🌻•Capítulo 39

《🌻》

Las pasos resonaba por todo el apartamento. Un par de figuras sentadas en la cama, observaban a la otra que no dejaba de moverse de un lado a otro por todo el lugar, mientras mantenía su celular entre su oreja y hombro, en tanto también trataba de terminar de arreglarse.

La fiesta empezaba a las nueve y media de la noche. Y ¿Qué hora era? Las ocho. SeokJin se había quedado dormido, y culpaba a sus alfas por no despertarlo antes. Pues él al ser uno de los organizadores de la fiesta, tenía que estar una hora antes de que llegaran los invitados para asegurarse de que todo estuviera en orden.

El par de atractivos alfas, ya se hallaban arreglados y vestidos con unos pulcros y elegantes trajes blancos. Así que solo estaba allí sentados, sin decir palabra alguna, viendo a su omega terminar de arreglarse.

—¡Jiminnie no contesta! —semi-gritó frustrado. Pues ellos dos eran los que siempre se hacían cargo de organizar la fiesta.

Dejó su celular sobre el tocador, y acarició sus sienes mientras trataba de relajarse. Suspiró cuando sintió a sus alfas colocarse a cada lado de sus hombros, donde se acercaron a su cuello y dejaron un besito en sus respectivas marcas, mientras acariciaban sus brazos tratando de calmarlo.

Los aromas de sus chicos, sus caricias y besitos, lograron relajar su estrés. Suspiró dejándose mimar, hasta que su celular comenzó a timbrar. Entonces se removió sorprendiendo a sus alfas, pero aún así contestó.

—¡Jimin! ¿Dónde estás metido? ¿Por qué no respondes mis llamadas y mensajes? ¿Ya estás en la empresa? —preguntó rápido pregunta tras pregunta.

Lo siento, Jinnie… —habló bajito. —El celo de YoonGi llegó ayer y pues… tu sabes… 

—Ya entiendo, no respondias porque estabas muy ocupado recibiendo-

¡Jin! —exclamó del otro lado de la línea cubriéndose la boca de inmediato al ver a su alfa removerse en la cama.

—¿Qué? Solo iba a decir que estabas ocupado recibiendo el amor de YoonGi, es todo. —fingió inocencia.

Sí, sí ya… —rodó los ojos. —escucha, ya hice un par de llamadas aprovechando que YoonGi está dormido y los del buffet ya tienen todo listo… oh y los de la decoración de luces colgantes en la entrada acaban de terminar de instalarlo, también el equipo de sonido, y supongo que lo demás ya debe de estar listo, solo debes de ir a cerciorarte de que todo esté bien.

—De acuerdo —suspiró más aliviado. —me pone triste que no puedas ir por culpa del calenturiento de tu alfa.

Las risitas de Namjoon y Jungkook se escucharon, haciendo que Jimin se sonrojara. —¡Mira quién lo dice! Señor tengo dos alfas que me parten el culo todas las no-

—¡Yah! —lo interrumpió. —Respeta a tus mayores, niño insolente.

Nop. 

Y Jin juraría que, aunque no está viendo al joven omega, este le estaba sacando la lengua infantilmente.

El omega mayor rodó los ojos. —Ya, está bien… cualquier cosa te enviaré un mensaje y… ¿Jiminnie?

Un gruñido de YoonGi había hecho presencia, acompañado de un jadeo de sorpresa del menor cuando inesperadamente fue sujetado de la cintura. —Tengo que colgar, después me cuentas cómo estuvo la fies- 

—¿Jimin? —miró la pantalla de su celular para darse cuenta de que Jimin había colgado.

—¿Qué sucedió? —preguntó Namjoon.

—Una bestia se ha devorado a mi amigo…

Jungkook y Namjoon se miraron confundidos, para después encoger sus hombros y continuar besando el cuello de su omega, este soltó un suspiro y su piel se erizó. El alfa menor fue subiendo por su mentón, hasta llegar a los gruesos labios y atraparlos entre los suyos. Namjoon acariciaba la estrecha cintura de su mayor, dejando leves mordisco en la sensible piel de su cuello.

Los aromas de ambos alfas se intensificaron, así haciendo una increíble mezcla de vino, frambuesas, coco y nuez por toda la habitación. La mente de SeokJin se colocó en blanco mientras disfrutaba de las sensaciones. De repente la leve migraña que había comenzado a tener, desapareció tal como su estrés.

Namjoon se acercó hasta los labios de su omega, para así quitar los de Jeon de encima y ahora tener él la oportunidad de besar esos esponjosos belfos. Kook gruñó al momento en que los labios de su omega le fueron arrebatados, aún así bajó al cuello del mayor, posando su grande mano en el vientre bajo de Jin y así dejar una breve caricia con algo de posesividad. Ambos fueron testigos de escuchar como su omega ronroneaba al sentirse tan amado.

