Relato 7 ≠ Concierto

Axl seguía insistiendo con las entradas en la mano, jalaba el brazo de X mientras le decía repetitivamente a Zero para ir. Zero estaba intentando tomar café tranquilamente mientras leía el periódico pero tenía a su pequeño justo al costado, el ojiesmeralda no hacía más que ver hasta que el rubio cedió ante la presión.

- Muy bien, Axl. Tú ganas ¿A donde vamos?.

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Mala idea, muy mala idea. Ahora estaban entre la multitud de personas que esperaban afuera para pasar al estadio -lugar del concierto- mientras compraban una que otra cosa, o sencillamente se encontraban con los amigos... Y eso era lo que Axl estaba deseando hacer. Se había perdido y él mismo había jurado no haberse apartado de su papá. Seguía intentando pasar por entre la gente y aún seguía sin ver a el rubio, comenzó a gritar su nombre y no se detuvo hasta que sintió que lo tomaban del brazo y lo guiaban entre la multitud hacía un costado, donde no había tanta gente.

- ¿Papá?.- dudó el pelirrojo en cuanto pudo dejar de ver tantas personas en su vista, no era Zero pero aún así se alegró de ver a X, lo ayudó y ya no se sentía asustado por el estar solo.

- Ya está, Axl. Ahora falta tu papá, - le alargó su mano y el niño la tomó casi inmediatamente.- No me sueltes, o te volverás a perder.

- Ok, tío. - Asintió el pequeño apretando su manita.

Volvieron a entrar en el multo de gente buscando al hunter carmesí. Ni siquiera se podían oír a sí mismos gritar. Después de infinitos segundos, llegaron a un pequeño banco y el ojiesmeralda se colocó junto a el chico de la cicatriz que se sentó un poco cansado, soltando un suspiro leve.

- Parece que habrá que tomar medidas drásticas.- exclamó X alzando la mano del niño a la altura de su cara.- No retengas nada.

- ¿Qué no retenga... ? ¡AAH!.- no pudó terminar la frase cuando el mayor clavó los dientes firmemente, en la mano de Axl, haciéndolo soltar un grito considerablemente fuerte. Y cómo por arte de magia, ya se oía la voz del rubio acercándose con mucha rabia.

- ¡Suelta a mi hijo, maldita sabandija! ¡Voy a arrancarte los ojos y... !

- Ya lo encontramos.- celebró X soltando a Axl y acercándose a su mejor amigo.
















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