《🌻》

Toda la casa se hallaba impregnada del espléndido aroma de los postres que estaban siendo preparados en la cocina. La naricita de cierto omega de orbes azules, percibió el tan delicioso aroma, dejando salir un suspiro largo y lleno de satisfacción, ansiando probar las galletas que estaban en el horno. 

Sonrió suavemente cuando escuchó los tiernos balbuceos del dulce bebito que se encontraba frente a él en su cómodo portabebé sobre la mesa de madera del pequeño comedor ahí dentro. Entonces el joven omega volvió su atención al pequeño que lo miraba con curiosidad moviendo hábilmente su lindo chupete. 

Taehyung cubrió su rostro con sus manos, confundiendo al pequeño SeokGi quien abrió mucho sus ojos al ya no ver a su encantador tío. El omega se rió para después alejar sus manos y decir con voz tierna un "¡Aquí ta!" A SeokGi le pareció lo más increíble del mundo que sonrió emocionado, sacudiendo sus piecitos y manitas al volver a ver el rostro de su tío.

Hace dos noches que Hoseok se había ido a Japón, así que desde entonces, Taehyung se había quedado en casa de Jimin y YoonGi. El primer día, Taehyung se sumió en un profundo sueño después de tomar un supresor, luego de que Hoseok se fue y no despertó hasta veinticuatro horas después, quizás su lobo había resentido la ausencia de su alfa, por eso tomó la decisión de dormir... Hoseok estaba muy preocupado al enterarse de que su pequeño se hallaba en un profundo y largo sueño, así que no paró de llamar a su hermano menor preguntándole si ya había despertado. Jimin lo tranquilizó, diciéndole que era normal después de toda la acción del celo, pues Taehyung necesitaba recuperar energías.

El omega dejó salir un suspiro al pensar en su alfa y no tenerlo con él. De verdad lo extrañaba, necesitaba sentir su aroma y abrazarlo mucho mucho, pero él no se encontraba y eso lo ponía muy triste. Soltó un suspiro más, llevando su mano a su pecho al sentir a su lobito lloriquear por no tener a su alfa cerca…

—Hoseok… 

El omega miró al bonito cachorrito frente a él...de repente le dieron muchas ganas de un abrazo, así que lo lo tomó entre sus brazos y lo acomodó entre su pecho y hombro. Suspiró aliviado al sentir la calidez del pequeñito, posando su nariz y labio en los oscuros cabellitos, inhalando el encantador aroma a leche y talco que lo relajaba… pero no tanto como el de su alfa…

Movió su cuerpo a los lados, tratando de arrullar al bebito quien no parecía incómodo con el abrazo. El omega cerró sus ojos, llevando su bella mano a la nuca del cachorrito para evitar que la cabecita se fuera para atrás. Inhaló una vez más el encantador aroma a bebé esbozando una pequeñita sonrisa… ah~ SeokGi le parecía tan bonito y chiquito.

Taehyung estaba tan hundido en sus pensamientos que no se dio cuenta cuando YoonGi entró a la cocina con un par de bolsas de papel. Hasta que este las colocó sobre la mesa justo a lado del portabebé. Ambos se miraron, pero el alfa sonrió al ver cómo Tae abrazaba a SeokGi. —¿Estaba llorando?

—¿Uh? —parpadeó. —Oh, no. —esbozó una minúscula sonrisa acariciando la espaldita del lindo cachorrito. —Tenía ganas de abrazarlo, SeokGi huele muy bonito.

YoonGi rió de acuerdo sacando las cosas de las bolsas. —Lo sé, el aroma a bebé es muy bonito. —sacó una envoltura colorida y la colocó sobre la mesa, frente al omega. —Toma, te traje unos dulces, no sé si te gusten, pero a mí parecer están deliciosos.

Los ojitos azules se enfocaron en la linda bolsita con ositos y figuritas de colores. —¿Para mí?

—Sip. —dejó un par de palmaditas en los rubios cabellos, para después deslizarse a la alacena y acomodar unas cuantas cosas de las que había comprado. —Son gomitas, son dulces y un poco ácidas, suelo comerlas cuando estoy en mi estudio, también a Jiminnie le gustan mucho.

—Uh, g-gracias… —murmuró sintiendo sus mejillas enrojecer.

—No es necesario que agradezcas. —sonrió restándole importancia con su mano. Caminó por la cocina hasta llegar al horno y asomarse para ver qué tal iban las galletas que su amado Jiminnie había preparado. —Oh y si quieres, puedes decirme YoonGi o hyung, como más te guste.

Taehyung asintió, acomodando a SeokGi en sus brazos. No pudo evitar sonreír al ver al pequeñito bostezar, que peinó con su mano los desordenados cabellitos del cachorrito, mientras el alfa regresaba para sentarse en la silla frente a Taehyung.

—¿Verdad que mi hijo es muy hermoso?

El omega miró al alfa mientras asentía repetidas veces con sus ojitos sonrientes. —¡Mucho!

