Capítulo 24🍁
En el auto, Jimin movía ansiosamente su pierna mientras contemplaba a través de la ventana el paisaje cambiar cada vez más mientras se alejaban de Busan, y en los asientos traseros, Taehyung no estaba exactamente mejor mientras hablaba por teléfono con su pareja.
Por el rabillo de su ojo Yoongi le echo un pequeño vistazo a su pareja, percibiendo lo nervioso que estaba, colocó una de sus manos sobre el muslo de su pequeño omega. Jimin respingo y le observó.
—¿Qué es lo que está pasando por esa dulce cabecita tuya? —pregunto suavemente el alfa, mientras sus ojos seguían fijos en el camino ante él.
—No, no es nada —negó empujando sus lentes más arriba—. Solo... —torció sus labios indeciso, si le decía a su pareja todo lo que realmente estaba pasando por su cabeza tal vez se volvería loco o le haría ver como un bebé, cosa que no era.
Terminando su llamada, el pequeño alfita se inclinó hacia adelante.
—Realmente estamos saliendo de Busan —exclamó Taehyung a penas creyendo sus propias palabras—. Nunca hemos salido de Busan.
—Y están nerviosos —observó el león.
Jimin resoplo—. Nerviosos, ansiosos, emocionados, con miedo... Estamos sintiendo muchas cosas en este momento Yoonie —expresó finalmente en un gruñidito tierno a los oídos del shifter león.
Yoongi sonrió suavemente ante la respuesta de su pareja, aunque amaba la parte tímida de su dulce erizo, esta parte un poco gruñona y algo mandona también le encantaba.
Era la perfecta combinación para dominar a un león, a su león y a él mismo.
—Nada malo les pasará, así que no se preocupen y traten de disfrutar del viaje aunque sea un poco —pronunció apretando suavemente el muslo de su omega—. Quizás cuándo ambos tengan el impulso de viajar otra vez.
—Bueno, eso es verdad —aceptó el pequeño alfa, echándose hacia atrás sacó sus lentes para limpiarlos con el borde de su suéter color azul, el cual realmente le pertenecía a cierto shifter águila—. Pero tengo curiosidad.
—¿De qué? —preguntó su hermano, dándose media vuelta para observarlo.
—¿Por qué quiso acompañarnos? —pregunto señalando a Yoongi.
—Tengo algo que hacer también en Ulsan —respondió el shifter león.
—¿Nos dejarás solos? —preguntó el pequeño omega, dejando su mano sobre la de su pareja que seguía descansando en su muslo.
—No pequeño —aseguró dándole una rápida mirada—. Solo deseo hablar con tu amigo Namjoon un tema que no podía hablarse por una llamada —respondió dejando más curiosos a ambos hermanos.
—¿Y de...? ¡Waaaow! —exclamó repentinamente Jimin mientras observaba a través de la ventana.
—¿Ya llegamos? ¿Ya llegamos? —pregunto Taehyung igual de sorprendido y emocionado.
Yoongi sonrió—. Bueno, necesito saber la dirección exacta pero sí, ya hemos llegado a Ulsan.
—Esto es tan... Diferente a Busan —susurro Jimin mientras contemplaba cada una de las diferentes tiendas y a la multitud de personas—. Se ve como... Más vivo...
—Las personas realmente pueden dar una diferencia a un lugar —pronunció Yoongi, deteniéndose en un semáforo—. Además, no hay que olvidar que aquí también viven humanos por lo que hay que tener cuidado —advirtió observando a ambos hermanos.
—Está bien —respondieron ambos pequeños erizos en sincronía.
—No será difícil, la multitud y conocer a personas nuevas aún no me llama la atención de momento —exclamó el pequeño alfa—. Y no creo que pronto lo haga... Tal vez nunca, no está en mi naturaleza después de todo —se excuso.
—Totalmente de acuerdo —apoyo Jimin, asintiendo repetidas veces con su cabeza y desordenando algo de su castaño cabello ante su movimiento.
Riendo, Yoongi apretó suavemente el muslo de su pareja.