Ah~ chicos… —se separó jadeante del beso, tratando de llamar la atención de sus alfas.  —dejemos esto para cuando regresemos de la fiesta, por favor… tengo que terminar de arreglarme y ustedes solo me van a desarreglar…

El par de alfas se detuvieron y se separaron, no sin antes dejar un beso en cada mejilla de su omega… después de la fiesta, si que harían sentir muy bien a su novio...

🌻

Un dulce gorgojeo de un bebé feliz y limpio hizo sonreír a su adorado tío. Hoseok abrazó a su amado sobrino, impregnandose de su lindo aroma a leche y talco, mientras lo mimaba y le hablaba con voz aguda diciéndole que era el bebé más precioso del mundo.

Después de aquella acalorada y pequeña sesión de besos con su omega, SeokGi los había interrumpido con su llanto, avisando que tenía el pañal sucio. Hoseok fue quien lo limpió y cambió, todo con la atención de Taehyung a su lado quien trataba de aprender. El alfa había aprendido muy rápido como cambiar el pañal del cachorrito, se felicitaba mentalmente. 

Luego del cambio, le continuó la tarea de hacerlo dormir. Taehyung intentó tomarlo en sus brazos y encargarse de esa tarea, pero SeokGi nuevamente se puso a llorar, él quería al tío Hobie. Taehyung hizo un puchero al sentirse rechazado, pero Hoseok lo abrazó y llenó su carita de besitos hasta hacerlo reír. 

Después de eso, el omega se subió a la cama y optó por tomar una siesta, para aguantar estar despierto durante la fiesta. Taehyung se durmió viendo a su alfa pasear por la habitación, con el bebé en su pecho en posición ranita, mientras tarareaba una canción de cuna.

Minutos más tarde, tanto SeokGi como Taehyung ya estaban profundamente dormidos. Hoseok soltó un suspiro, plantando un cariñoso besito en los cabellitos del cachorrito en su pecho y dándole una mirada a su omega que ya se hallaba en el mundo de los sueños abrazando la almohada de su mayor.

Pensar que los perdió a ambos en aquel centro comercial lo hace sentirse realmente mal. Fue tan descuidado por confiarse, y gracias a su descuido, su omega había pasado un muy mal momento perdido entre todas aquellas personas en un lugar desconocido. Además de que inesperadamente, tuvo que reencontrarse con Rosé.

Tenía que admitir que sintió su estómago revolverse y sintió su sangre helarse al verla en la entrada de la sastrería. Sobre todo al saber que ella y Taehyung tuvieron contacto. Rosé se había portado muy bien y había sido muy amable con el rubio y se lo agradecía en serio, sobre todo por ayudarlo. Aún así, una sensación desagradable continuaba ahí, justo en su corazón.

Aún recuerda claramente cuando llegó a aquél apartamento, con la emoción a mil, con un ramo de rosas rosadas, mientras que mantenía una mano dentro de su bolsillo, tocando ansioso aquella cajita de terciopelo negro. Tenía todo planeado, pensaba llegar y sorprenderla con sus flores favoritas, entonces se besarían y probablemente ambos terminarían en la cama, para después tomar una ducha juntos y llevarla a cenar a su restaurante favorito en su mesa favorita, donde después de cenar, él se arrodillaría a su lado y sacaría aquella cajita con aquel precioso anillo que fue especialmente diseñado para ella, luego de eso él recitaría unas tontas y cursis palabras, para después hacer la tan esperada pregunta que tanto había practicado frente al espejo desde hacía semanas: ¿Te casarías conmigo?. Entonces ella aceptaría y Hoseok colocaría el anillo en su dedo, así oficialmente comprometiéndose.

Nada podría salir mal… vaya iluso.

Después de digitar la clave y entrar al apartamento, sintió náuseas al percibir cierto aroma vagamente conocido, mezclado con el aroma a cítricos de Rosé. El aroma a sexo y un poco de alcohol se hacía cada vez más intenso conforme se iba adentrando al lugar. Tomó con fuerza el ramo de rosas, cuando escuchó ciertos sonidos provenir de la habitación y las feromonas de alfa comenzaron a llegar.

Era el momento perfecto para echarse para atrás y salir de ahí lo antes posible, pero decidió continuar. Aún recuerda el momento exacto en el que su corazón se hizo añicos cuando ambos cruzaron miradas, mientras ella se hallaba debajo de aquél sujeto, enredados entre las sábanas, en la misma cama donde Hoseok y Rosé habían tenido tan bellos e íntimos momentos de pareja… Jung dejó caer el ramo al suelo y sin decir nada ni reclamar nada, solo un simple y bajo "terminamos" con su mirada cristalizada y su corazón doliendo como el infierno, salió de ahí sin importarle los llamados de quién estuvo a punto de convertirse en su prometida.

