Sus cerebro está cansado,  rememorando las cosas del día de hoy . Con un bolso negro de donde estudia y dos bolsas de compra.

Murmurara mientras hace un movimiento repetitivo con un puerro,  caminando con pesadez.

Sus pasos son aún que seguros , suaves y poco fiables según algunas lenguas .

Pero sabe el destino de donde de ir ahora.

Mira a lo lejos,  madres y niños con un cascos amarillos , mochilas lindas y brillantes.

Suspira,  preparado para lo que venga.

En el fondo , tiene miedo , le sudaran las palmas y no podrá hablar .

Aprieta las bolsas y camina nervioso , aun sin acostumbrarse a esto , no se siente mal por tener un niño .

Menos haber perdido tiempo de estudio , no le molestaba repetir ni estar a punto de cumplir los 19 años.

Solo cree que las palabras de la gente están cada día más horribles .

Suspiró agotado,  preparado totalmente ahora si que si  para atrapar al niño que estaba sobre un árbol.

Sacudiendo las ramas y tirando las flores recién crecidas al suelo.

- Tora ! Baja de allí , te vas a hacer daño -

Ese niño del árbol,  era su hijo . Un intrépido y muy energético niño.

Era capaz de responder a varias preguntas de forma correcta o aveces decidía evitarte .

- si papá! Estoy jugando con el pajarito-

La gente se quejaba de que era muy flexible y liberal con él, pero de hecho Tora estaba siendo solo un niño algo travieso.

Si , había tenido algunas riñas con otros niños de su edad.

Pero solo tenia 4 años ( casi 5 añitos  ) los niños peleaban hasta por que color era más lindo.

Además él le contó que algunos niños también habían hablado mal de su padre , no le pareció justo , se quiso justificar y refutar lo dicho pero usaron algún apodo ofensivo para su padre.

Y saben , los golpeó.

- Ten cuidado con el pajarito , la última vez  se cayó y sus padres te lastimaron ... anda hijo , tengo que preparar la cena para mañana-

Lo último sonó cansado , logrando ver como su pequeño iba bajando con lentitud y un puchero.

Calmo la expresión a un rostro comprensivo y fue a ver que pasaba con él,  algo malo pasó o seguramente solo iba a hacer un berrinche.

Podía sentir las voces ajenas hablando de " como podía tener un hijo tan salvaje ".

Era irritante.

- siempre... te la pasas haciendo esas cosas...-

- pe-pero Tora -

- quiero pasar más tiempo contigo -

- tenemos... los sábados y domingos , las cenas y los desayunos -

- papá... -

Oh no,  no llores . Se estiro para limpiarle la cara que se lleno con perlas saladas.

Se sentía triste , era cierto que se veían poco.

Pero hacia lo mejor que podía para pasar tiempo con él.

Ya le había explicado a su hijo que tenia otras responsabilidades además de él y estaba tan cansado.

- Hijo , yo... sabes que no puedo faltar al instituto y... y además , falta poco para que sea sábado,  prometo... pasar el día solo contigo -

- lo... lo prometes ?-

- si... lo prometo-

Beso su frente y le dio un abrazo tras dejar las bolsas en el suelo , era su bebé aún.

Y era lo único que no era algo material que amara.

Tenía un gran valor.

- Tora , por que no estas usando tus lentes ?-

- un grupo de niñas me dijo que se veían raros -

- ah...que tal si mientras vamos a casa me cuentas más-

Tomando las bolsas en su mano izquierda le agarro con suavidad el brazo,  esto estaba bien.

Era la misma rutina de siempre.

El pequeño era muy ocurrente,  curioso y alegre , un verdadero sol desde que Kaworu.

Pensar en él era como pensar en un amor a primera vista en la estación,  que sepas que estás conectado a esa persona pero su tren avanza y el tuyo no.

Entonces el crecería junto a su hijo y Kaworu se quedaría impune .

Igual de bello y joven como hace 4 años .

Pensar en eso , le daban ganas de llorar , así que se aferraba más a la idea de tener a Tora.

Era lo último que le quedaba de Nagisa además de sus profundas puñaladas, marcas profundas y aun sangrantes de promesas vacías.

Solo prefirió suspirar,  en días frescos como estos solo admiraba cuando saludable estaba su hijo.

Ni pensó que podría hacerlo prácticamente solo.

Misato o Asuka solo estaban allí flotando , aveces cuidaban de Tora cuando el no podía,  pero no significaba nada para ellas.

Eso habían llegado a decirle en privado.

Y era extraño , lo estaban viendo crecer y ser feliz o incluso triste.

Viendo todas sus facetas y lo catalogaron como " poco significativo ".

...

Llego a casa , ahora sabiendo la corta vida de las cigarras veraniegas.

La vida , era algo que a Tora le interesaba .

Ya que uno podía sentirse vivo pero estar metafóricamente hablando " en otro mundo " .

Por lo que el dibujaria en las paredes , la mesa de la cocina e incluso el suelo con crayones o plumones.

Shinji solo observaria para luego preguntarle si ya termino , las tareas de Tora irían primero.

Pintaría con los colores correctos pero fuera de las líneas y luego en vez de practicar los ejercicios haría dibujos de serpientes .