—Es porque se parece a mi. —sacudió sus hombros con modestia.

El omega rió bajito, al mismo tiempo en el que Jimin entraba a la cocina, acariciando su estómago con una mueca de incomodidad. YoonGi se dio cuenta del sentir de su omega en un santiamén, que en solo unos segundos ya lo llevaba de la cintura, hasta sentarlo en la silla que anteriormente él se hallaba sentado.

—¿Qué sucede? —se inclinó frente a él sujetando sus manos. Jimin lucía levemente pálido y eso lo alarmó. —Sentí algo extraño en nuestro lazo cuando estaba en la tienda pagando, ¿Te encuentras bien?

Taehyung también miró a Jimin con preocupación, porque hace como veinte minutos, había salido de la cocina con prisas sin decir absolutamente nada.

—Tenía náuseas… y vomité. —contó pasando su mano por su estómago con un puchero.

El alfa detuvo sus movimientos, mirando alternativamente los ojos de su omega. Relamió sus labios mientras sentía su corazón detenerse por unos milisegundos, viendo como chico sobaba su estómago. —¿Vomitaste?

Jimin asintió, introduciendo su mano libre en el bolsillo delantero de su hoodie amarillo. YoonGi tragó grueso cuando vio cómo de ese lugar, salía una pequeña y muy conocida varita blanca. —Me vi… en la obligación de hacer esto.

—Ji-Jiminnie… —ahora se hallaba más pálido de lo usual por la situación tan inesperada en la que se encontraban envueltos, mientras que Taehyung solo observaba todo en silencio muy confundido.

Los ojos del alfa viajaron al pequeño objeto de plástico, sin embargo cayó de bruces al suelo cuando vio el resultado. Jimin se asustó, inclinándose frente a su alfa al verlo reaccionar de esa manera. Aunque… no tenía de qué sorprenderse, pues reaccionó casi de la misma manera cuando se enteró de que SeokGi venía en camino. 

—¡YoonGi! —Jimin sujetó su brazo. Taehyung se puso de pie, y recostó a SeokGi en el portabebé, para luego inclinarse junto a ellos e intentar ayudar para que se levantara.

—¡Dios! —exclamó el pálido. —¡Negativo! 

—¡Lo siento, lo siento! —sujetó sus manos. —No pensé que reaccionarías así después de ver este resultado.

—Es que dijiste náuseas, vómito y además te veías pálido… —suspiró. —Y luego me muestras la prueba… Pensé que ya habíamos encargado un hermanito para SeokGi… 

—Hemos tenido mucha precaución, Yoonie… —lo ayudó a levantarse. —Es solo que no pude evitar hacer la prueba al tener esos síntomas, la hice nada más para asegurarme.

YoonGi miró a su omega, después a Taehyung y de nuevo a Jimin. —Ya sé que te causó eso, anoche te comiste lo último que quedaba de la cena de navidad —negó sujetando la cintura de su pareja, hasta unir sus cuerpos. —te dije que podría caerte mal.

El omega abultó sus labios y recargó su frente en el hombro derecho de su alfa, quien acariciaba su espalda tratando de ayudarle a sobrellevar el malestar. En cambio Taehyung, se quedó de pie jugando con sus dedos mientras miraba a la melosa pareja. Un pequeño suspiro brotó de sus labios al pensar en Hoseok… en serio lo extrañaba mucho.

🌻

El atardecer coloreaba todo el lugar en tonos naranjas, dando el aspecto de un film antiguo. Un par de omegas disfrutaban de la tarde, viendo una película animada en el living, mientras comían frituras y dulces, cortesía del alfa de la casa, quien se fue a tomar una siesta junto con su bebito y así dejar a los lindos omegas disfrutar tranquilos de su película.

Aunque, Taehyung en realidad no estaba prestando mucha atención. Se estaba distrayendo de manera constante, al llevar su mirada al celular en su regazo, esperando a que timbrara y la pantalla se encendiera con el nombre de Hoseok indicando que lo estaba llamando… pero nada.

Desde que se conocieron, Taehyung jamás había sentido la necesidad de estar tan cerca de Hoseok, de abrazarlo y sentir su aroma. Si pasaba que lo extrañaba mucho, pero esta vez es como si tuviera meses sin verlo, y su lobito estaba de acuerdo porque también estaba inquieto… y aunque Taehyung no lo entendía, se debía al reciente celo. El no haberse alejado el uno del otro en este par de días, en serio lo había afectado, que ahora tenerlo lejos le hacía extrañarlo y necesitarlo con muchísimas ganas.

Taehyung solo deseaba abrazar a su alfa, recostarse sobre su pecho, mientras escucha sus latidos, percibiendo su encantador aroma y dormirse con la calidez que su cuerpo emanaba, mientras lo rodeaba con sus brazos.