Salió del edificio, para tomar su auto y conducir sin rumbo alguno, solamente él y su corazón roto. Aunque ahora que recordaba todo y su mente estaba más clara, esas feromonas que había percibido no eran de un simple alfa, eran feromonas de un alfa en celo… y según la versión de la historia que Rosé le contó aquel día en la oficina, ese tipo fue a visitarla, bebieron un poco entre charlas y entonces ya no supo cómo fue que terminaron en la cama. Sí, al parecer su mente fue nublada y seducida por las feromonas de celo de ese alfa, todo concordaba. Ella nunca le fue infiel por decisión propia.

Aunque a estas alturas del partido, ella ya debe saberlo, el tal "Mino" ya debió contarle todo, pues actualmente se encuentran juntos. Aún así, todo eso quedó en el pasado. Hasta se atrevería a decir que agradecía que pasara todo eso, pues entonces jamás habría conocido a Taehyung… el destino ya estaba escrito, y ese era impedir que Hoseok se casara con aquella omega… las cosas estaban destinadas a pasar y Hoseok estaba destinado a tener un corazón roto, para así tener la oportunidad de encontrarse con aquellos preciosos ojitos azules en su camino y estos le iluminaran el alma.

Pero verla después de varios meses, de verdad le impactó. Y se sentía tranquilo al ver que había tomado todo con calma y esa madurez que siempre la caracterizaba. Pero lo que en serio le quitó el aliento a Hoseok, fue cuando ella le dijo que estaba embarazada. Y por un momento, el alfa pensó que ese bebé era suyo, pues ambos eran sexualmente activos y en ocasiones él no contaba con algún preservativo a la mano cuando se ponían creativos en cuanto a los lugares donde hacerlo… 

Había dejado salir todo el aire contenido, cuando Rosé aclaró que el bebé no era suyo. Pero si las cosas hubieran sido al revés, Hoseok se habría hecho cargo, todo sin sentimientos de por medio, solo como una simple amistad.

•••

Hoseok sonrió al ver a SeokGi beber su leche con suma paciencia. El alfa se las había arreglado por sí solo, para limpiar y vestir al cachorrito. Taehyung aún se hallaba profundamente dormido, así que optó por hacer todo él solo para no despertar a su chico.

Lo había vestido con un lindo y suave trajecito de osito totalmente blanco, con orejitas y colita. Pues el código de vestimenta de la fiesta, era ir todos de blanco. Todo el lugar se vería tan bien, y aunque es una fiesta de la empresa, Hoseok había invitado a varios de sus amigos que también eran modelos y a alguno que otro socio con el cual había congeniado muy bien. La fiesta en sí, cada año era maravillosa.

Al ser navideño, el ambiente era tranquilo y familiar, varios de los invitados se atrevían a llevar a sus hijos y parejas. No había mucho escándalo pero no dejaba de ser divertido, por eso a Hoseok le entusiasmaba llevar a SeokGi a su primer fiesta navideña.

Una vez el lindo bebé terminó de comer, Hoseok le sacó el aire con leves palmadas para después, hacerlo dormir en su cuna. Entonces se subió a la cama, donde su lindo Taehyung yacía cómodamente dormido, sin dejar de abrazar la almohada de su alfa. Se recostó de lado frente a él y una pequeña sonrisa surcó sus labios.

Llevó su dedo índice a la nariz de su chico, tocando la punta unas cuantas veces, mientras repetía esa acción también con las mejillas. El omega se removió un poco soltando un bajito suspiro y apretando más la almohada entre sus brazos.

El alfa no pudo evitar reír, de verdad se veía tan tierno… Hoseok ya estaba prácticamente listo, portaba su impecable pantalón blanco, acompañado de una camisa semitransparente a botones y fajada. Aún no se colocaba los zapatos así que solamente andaba en pantuflas y el saco que llevaría puesto encima, aún estaba colgado frente a su espejo para que este no se arrugara.

Hoseok no durmió, tal como lo hicieron el par de bebés que tenía en casa. Él se dedicó a hacer algunas llamadas para confirmar asistencias de algunos amigos, también llamó a Jin para preguntarle qué tal iba todo y por supuesto también llamó a la empresa. 

Revisó su correo en su laptop, envió varios e-mails, y luego la apagó. Entonces se dio una ducha y se arregló con calma, para después, vestir a SeokGi y alimentarlo. Había hecho todas las cosas con tranquilidad, sin prisa alguna. Ahora solo tocaba despertar al amor de su vida y ayudarlo a arreglarse.

