Capítulo 5.
Piso 10.
Todo el grupo de Finn se encontraba corriendo a toda prisa, para llegar a un doctor, habían encontrado unos aventureros malheridos.
-Tiona, Tione vayan a la sede y avisen le a Riveria y Aiz, nosotros iremos donde Airmid- Dijo Finn -Si no nos encuentran allá es porque apenas estamos saliendo del calabozo.
-Si, capitán- Dijeron ambas Amazonas.
Y así empezaron a correr aún más rápido para llegar a su sede.
Mansión Crepúsculo.
Una peli dorada se encontraba acostada, triste sin hacer nada, solo miraba su costado de la cama.
Riveria estaba con ella acariciando su cabello, para intentar levantar ánimos, Aiz quería que el que la acariciara fuera Bell.
Todo ese silencio se vio interrumpido por una o 2 Amazonas que llegaron a toda prisa, que gritaban por Riveria.
Riveria abrió la puerta y hay estaban ambas jadeando, pero se re compusieron rápido para decir las órdenes del capitán.
-¿Qué les pasa a ustedes?, ¿no estaban en la expedición?- Pregunto Riveria.
-Dice el capitán Finn, que tienen que ir ambas con nosotros, es una emergencia- Dijo Tiona.
-¿Ocurrio algo malo?- Pregunto Riveria.
-No hay tiempo para preguntar Riveria, tenemos que ir- Dijo Tione.
-Esta bien, Aiz tenemos que ir- Dijo Riveria.
Aiz no quería pero tuvo que aceptar de mala gana, y así salieron las 4 corriendo al calabozo.
Orario.
Finn y el grupo habían salido finalmente del calabozo, mientras que ya salían Finn y su grupo, Aiz y las demás ya estaban ahí esperando afuera del calabozo.
La sorpresa fue grande, Aiz comenzó a llorar aún más, tanto así que se tapó la boca con sus 2 manos y cayó de rodillas al suelo.
No podía creer lo que veía.
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Garet traía alzado en sus brazos a un peli blanco, mientras que Bete traía a una elfa, ambos estaban muy malheridos, terriblemente heridos.
Aiz rápidamente se levantó y corrió hacia el peli blanco, Garet solo pudo ver como se lo quitaban de sus brazos, Aiz solo estaba abrazandolo.
Los aventureros que estaban cerca, pudieron ver al peli blanco y rápidamente de esparcio el rumor que estaba vivo.
-Aiz, tenemos que llevarlo con Airmid- Dijo Finn.
Así la peli dorada captó la orden y activando su magia "Tempestad" empezó a correr con toda la velocidad al hospital de Airmid.
Una vez llegaron todos, fueron atendidos rápidamente, llevados a una sala, donde la peli dorada quería estar con el conejo pero no podía, ya que los doctores debían hacer su trabajo.
La peli dorada no tuvo más opcion que quedarse en la sala de espera, el más afectado de todos fue Bell, Ryuu no estaba tan afectada, fue la más rápido en terminar.
Horas pasaban y finalmente avisaron que estaba estable, y que claramente sobreviviría, pero no podría usar su brazo por un tiempo.
Y mandaron a avisar a la familia del chico, la rubia había pedido si podía quedarse en la habitación con el peli blanco.
Pero le fue negado, solo se lo permitirían hasta mañana, minutos pasaron y llego finalmente la familia del peli blanco.
Quien su diosa desesperadamente buscaba ver a su hijo, pero también le era negado, el chico tenía que descansar.
El grupo de Finn había pagado las pociones más caras, para que ambos se recuperaran rápidamente.
La que le darían de alta más rápido sería a Ryuu, mientras que el otro tendría que esperar otro día más.
Día siguiente.
Y así llegó el doctor a ver a ambos, el chico seguía dormido y la elfa ya estaba despierta y mucho mejor, le dijeron que ya podía irse y así se retiró el doctor.
Ryuu y Bell sobrevivieron sin infierno, y se volvieron cercanos, Ryuu había empezado a tener sentimientos por el, cuando estaban atrapados.
-Gracias, Cranel- Dijo Ryuu.
Como Bell aún no despertaba ella solo se acercó y le dio un beso en la mejilla izquierda, para después irse.
Unas horas más tarde al fin habían dejado entrar a cualquiera a la habitación del peli blanco, estaba acostado, muy mal.
Hestia se le había tirado encima, para abrazarlo, pero tuvo que ser separado por Airmid, ya que el tenía que descansar y también de los huesos.
Una vez salieron todos, se quedaron en la sala de espera, en silencio, solo miradas habían.
-¿Qué creen que le haya pasado?- Pregunto Tiona.
-No lo sé, pero cuando lo encontramos estaba realmente mal- Dijo Finn.
-¿Donde lo encontraron?- Pregunto Welf.
-En la entrada del piso 37- Dijo Finn.
-Pero, ¿cómo llegó hay?- Pregunto Riveria.
-Solo el lo sabrá- Dijo Finn.
Y así hubo otro silencio, hasta que la peli dorada que miraba a la diosa decidió hablar con ella.
-diosa Hestia- Dijo Aiz.
-¿Qué quieres, Wallen?- Pregunto Hestia.
-Me preguntaba, si cuando le dieran de alta a Bell, podía llevarlo a mi sede y cuidarlo- Dijo Aiz.
Una sorpresa para la familia Hestia, Aiz mostraba interés, pero no era sorpresa para la familia Loki.
-¿Acaso estas loc- Hestia fue interrumpida por Welf que le tapo la boca con su mano.
-Claro que sí, Princesa- Dijo Welf.
Aiz volteo a mirar a todos los amigos de Bell y todos aceptaban, eso alegro a Aiz.
Mientras que Welf y los demás se llevaron a Hestia a hablar en un lugar donde no los escucharan.
-¿Qué crees que haces, Welf?- Pregunto Hestia molesta.
-Deberia dejar que ellos 2 pasen tiempo juntos, Bell ama a Aiz y Aiz a sufrido por el- Dijo Welf serio.
-¿Y tu como vas a saber eso Welf?- Pregunto Hestia con los brazos cruzados.
-Porque la señorita Riveria me lo dijo- Dijo Welf -Ella nos contó todo-
Hestia pudo ver que Welf y los demás no mentían, y decidió aceptar de mala gana.
-Bien- Dijo Hestia - Pero quiero despedirme de mi Bell-Kun-
-De acuerdo- Dijo Welf con los brazos cruzados.
Hasta aquí el capítulo.
Espero que les haya gustado.
Apoyenme dándole a la estrellita.
"La princesa que recupero a su príncipe".
Fácil que la vida te separa, pero difícil que te vuelva a unir.
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