Jimin volteó a ver al omega menor con un puchero prominente en sus labios al darse cuenta de que no le estaba prestando atención a la película. Sabía que Taehyung extrañaba a Hoseok y que por eso se encontraba distraído esperando a que por lo menos le hiciera una llamada. 

El timbre sonó y segundos después, Jimin iba camino a la puerta principal, para ver quién era. Se puso de puntitas para mirar por el picaporte y así abrir rápido. —¡Jin!

—Hola, Jim- o-oh… —el omega más bajito abrazó por sorpresa al más alto, haciéndolo perder un poco el equilibrio. —Vaya, tenías muchas ganas de verme. —Jimin le sacó la lengua después de separarse con una risita y permitirle adentrarse a su hogar después de quitarse los zapatos y el enorme abrigo. —Ah~ aquí dentro está calientito…

Jimin se rió bajito. —Sip, en esta temporada tenemos el termostato prendido casi todo el tiempo. —olfateó a su amigo más de cerquita. —Oye Jin, hueles-

—¡Oh por dios! Taehyung está aquí. —interrumpió sin querer al encontrarse con aquel par de ojitos azules. —Pensé que Hoseok lo había llevado con él. —caminaron hasta el living donde el precioso omega los esperaba.

Jimin negó, para después murmurar muy bajito. —Taehyung estaba en celo, Hobie no se quería ir y dejarlo solo.

Jin formó una perfecta o con sus labios ante tal información. Una vez llegaron al living, Taehyung se puso de pie para abrazar al omega mayor con alegría. No lo veía desde la fiesta de navidad en la que se habían divertido mucho.

—¿Cómo estás, ojitos lindos? —preguntó Jin, sentado a lado de Taehyung en la alfombra. El joven omega soltó una baja risita avergonzada porque le habían dicho "lindo".

—Triste —confesó con un suspiro. —extraño a Hoseok… ya quiero que regrese.

Tanto Jimin como Jin soltaron un "aww" al mismo tiempo. —Te entiendo… —acarició su espalda. —Namjoon y Jungkook se fueron con él a Japón.

El joven omega ladeó su cabeza al escuchar nombrar a Jungkook, sin embargo no le tomó importancia al nombre de Namjoon, pues a él no lo conocía. —¿También estás triste porque Jungkook se fue?

—Sip, pero pronto regresarán, ¿verdad, Jiminnie?

—¿Uh? —volteó a verlos con la boca llena de papitas fritas. —Mhm, promto…

Los otros dos omegas se rieron al ver a Jimin con sus mejillas infladas de papitas, sus favoritas. Jin tampoco se contuvo y comenzó a comer frituras y dulces, no podían culparlo si se le antojaba algo, era culpa del cachorrito que crecía en su interior. 

Los tres se concentraron en terminar de ver lo que le faltaba a la película, sin dejar de comer bocadillos mientras reían. Eso hasta que una figura cruzó el umbral con pasos tranquilos. Los tres pares de ojos se dirigieron al alfa que se encontraba de pie con sus ojos entrecerrados haciéndolo lucir con un gatito bebé, sus mejillas con un suave tono rosado debido a la somnolencia y sus labios tiernamente abultados mientras vestía solo con un pantalón gris de pijama, con su cabello revuelto y el torso completamente desnudo dejando a la vista la pálida piel y su sutilmente marcado abdomen. En su pecho descansaba su lindo bebito, tranquilamente dormido con su gordita mejillita recargada en la cálida piel de su padre, escuchando los latidos de su corazón. YoonGi lo sostenía sólo con su pálido y fuerte brazo izquierdo, en tanto soltaba un bostezo mientras restregaba su ojo con su mano libre y después rascaba su nuca dando pasos perezosos.

—Ya decía yo que olía raro aquí… —murmuró con voz ronca, de pie detrás del sofá. 

—Sí, también me da gusto verte, YoonGi. —habló SeokJin con sarcasmo.

El pálido alfa le sacó la lengua acariciando la espalda de su cachorrito. —¿Y ese milagro que no vienen tus guardaespaldas contigo?

—Qué te importa. —también le sacó la lengua, haciendo que YoonGi arrugara la nariz y olfateara disimuladamente al aire.

El entrecejo de YoonGi se suavizó cuando Jimin se acercó a él y dejó un besito en su mejilla y otro en la cabecita de su cachorrito. El alfa le susurró algo al oído a su omega mientras este asentía, dándole una discreta mirada al omega mayor en la alfombra.

Minutos después, de preparar el biberón de su cachorrito, YoonGi regresó a la habitación de arriba, volviendo a dejar a los tres omegas en el living. La película había finalizado, y los tres se pusieron a charlar, solo que Taehyung apenas decía palabra alguna por estar viendo la pantalla apagada de su celular: él seguía esperando a que Hoseok le llamara.

—Tranquilo, pequeño… —habló Jin con voz calma, acariciando los cabellos del menor. —Pronto te llamará. Lo extrañas mucho ahora porque recién estuviste en celo…

—Lo cual es normal, porque esos días no se separaron para nada… —codeó Jimin con una risita.