—Cachorro… —llamó peinando el flequillo de su frente hacia atrás. Se acercó un poquito, y plantó un tierno besito en su nariz. —Despierta, pequeño dormilón… 

El omega suspiró ante el contacto y el aroma de su alfa, que inconscientemente alzó levemente su rostro y olfateó en busca de su mayor, aún con sus ojitos cerrados. Jung sonrió enternecido.

—Mi vida… —llamó de nuevo acunando en su mano la mejilla derecha. —Mi alma, aquí estoy…

Taehyung se recargó en la mano, cual tierno felino buscando más caricias. Cosa que hizo reír al azabache, aún así le dedicó más caricias, asombrándose al escuchar lo que parecía ser un ronroneo. Un suspiro más y un par de preciosos ojitos azules se asomaron lentamente, estos sonrieron al encontrarse con los de su alfa, abriendo paso a un lindo sonrojo al tenerlo tan cerca.

—Hey… ¿Cómo dormiste? —dejó una sutil caricia con su pulgar.

Asintió. —Bieeen… —bostezó alejándose un poquito, para después, dejarse caer en el pecho de su alfa. Las manos de Hoseok lo recibieron gustoso, hundiendo sus dedos entre las rubias hebras.

—Aún tiene sueño, ¿No es así? Ahora me siento mal por querer llevarte allá en lugar de dejarte dormir… 

Los ojitos de Taehyung se abrieron en un santiamén, así como también se removió, para después ponerse de pie. —¡Si quiero ir! 

Y entonces, Hoseok lo vio correr al cuarto de baño para darse una ducha. Negó divertido para ponerse de pie, e ir por la ropa de su omega. De verdad esperaba que Taehyung se divirtiera.

🌻

Cuando Hoseok y Taehyung llegaron, eran las diez con veintiocho minutos. Ambos vestidos completamente de blanco, luciendo unos maravillosos trajes. Desafortunadamente, en la entrada se encontraban varios paparazzis que fotografiaban a las caras conocidas de la farándula que fueron invitadas.

Hoseok le colocó su abrigo encima a Taehyung, para que no fotografiaran su rostro. Tenía que protegerlo del ojo público, que, aunque muchos lo conocerán allá dentro, sería muy diferente a que algún paparazzi lo haga.

El precioso omega quedó maravillado cuando entró al edificio y vio la enorme decoración colgante de copos de nieve en el pasillo que llevaba al elevador. Una vez dentro, Taehyung se abrazó a su alfa, pues aún le daban cierto miedo los elevadores.

En el momento en el que estuvieron en el piso indicado, y las puertas del elevador se abrieron, la música comenzó a escucharse. Y una vez entraron al lugar, con las manos entrelazadas, los ojitos de Taehyung brillaron mirando a todos lados. Todo el lugar se hallaba decorado en tonos azules, blancos y plateados. Con figuras talladas de hielo, pinos navideños esparcidos en lugares estratégicos. La enorme mesa de bocadillos con su fuente de chocolate y a lado el buffet. Además de que ya estaba lleno de personas divirtiéndose y charlando por todos lados.

—¡Hoseok! —exclamó SeokJin llegando hasta ellos. —¡Al fin llegas! ¡Oh, Taehyung! ¡Viniste! —se acercó a él y lo abrazó— ¿Te acuerdas de mí? —el ojiazul asintió despacio un poco conmocionado por el entusiasmo de Jin. —Pequeño, siento mucho lo de tu abuelita —lo abrazó con más fuerza. Taehyung se quedó en silencio ante la mención de su abuela, después de que SeokJin se separara de él. —Creí que no vendrías y… ¡Oh por dios! ¿Es SeokGi?

—Es él —Mencionó Hoseok, pero apenas dijo esas palabras, SeokJin ya había tomado al pequeño en sus brazos con mucho entusiasmo.

—¡Miren que lindo osito! —halagó su trajecito. —¡Te lo robaré un rato! Le mandaré fotos a Jiminnie~ —y tal como llegó, se fue, dejando al par confundidos.

—¡Me las envías a mí también! —Hoseok negó ante lo hablador que era su amigo. Volteó a ver a su chico, quién se quedó viendo todo el lugar en silencio. —Hey… ¿Todo bien? —el omega lo miró y asintió con una pequeña sonrisa que Hoseok no creyó.  —¿Fue porque mencionó a… tu abuelita?

Entonces un pequeño puchero apareció en los gruesos labios del precioso omega para después asentir despacito. El alfa lo atrajo a su pecho en un confortable abrazo… Taehyung olfateó con profundidad el aroma de su mayor qué siempre lo hacía sentir bien.

