El día del parto por fin llego, fue durante la noche que Wei Ying sintió dolor en el vientre y también que algo escurría por sus piernas. Wen Xu se alerto por los quejidos de su esposa y mando a llamar inmediatamente a sus primos médicos. La chica sabía que esto dolería, pero no tanto.

-Si quieres más hijos, tú los vas a parir, yo no-aviso mientras sentía las contracciones.

-Cariño tranquila, ya vienen Wen Qing y Wen Ning-

-¿Y eso que?-grito adolorida-siento que me parten en dos-Apretó la mano de su marido con mucha fuerza.

Justo en ese momento llegaron los médicos para atender el parto. Fue un largo rato dónde Wei Ying estuvo en labor de parto.

Wen Ruohan estaba a las afueras del cuarto esperando noticias. Y Wen Xu cada vez que veía los paños ensangrentados se preocupaba aún más por su esposa e hijo. Finalmente se escuchó el llanto de un bebé y eso fue música para los oídos de todos. Wen Ning abrió la puerta del cuarto para dejar pasar a su tío.

-P-pase p-para ver al cachorro-dijo con tartamudeo.

Wen Ruohan entro sin dudar y ahí estaba su nieto.

-Es perfecto querida nuera-

-Se parece a su padre-dijo con una sonrisa cansada-pero no ha abierto los ojos-

El pequeño estaba envuelto en una gran manta roja con bordados dorados de pequeños soles. Wen Xu cargaba a su hijo con una gran sonrisa.

-Mi pequeño cachorro-lo mecia con cuidado-pronto tendrá hambre-

-Daselo a su madre-dijo Wen Qing-deben formar el lazo madre e hijo, a pesar de todo lo que vivió salió sano y sin ningún problema, es todo un luchador-

Con ayuda la Omega se pudo sentar y después recibir a su cachorro en brazos. El pequeño justo en ese instante abrió sus pequeños ojos, eran grises como los de su madre.

-Tiene tus ojos cariño-dijo Wen Xu con una sonrisa-nuestro pequeño A-Yuan, nos tenías tan impacientes-

El pequeño solo soltó un pequeño bostezo y después observo a sus padres.

-Es muy hermoso nuestro rabanito-le dedico una sonrisa.

-Es un bello cachorro-dijo su abuelo-Mi nieto, el heredero de la secta Wen, su celebración de presentación será memorable-dijo Wen Ruohan emocionado.

-Lo es-el pequeño volvió a cerrar los ojos-esta cansado-

-Es normal, venir al mundo le tomo tiempo-beso la frente de su cachorro-Así será padre-

El líder Wen junto a sus sobrinos salieron para dejar sola a la nueva familia. En ese momento cierto cachorro decidió que ya era hora de comer algo. Se pegó al pecho de su madre y comenzó a succionar.

-Vaya que sigues siendo un glotón, serás un cachorro grande y regordete en poco tiempo-

-Es tan lindo, huele muy rico a miel-

-Los cachorros tienen un aroma tan adorable-dijo ella con una sonrisa.

-¿Que crees que será cuando grande, alfa u Omega?

-No importa que sea, solo sé que siempre lo voy a cuidar, aunque él no quiera-

-Eso es importante-le sonríe-siempre cuidaremos del pequeño A-Yuan-El cachorro estiró su bracito en dirección de su padre.

Tomo la pequeña manita del cachorro.

-Aquí estoy mi pequeño cachorro, no tienes porque preocuparte-Era una bella escena familiar.

Después de que el pequeño comiera y de que me sacarán los gases se quedó profundamente dormido.

-Ven pásamelo, lo acostaré en su cuna-

-No quiero que se aleje de mí, que duerma con nosotros-

-Esta bien cariño-le dedicó una sonrisa-es lo mejor de todas formas-Wei Ying sonrió y beso la frente de su bebé.

-Ayudame a acomodarlo en medio de nosotros, tiene que estar rodeado de nuestras feromonas-

-Yo te ayudo amor-Lo toma entre sus brazos y se acuesta junto a su esposa acomodando al cachorro en medio de ellos.

El bebé estaba profundamente dormido con una pequeña sonrisa en su rostro. Wei sonreía al ver a su pequeño dormido.

-Es un pequeño muy risueño-Perfumaba a su cachorro junto a su amada.

La chica no tardó en caer dormida, después de todo dar a luz era algo realmente agotador.

Su marido también cayó dormido, ese día había sido agotador. Obviamente se hizo el anuncio del nacimiento del heredero de la secta Wen por todo lo alto. Todas las sectas asistieron, hasta una persona que Wei Ying nunca más espero ver en su vida.

