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-¿Y como has tratado de suicidarte?

Entonces Nora peinó su cabello, dejando al descubierto su remolino.

-¿Ve esto? Lo hice cuando metí dinamita en una gorra e hice explotar la misma. Mi cerebro se arrastró hacia mi cuello y mis oídos pasaron de un "piii" a los ruidos de miedo y gritos. Dígame usted si ha probado un ácido destapa caños - Dijo mientras sacaba una botella de un ácido destapa caños y le dio un trago enorme.

-Oiga ¿Que está haciendo?

-Descuida. Con el tiempo te acostumbras a esta mierda.

Siguió bebiendo. 

-La primera vez que lo probé, por miedo, mi estomago se derritió y mis tripas salieron. Ahora no soy una cobarde y esta porquería me sabe a cerveza ¿Quiere?

-No gracias.

Nora empezó a carcajearse del oficial de policía.

-Aun así - Prosiguió el oficial - Eso no justifica el porqué estaba de exhibicionista en la calle.

-Estuve en el mercado de Tultepec, todo voló en pedazos, niños, adultos, ancianas y perros. No es como que fuera algo gracioso - Tuvo una risa ahogada - Disculpe, pero como digo, no es que fuera algo gracioso. Simplemente pasó y ya. Ahora solo puedo decir que mi ropa había quedado hecha como sus calzones.

-¿Como?

-Hechos mierda

Mientras Nora empezó a reírse, el oficial salió de la celda donde estaba.

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Tras que la puerta se cerrase y el oficial ya no estuvo allí, Nora se dijo, mientras estaba cabizbaja:

-Si tan solo me hubiera violado - Sacó aire de sus labios rojos - Bueno, al menos, si espero lo suficiente, me llevará a prisión y allí si ¡A tener sexo! ¡JAJAJAJAJAJAJA!

Que ridícula situación.

Normalmente le dirían algo como "deben apreciar la vida o simplemente que empiece a hacer algo positiva con ella", lo que no saben es que lleva diez siglos viva.

¡Si! como lo ven. La primera vez que se le vio fue en el año 1030, sin embargo en aquella época ,¿que es lo que había? Guerras sin sentido y poderíos aburridos. Que grato sería vivir en aquellos años otra vez.

Fueron unos aburridos 8 siglos, con décadas y lustros. 

Ya, hasta 1914, las cosas se pusieron realmente candentes; guerras mas emocionantes que las ya monótonas peleas con espadas y caballos con honores de caballeros y mujeres como premio; ahora era batallar con un rifle y un patriotismo que volvía mas estúpidos a los combatientes.

¡Uy! Para ella, la secuela fue quizá lo mejor que pudo presenciar. Tuvo que estar en los hornos judíos para sentir un poco de lo que podía significar estar muerta; sin ningún efecto salvo que el hedor carbonizado de los cuerpos cemitas.

De allí en mas, los países europeos y estados unidos, tenían poca creatividad.

Fue durante los 70's, que se mudó a México.

El primer nombre con el que se le conoció, a inicios de su vida, fue Lara de Normandía.

Después tomó mas nombres, conforme a la época. Fue hasta el siglo XX que fue mas fácil tomar un nombre:

-Lidia Hocks

-Silvia McAvyne

-Dolores Sánchez

-Ivanovna Petrov

-Abbey Grey

- Y últimamente, su nombre es Nora Gutiérrez. Desde 1973...

Se ha quedado en México, porque reconoce que el narco, tiene formas creativas de entretenimiento, llegando a ser crueles a niveles sublimes; no pueden superar al escuadrón 731, sin embargo pueden ser mas frecuentes.

En dos ocasiones la han violado y la han descuartizado, dejándola abandonada en el desierto de Sonora (en la segunda ocasión fue en un parque de Ciudad Juárez); fue divertido pero no pudieron matarla. Allí entendió que tendría que empezar a buscar formas mas estrambóticas para morir.

Antes de todo lo ocurrido en el mercado de Tultepec, realmente ella había hecho lo que fue mencionado; ácido destapa caños y dinamita en la cabeza.

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Nora, o como sea que se pueda llamar en tu época o la mía, o de quien lea esto, era una chica delgada, con manos venosas, uñas viejas y un rostro demasiado fino. Tenía cabello corto castaño con la raya en medio, cejas extrañas que la hacía ver enojada. Su voz era algo chirriante, por no decir aguda. Su cuerpo era el sueño para cualquier persona con fantasías sexuales ficticias; su apetito sexual y suicida era también un chiste demasiado horrido. Para sentirse mas "normal" se había puesto frenillos en los dientes.

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