El último jugador con armadura roja se encontró acorralado tras presenciar cómo el dúo de negro y morado eliminó a sus compañeros sin dificultad. De inmediato, su mente los catalogó como jugadores Smurf.

Aunque en Alfheim la fuerza de un jugador dependía de su condición física real, le resultaba imposible aceptar que ambos se hubieran adaptado tan rápidamente al movimiento en un entorno virtual.

La única explicación posible que encontraba para la velocidad cegadora de Kirito y fuerza abrumadora de Ashborn era que provenían de otros juegos virtuales.

Ashborn: Y bien?

Kirito: Todavía tienes ganas de pelear?

Jugador 1: Paso, mi habilidad magica está por alcanzar los 900 puntos, por lo que no quiero experimentar una penalización por muerte

Kirito: Vaya, alguien sensato por una vez

Ashborn relajó su postura, permitiendo que un zumbido bajo vibrara en el aire como una señal silenciosa de respeto hacia su decisión. Enfundó su espada y se giró hacia la chica rubia.

Ashborn: Que hay de ti?

Chica Rubia: Estoy agotada, así que no. Pero, me aseguraré de ajustar cuentas con ellos luego

Jugador 1: Ni hablar, apesto para los uno contra uno

Las alas del último jugador de armadura roja en pie brotaron de su espalda y no tardó en elevarse por los cielos.

Kirito guardó su espada en su funda y al asegurarse que el jugador estaba fuera de vista, se giró para mirar a la chica tambien.

Ashborn: Así que, de que se trataba todo eso?

Kirito: Y que pasa con estas llamas?

Kirito señaló hacia el suelo, apuntando hacia un par de llamas rojizas flotando a unos cuantos centímetros por el aire.

Ashborn notó un detalle que pasó desapercibido para los demás presentes: la posición de las llamas era demasiado conveniente.

Desde ahí, gracias a que ella caminó unos cuantos pasos hacia él y Kirito, las llamas tenían una vista directa de lo que había bajo la falda de la chica rubia.

Chica Rubia: Sshh! Son [Luces Remanentes]. Todavía con conscientes de sus-

Pero no terminó la frase. Antes de que pudiera seguir explicando, los zarcillos de Ashborn surgieron en un destello y atraparon las llamas.

Ashborn: Demasiado conscientes

Sin más, Ashborn las lanzó con toda su fuerza hacia el horizonte. Las luces surcaron el aire, soltando gritos desesperados mientras se perdían en la distancia. Unos momentos después, se escuchó la voz del jugador de armadura roja desde lo lejos.

Jugador 1: Qué carajo!?

Kirito suspiró, pasando la mano por su cabello.

Kirito: ...

Ashborn desactivó sus zarcillos con total calma, pero en su rostro asomaba un ceño fruncido con molestia evidente.

Chica Rubia: Cómo...? Por qué...?

Ashborn se encogió de hombros, como si la respuesta fuera obvia.

Ashborn: Parecían estar disfrutando la vista

Los ojos de la chica se abrieron de golpe, y su rostro se tiñó de un sonrojo suave al darse cuenta demasiado tarde de lo que Ashborn había notado. Kirito, incómodo por el súbito silencio, tosió ligeramente.

Kirito: Ejem...en donde nos habíamos quedado?

Chica Rubia: C-cierto... Uh, que deberíamos hacer ahora? Les agradezco? Tengo que huir?

La vergüenza desapareció de chica al instante siguiente, ella empuñó su espada con fuerza y la apuntó hacia el dúo de negro y morado.

Chica Rubia: O tendré que enfrentarme a ustedes 2?

Ashborn: Ninguna

Kirito: En mi caso, estaba esperando la típica escena del "Caballero en armadura brillante salvando a la princesa"

Ashborn: Debería de llamarte Seiya?

Chica Rubia: Huh? De que estás hablando?

Kirito: Te salvé, no? Tendrías que estar en mis brazos con lágrimas de alivio

Chica Rubia: Eres retrasado o que!?

Kirito se rió entre dientes.

Kirito: Tranquila, solo es una broma

Ashborn: A mi no me lo parecía...

Yui: Por supuesto! Eso sería inaceptable papá!

Strea: Oh~? No sabía que Kirito era así de pervertido

Strea se rió entre dientes mientras aterrizaba al lado de Ashborn y al mismo tiempo, Yui salió del bolsillo de Kirito.

Chica Rubia: Huh!? Quiénes son ustedes? Y cómo qué papá!?

Kirito: Uh, verás...

Chica Rubia: Espera, esa es una "pixie de navegación"?

Kirito: C-claro...algo así...

Chica Rubia: Ya veo... Interesante, pero, qué hacen 2 Spriggans y un Gnomo por aquí?

Las palabras de Leafa confundieron al [Espadachín de la Oscuridad]. Si Strea fuera un gnomo, no debería ser un jugador mucho más pequeño?