—La dirección, pequeño —le recordó y el omega inmediatamente se la dio después de leerla en su celular.
—¿Está muy lejos? —preguntó su dulce pareja.
—No, solo hay que avanzar un poco más y luego doblar —respondió volviendo a conducir cuando el semáforo cambió.
—¿Ya habías estado aquí? —preguntó curiosa su pequeña pareja.
—Trabajé aquí por unos meses con Jackson, construyendo un centro comercial —explicó.
—¿Te refieres a ese bien grandote que acabamos de pasar? —preguntó sorprendido Tae, antes de que el alfa doblara y se alejara.
—Sí, ese mismo —asintió.
—Waow, ¿ese lo diseñaste tú? —exclamó Jimin con sus ojitos grises bien abiertos—. Increíble...
Yoongi asintió con una gran sonrisa orgullosa al contemplar la sorpresa tanto en la voz como en la expresión de su pequeña pareja. Casi parecía que su león ronroneaba feliz mientras sacudía su gran melena.
—Ya hemos llegado —avisó, estacionándose frente a un edificio de seis pisos.
—Eh... Esto no es una casa —pronunció Taehyung observando a través de la ventana.
—Me imagino que sus amigos deben de vivir en uno de esos pisos —respondió quitándose su cinturón de seguridad.
—¿Viven con otras personas? —pregunto Jimin, observando nerviosamente a su alrededor.
—Otras personas viven ahí, pero sus amigos tienen un departamento propio —explicó calmadamente, esperando a que ambos hermanos estuvieran listos antes de bajar.
—Está bien, vamos —asintió el pequeño omega erizo.
—Vamos —repitió el pequeño alfa.
Sonriendo enternecido por ambos hermanos, Yoongi se bajó de su camioneta e inmediatamente la rodeó para estar al lado de los dos shifter erizos, que se apegaron a cada costado suyo.
—Bueno, ahora entiendo por qué el mensaje decía segundo piso y la puerta 12A —murmuró Jimin mientras avanzaba junto a los demás.
Entrando al ascensor, ambos erizos estuvieron profundamente aliviados cuando subieron estando solamente ellos tres.
Cuando se bajaron, ninguno de los dos se despegó del lado de Yoongi mientras avanzaban buscando el departamento de sus amigos.
—Oh, es ahí —exclamó Taehyung señalando la última puerta.
Adelantándose, el pequeño alfa tocó la puerta con sus nudillos y se colocó al lado de su hermano cuando este estuvo frente al departamento también.
—¿Si le avisaste que vendríamos, no pequeño? —pregunto Yoongi cuando la puerta no fue abierta.
—Sí, lo hice —prometió juntando levemente sus cejas.
—¿Toco otra vez? —preguntó el pequeño alfa.
Entonces, la puerta fue abierta revelando a Namjoon con una expresión cansada. Los ojos del beta se abrieron exageradamente al contemplar a los dos pequeños erizos frente a él junto al alfa de la otra vez.
—Realmente están aquí —pronunció con sorpresa.
—¿SeokJin no dijo que vendríamos? —preguntó el pequeño omega, frunciendo sus labios.
—Bueno, sí pero... —balbuceó—. Pero con sus personalidades tan tímidas, miedosas y antisociales... No creíamos que en verdad vinieran —explicó un tanto avergonzado, pasando su mano por su nuca.
—Bueno, gracias por su confianza —respondió bastante indignado Taehyung, sacándole una risa baja a su amigo.
—Lo siento —se disculpó con una sonrisa—. Por favor, pasen —invitó haciéndose a un lado—. Alfa... —pronunció cuando finalmente observó a Yoongi.
—Por favor, olvida todo eso —pidió—. Eres amigo de mi pareja, por lo tanto también el mío —sonrió y Namjoon le correspondió mientras cerraba la puerta.
—¿Y Jin? —preguntaron ambos hermanos.
—En la habitación con los bebés —respondió señalándoles una puerta—. Estaba intentando hacerles dormir para que pudiera descansar un poco mientras estoy aquí —explicó.
—Podemos...
—Ir...
Pidieron ambos erizos, sacándole una sonrisa de labios a ambos contrarios.
