectivos platos, Goten se entretenía con una consola de videojuegos portátil que Trunks le había prestado con anterioridad. Al mismo tiempo, el propio Trunks se mostraba cabizbajo y desanimado, dado a que no había tenido la oportunidad de pasar tiempo a solas con Mai, así como el tener que soportar el hecho de que su amor platónico no podía quitarle la mirada a su "yo" del futuro a pesar de estar comiendo. Sin embargo, Trunks no sabría lo que sería un verdadero ataque de celos, sino hasta que la música de ambiente comenzó a volverse más suave para incitar a las parejas a bailar. Gohan y Videl fueron los primeros en entrar a la pista, seguidos por Krillin y Número 18. A los pocos segundos se les unieron Milk y Goku, quién no tenía la menor idea de que era lo que había que hacer. Bulma por su lado, empujó a Vegeta hacia el escenario. Obligándolo a bailar aún en contra de su voluntad.

Pareciera que nadie más se pensaba a unir a las parejas felices, sino hasta que Mai se levantó repentinamente de su asiento para dirigirse hacia la mesa dónde el Trunks del futuro se encontraba jubiloso mirando el espectáculo. En ese momento, el pequeño Trunks siguió con la vista a Mai, percatándose de como ella le pedía insistentemente algo que no dejaba de incomodar de cierto modo al muchacho futurista. No obstante, después de unos cuantos segundos de una incómoda charla entre ambos, Trunks se puso de pie y llevó a la pequeña Mai al centro de la pista para bailar con ella, como sí ella se tratara de su hermana menor. En contraparte el pequeño Trunks sintió como su corazón se marchitaba poco a poco, al grado de dejar escapar un par de lágrimas provocadas por la ira y la frustración más agobiantes jamás sentidos.

—¡Oye, Trunks! —Goten le llamó la atención, despegando la mirada de la pantalla de la consola—. ¿Estás llorando?

—No... ¿Cómo crees? ¿Yo? ¿Llorando? —Trató de negarlo a toda costa, limpiando su llanto rápidamente con la manga de su saco—. Estás alucinando, Goten. Solo se me metió algo en el ojo. Eso es todo. En fin... Necesito ir al baño... No tardo...

—De acuerdo. —Respondió Goten de forma inocente, regresando a su partida.

Continuará...

Pobre chibi Trunks, su situación es realmente grave. Que tú "yo" del futuro te esté bajando a la novia debe sentirse todavía peor que caer en la friendzone. Aunque admito que me gusta hacerle bullying.

En fin, eso ha sido todo por ahora. Sí son fans de la pareja espero de corazón que les haya gustado. El próximo capítulo lo publicaré el día 20 de este mismo mes. Sin más que decir voy de regreso a mi sarcófago. Pasen una buena semana en dónde quiera que se encuentren. ¡Chao!