Pero luego recordó con que parámetros los juegos y, básicamente la mayoría de los medios de entretenimiento, se hacían en su lado del mundo, estaban repletos de fan service.

( Cuando no tienes nada más que hacer con tu vida, el internet puede ser tu única forma de matar el tiempo y cuando navegas en lo profundo... No es necesario que entre en detalles sobre lo que puedes encontrar, está claro como el agua ) -Ashborn

Kirito: Nos...perdimos...

La Chica Rubia miró en dirección de Ashborn para confirmar que Kirito le estaba diciendo la verdad y cuando él asintió, ella se quedó en silencio durante unos segundos antes de empezar a reírse de la situación del dúo.

Chica Rubia: Este lugar no está ni siquiera cerca de ninguno de sus territorios, no están ambos hacia el este? Sus sentidos de la orientación son terriblemente malos

Ashborn: Gracias por el cumplido... -_-

Chica Rubia: Bueno como sea, tienen mi agradecimiento. Gracias por salvarme. Mi nombre es Leafa

Kirito: Soy Kirito. Y ella es Yui

Yui: Es un gusto conocerte, Leafa-san!

Ashborn: Ashborn

Strea: Hola! Soy Strea! Hermana mayor de Ashborn!

Leafa: Mucho gusto, pero, ahora que harán? Si gustan...hmm...les invitaré unas bebidas como agradecimiento. Qué tal?

Ashborn: Suena bien

Kirito: En realidad, estábamos buscando a alguien que podría ayudarnos respondiendo unas cuantas preguntas

Leafa: Cómo qué?

Kirito: Cosas sobre este mundo y sobre un árbol en particular

Leafa: Un árbol? Te refieres a Yggdrasil? Claro. Puede que no lo parezca, pero sé bastante sobre este juego. Hay una aldea neutral al norte de aquí, vayamos allí y charlemos

Ashborn: Pero, Swilvane no está más cerca?

Leafa: En verdad no saben nada, eh? Ese es territorio de los Sylph

Ashborn: Ajá...y?

Leafa: No puedes atacar a una raza dentro de su territorio, aunque ellos sí que pueden atacarte a ti

Ashborn: Qué clase de idiota programó una mecánica tan desbalanceada cómo esa? -_-

Kirito: Eh, no es como que vayan a atacarnos solo porque sí, no? Además, estaremos contigo Leafa

Leafa: Si insisten, no tengo problema, pero no puedo garantizar su seguridad...

Ashborn: No te preocupes por eso. Ya nos viste en acción

Leafa: Muy bien, vayamos entonces

Con un ligero movimiento, Leafa invocó sus alas, que se desplegaron de su espalda en un destello. Kirito la observó sorprendido como ella ascendía con naturalidad.

Kirito: Leafa, no necesitas un control de asistencia para volar?

Leafa: Para nada. Qué hay de ustedes?

Ashborn: Yo me estoy acostumbrando poco a poco, no sé qué hay de Kirito

Kirito: Lo mismo que tú

Strea: Yo puedo volar fácilmente sin uno

Leafa: Bueno, volar sin uno es un complicado, pero tengo un truco. Ambos dense la vuelta y no saquen el control

Kirito: O-ok

Ashborn y Kirito intercambiaron una mirada, pero obedecieron y se giraron. Leafa colocó una mano en la espalda de cada uno, su toque suave pero firme.

Leafa: Sienten el lugar donde estoy tocando?

Ashborn y Kirito: Si

Leafa: Imaginen que hay huesos y músculos virtuales saliendo de allí, luego intenten moverlos

Kirito: Huesos y músculos virtuales...

Ambos cerraron los ojos, respirando hondo mientras intentaban conectar con las alas. Lentamente, comenzaron a moverlas.

Leafa: Si, así! De esa forma. Ahora hagan lo mismo, pero con movimientos más fuertes

En ese momento, Strea aprovechó la oportunidad para empujar a Ashborn con un gesto travieso. Leafa hizo lo mismo con Kirito, y de repente ambos se elevaron por el aire de manera descontrolada.

Kirito: En serio!?

Las chicas miraron hacia el cielo, notando como Kirito volaba haciendo toneles claramente no intencionados y con Ashborn flotando boca arriba, como si fuera un pez muerto.

Como era de esperarse, las chicas se rieron a carcajadas de la situación del dúo de negro y morado.

...

Después de que Ashborn y Kirito finalmente lograran más o menos manejar el vuelo sin necesidad de un control, Leafa empezó a guiarlos junto a Strea y Yui hacia Swilvane.

No obstante, mientras se aproximaban a su destino, Leafa recordó un detalle importante: no les había enseñado cómo aterrizar al dúo de negro y morado.

Leafa: Kirito, Ashborn, saben cómo aterrizar?

Kirito: No...no puedo...

Ashborn: En realidad no. Simplemente desactivo mis alas

Leafa: Oh...entonces lo siento. Es demasiado tarde! Les deseo suerte!