—¿Qué tanto hicieron ustedes dos como para que lo extrañes tanto? —cuestionó SeokJin en broma con una baja risita llevándose una papita a la boca.

Taehyung parpadeó mirando a cada lado, pues él se hallaba en medio de los dos y ambos lo miraban con diversión. —U-Uh… Hoseok me hizo sentir bien… me tocó aquí —señaló a su regazo. —Y también acá-

Jadeó sorprendido cuando Jimin cubrió su boca con una increíble velocidad. —¡No era en serio que nos contaras lo que mi hermano y tú hicieron!

—¿Uh? —tomó una bocanada de aire después de que su boca fuera descubierta. Miró a Jimin quien se encontraba avergonzado y a SeokJin quien se estaba aguantando una carcajada. Ladeó la cabeza confundido. —Pero… Jin hyung preguntó…

Y entonces SeokJin explotó en carcajadas logrando confundir más al precioso ojiazul. Jimin cubrió su rostro con sus bonitas manos, escondiendo su sonrojo de vergüenza. No pensó que Taehyung podía contar todo como si nada… sin embargo, no pudo evitar reír también al escuchar a su amigo reír. La risa de Jin era en serio graciosa y contagiosa, sobre todo al ver su rostro y cuello rojo, mientras sujetaba su barriga soltando grandes carcajadas.

—Aaah… —el omega castaño respiró profundo, limpiando una lágrima que recién brotaba de uno de sus ojos por la risa. —Eres tan adorable…

—Tae… —llamó Jimin con un suspiro. —No debes contarle a nadie la intimidad que tienes con tu pareja. —aclaró mientras los ojitos azules se abrían con impresión. —Eso es algo privado entre ustedes dos y nada más. Entiendo que eres nuevo en todo esto y por suerte fue a nosotros a quienes nos lo dijiste, pero no lo hagas con nadie más, ¿De acuerdo? —Taehyung asintió con un sutil rubor en sus mejillas relamiendo sus labios. —Recuerda que las cositas que hagan mi hermano y tú en la cama, las debes de mantener en privado y hablarlo solo ustedes dos. —acarició los platinados cabellos con una sonrisita. —Así que si alguien te pregunta sobre el tema, solo dile que eso no es de su incumbencia o simplemente no digas nada de nada.

Taehyung asintió escuchando con atención cada una de las palabras dichas por el rubio. Jimin le lanzó un pequeño cojín a SeokJin a la cara para que también dijera algo y no solo se estuviera riendo. Después de todo, él fue el que hizo la pregunta.

—Ah, sí, sí… —aclaró su garganta. —Esa clase de experiencias, solo las debes de guardar para ti y para Hoseok. —pasó una mano por su cabello para después ventilarse con la misma. Reírse tanto en serio le sacó calor. —Me refiero a que, no es ningún secreto que todas las parejas hacen "cositas" o como tú dices "se tocan", pero es preferible solo comentarlo con tu pareja y no con otras personas. 

Jimin asintió y los ojitos de Taehyung brillaron al saber esa información. Bien, había aprendido algo nuevo.

—¡Pero nosotros somos tus amigos! —exclamó de repente el omega mayor acercándose más a Taehyung, quien dio un saltito por tan repentina exclamación. —Aquí hay confianza, ¡A nosotros si nos puedes contar! ¿Verdad, Jimin?

—¡Cierto! —saltó Jimin a su lado pegándose más a él, dejando al joven ojiazul casi como un sándwich. —¡Somos tu amigos! Además, te podemos aconsejar o responder alguna duda que tengas.

—¿Amigos? —Taehyung miró a las dos personas muy juntas a él. Una sensación bonita y cálida apareció en su corazoncito que le hizo sonreír y sentir un lindo cosquilleo en sus mejillas. —¿Soy su amigo?

Jin y Jimin intercambiaron miradas enternecidas para después recargar sus cabezas en los pequeños hombros de Taehyung, mientras sujetaban sus manos y le decían que por supuesto eran amigos. Eso puso muy feliz al pequeño omega de ojitos azules, él siempre había querido tener muchos amigos, pero solo conocía a el señor Choi, a MinHo y a Yoona… después, conoció a Hoseok a quien en su tiempo también lo consideró su amigo. Luego conoció a Jimin quien le cayó muy bien tan pronto cruzó palabras con él. YoonGi… ¿YoonGi también querrá ser su amigo? Y ahora SeokJin, él había sido muy amable desde que se conocieron y escucharle decir que lo considera su amigo, lo hizo muy feliz.

Así que por un par de minutos, estuvieron ahí mismo, dándole abracitos y haciéndole cosquillas a Taehyung quien simplemente se dejaba hacer. Le hacía muy feliz tener amigos.

—Entonces… ¿Vas a contarnos? —preguntó SeokJin sentándose frente a Taehyung.