—Vayan —asintió el shifter lobo—. Sé que Jinnie estará feliz de verles.
—Yoongi... —pronunció Jimin, observando a su pareja.
—Ve pequeño, estaré aquí hablando con Namjoon —prometió logrando que el nombrado le mirase curioso.
Asintiendo levemente, el pequeño omega tomó la mano de su hermano y ambos se dirigieron a la puerta señalada, tocando suavemente sobre la superficie de madera.
—Pasa, aún no logro hacer dormir a este pequeño —indicó en el interior—. ¿Quién era? —preguntó mientras se paseaba por la pequeña habitación, sin prestar mucha atención a quienes entraban.
—Waow, son realmente pequeñitos —exclamó Taehyung, finalmente llamando la atención de SeokJin.
—Están aquí —chillo tratando de no alzar mucho la voz para así no asustar a sus pequeños hijos.
Sonriendo, ambos hermanos se acercaron más a su amigo.
—Te dije que vendríamos —sonrió Jimin, observando encantado al pequeño ser en los brazos de su amigo—. ¿Y quién es este pequeñín? —preguntó contemplando al hermoso bebé que observaba todo con curiosidad.
—Este es Baekhyun y el otro pequeño en la cuna es Jongin —presentó y sus ojos repararon en la bolsa entre las manos del omega—. Por favor, dime que esos son mis pastelitos —pidió—. Realmente necesito algo de azúcar en mi cuerpo —gimió.
—Si, lo son —rió Jimin, entregándole la bolsa.
—Dios, gracias —exclamó—. ¿Quieres sostener a Bae? —preguntó y de todas formas se lo entregó con cuidado para poder devorar sus pastelitos.
Con el bebé entre sus brazos, Jimin lo observó asustado, hasta que pronto, comenzó a relajarse y dejar que ese instinto dentro de él lo guiase.
—Es tan pequeñito —pronunció recorriendo con la punta de su dedo índice la diminuta nariz de botón.
—¿Quieres tomar a Jongin? —pregunto Jin cuando contemplo a Taehyung observando embobado en la cuna.
—No gracias, son tan pequeñitos que me da miedo romperlos o dejarlos caer —pronunció observando encantado aquellos ojitos azules que le miraban con curiosidad.
Jimin soltó un pequeño ruidito encantado cuando el pequeño entre sus brazos le soltó una dulce sonrisita sin dientes que revelaba un par de hoyuelos diminutos y preciosos.
—Ambos bebés son increíbles —susurró Taehyung, alzando su mano la acercó al bebé y este atrapó uno de sus dedos con su pequeño puñito.
Si él finalmente tenía un sobrinito o sobrinita, esperaba que fuera así de hermoso y chiquito, un pequeño Jimin sería totalmente adorable.
—Es cansador, pero lo mejor que me ha pasado en la vida además de mi Joonie —sonríe tomando asiento, soltando un suspiro.
—¿No has dormido bien? —pregunto Jimin, contemplando el rostro de su amigo con algo de preocupación.
Al igual que en Namjoon, el cansancio estaba marcado en el rostro de SeokJin.
—Es parte del papel como padre —respondió quitándole importancia—. Lo que me tiene un poco cansado de tan solo pensarlo, es que pronto Namjoon tendrá que volver a trabajar y yo me las veré a solas con ellos dos —suspiró.
—Entonces que no vaya y que pida más tiempo para estar contigo y sus hijos —respondió obvio el pequeño alfita.
—Oh, seguro que nos encantaría pero si ni él y yo estamos trabajando, ¿cómo mantendríamos este departamento y a los pequeños? —suspira—. Sí, estaríamos bien por un tiempo pero... ¿Y después qué? Los niños también van a necesitar más espacio y su propia habitación, y este departamento era perfecto, ya que solo éramos nosotros dos pero ahora... —expresó sus recientes preocupaciones.
Suspirando, sacó uno de los pastelitos que le dio Jimin y comenzó a devorarlo.
—Ooh... —exclamaron ambos hermanos, contemplando a su amigo.