La chica no quería hacer enfurecer a su alfa y por eso ignoró a Lan Wangji y mejor fue con otros invitados para no verlo. Pero Lan Zhan no se rendiría tan fácil, con ayuda de su tío consiguió poder hablar un momento en privado con la chica.

-Wei Ying...-le susurro, su rostro se veía demacrado y que decir de su cuerpo.

La chica no dijo nada y volteo la mirada.

-Hay reglas que de deben respetar y un Omega emparejado no debe hablar con un alfa a solas-

-¿Por qué nunca respondiste mis cartas?-le dijo con dolor-¿tan fácil te entregaste a ese hombre?-sonaba dolido-Wei Ying, yo espere por tí siempre...y lo seguiré haciendo-

-Nunca me llegó alguna carta-eso era verdad-y lo que haga o no con mi vida no es de tu interés, ya rindete y no causes más problemas, estoy casada y con un hijo-

-Sabes que si llegaron...pero tú nunca respondiste...mi tío me contó todo-

-Ya no importa, vete y no me causes más problemas, déjame en paz-Se alejo de él.

-Wei Ying sabes que no quieres eso...Y sé que él aún no te ha reclamado-se acercó y la abrazo por detrás-aun podemos estar juntos, yo te cuidare a tí y al cachorro-La chica quitó su brazo y se alejo como si su toque la quemara.

-No, no es así, deja de ilusionarte y vete de aquí, tengo que volver a la celebración de mi hijo, el heredero de la secta Wen-Lan Wangji la dió vuelta y la beso profundamente.

La chica solo lo empujó y después abofeteo.

-No, es no-le gruño-ya déjame en paz, tengo una vida y una familia feliz, no me busques jamás-

El alfa simplemente la miro con una cara destrozada y se fue volando de ahí, ya no lo soportaba. Algunos sirvientes habían visto lo que sucedió.
La chica vio a los sirvientes y con un tono frío y amenazador dijo:

-Una palabra de esto y dense por muertos-Luego se alejo de ahí con el corazón destrozado y un gran dolor en el alma. Era lo mejor para todos.

-Si Madame Wen-le dieron una reverencia, eran simples betas.

-Bien, si alguien pregunta, digan una excusa y ya-

-Esta bien Madame Wen-

La chica volvió con su hijo y fingió que nada había ocurrido. Apenas y había alcanzado algo de estabilidad y no la perdería por su estupidez.

Su esposo la miraba y olía a otras feromonas pero lo dejo pasar. Quizás era el ambiente.

La chica se sacudió la túnica un poco y después observo como su hijo parecía abrumado con tantas personas a su alrededor.

-Me temo mi rabanito que tendrás que acostumbrarte a tanta gente, es normal-El pequeño cachorro se escondía en el pecho de su madre resguardandose del gentío.

-En cuánto sea posible nos vamos, es tu celebración y tu abuelo hizo que fuera grande por ser su amado nieto-Lo mecio con cariño y beso su frente-veamos que te trajeron de regalo-

Vio todos los regalos. Eran muy especiales. Pero el que más le apretó el corazón era una pareja de conejos uno blanco y el otro negro. Decidió ignorarlos y apartarlos de los demás regalos, mientras menos viera de él, mucho mejor. Le mostró a su hijo los juguetes que habían mandado para él. Pero pequeño cachorro insistía en que le diera a los conejos. Tras mucho batallar por fin se los dió, aunque fue a regaña dientes obviamente.

El pequeño A-Yuan estaba feliz con los conejos, se sentía muy feliz. La chica esperaba que su marido no supiera nada del incidente y que todo pudiera seguir como estaba. Wen Xu simplemente lo ignoro, decidió que más tarde averiguaría lo que pasaba. En cuanto pudo retirarse, Wei Ying se quitó la túnica y se dió un baño, tenía que sacarse el olor de Lan Wangji de encima y evitar sospechas.
Luego de salir con una túnica apenas cerrada fue a alimentar a su cachorro.

-Eres un rabanito muy glotón, necesitas sol para crecer sano y fuerte-El pequeño cachorro se pego al pecho de su madre y comenzó a comer.

Su marido justo venía entrando con una sonrisa.

-Es muy comelón-

-Puede que eso lo haya sacado de mí, como mucho a decir verdad-observo a su hijo-no le gusta estar rodeado de gente, lo pone mal-

-Es muy sensible a los olores ajenos-acaricio el cabello de su pequeño-por cierto, hay rumores que dicen que hoy estuviste con Lan Wangji-

-El me pudo acorralar mientras saludaba a los miembros de las sectas del norte, pero le dije que dejara de molestarme, que estoy feliz con mi vida y con mi familia-dijo con la mayor calma posible-le dije que ya se detuviera-Tenía que calmar al alfa y evitar que su cachorro de alterará-Mi pequeño A-Yuan es un glotón, un becerro en miniatura-acaricio su estomaguito.