Leafa y Strea comenzaron a descender suavemente. Ashborn desactivó sus alas a una distancia calculada del suelo y dejó que la gravedad hiciera el resto, cayendo en picada. Kirito, por otro lado, se quedó volando a una altura considerable, luchando por detenerse.

Kirito: T-tiene que ser una broma!

Incapaz de controlar su vuelo, Kirito chocó contra un edificio de la aldea y luego se estrelló ruidosamente contra el suelo.

El impacto levantó una nube de polvo, atrayendo la atención de los Sylph cercanos. Poco después, Ashborn, Leafa y Strea llegaron a su lado.

Kirito: Eso fue cruel...

Ashborn: Oh, vamos, estás bien, no?

Leafa: Lo siento. Te sanaré

Leafa juntó las manos y comenzó a recitar un encantamiento místico. En cuestión de segundos, los PS de Kirito comenzaron a recuperarse lentamente.

Ashborn: Así que esto es la magia?

Kirito: Wow

Leafa: No puedes usar magia de sanación de alto nivel a menos que seas un Undine, pero es un hechizo indispensable. Deberían aprenderlo

Kirito: Así que...hay bonificaciones específicas para cada raza?

Ashborn: No leíste la historia de los Spriggan? Somos buenos en la busca de tesoros y la magia de ilusión

Leafa: Pero ninguna de esas dos es útil en combate

Ashborn: No estoy de acuerdo. Unas buenas ilusiones pueden desorientar al enemigo y darte una ventaja decisiva

Leafa: Huh, no lo había visto así...

Mientras continuaban conversando, Strea se distrajo observando los alrededores, maravillada por la belleza de la aldea.

Strea: Wow, esta es la aldea Sylph? Es preciosa

Leafa: Verdad que sí?

Leafa sonrió con orgullo.

???: Leafa!

Leafa giró hacia la dirección de donde provenía la voz, y los demás siguieron su mirada. Un chico Sylph de cabello verde corría hacia ellos, con una sonrisa evidente en su rostro.

???: Te encuentras bien?

Leafa: Ah, Recon

Recon: Sabía que lo lograrías, Leafa

La mirada del ahora conocido como Recon se posó en los acompañantes de Leafa. Al notar sus razas, dió un salto hacia atrás y llevó la mano hacia la daga en su cinturón.

Recon: Qué hacen 2 Spriggan y un Gnomo aquí!?

Leafa: Tranquilo, ellos me salvaron. Este es Recon, un amigo mío

Kirito: Hola, soy Kirito

Ashborn: Ashborn

Strea: Strea! Es un placer conocerte, lindo~

Recon: Oh, un gusto conocerlos

Recon les sonrió, pero enseguida sacudió la cabeza y dió otro salto hacia atrás.

Recon: No, no, no! Esto no está bien! Estás segura de esto? Podrían ser espías o algo parecido!

Leafa: No te preocupes. Strea es agradable y estos 2 no son más que un par de cabeza hueca. Es imposible que sean espías

Ashborn: Era necesario el insulto? -_-

Recon: Sigurd y los demás te están guardando un asiento en el bar de siempre

Leafa: Ya veo. Pero hoy pasaré

Recon: Huh? No vendrás?

Leafa: Lo siento, pero les debo una bebida por haberme salvado. Nos vemos después

Leafa tomó a Ashborn y Kirito por el cuello de sus abrigos y comenzó a arrastrarlos hacia el bar. Strea les siguió mientras se despedía de Recon con una sonrisa.

Strea: Nos vemos!

Recon: Leafa...

...

Después de dejar a Recon atrás, llegaron al bar. Todos se sentaron alrededor de una mesa y, tras pedir comida, comenzaron a charlar.

Kirito: Ese tipo era tu novio?

Yui: Era tu amante?

Leafa: Huh? N-no! Solo hacemos equipo en una party

Strea: Oh~, así que es tu amor secreto

Leafa: No! Él no es nada mío!

Ashborn: Dejame presionar la x para dudar. Se nota a leguas que se llevan muy bien

Leafa: Lo conozco en la vida real. Vamos al mismo grado en la escuela, pero eso es todo

Leafa se tomó un momento para suspirar y desaparecer el sonrojo en sus mejillas antes de devolver su atención hacia los demás.

Leafa: Dejando eso de lado, gracias por haberme salvado

Ashborn: Esos tipos eran bastante agresivos. Son comunes las cacerías de jugadores así de organizadas?

Leafa: Bueno, la raza Salamander y los Sylph nunca se han llevado muy bien. Pero esas cacerías empezaron hace poco. Estoy segura de que buscan conquistar el pináculo de Yggdrasil

Kirito: Sobre eso, podrías contarnos todo lo que sepas de Yggdrasil?

Leafa: Claro, lo mencionaron antes. Por qué?

Kirito: Quiero llegar a la cima

Leafa: Uh? No es eso lo que busca cualquier jugador? Después de todo, conquistar Yggdrasil es la [Quest Legendaria de ALO]

Ashborn: [Quest Legendaria]?