—Está bien… —frotó la pequeña espalda. —Ella siempre estará contigo…

El omega suspiró. Recordar a su abuelita, siempre lo pondrá triste. Hoseok dejó un besito en sus suaves cabellos, para después tomarlo del mentón y mostrarle una sonrisa.

—Esta noche haré que te diviertas mucho… —entrelazó sus manos. —Además, te tengo una pequeña sorpresa.

—¿Sorpresa? —el alfa asintió para así avanzar entre las personas.

El lugar se veía fantástico, con todos los invitados vistiendo de blanco. Muchos de ellos se detenían a saludar a Hoseok y agradecerles por la maravillosa fiesta. Taehyung solo se escondía detrás de su alfa con mucha timidez, cuando este lo presentaba con tanto orgullo como su omega.

A lo lejos, lograron ver cómo Jin le tomaba muchísimas fotos a SeokGi donde se encontraban algunas decoraciones navideñas. Sus alfas solo estaban a su lado, cuidado de él, contentos de ver a su omega tan entusiasmado con el cachorrito.

Hey, Hoseok… 

Tanto Hoseok, como Taehyung, voltearon ante el llamado, donde se encontraron con un par de atractivos alfas. Taehyung de inmediato se escondió detrás de Hoseok, al sentir la miradas de ambos hombres sobre él.

—¡SeoJoon! ¡HyungSik! —exclamó Jung con alegría al ver a su par de amigos en la fiesta. —Me da mucho gusto verlos aquí.

Saludó a ambos con un choque de puños y un rápido abrazo.

—Esta fiesta es grandiosa y los bocadillos están deliciosos. —mencionó SeoJoon. —Gracias por invitarnos.

Hoseok rió. —Fue un placer, ¿Cómo van con las grabaciones de la película?

—Ah, en febrero terminaremos. —suspiró HyungSik dándole un sorbo a su ponche de frutas.

—Estoy ansioso por verla —entrelazó con más fuerza su mano y la de su chico.

HyungSik se ladeó un poco, dándose cuenta de la figura un poco más bajita detrás de su amigo. —Oh… ¿Él quien es?

Eso también llamó la atención de SeoJoon. Hoseok sonrió y atrajo a Taehyung delicadamente de la cintura, para posarlo a su lado. Y tal como todos los que recién conocían a Taehyung, quedaban maravillados con esos ojitos zafiro. No era muy común encontrar a omegas y alfas con ojos azules.

—Él es Taehyung y es mi omega… —besó con dulzura la cabeza del menor. Sentía un agradable cosquilleo en su pecho, cada vez que le decía a alguien que Taehyung era su omega. Y por otro lado, cada vez que Tae escuchaba a Hoseok decir eso, sus mejillas se sonrojaban y su corazoncito se aceleraba.

—Woh… se ven muy bien juntos, me alegro por ambos —felicitó SeoJoon para después mirar al menor. —Hola, Taehyung.

—H-hola… 

—¡Adorable! —exclamó HyungSik con una mano en su pecho. —Un gusto en conocerte, Taehyung.

El omega sentía tanta vergüenza de tener la total atención de esos alfas sobre él, que mejor escondió su rostro en el hombro de su novio. Hoseok se rió bajito, llevando una mano a su espalda y otra a su nuca. —Es muy tímido…

Minutos después, dejaron al par de Park's y continuaron caminando por el lugar. Taehyung sonreía al ver a las personas divertirse. Muchos bailaban la alegre música, otros charlaban entre risas, y también había niños que corriendo por el lugar. Todo lucía tan mágico.

Hoseok llevaba de la mano a Taehyung por todo el salón, mientras buscaba a alguien. Cuando al fin dio con esa persona, se detuvo frente a él, mientras que los ojitos de Taehyung se iluminaron enormemente, que soltó la mano de su alfa y fue a abrazar a ese alto alfa. —¡MinHo hyung! —volteó a su lado abriendo su boquita en sorpresa para después alejarse de su hyung y abrazar al omega que lo acompañaba. —¡Taemin hyung! ¿Cómo llegaron aquí?

Choi rió sacudiendo los cabellos del emocionado omega. —Tu alfa nos invitó… dijo que te pondrías muy feliz si veníamos, así que de inmediato aceptamos. —pellizcó la abultada mejilla. —Todo por verte sonreír.

—¡Los extrañé mucho!

Al ver a su omega tan feliz, Hoseok decidió dejar a esos tres solos, para que charlaran más cómodos. Mejor se fue a saludar a los demás invitados el solo, y así Taehyung no se sintiera incómodo saludando a personas desconocidas para él. Luego fue a buscar a su sobrino, encontrando a Jin en la pista de baile, sosteniendo a SeokGi y bailando con él, con sus alfas a sus lados. En serio la estaban pasando bien.