Otro suspiró se escaparía,  se frustraba el pero no su hijo.

Lo que le tenia vuelto loco .

Es que sabía que su pequeño era inteligente y capaz de hacer las cosas , pero por voluntad propia o mera diversión decidía no entenderlo.

Por lo que seguramente no llegaría a ningún lado.

Así que lo dejaría con los lápices y su cuaderno , listo para preparar la comida de mañana y esta noche.

Luego mientras comía la cena terminaría la tarea .

Aun que antes de comer iba a limpiar el polvo y el suelo , lavar los platos , tender las camas .

Lavar ropa , sacarla y colgarla.

La pesadez se acomodaba en sus hombros , casi ni tiempo tenía para sus propias cosas.

Tora ya sabía cambiarse solo , así que llegaba y se ponía algo cómodo.

En cambio el terminaba usando la ropa de instituto.

Sintiéndose estancado.

Gruñiria,  pero sabía que su hijo intentaría copiarle y ahora temía que se escuchaba más fuerte como llamaban a su hijo un salvaje.

Sería mejor si se callaran.

- papá,  papá! Cuando termine el arroz ... puedes darme un tazón?-

- claro -

Una respuesta automática mientras buscaba específicamente el tazón de su hijo , blanco con flores azules .

Un lindo detalle.

al menos ya tenía listo eso , solo le faltaba un poco al arroz de la arrocera.

Y de paso cortaría los vegetales que llevaría a cocinar al vapor.

Picaba con calma, pensando mejor en cosas agradables.

- papá  , papá  -

- dime -

- me haces jugo de naranja ?-

- Tora , hoy no compré naranjas , revisa si en la refri si quedan algunas -

Le pidió amablemente , sintiendo un piquete y quejándose.

Ah , se había cortado.

- ah- ahmm... Tora , papá necesita el botiquín  -

Dijo nervioso , la sangre se quedó en el cuchillo , en la tabla y goteaba a los vegetales picados.

- Tora , papá lo necesita urgente -

Pidió insistente.

No sabía por qué su cuerpo no reaccionaba más allá de hablar o mover los ojos.

Su mano se sintió asquerosa,  espesa en líquido temiendo por un momento que fuera lo que pensaba que era.

- Kaworu  -

Quería llevar la cara al suelo para rogar perdón , que volviera a su vida .

Que se pensaba ir con él , quería tomar el mismo vagón que el ángel para poder tomarle la mano de nuevo y sentir su sonrisa .

Se llenaba de tristeza , una profunda y dolorosa .

Que se aferraba a su carne y huesos , siendo casi como hermanos de la pena dolorosa .

Kaworu fue dulce , cálido y amable .

Pero la gente como Kaworu no es real ,cosa que le hace sentir mal a un punto que se siente enfermo.

Quiere subir a su vagón,  derritiéndose con lágrimas felices mientras el le repite cuanto lo ama.

Podría dejar a todos parados .

Y el no crecería,  se quedaría con Kaworu.

Él alguna vez fue mayor que el , irónicamente ahora el lo era.

Kaworu seguía fresco como suelo recién mojado .

Si siguiera vivo , tendría 19 años estaría casi por cumplir los 20 años quizá hubiera dejado crecer su cabello y hubiera deseado especializarse en algo relacionado a la vida .

Como medicina o agricultura .

Tal vez fotografía.

Incluyendo las artes de todo tipo , desde música a maquillaje .

Si el siguiera vivo.

Gustosamente le cocinaria y limpiaria,  esperaría paciente y tendría citas románticas.

Rosas y besos .

Pero no lo estaba , para desgracia del mundo.

El , Shinji Ikaria , lo mató.

Con las mismas manos con las que ahora cocinaba , las mismas que estudiaban y abrazaban a Tora .

Las que hoy limpiaron sus lágrimas.

Se instalo rencor escondido en su pecho,  era un asesino,  uno que vivía feliz mientras Kaworu desaparecía de la memoria colectiva.

Mientras el lo oculta quisqiillosamente en su corazón. Entre más profundo y fuerte deseaba .

Más doloroso y triste era,  se iba a esconder su amor y el recuerdo que le hería.

se afirmó y se resbaló igualmente,  sus pestañas pegajosas de retener las lágrimas.

El mantel en el suelo y su hijo con el botiquín,  estaba asustado , seguramente al captar el ataque de pánico.

Al por primera vez captar el sufrimiento de Shinji sin ser ocultado .

Solo fue sangre , un corte patético que fue fácil de curar.

Fue tan poca y el ya no podía ni respirar , solo logro sentir que Tora lo abrazaba , su peso fue reconfortante y lo abrazó como si todo dependiera de ello.

- ¿ por que... siempre estas triste?-

Nunca le puedes ocultar como te sientes al descendiente de un Ángel.

Pero escuchar su pregunta solo le hizo llorar.

- nunca...permitas que alguien...cumpla promesas donde dañas a otros -

Shinji llora.

Incluso después de ya no tener por qué , sigue llorando.

Lavo la ropa,  cocino la cena,  seco,  tendió , ordenó y dejó con aroma a flores.

Pero no dejo de llorar hasta que cayó dormido en la alfombra de la sala donde Tora se acerco para darle una almohada y poder dormir una siesta a su lado.