Leafa pasó los siguientes diez minutos explicando la situación a Ashborn, Kirito, Strea y Yui. La raza que lograra conquistar la copa de Yggdrasil, recibiría la habilidad de volar sin restricciones y así alcanzar la cima del árbol sagrado.

Ashborn: Es imposible llegar a la cima actualmente?

Leafa: Creo que no, pero es bastante difícil. Incluso si toma años, estoy segura de que eventu-

Kirito: Para ese entonces será demasiado tarde!

Todos se giraron sorprendidos por el grito repentino de Kirito. Ashborn, Strea y Yui notaron la frustración que ardía en sus ojos.

Yui: Papá...

Kirito: Lo siento...

Ashborn colocó una mano firme sobre el hombro de Kirito y le dio un apretón tranquilizador.

Ashborn: Llegaremos hasta ella. Te lo prometo

Kirito: Tenemos que llegar allá arriba, pronto

Leafa: Por qué?

Kirito: Estoy buscando a alguien

Leafa: A qué te refieres con eso?

Kirito: Es complicado de explicar... Gracias, Leafa. Tu información nos será muy útil

El grupo de Ashborn estaba a punto de levantarse para marcharse cuando Leafa tomó la manga de Kirito.

Leafa: Esperen. Planean conquistar Yggdrasil?

Kirito: Sí. Necesito confirmar algo

Ashborn: Y nosotros vamos a ayudarlo

Leafa: Suena temerario... Está lejos, y habrá monstruos fuertes en el camino. Claro, ustedes son fuertes, pero... Bien, lo decidí: los acompañaré

Ashborn: Disculpa?

Kirito: Huh? No podemos pedirle tanto a alguien que acabamos de conocer

Leafa: Acaso saben siquiera cómo llegar a Yggdrasil?

Ashborn: Touché...

Kirito: ...

Leafa: Y cómo planean pasar por los guardias?

Ashborn: Encontraremos la manera. Y si no tenemos suerte...los atravesaremos por la fuerza

Leafa: Aun así, ya tomé mi decisión

Ashborn y Kirito se miraron, soltando un suspiro de resignación al mismo tiempo.

Kirito: Bien...

Leafa: Hmm... Pueden iniciar sesión mañana?

Ashborn: Siempre estoy disponible

Kirito: Eh? Sí

Strea: Pueden contar conmigo!

Leafa: Entonces nos vemos aquí a las 3 PM. Ahora debo irme. Pueden usar la habitación de arriba para desconectarse. Nos vemos mañana

Leafa estaba a punto de desconectarse, pero Kirito la detuvo.

Leafa: Qué?

Kirito: Gracias por lo que haces por nosotros

Leafa: No hay de qué

Leafa le dedicó una sonrisa antes de desconectarse finalmente.

...

Actualmente sobre el tejado de una de las posadas de Swilvane, Ashborn estaba sentado, con la mirada pérdida en la ciudad, acompañado únicamente por la serena luz de la luna.

Aunque en el mundo real ya era bastante tarde, Swilvane seguía vibrando de vida.

Jugadores iban y venían por las calles, comprando, conversando, o simplemente disfrutando de la noche en compañía de otros. La bulliciosa ciudad irradiaba energía.

Ashborn permitió que una ligera sonrisa cruzara su rostro al contemplar el movimiento debajo, pero pronto su expresión se desvaneció cuando sus ojos se posaron en un parque lleno de parejas. El vacío familiar en su pecho reapareció con fuerza.

( Si tan solo hubiera sido más fuerte en ese momento...podría haberla salvado ) -Ashborn

El leve brillo en sus ojos se apagó por completo cuando la peor memoria que albergaba en su mente emergió, de nuevo, como una sombra implacable.

Flashback (Perspectiva de Ashborn)

Todo se sentía borroso, claramente distante...pero el dolor seguía sintiendose tan vívido como en ese día.

Mis rodillas se estrellaron contra el suelo bajo mi propio peso y mis manos, temblando como la gelatina, se dirigieron hacia la herida en su abdomen.

Presioné la herida con todas las fuerzas que me quedaban, desesperado. Cómo todo niño estúpido, me aferraba a una esperanza absurda. Solo necesitaba apretar con la suficiente fuerza para detener la hemorragia.

Yo: P-por favor...aguanta, Honami...

Mis dedos se empapaban de su sangre caliente, pero no importaba lo que hiciera; la herida seguía abierta, la sangre seguía fluyendo.

Honami me miró, aún sonriendo. Incluso sabiendo que yo era el causante de su estado actual, no dejó de sonreírme.

Honami: Tú...sabes que eso es inútil, Akira...

Su voz era suave, su último susurro hacia mi persona. No pude detener las lágrimas. Se desbordaban, ardientes, cayendo sobre su piel, sobre mis manos empapadas de su vitalidad.