—¿Jimin? —enarcó una ceja al ver a su hermanito acercarse, vistiendo completamente de blanco y muy bien arreglado.

—¡Hobie! —lo abrazó con fuerza. Hoseok frunció el ceño al percibir muy impregnado el aroma de YoonGi. 

—¿Qué haces aquí? ¿Te encuentras bien? —lo tomó de los hombros. —¿No se supone que YoonGi…?

—Ah, su celo terminó. —informó aliviado. —Ahora dormirá por dieciséis horas seguidas.

—Oh… Pero ¿estás seguro de que no despertará?

Negó con sus manos restándole importancia. —YoonGi termina en coma —bromeó. —Dormirá como un oso en hibernación, ni siquiera se despertó con todo el ruido que hice al ducharme y arreglarme. Mucho menos se dio cuenta de que salí. —soltó una risita traviesa. —¿Y mi bebé? Lo extraño mucho, ¿Aún lo trae Jin? Me envió muchas fotos.

—Sí, está por allá —señaló. —en la pista de baile.

—De acuerdo —rió. —¿Y Taehyung?

—Oh, invité a unos amigos de él, está allá con ellos.

—Aww, mi hermanote es tan dulce. —tocó sus dos mejillas. —Bueno, iré a ver a mi cachorrito antes de que Jin le contagie su locura, ¡te veo al ratoooo!

Hoseok negó al ver a su hermanito irse entre las personas y notar la manera en que cojeaba levemente pero trataba de disimularlo. 

¡Jimin! ¡Aún puedes caminar! ¿Que voy a hacer con la silla de ruedas que te había comprado? —exclamó SeokJin imprudentemente desde lejos.

¡Usarla para ti! —respondió Jimin de la misma manera con una carcajada. —¡La necesitarás más que yo!

El alfa no podía creer la manera en que esos dos se llevaban. Negó con una mano en su frente y sin más, decidió ir en busca de su chico, lo cual no tardó mucho pues este impactó contra su pecho inesperadamente. Volteó a verlo encontrándose con una enorme sonrisa que lo tranquilizó.

—¡Hoseok! —restregó su mejilla en el pecho y clavículas de su alfa muy contento.

—¡Hey! Justo iba a buscarte —posó sus manos en las bonitas caderas. Percibiendo su aroma extrañamente un poco más intenso. —¿Y tus amigos?

—MinHo hyung, acompañó a Taemin hyung al baño, porque tenía malestar, yo iba a ir con ellos, pero mejor vine a buscarte. —explicó con una tierna sonrisa.

—Ya veo… ¿Cómo estuvo su charla?

—Me preguntaron si de verdad yo te quería mucho… ¡Y les dije que sí! —contó con una risita de mejillas ruborizadas. —También si tú eras bueno conmigo y si me tratabas bien, ¡Tu siempre me has tratado muy bien!

Hoseok sonrió acunando la mejilla de su omega con ternura. No le ofendió que le hicieran esas preguntas a su chico, más bien entendía por qué lo hicieron. Y está bien, porque se preocupaban por él

Tomó a Taehyung de la mano, para dejar un besito en el dorso y después entrelazar sus dedos y así llevarlo a la pista de baile donde sus amigos los estaban llamando, pues una canción animada había comenzado.

El alfa soltó una carcajada al ver a SeokJin con unas varas de luz en sus manos, mientras las agitaba a los lados y supuestamente bailaba. Namjoon y Jungkook portaban unas gafas con luces y solo se mantenían moviendo con tranquilidad sin dejar de reír por las ocurrencias de su omega.

Jimin se movía y saltaba animadamente por el lugar con su cachorrito en brazos sin dejar de verlo. Inesperadamente, SeokJin jaló a Taehyung del brazo y le colocó en la cabeza un lindo moño rosado con lunares blancos y entonces lo invitó a bailar con él. Hoseok soltó una enorme carcajada, que también logró hacer reír a su omega, quien comenzó a divertirse con Jin y Jimin.

Hoseok también se unió, pasándola bien con todos, entre risas y divertidos bailes. Pasaron alrededor de tres canciones, sumamente animadas donde todos rieron y saltaron. El primero en retirarse muy cansado a sentarse, fue SeokJin. Sus alfas lo llevaron a uno de los lindos sofás blancos que estaban al fondo cerca de la mesa de bocadillos. Namjoon lo abanicaba y JK le llevaba una botella de agua.

Mientras tanto, la linda parejita estaba tomada de las manos, mientras se movían a los lados con diversión. Pero, fue en solo unos segundos, donde las luces de la pista bajaron, logrando que los copos de nieve que se reflejaban en el suelo, se notaran con más intensidad. El sonido de un piano comenzó a hacer presencia y las risas se detuvieron.