-Así que eso fue-dijo algo molesto-tendre que recordarle de quién eres y adónde perteneces-miraba fijamente su cuello.

-Calmate cariño, recuerda lo que me prometiste-dijo ella asustada-asustas al cachorro-El cachorro de hecho parecía que lloraría en cualquier momento.

Se relajo suspirando acariciando su cien.

-Prometeme que nunca te irás con él, Y que me responderas si me dejaras marcarte-

-Lo prometo...-dijo con cierto nerviosismo.

-Esta bien-beso su frente y acaricio a su cachorro-tú y A-Yuan son todo para mí-Ella solo asintio más relajada y el bebé dejo de comer para después observar a su padre.

-Mi pequeño A-Yuan-beso su frente. El cachorro observo intento agarrar el cabello de su padre.

-Si te agarra el cabello no te lo soltará tan fácilmente-advirtio ella.

-Tiene mucha fuerza el pequeño rabanito-

-Es fuerte como su padre-

-Será un gran cultivador de grande-

-Lo sé-El pequeño A-Yuan bostezo.

-Ya vamos a dormir mi rabanito-Arrullo la Omega y decidió tararear una canción para hacerlo dormir.-duerme bien mi rabanito, que sueñes bonito-

El alfa los perfumo a ambos con una sonrisa.

-Descansen-susurro a ambos.

Así fue como ese día termino tranquilo por el momento.

Los meses pasaron y el pequeño A-Yuan crecía muy rápido. Ya pronto podría caminar. Así que era muy común ver al pequeño gateando por cualquier lado y a sus padres persiguiendolo para que no se hiciera daño o entrará a un cuarto prohibido.
No hubo señales de Lan Wangji y eso alivio a la chica a la vez que la hizo sentir terriblemente mal.

-Vamos con cuidado mi amor-dijo Wei Ying mientras ayudaba a su hijo a ponerse de pie-tú puedes ni rabanito-

El pequeño se puso de pie y camino hasta dónde su padre quien lo recibió en sus brazos.

-Mi cachorro-jugo con sus cabellos-Tan grande y ya está caminando-El pequeño empezó a reír y a balbucear.

-Nuestro A-Yuan pronto podrá hablar-

-Vamos rabanito, ven con a-niang-

-A-nian-balbuceo el pequeño y camino en dirección de la Omega.

La chica soltó un chillido de felicidad.

-Tu primera palabra, bien hecho A-Yuan-felicito con muchos besos y abrazos.

-Dada-Movía sus bracitos.

-Tenemos un rabanito muy listo, dijo dos palabras en un día-Observo a su esposo con una gran sonrisa.

-Así es, mi pequeño cachorro es muy listo-

-Vamos con tu abuelo, que te oiga hablar, va a estar muy emocionado-

-Vamos, de seguro estará muy feliz-Se dirigieron al estudio de Wen Ruohan pero un discípulo los alerto antes.

-Será mejor que no vayan con el líder, está...Bueno, ocupado en asuntos maritales-

-Bueno-dijo ella-hasta la hora de la cena mejor-

-Si, dejemos a mi padre con su esposa a solas- dijo con una pequeña risa. A-Yuan no entendia nada.

-¿Que tal si vamos al mercado?-pregunto ella-estoy segura que A-Yuan querrá ver lo que hay ahí-El bebé aplaudió emocionado ante la idea.

-Le gusta la idea, vamos entonces-

-Vamos a comprar cosas para este lindo rabanito-dijo ella emocionada.

-Hare que preparen el carruaje-

-Me gustaría ir caminando, A-Yuan debe conocer bien el lugar que algún día dirigirá-

-Esta bien-

-Bueno A-Yuan, vamos a estirar las piernas y hacer todo como una familia-El bebé asintio varias veces emocionado.

Fueron de forma tranquila y en familia hasta el mercado. Los ojos del pequeño cachorro brillaban.

-Ya sabía yo que era mejor venir caminando que en un aburrido carruaje-

-Lo decía para que no te cansadas cargando a A-Yuan-

-Yo también debo hacer ejercicio, tiene tiempo que no salgo-

-Estas perfecta-

-Este rabanito es travieso y si sigue así no podré ir tras él-

-Tranquila para eso estoy yo igual-

-Pues me aburro y no puedo ir a los jardines que siempre atrapó a mis suegros haciendo una camada-

-Lamento que así sea cariño, hablaré seriamente con ellos-

-No creo que hagan caso, Wen Qing ya se quejo porque traumaron a su hermano-Dijo ella restando importancia al asunto-creo que tu padre quiere muchos hijos-

-Parece que si-sonrio-Muchos hijos-

El pequeño cachorro se emocionaba con todos los jueguetes que veía a su alrededor

-¿Qué quieres comprar mi rabanito?-pregunto interesada.