Honami: Te amo

Sus ojos comenzaron a cerrarse lentamente, como si el mundo entero se apagara con ellos. Sus párpados finalmente se cerraron, llevándose consigo todo mi alrededor.

El mundo se disolvió como un sueño que termina. Me quedé solo en un abismo frío y silencioso, incapaz de sentir nada más que la helada oscuridad que se apoderó de mi ser.

Fin Flashback (Perspectiva del Narrador)

Ashborn trató de contener el torrente de emociones, pero sus esfuerzos fueron en vano. Las lágrimas comenzaron a brotar sin control, cayendo silenciosamente mientras él se disculpaba en voz baja, apenas audible.

Ashborn: Honami...lo siento...yo...

De repente, sintió el peso familiar de unos brazos envolviéndolo desde atrás. La voz que escuchó después lo dejó helado.

Honami: Eso no fue tu culpa, Akira...

Sus ojos se abrieron de golpe. Ashborn se giró rápidamente, con el corazón en la boca, esperando encontrar lo imposible. Pero al voltear, no estaba Honami, sino su hermana mayor, quien lo abrazaba con calidez.

Strea: Ya, ya. Tu Onee-san está aquí contigo

Ashborn: Qué estás haciendo, Strea...?

Strea: Soy una IA programada para estabilizar tu salud mental y también tu hermana mayor. Además de ser mi intuición de hermana, es mi trabajo consolarte cuando estés triste

Ashborn no dijo nada. No tenía fuerzas para hablar. Simplemente alargó la mano y tomó la de Strea. Ella lo apretó más fuerte, envolviéndolo en un abrazo aún más cálido.

Ashborn: Gracias... Nee-san...

Strea: No tienes que agradecerme. Haría lo que fuera por mi hermanito

Ashborn se dejó llevar por la paz que encontró en el abrazo de su hermana. Minutos después, el cansancio lo venció, quedándose dormido en sus brazos, como si aquella calidez lograra por fin ahuyentar el frío de sus recuerdos.

Strea sonrió con ternura y, sin despertarlo, lo cargó cuidadosamente hacia su habitación. Lo recostó sobre la cama, asegurándose de cubrirlo bien con la manta. Antes de irse, se inclinó y depositó un suave beso en su frente.

Strea: Buenas noches, hermanito

...

Al día siguiente, Ashborn charlaba con Strea en una mesa dentro de la habitación cuando, tras unos minutos, Kirito se conectó y los encontró allí.

Ashborn: Hola

Kirito: Hey

En ese momento, la puerta de la habitación se abrió, y al mirar hacia ella, vieron a Leafa entrar.

Kirito: Llegaste temprano

Leafa: En realidad no, estuve haciendo algunas compras

Ashborn: Hablando de eso, necesitamos equipamiento para el viaje

Kirito: Sí, este equipo inicial no es para nada confiable

Leafa: De acuerdo, vayamos a la armería. Cuánto dinero tienen?

Ashborn y Kirito accedieron a sus menús para revisar sus fondos.

Kirito: Hmm... te refieres a esta cosa llamada "Yrd"?

Leafa: Ese mismo

Ashborn: Bueno...no es como que tengamos tanto

Además del dinero inicial, Ashborn y Kirito tenían un poco más de Yrd porque obtuvieron un poco de los ingresos de los jugadores que atacaron a Leafa al derrotarlos.

Leafa: Pues están de suerte, porque conozco una persona que con muy poco hace lo mejor

Ashborn intercambió una mirada intrigada con Kirito, pero ambos, junto con Strea, siguieron a Leafa a través del bullicioso mercado. Las tiendas, decoradas con telas flotantes y cristales brillantes, dieron paso a callejones más tranquilos.

Finalmente, después de que Leafa les haya comprado un arma nueva como regalo, se detuvieron frente a una boutique discreta, con un cartel que decía "Nómada". La puerta se abrió con el suave tintineo de unas campanas.

Leafa: Ashley! Estás por aquí?

De la trastienda surgió una joven con el cabello café recogido en una coleta suelta, ojos verdes y una cinta métrica alrededor de sus hombros.

Al ver al dúo de negro y morado, sus ojos se iluminaron con un breve destello de reconocimiento, aunque su expresión se mantuvo serena.

Ashley: Vaya, miren a quiénes tenemos aquí~

Ashborn sintió una calidez familiar al verla y dejó escapar una ligera sonrisa mientras relajaba los hombros.

Ashborn: Es bueno verte de nuevo, Ashley

Kirito: Ha pasado mucho, eh?

Ashley quitó una aguja de sus labios, apoyándola en un alfiletero cercano.

Ashley: Lo mismo digo. No esperaba encontrarlos aquí, pero me alegra que hayan venido

Strea: La conocen?

Strea inclinó la cabeza mirando hacia el dúo de negro y morado con una curiosidad evidente. Ambos intercambiaron un asentimiento antes de que Ashborn respondiera a la pregunta de la pelilavanda.