Taehyung se detuvo y miró a su alrededor, dándose cuenta de que las parejas se tomaron de la cintura y cuello y comenzaron a bailar lentamente. Jimin apareció y con un movimiento rápido, quitó el moño rosado que Taehyung portaba en sus platinados cabellos. Aún confundido, el omega volteó a ver a su alfa, quien lo veía con una pequeña sonrisa ladina.

—¿Recuerdas nuestra pequeña lección de baile?

Taehyung asintió despacio, mientras el alfa acercaba sus cuerpos lentamente, tomando a su amado chico de la cintura. El omega entendió así que con un poco de timidez, levantó sus brazos y rodeó el cuello de su mayor.

El tímido ojiazul, no pudo evitar mirar a los lados y ver a las parejas, pero también habían personas que los miraban solo a ellos dos y eso lo hacía sentir cohibido. Eso, por supuesto que no pasó desapercibido por el mayor, quien colocó delicadamente sus dedos en el mentón y giró el dulce rostro, para luego, unir sus frentes.

—Cierra tus ojos… —susurró. —olvida que ellos están aquí, e imagina que solo somos nosotros dos…

—Pero… —sus mejillas se ruborizaron en un santiamén. —b-bueno…

Taehyung suspiró, para después cerrar sus ojitos, centrándose en el aroma de su alfa, quien poco a poco comenzó a balancear a ambos, lento, lado a lado.

Con el rostro de un ángel… un cálido misterio vino a mi… y eras tú...♪

—Concéntrate en la canción… en la letra… —acarició su espalda, para transmitirle calma. —Imagina que soy yo quien te está cantando todas esas bonitas palabras en el oído… 

Quiero creer que seré la única persona que se quedará a tu lado… para amarte… ♪

El omega relamió sus labios con un leve asentimiento y suspiró bajito, empezando a prestar atención a la canción.

Incluso en las frías mañanas de invierno… y en las noches que parecen solitarias, todavía estamos juntos aquí… cambiaré la oscuridad a luz por ti. Esta noche será como un precioso milagro…♪

De repente, en su mente, solo eran ellos dos… y nadie más… 

Hoy, te tomaré entre mis brazos y te daré mi corazón y alma… porque eres mi todo… para toda la vida...♪

Poco a poco algunas parejas se fueron retirando de la pista, más no quedaron solos. Pero un reflector, los alumbró solo a ellos dos… la luz no era intensa, era tenue en tonos azules, dando el ambiente como un cuento de hadas… 

Mil palabras no son suficientes, para decirte que incluso si vuelvo a nacer, te elegiría a ti...♪

Sus corazones comenzaron a latir en sincronía, con una velocidad increíble, gracias al desborde de emociones que comenzaban a sentir… 

No puedo estar con nadie más, solo contigo… para toda la vida…♪

Sin entender muy bien por qué… una lágrima se deslizó traviesamente por la mejilla de Taehyung… 

El silencio cambió a una canción llamada tú, esta noche… y la quiero escuchar por siempre...♪

Sin poder más, un bajito sollozo salió de sus labios, y alejó su frente de la contraria, para recostar su cabeza, en el hombro de su alfa y hundir su congestionada naricita en el sensible cuello de su mayor…

Hoy, te tomaré entre mis brazos y te daré mi corazón y alma… porque eres mi todo… para toda la vida...♪

La mano de Hoseok viajó a la nuca de su precioso omega, donde dedicó suaves caricias silenciosas, logrando escuchar los tenues sollozos de su amado...

Mil palabras no son suficientes, para decirte que incluso si vuelvo a nacer, te elegiría a ti… porque no puedo estar con nadie más, solo contigo… para toda la vida…♪

—Te amo, Taehyung…

Solo quiero mirarte durante toda mi vida… sé que no todo será fácil, pero voy a protegerte para toda la vida… este amor, nunca terminará...♪

El omega alzó su cabeza, y miró a su alfa con esos preciosos ojitos azules cristalizados, llevando una mano a su pecho, sintiendo los latidos acelerados de su corazón, rebosante de amor…

—H-Hoseok… yo… y-yo también te amo… 

Voy a amarte… para toda la vida...♪

Las palabras de Taehyung salieron seguras, no había ninguna señal de duda en ellas. Y eso agitó en demasía, el corazón del conmovido alfa. Había esperado pacientemente a que Taehyung se atreviera a decir esas dos palabras, sin presión alguna, solo cuando él se sintiera listo para decirlas… y hoy, finalmente ha sucedido.