Los dos omegas lo miraban con atención, esperando con muchísima curiosidad y expectación el saber cómo la pasó Taehyung en su celo. Pero el dulce omega simplemente mordió su labio inferior y jugó con sus dedos, confundiendo a los otros dos.

—¿Tae?

—¿Uh? —alzó la vista para así mirar a sus amigos que lo miraban confundidos.

—¿No nos vas a contar lo de tu celo?

—Oh… p-pero ustedes dijeron que no le dijera a nadie… y si alguien me preguntaba, qué mejor no dijera nada… y eso hice. —rascó su nuca.

Jimin se rió sujetando sus manos. —Lo sé y está bien, pero como te dijimos, somos tus amigos, puedes confiar en nosotros.

Taehyung miró a ambos a los ojos, sintiendo sus mejillas enrojecer, para entonces asentir y aceptar contar lo que recordaba. SeokJin y Jimin se miraban emocionados al escuchar a Taehyung contar cómo se sentía gracias a los toques y caricias de Hoseok.

—Y yo… u-uh tenía mucho calor… —tocó su abdomen bajo. —Me ardía mucho aquí y… y me dolía acá… —señaló su regazo con timidez. —Pero Hoseok me ayudó a que ya no me doliera… y me preguntaba si podía intentar algo más…

El par de omegas frente a él chillaron emocionados al escuchar ese relato y otros más de ellos. Estaban realmente sorprendidos por el autocontrol de Hoseok. —Vaya… si no estuviera enlazado y ustedes no se hubieran conocido, habría ido detrás de Hoseok. —comentó pasando una mano por sus castaños cabellos. —Me asombra muchísimo lo educado y paciente que ha sido contigo, Taehyung.

—¡También estoy sorprendido! Yo pensé que ya lo habían hecho… —murmuró Jimin lo último, encogiendo sus piernas para recargar su mentón en sus rodillas y así poderse abrazar.

—¿Hecho? —el ojiazul miró al rubio.

SeokJin y Jimin intercambiaron miradas nuevamente, debatiéndose en si decirle o no. —Sí… ya sabes, tener relaciones sexuales.

—Que Hoseok ponga su… —Jin rascó su nuca pensando una manera adecuada de decirlo. —que ponga su… en tu… ¡Así como usó sus dedos ahí!

Taehyung frunció el entrecejo sin entender muy bien  a lo que se referían. —¿Su qué? —el omega mayor rodó los ojos y así acercarse al lindo ojiazul para susurrarle al oído. El sonrojo de Taehyung se extendió hasta sus orejas, dejando en evidencia su notoria vergüenza después de que Jin se alejó.

—¡¿Ya viste lo que hiciste?! —Jiminnie lanzó los restos de papitas y palomitas contra Jin. —¡¿En serio se lo dijiste?!

—¡En algún momento tenía que saberlo! —decía cubriendo su cara de las frituras.

—¡Mi hermano se va a enojar! ¡Corrompiste a Taehyung! 

Jimin se colocó sobre sus rodillas y así caminó hasta dónde Jin, quien hizo exactamente lo mismo, pero este huyó a esconderse detrás de Taehyung, quien a pesar de aún encontrarse avergonzado, se sorprendió al ser usado como escudo.

—¡Taehyung, ayúdame!

—¡Ven aquí, pervertido! 

Los dos estaban jaloneando al pobre de Taehyung como si fuera un muñeco de trapo. El joven omega iba a decir algo, de no ser por cierto aroma suave y dulzón que llegó a su naricita… el aroma le parecía bastante familiar… ¿Dónde lo había olido antes?

—Huele… —miró a los lados para ver si YoonGi no había regresado con el cachorrito, pero no fue así, solo estaban ellos tres. —Huele como a SeokGi… pero más dulce… 

Esas palabras detuvieron la pequeña y nada peligrosa riña que había entre el par de omegas, mientras veían como Taehyung entre cerraba sus ojitos y olfateaba al aire cual cachorrito… SeokJin relamió sus labios cuando el omega se acercó a él olfateando más de cerca, dándose cuenta casi de inmediato, de quién provenía ese aroma.

—Me gusta tu aroma. —la vocecita de Taehyung salió suave, ese aroma lo había hecho sentir tranquilo, casi como el del bebito de la casa. —¿Por qué hueles como SeokGi?

Jin volvió a relamer sus labios al ser ahora él, el centro de atención. Jimin se cruzó se brazos con una ceja enarcada esperando a que él mismo lo dijera.

—Bueno, porque… —llevó sus manos a la orilla del suéter de lana color rojo que portaba y lo alzó, dejando ver una porción de piel, que dejaba a la vista su ombligo y un pequeño abultamiento apenas notable. —Estoy esperando un bebé…

Un chillido y unos aplausos resonaron en toda la casa en cuanto esas cuatro palabras fueron soltadas. Jimin se lanzó a abrazar a su mejor amigo teniendo la precaución adecuada, mientras este le correspondía sintiendo sus ojos cristalizarse.