Ashborn: Hemos trabajado antes. Estoy seguro que al menos has oído sobre ella

Strea sonrió ampliamente, acercándose a Ashley con la misma energía despreocupada de siempre.

Strea: Yo soy Strea! No nos conocemos en persona, pero como dice mi hermanito, he oído cosas buenas de ti. Así que...eres quien va a hacer que luzcamos geniales?

Ashley le devolvió la sonrisa, sin inmutarse ante la energía arrolladora de Strea.

Ashley: Un gusto, Strea. Veremos qué puedo hacer para que todos luzcan como lo que son, héroes

Leafa se cruzó de brazos, satisfecha con la presentación. Aunque no quería decir que no le sorprendería el hecho de que una modista de Alfheim conociera al dúo de negro y morado.

Pensó en decir algo respecto, pero decidió no hacerlo y solo examinó al dúo de negro y morado de arriba a abajo.

Leafa: Ellos necesitan ropa para un viaje largo. Nada exagerado, pero algo funcional y elegante, si es posible

Ashley: Déjamelo a mi. No han cambiado en lo absoluto verdad, Ashborn, Kirito? En cuanto los ví, se me ocurrió el traje perfecto para cada uno

Ashley arrojó una mirada cómplice hacia el dúo de negro y morado, a lo que Ashborn dejó escapar una breve risa, más relajado de lo que normalmente se mostraba.

Ashborn: Tu eres la artista aquí

Kirito: Correcto. Estamos en buenas manos

Ashley chasqueó los dedos y en un santiamén, se formaron un par de pergaminos del aire mismo.

Ashley: Bien, qué les parece algo práctico pero con estilo? El viaje puede ser duro, pero no hay excusa para no lucir bien

Strea: Me gusta cómo piensas! Además, puedo ayudarte con la costura? Mi habilidad está a la par con la tuya

Ashley levantó una ceja, sorprendida por la afirmación de Strea.

Ashley: De verdad? No creí que alguien más que yo tendría la paciencia para subir al máximo mi [Costura]

Strea: No lo pude evitar, es divertido! Que dices?

Ashley: Está bien, sería genial tenerte de ayudante! Vamos a asegurarnos de que todos brillen

Ashborn observó la escena, sintiéndose agradecido por la energía renovada en el ambiente mientras Strea y Ashley comenzaban a intercambiar ideas sobre telas y patrones.

Su viaje en Alfheim apenas había comenzado y ya era mucho más interesante que lo que sea que hizo durante dos meses atrás para pasar el tiempo. Ni siquiera lo recuerda.

...

A/N: Traje y arma de Ashborn para al resto de este arco, si, he jugado demasiado Genshin :v Kirito está igual que en el anime y Strea...pues es Strea.

Después de conseguir un equipamiento decente y agradecer a Ashley por sus servicios, el grupo caminaba hacia la imponente torre que dominaba el centro de la ciudad.

Kirito: Por qué vamos hacia la torre?

Leafa: Si quieres volar largas distancias, necesitas tomar impulso desde allí. Te da la altitud necesaria para un vuelo más eficiente

Ashborn: Tiene sentido

De pronto, Strea tiró del brazo de Ashborn con entusiasmo.

Strea: Vamos, no tenemos todo el día!

Leafa: Ella tiene razón. Debemos cruzar el bosque antes de que anochezca

Al entrar en la torre, se dirigieron hacia el elevador que los llevaría a lo más alto. Sin embargo, una voz inesperada llamó a Leafa, deteniendo sus pasos.

Se giraron hacia la voz y encontraron a un hombre de cabello y capa verde, acompañado por otros dos jugadores.

Leafa: Buenas tardes, Sigurd.

Sigurd: Dejarás la party, Leafa?

Leafa: Sí

Sigurd: No tienes idea del problema que eso nos causará?

Leafa: Acordamos que unirme o dejar la party era mi decisión, recuerdas?

Sigurd: Pero ya eres conocida como parte de nuestro grupo. Si te vas sin motivo, quedarás mal...y nosotros también

Ashborn frunció el ceño con evidente molestia y dio un paso al frente.

Ashborn: Oye, idiota, los compañeros no son simples ítems

Sigurd: Qué dijiste?

Ashborn: Me oíste bien, imbécil. No puedes tratar a otros jugadores como tu pieza de equipo favorita

La expresión de Sigurd se endureció por la rabia.

Sigurd: Eres solo un Spriggan asqueroso... Deberías saber cuál es tu lugar. Apuesto a que te echaron de tu propio territorio!

Leafa: Cuidado con lo que dices. Ashborn, Kirito y Strea son mi nueva party!

Sigurd: Qué!? Piensas abandonar tu hogar y convertirte en una renegada!?

Leafa: Exactamente

Sigurd desenfundó su espada y la dirigió hacia Ashborn, pero este la detuvo sin esfuerzo, atrapando la hoja con su mano desnuda.