Le señalaba unas mariposas.

-Agu agu-

-Ya entendimos, mariposas para A-Yuan-dijo la omega.

Compro varias para su hijo.

-¿Que más quieres mi rabanito?-

-Quiere muchos juguetes al parecer-

El pequeño cachorro movía sus manitas señalando muchos juguetes. También el peluche de un burro.

-Cuando era una cachorra mis padres y yo viajabamos de pueblo en pueblo y teníamos un burro, mi a-niang lo llamaba Burro, decía que no había otro nombre para él-Le contó esa anécdota de su infancia.

-¡Agu!-Movía más sus bracitos queriendo el burro.

-Entiendo, vamos a comprartelo A-Yuan-dijo su padre.

-Es todo un mimado este cachorro-dijo la Omega sonriendo-pero así debe ser, aunque no en exceso-El pequeño bebé estaba muy feliz.

-¿Quieres un dulce?-pregunto su madre-esta temporada hacen unos muy ricos según dijo tu padre y quiero comprobarlo-

-¡Agu agu!-

-Creo que es un sí cariño, vamos esposo mío, tú conoces este lugar, nosotros no-

-Vamos entonces cariño-los guió por el mercado. Llegaron hasta el puesto de dulces.

El pequeño al ver los dulces se emocionó de inmediato y queria agarrarlos todos.

-Solo unos pocos o te harán daño al estómago y no queremos eso y no son sanos tampoco-El cachorro hizo un puchero-Ni te enojes, es por tu bien-dijo ella-que tu padre te diga si no es cierto-Vio a su esposo en busca de apoyo.

-Tú madre tiene razón pequeño, los dulces en exceso hacen mal-

-Te dije mi rabanito-dijo ella-Solo compraremos unos t serán tu postre si eres un niño bueno, ¿entiendes?-El niño asintió y acepto.

-Entonces llevaremos para comer más tarde-

-Entonces el cachorro escoge los que más quiera-

Acercó a su hijo para que esté pudiera elegir los que más le llamarán la atención. El cachorro tomo los más coloridos.

-Espero y estén deliciosos mi rabanito-él movía sus bracitos feliz.

-A-niang quiere de esos caramelos de almendras y miel queue tanto comía cuando tú estabas en mi interior, ¿Y tú cuáles quieres cariño?-Observo a su alfa mientras esperaba su respuesta.

-Yo quiero los de regaliz y esos bollos con crema-El comerciante empaco todos los dulces solicitados y después se los entregó al alfa.

-Muchas gracias-le dió una reverencia y pago por los dulces.

-Vamos a comer, por aquí cerca seguro ya tienen hambre-El pequeño empezó a soltar algunos quejidos por hambre.

-Tienes razón cariño, este rabanito tiene que comer y mucho para ser grande y fuerte-Fueron hasta una casa de té y comida.

-Pidan lo que deseen-

-Este rabanito tendrá una sopa dulce con unas verduras al vapor-dijo su esposa-yo quiero una sopa de pescado con loto-

-Yo quiero unos fideos con mucho picante y verduras-El dueño anoto todo y fue por la comida.

-Te dije que era mejor venir caminando, así nuestro rabanito no nos despertara en la noche-

-Es cierto, pero de regreso podemos ir en carruaje con todo lo que compraremos-

-Bueno eso sí, no creo que nuestro rabanito quiera hacer más después de hoy-

El niño ahora sí se había cansado y entonces no se despertaría en la noche exigiendo que lo entretuvieran.

-Será lo mejor para nosotros, podremos dormir mejor-Le dió un suave beso a su amada. El niño empezó a exigir ser mimado también.

-Obviamente te daremos un beso-dijo su madre para después besarlo en la mejilla. Su padre beso su frente. El bebé ahora sí estaba feliz.

-Siempre te vamos a mimar A-Yuan-

-Así lo haremos siempre querido hijo-

Luego la comida llegó y la familia se dispuso a comer.

-Come tu sopa rabanito-su madre le ayudo a usar la cuchara-despacio-

La familia estaba en un momento tan feliz y agradable, cualquiera querría que esto siguiera así por siempre. Pero no toda la felicidad dura para siempre. En cada momento puede existir un poco de oscuridad. Más de la forma en que ellos se emparejaron.