—¡Pensé que no lo dirías nunca! —chilló separándose del omega llevando sus manos al muy pequeño, pero firme vientre. —¡Tu aroma era tan obvio! Incluso YoonGi se dio cuenta y vaya, ¡Hasta Taehyung! 

—Si lo iba a decir… —sonrió restregando sus ojos tratando de limpiar las lágrimas. —Dios, estoy tan sensible, ahora lloro por todo…

—Pero, ¿Cuando te enteraste? ¿Cuanto tienes? —Jimin estaba realmente emocionado.

—Cuando me embriagué a más no poder… —las lágrimas regresaron y una expresión triste se formó en su rostro mientras cubría su vientre con ambas manos. —Jiminnie, casi lo pierdo… gracias a todo lo que bebí, estuve apunto de abortar… y-yo no sabía que estaba en cinta, si no jamás habría bebido una sola gota de alcohol.

—No, no… —lo abrazó de nuevo dejando caricias en su espalda. —Todo está bien, no fue tu culpa, ¿De acuerdo? No tenías ni idea.

Jimin se mantuvo abrazando a SeokJin por un par de minutos para tratar de calmarlo. Mientras que Taehyung veía a los dos con timidez, jugando con un pedazo de servilleta entre sus manos. ¿Un bebé? Pensaba una y otra vez. Llevó su vista al abdomen plano del omega mayor, poniendo una gran duda en su cabeza.

—¿Un bebé? —la voz de Tae hizo que los otros dos le prestarán atención. —¿Tienes un bebé en tu barriga? —SeokJin sonrió limpiando sus lágrimas para después asentir. —Pero, ¿Por qué es tan pequeña?

—Oh, porque apenas tengo dos meses. —se rió llevando sus manos a su abdomen bajo de manera inconsciente. —Un bebito dura nueve meses dentro de la barriga y conforme pasan esos meses, la barriga va creciendo y el bebito también, ¿No lo sabías?

Negó despacito pero maravillado por la información que acababa de escuchar. —¿Nueve? —Jin y Jimin asintieron. —Entonces… —miró su mano contando los meses con sus dedos y así sacando sus propias cuentas. —Mayo siete… Junio ocho… ¡Julio! ¡Tu cachorrito nacerá en Julio! —exclamó con emoción mostrando sus dos manos frente a sus dos amigos. —¡Mira ya conté! Noviembre, diciembre… —decía mientras señalaba sus dedos y los dos omegas lo miraban enternecidos. — Junio, ¡Julio! ¡Son nueve meses! ¿Verdad?

—Tienes toda la razón, pequeño. —dejó un par de palmaditas en la cabeza del menor, viendo lo adorable que lucía emocionado. 

—¡Jiminnie! —se dirigió a él. —¡SeokGi tendrá un amigo igual de pequeñito y bonito!

—¡Es verdad! —saltó él, pero de inmediato fue interrumpido por un celular timbrando… bueno, dos de ellos.

Taehyung se arrastró hasta el sofá donde había dejado su celular, lo tomó entre sus manos y una sonrisa enorme apareció en su rostro. —¡Es Hoseok! —se puso de pie comenzando a saltar muy emocionado por todo el living. —¡Es Hoseok! —Sin más, se dejó caer en el sofá para deslizar su dedo en la pantalla y contestar. —¡Hoseok!

—¡Hola, cachorro! —respondió con el mismo entusiasmo que su omega. Rápidamente sintió como sus energías volvían.

—¡Hoseok! ¡Te extraño mucho! —exclamó haciendo sonreír al par de omegas en el living…. Taehyung era tan tierno.

—Yo también te extraño… —murmuró Hoseok enternecido sentándose en la enorme cama de hotel. —Te extraño, como no tienes idea… —las mejillas de Taehyung se pusieron rojitas. —Cuéntame, ¿Cómo te has sentido? 

—Tristeeee. —respondió de inmediato. —Me pone muy triste que no estés aquí…

—Lo siento mucho, cariño… pasado mañana regreso, te lo aseguro. —suspiró pasando una mano por sus cabellos. —A mi también me pone triste no estar contigo y más con este frío en el que podríamos estar acurrucados en la cama dándonos besitos y abrazos… —insinuó dulcemente, logrando que el sonrojo de Taehyung se extendiera hasta las orejas.

Aunque la idea no le parecía bastante mala, pues al joven omega le agradaba el simple pensamiento de ellos dos acurrucados en la cama, cubiertos con una suave manta brindándose calor mutuamente, comiendo palomitas mientras ven una película navideña y se regalaban muchos besitos y caricias, como lo habían estado haciendo últimamente.

Por otra parte, SeokJin también había respondido a al timbre de su celular. Era una llamada del teléfono de Jungkook, pero este lo había puesto en altavoz y así tanto él como Namjoon, pudieran hablar y escuchar a su amado omega.