El grupo quedó boquiabierto y Sigurd intentó zafarse, pero la espada no se movió.

Sigurd: Qué demonios...?

Ashborn: De verdad crees que eso me asusta?

Sigurd: Huh...?

Ashborn: He visto la cara de la muerte cientos de veces y, cada vez, le escupí en el rostro

Una sombra oscura emanó de Ashborn mientras su [Enlace Oscuro] lo convertía en un vendaval.

Su aura tenebrosa envolvió el ambiente, haciendo más intensos sus ojos carmesí, que parecían atravesar el alma de Sigurd.

Ashborn: Comparado con el infierno por el que he pasado, tú no eres nada

Sigurd, incapaz de liberar su espada del agarre de Ashborn, sintió cómo el miedo comenzaba a filtrarse en su expresión. Su mano tembló cuando intentó alcanzar una daga oculta, pero uno de sus compañeros lo detuvo.

Jugador: No es el momento, Sigurd. Si atacas a un jugador indefenso frente a todos, no acabará bien para ti

Sigurd miró a su alrededor y notó que los jugadores presentes en la torre observaban cada movimiento. Ashborn soltó la espada, y Sigurd, con un gruñido frustrado, la enfundó.

Sigurd: Tch... "Jugador Indefenso" dices...

Sigurd lanzó una última advertencia, su mirada ardiendo de resentimiento.

Sigurd: Corran todo lo que quieran, pero si nos traicionas, Leafa, haré que lo lamentes

El trío se retiró, y Leafa se acercó a Ashborn, colocando una mano en su hombro mientras él observaba cómo la herida en su mano se cerraba lentamente.

Leafa: Lo siento. Parece que te involucré en mis problemas

Ashborn: No fue nada. Me involucré solo. Pero él es el tipo de persona que más odio...

Kirito: Estás segura de lo que haces, Leafa? Abandonar tu hogar?

Leafa no respondió y simplemente los condujo hacia el elevador. Al llegar a la cima de la torre, Recon los alcanzó.

Leafa: Oh, Recon

Ashborn: Parece que alguien es bastante popular hoy

Ashborn rodó los ojos mientras Recon se les acercaba, jadeando ligeramente.

Recon: Podrías haberme avisado antes de irte

Leafa: Lo siento...

Recon: Escuché que dejaste la party

Leafa: Fue más bien algo del momento. Y tú? Qué harás ahora?

Recon desenvainó su daga y la empuñó con solemnidad.

Recon: No importa a dónde vayas, Leafa, mi espada siempre te pertenecerá

Leafa: Ew

Ashborn: Piensa con cuidado antes de abrir la boca... -_-

Kirito: No es su culpa que ambos sean un par de mal pensados

Strea: De que hablan?

Recon: D-Dejemos eso de lado... Naturalmente iría contigo, pero hay algo que me preocupa

Leafa: Qué cosa?

Recon: Aún no tengo pruebas, pero quiero investigar un poco. Estaré un tiempo con la party de Sigurd. Kirito, Ashborn, Strea...tengan cuidado. Ella suele meterse en problemas

Ashborn: Seguro

Kirito: O-Ok

Strea: La vigilaremos!

Recon: También, para que sepan, ella es mi-

Antes de que pudiera terminar, Leafa aplastó su pie con el suyo, provocando que se retorciera de dolor.

Leafa: Vamos a una región neutral por un tiempo. Si pasa algo, mándame un mensaje

Sin esperar respuesta, Leafa desplegó sus alas y se elevó. El resto del grupo la siguió sin dudar.

...

Después de avanzar un poco hacia Yggdrasil y derrotar varios monstruos por el camino, Leafa, Ashborn, Kirito y Strea decidieron hacer una pausa.

Leafa: Están cansados?

Ashborn: Para nada

Kirito: No, en realidad no

Strea: Yo sigo llena de energía!

Leafa: Vaya, sí que trabajan duro. Pero no podemos volar por un tiempo

Kirito: Por qué?

Leafa: Ves esa montaña? Es más alta que el límite permitido para volar, así que tendremos que atravesar unas cuevas. Es la parte más dura del viaje desde el territorio Sylph hasta Alne...o al menos eso he escuchado. Es mi primera vez cruzando por aquí también

Ashborn: Anotado

Kirito: Las cuevas son muy largas?

Leafa: Considerablemente. Hay una aldea minera a medio camino, así que podremos descansar ahí. Alguien necesita desconectarse pronto?

Kirito: Son las 7 pm en el mundo real. Puedo quedarme un poco más

Ashborn: Estoy bien también

Leafa: Perfecto. Avancemos un poco más y luego tomemos turnos

Ashborn y Kirito intercambiaron miradas de confusión.

Kirito: T-turnos?

Leafa: Sí, para hacer una rotación. Uno se desconecta para descansar mientras los demás vigilan su avatar

Kirito: Ah, suena bien. Puedes ir tú primero, Leafa

Leafa: Entonces regreso en 20 minutos

Leafa se desconectó, y Kirito miró a Ashborn.