—Si tienen problemas, recuerden que pueden contar con nosotros a pesar de la distancia —pronunció Jimin con una pequeña sonrisa.
—Cierto —asintió Taehyung—. Ustedes nos ayudaron cuando nosotros lo necesitábamos, ahora nosotros queremos ayudarlos —sonrió el pequeño pelinegro.
—Gracias chicos —sonrió con ternura Jin.
—Somos amigos, los amigos se ayudan —sonrió alegremente Jimin.
—Aish, que tiernos pueden ser cuando quieren —gruño divertido, sacándole una risita al par de hermanos. Luego se concentró en Jimin—. Así que... ¿Tienes pareja? —preguntó moviendo sus cejas.
—Y ya está completamente reclamado —rió el hermano de este.
—Taehyung —chillo avergonzado y luego observó con pena al bebé entre sus brazos que le hacía puchero—. Oh, no bebé, no era mi intención asustarte —pronunció con ternura, moviendo sus brazos en un suave balanceo hasta que borro el pequeño pucherito.
—Uff, ya pensaba que iba a estallar en llanto —Jin suspiró en alivio—. Así como lo ven, en verdad tiene unos buenos pulmones, ambos —comentó divertido, devorando otro pastelito—. Así que... ¿Cómo se llamaba?
—Yoongi —respondió—. Y Taehyung también encontró a su pareja, es el amigo del mío —reveló Jimin al volver ser el centro de atención de SeokJin.
—Minnie —chillo el pequeño alfita—. No seas chismoso —se quejó.
—Tú lo fuiste primero TaeTae —acusó sacándole la lengua.
—La pareja de Minnie es el nuevo alfa de Busan —reveló logrando que Jin volviera a observar a Jimin.
—La pareja de Tae es un shifter águila —Jin observó a Taehyung.
—La pareja de Minnie es un león.
—La pareja de Tae ya logró tomarle de la mano.
—La pareja de Minnie ya lo reclamó.
—Eso ya lo dijiste —rió el pequeño omega.
—Ugh... Cállate —refunfuño con una sonrisa oculta.
—Uy, así que mis dos pequeños amigos ariscos y tímidos encontraron a sus parejas —rió SeokJin—. Las cosas que me pierdo por no vivir con ustedes.
Ambos hermanos rieron también.
—Jimin, Taehyung —llamó Yoongi entrando en la habitación—. Tenemos que irnos —anunció con una expresión llena de seriedad, una que también estaba en Namjoon.
—¿Ya? ¿Tan pronto? —preguntó Taehyung.
Jimin observó en silencio a su pareja, presintiendo que algo estaba mal.
—¿Ocurrió algo, no? —preguntó el pequeño omega.
—¿Qué? ¿Qué pasó? —pregunto Tae con un mal presentimiento cuando Yoongi le observó.
Levantándose de su silla, Jin tomó a su pequeño bebé de los brazos de Jimin, permitiendo que este se acercara a su alfa.
—Yoonie... ¿Qué sucede? —preguntó tomando su mano.
Apretando sus labios, el alfa observó al hermano de su pareja por unos segundos más antes de suspirar y pasar su mano libre por su cabello rubio.
—Jungkook llamó, es Hoseok, alguien le disparó —respondió finalmente Min, logrando que todo el color escapara del rostro del pequeño alfa erizo.
—Es-está... Él... Esta... —balbuceó Taehyung y Yoongi inmediatamente negó.
—No, según lo que me dijo Jungkook, no parece ser una herida peligrosa ni llegó a una zona vital, él aún está consciente —respondió contemplando como su pareja se alejaba para ir al lado de su hermano.
—Vámonos —pidió Jimin con preocupación.
—Si llega a ser algo más serio, llámenme —pidió Namjoon siguiéndolos a la entrada de su departamento—. Estaré ahí lo más pronto posible —prometió.
—Lo tendré en cuenta —asintió Yoongi, siguiendo a los pequeños erizos fuera del apartamento.
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Hola mis copitos! Que tengan un buen inicio de semana y se me cuidan un montón 💕
Un besote y un abrazote <3
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