—¡Jinnie! ¿Estás bien? —cuestionó JK con prisa apenas escuchó la voz del mayor.

—Te sentimos muy triste a través del lazo —la voz de Namjoon se escuchó ahora. —¿Te encuentras bien? ¿Qué pasó? 

El omega parpadeó. Es cierto, debería controlar mejor sus emociones, pero en ocasiones se le olvida que puede transmitirle a sus alfa todo su sentir por el lazo. Aún no se acostumbra del todo a estar marcado. —Estoy bien, nuestro cachorrito y yo lo estamos, tranquilos… —suspiró dándole un manotazo a Jimin en el brazo quien lo miraba burlón. —Vine a visitar a Jimin y le conté de mi embarazo, y sobre lo que casi pasa… saben que estoy muy sensible por ello… lamento si los preocupé.

Jimin miró a su amigo ahora dejando de juguetear con su brazo. Jin si se había puesto muy triste al relatar que casi perdía a su bebé y eso por supuesto que sus alfas lo sintieron, obviamente tuvieron que preocuparse. Un puchero apareció en los labios de rubio omega, para ahora llevar su vista al joven omega sentado en el sofá, quién también hablaba por celular con sus mejillas muy rojitas y una sonrisita en sus labios que se negaba a desaparecer.

Ahora él extrañaba a su alfa al ver a sus amigos hablar con los suyos. Pero el sentimiento de querer al suyo, no tardó mucho en desvanecerse cuando el delicioso aroma a chocolate y café invadió sus fosas nasales, acompañado del dulce aroma a talco y leche de su bebito. Jiminnie giró su cabeza al umbral del living encontrándose a su alfa de la misma manera que hace un rato, así que no dudó en ponerse de pie y correr a él.

—Hey… —YoonGi lo sujetó de la cintura al sentir a su chico acercarse a su cuello y clavículas, olfateando con necesidad. —¿Todo bien?

—Te extrañé… —se alzó un poquito más para dejar un besito en la mejilla rosita de su mayor. —Ellos están hablando con sus alfas, así que dejaron de prestarme atención… —abultó sus labios luciendo tan malditamente adorable. YoonGi colocó sus dedos en el mentón de su omega con dulzura. —Así que verlos hablar con sus alfas, me hizo extrañar al mío… 

—¿Es eso? —sonrió plantando un delicado besito en los esponjosos labios de su pequeño y amado esposito. —SeokGi y yo también te extrañamos… 

YoonGi sujetó bien a su cachorrito con su brazo, mientras que con el otro volvió a tomar a su omega de la cintura y así apoderarse de sus dulces labios. Por otro lado, SeokJin aún estaba al teléfono hablando con su par de alfas insistiendo en que todo estaba bien y que no tenían de qué preocuparse…

Y por último, Taehyung se hallaba muy feliz hablando con Hoseok, escuchándolo hablar de las preciosas decoraciones llenas de luces navideñas en las calles de Tokio. Cuando Hoseok las vio, deseó tanto que Taehyung las pudiera haber visto, así que tomó algunas fotografías y se las enviará a su celular… aún así, el precioso omega no dejaba de repetir cuánto extrañaba a su alfa y que en serio ansiaba abrazarlo mucho…

🌻

Diez y media de la noche, y Taehyung no podía conciliar el sueño. El pobre daba vueltas y vueltas en la cama, abrazando su lindo pollito de felpa, envuelto en una camiseta de Hoseok para tener su aroma con él.

Hace una hora estaba en el living viendo una película de acción con YoonGi y Jimin, pero cuando dieron las nueve con treinta minutos, sus párpados comenzaron a pesar, así que les dio las buenas noches y subió a la habitación en la que se estaba quedando. Se colocó su pijama para finalmente acostarse, donde un par de minutos después, su celular comenzó a sonar con una llamada entrante de Hoseok, solo para hablar con él hasta que se quedara dormido y desearle buenas noches.

Y si, estaba quedándose dormido, pero cuando menos se dio cuenta, tenía los ojos abiertos viendo a la ventana y todo rastro de sueño había desaparecido, al mismo tiempo en el que su mente comenzó a divagar… Hoseok apareció en su cabeza, de verdad extrañaba tanto tenerlo con él. Se había acostumbrado tanto a qué ambos durmieran juntos entre los brazos del otro, que al parecer ahora era más difícil conciliar el sueño sin él.

Un puchero se formó en sus labios, a la vez en la que se giraba de nueva cuenta en la cama… ahora era su casa la que apareció en su mente… su granjita, sus poquitos animalitos… de verdad esperaba que el Señor Choi esté cuidando bien de ellos… extrañaba su granjita de verdad. En estas fechas, lo que él hacía era era tomar chocolate caliente con su abuelita para mitigar el crudo frío de diciembre. Su abuelita… oh como extrañaba a su abuelita.

Los ojitos de Taehyung se cubrieron de lágrimas al recordarla, aún le dolía mucho su pérdida. Extrañaba su voz, sus abrazos, sus mimos, sus consejos, sus enseñanzas, su sonrisa… todo.