Kirito: Si necesitas desconectarte, Strea y yo podemos vigilar tu avatar

Ashborn: No tardo

Strea: No te preocupes, yo me aseguraré de que nadie se acerque

Asintió y usó su menú para desconectarse, al abrir los ojos en el mundo real, Akira se quitó el AmuSphere en silencio. La habitación permanecía en penumbra, solo rota por la luz tenue que se colaba entre las cortinas.

Se levantó y fue directo al baño, sintiendo cómo sus pensamientos comenzaban a arremolinarse de nuevo, como lo habían hecho tantas veces en los últimos dos meses.

Esa voz constante en su cabeza, una que nunca dejaba de recordarle todo lo que había perdido, todo lo que había vivido. En esos dos meses fuera de SAO, el mundo le había dado libertad, pero su mente lo había mantenido encadenado.

No obstante, todo era diferente ahora. Durante los pocos días que llevaba en Alfheim, ese ruido mental había comenzado a desvanecerse, casi sin que se diera cuenta. Por primera vez en mucho tiempo, su mente estaba en silencio. No entendía el motivo.

Por mucho que intentara buscarle una explicación, no la encontraba. No había lógica alguna que justificara por qué, después de tanta tormenta interna, de repente sentía paz.

Tal vez era la sensación de volar sin límites. Tal vez era el hecho de que, en lugar de estar atrapado con sus pensamientos, estaba avanzando hacia algo concreto: salvar a Asuna. O tal vez simplemente eran las personas que lo rodeaban.

Kirito, su mejor amigo. Strea, una versión hipotética de su hermana. Yui, su nueva sobrina. Ashley, quien se encargó de mejorar la estética del traje con el que permaneció hasta el final de sus días en SAO. Y por último, pero no menos importante, Leafa aunque una desconocida hasta hace poco, había mostrado ser alguien agradable.

No tenía opinión sobre Recon, ya que apenas habían intercambiado palabra, pero parecía ser un buen chico también.

Akira dejó que el agua fría de la ducha recorriera su cuerpo, liberando la tensión acumulada. Era curioso cómo, en ese mundo familiar, se sentía más libre que nunca. No tenía respuestas, pero tampoco las necesitaba.

Por ahora, esa libertad, por incomprensible que fuera, bastaba. Al abrir los ojos, ahora de nuevo como Ashborn, se encontró recostado en el regazo de Strea. Soltó un suspiro resignado.

Ashborn: Por qué...?

Strea: Oh, estás despierto.

Ashborn: Por qué estoy en tu regazo... Nee-san?

Strea: Porque pensé que estarías más cómodo aquí. Hay algún problema?

Ashborn: Al contrario...pero...

Strea: Pero?

Ashborn: No es raro para ti? Soy tu hermano...

Strea: No

Ashborn: No?

Strea: No creo que sea extraño. Soy tu Onee-san y quiero que mi hermanito sea feliz

La sonrisa cálida de Strea iluminó su rostro, y Ashborn no pudo evitar devolverle la sonrisa. Acababa de reforzar la teoría que el hecho de estar en Alfheim le tranquiizaba de sobre manera.

Ashborn: Gracias, Strea

Strea: Ho~ logré hacerte sonreír de verdad

Ashborn soltó una leve risa. En ese momento, escuchó la voz de Kirito llamándolo.

Kirito: Ashborn? Estás listo?

Ashborn se giró y vio a Kirito y Leafa esperándolo. Asintió, se puso de pie y ofreció su mano a Strea, ayudándola a levantarse.

Justo entonces, una sensación incómoda recorrió su cuerpo, como si algo los acechara desde las sombras.

Ashborn: Huh...

Kirito: Tú también lo sentiste?

Leafa: Pasa algo?

Ashborn: Siento que alguien nos observa

Kirito: Yui, hay jugadores cerca?

Yui: No, no detecto a ninguno

Leafa: Podría ser un buscador

Ashborn: Buscador?

Leafa: Es magia de seguimiento. Un pequeño familiar informa la posición del objetivo al invocador

Kirito: Podemos eliminarlo?

Leafa: Solo si lo encontramos, pero en un lugar como este es casi imposible

Kirito: Entonces sigamos. Puede que haya sido solo nuestra imaginación

Leafa: Muy bien

El grupo desplegó sus alas y comenzó a volar hacia las cuevas. Desde la oscuridad, un pequeño murciélago de ojos rojos los observaba partir, su presencia vinculada a un hombre de capa roja. A su lado, varios jugadores de la raza Salamander aguardaban en silencio.

Fin del Capítulo.

Smurf: Describe una práctica específica. El uso de una cuenta secundaria por parte de un jugador experimentado, y que ya tiene una cuenta principal, para competir en niveles de habilidad más bajos.

Gracias por leer, espero que les haya gustado y nos vemos en el siguiente capítulo: [Ecos de Otro Mundo]!