Si poder contenerse, el melancólico omega se puso de pie, abrazó su pollito y salió de la habitación entre lágrimas silenciosas para no despertar a Holly que dormía adorablemente en una pequeña camita a lado de la suya. Se detuvo frente a la puerta de la pareja de la casa y sin más, colocó su mano en el pomo y giró despacio, encontrándose con la habitación iluminada por la tenue luz de una lámpara.

El omega dio dos silenciosos pasos adentro, pero se detuvo en su lugar cuando escuchó ciertos sonidos… ¿Esos eran besos? Avanzó un poquito más adentro hasta que se encontró con la cama y a Jimin sentado en el regazo de su alfa, mientras los dos se comían la boca. 

YoonGi tenía sus manos dentro de la pijama de su omega, acariciando su cintura. Mientras que Jimin se mantenía sobre su alfa, soltando bajas risitas sin despegar sus labios de los de su mayor. Taehyung sintió sus mejillas calentarse de vergüenza así que mejor decidió irse… pero para su mala suerte, chocó suavemente con un mueble, logrando hacer un poco de ruido, así obteniendo un jadeo de la caliente pareja, asustándose de ver al joven omega ahí.

Jimin se bajó del regazo de su alfa apenas vio a Taehyung adentro de la habitación. Afortunadamente apenas iban empezando con su sesión de besos así que aún se encontraban vestidos. 

El alfa miró al omega confundido. —¿Taehyung?

—¡Te dije que podía estar despierto! —el rubio le dio un manotazo a su alfa en el pecho, que aunque no fue con mucha fuerza, el área quedó rojiza.

—Y-Yo… —bajó la mirada avergonzado, sintiendo las lágrimas volver a bajar.

—Heeey —Jimin se bajó rápido de la cama y caminó hasta él. —¿Te pasó algo? ¿Por qué lloras?

Los labios de Taehyung formaron una firme línea, mientras sus mejillas se abultaban tratando de contener sus ganas de soltarse a llorar. Jimin colocó su mano en su espalda y lo llevó a la cama para sentarlo en la orilla. El omega mayor se inclinó frente a él sujetando una de sus manos, viendo desde abajo como sus ojitos estaban cubiertos de lágrimas y estas se deslizaba traviesa mente por sus rojitas mejillas.

El pálido alfa se colocó la parte de arriba de su pijama y se arrastró hasta la orilla para quedar sentado a lado del triste ojiazul. Tenía que admitir que le preocupaba que algo le hubiera pasado. Inclusive ni le había molestado que interrumpiera su momento con Jimin. —Hey, ¿Te duele algo? ¿Te lastimaste?

El omega simplemente negó con una expresión muy triste en su rostro. —¿Por qué lloras, Taehyung? —preguntó Jimin con voz calma. —¿Es porque extrañas a mi hermano?

Negó, aunque bueno, en parte tenía razón, si extrañaba mucho a Hoseok, pero ésta vez se sentía más triste por otra cosa…

—¿Tuviste alguna pesadilla? —preguntó YoonGi esta vez recordando que Hoseok les había contado que Taehyung había tenido pesadillas después de la muerte de su abuelita. Quizás ahora que no tenía al alfa con él, estas pudieron haber regresado.

Pero Taehyung negó nuevamente. Abrió su boquita dejando salir un suspiro tembloroso acompañado de más lágrimas. —Y-Yo… extraño m-mi casita… —lloró. —q-quiero irme… quiero irme a mi casa...

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Asdfghjk la diferencia de los Taehyung de Clumsy Alfa y My Sunshine xd crdts: hopev_blossom ❣️ Síganme en ig: @soo.nyah y envíenme sus memes y/o dibujos❣️🌻

¡Hola mis preciosos girasoles! Me disculpo si el capítulo quedó muy aburrido ;; pero en fin ¡¿QUÉ LES PARECIÓ?! ¿Qué creen que pasará en el siguiente? Amo leerlos💓

¡Por cierto! Ya vi desde donde me leen y omg ¡Muchísimas gracias por el apoyo!💓 Ahora les tengo otra pregunta:
<<¿Cuál es su capítulo favorito de My Sunshine? ¿Y por qué?>> Asdfgh o su escena favorita. La mía es cuando los lobos aparecen y logran que Tae y Hobi se besen❣️ ¡Estaré leyéndolos!

Pd-. Feliz cumpleaños a mi bello girasol Fátima que está en el grupo de WhatsApp, felicidades bb💓

AaaAaa ya no sé que más decir ;; solo que se cuiden muchísimo y que los amo muchisisisisisisísimooOoo les mando un enorme abrazo y gatitos. Amén y respeten a todos✨ ¡Nos leemos en el próximo capítulo! No olviden que Sony los ama muchomuchomucho🥺🌻✨💓🌻✨🌻💓🌻✨🌻💓🌻✨🌻