— Tú… lo has dicho… —detuvo sus pies, sintiéndose sus ojos cristalizarse, para después llevar sus manos a las húmedas mejillas de su adorable omega. —Puedes… ¿Puedes decirlo… de nuevo?

Taehyung sorbió su nariz, mientras los pulgares de Hoseok trataban de limpiar las traviesas lágrimas. Relamió sus labios y conectó las miradas de ambos, donde el color dorado en los ojos del alfa destacaba con intensidad… y qué decir del precioso color zafiro que destellaba en los ojitos del rubio… 

T-Te amo, Hoseok…

Y sin contenerse más, el enamorado omega, enredó nuevamente sus brazos en el cuello de su amado y unió sus labios con desesperación. Hoseok lo tomó delicadamente de las caderas, retrocediendo un par de pasos ante el entusiasmo de su chico… aún entre el beso sonrió… sonrió con auténtica felicidad, con ambos corazones desbordantes de amor… 

Quizás, no tenían un lazo concretado aún, pero era tan claro como el agua, la inmensa felicidad que la bella parejita derrochaba… 

El aroma de ambos circulaba por el lugar… pero el que más predominaba, era el de Taehyung… el aroma a flores y vainilla era tan maravilloso que Hoseok se sintió en una nube de algodón, mientras continuaban con sus labios unidos y la música de piano seguía entonando… 

Con un bajo chasquido, concluyeron con su dulce beso, logrando que ambos soltaran una risita cómplices… pero fueron solo unos segundos, para que Taehyung recordara en donde se encontraban. Su rostro se puso rojo al percibir miradas sobre él, que no pudo evitar esconderse en el pecho de su mayor, completamente avergonzado y abrumado.

Hoseok se dio cuenta de ello, así que tomó a su chico de la cintura y sin importarle nada ni nadie más… salió con él de ahí lo más rápido que pudo, con muchas miradas curiosas sobre ellos.

Ingresaron al elevador, donde se abrazaron con fuerza, y las palabras no eran necesarias. Las puertas se abrieron de nuevo, salieron del pequeño espacio y aún con Taehyung pegado al pecho de su novio, llegaron hasta la oficina del alfa. Hoseok tecleó un código y pasó una tarjeta que traía en su bolsillo, así logrando que la puerta se abriera.

Entraron juntos, cerrando la puerta detrás de ellos. El alfa encendió las luces, más reguló la intensidad para no abrumar más a su pequeño, quien no parecía querer despegarse de él. 

Tierno.

Lo llevó hasta el sofá negro que tenía pegado a la pared, cerca de su escritorio. Hoseok se sentó primero y Taehyung lo que hizo, fue sentarse en el regazo de su alfa y recostar su cabeza en el fuerte hombro, tratando de esconder su rostro, aún se sentía bastante avergonzado.

—Hey… ya estamos solos, tranquilo… —acarició su cabello y sujetó una de sus delgadas manos.

El omega no dijo nada, más solo levantó su cabeza, permitiendo que su flequillo cubriera levemente sus ojos. Hoseok sonrió, peinando los rubios cabellos hacia atrás y así liberar esos preciosos ojos.

—Estoy muy feliz… —murmuró Hoseok con una sonrisita, haciendo que las mejillas de Taehyung se tiñeran dulcemente. —En serio, te amo tanto… gracias por también amarme… dime algo, ¿Te sientes feliz?

—Mucho —contestó sin dudarlo.

—Me alegra tanto saber eso… —acarició su mentón con delicadeza, mirando los gruesos y rosados labios. —¿Puedo besarte?

Las mejillas del omega adquirieron más intensidad, pero asintió, él quería besitos. Hoseok sonrió, mostrando su blanca dentadura, y se acercó con lentitud rozando sus labios, hasta que finalmente los unió con suavidad, comenzando con un ritmo lento, que hizo suspirar al más pequeño.

La mano izquierda de Hoseok, viajó a la nuca de su amado, dejando pequeñas caricias ahí mismo, mimandolo. Mientras que la mano libre de Taehyung, empuñó la camisa a de Hoseok, a la altura del pecho, gracias a las bonitas sensaciones que le provocaban sus besitos.

Una risita del omega detuvo el beso, aún sin separarse, sus labios y nariz aún rozaban, e incluso mantenían sus ojos cerrados. Hoseok no pudo evitar sonreír al escuchar esa risa que era como música para sus oídos.

—¿Qué sucede? —preguntó sin dejar de sonreír, estirando sus labios para dejar pequeños besitos.

—Me da cosquillas… —dijo refiriéndose a las caricias en su nuca. Taehyung encogía levemente su cuello, sintiendo su piel erizarse por el cosquilleo.

—¿Ah, sí? —movió sus dedos en ese lugar, provocando otra risita del menor. —Amo escucharte reír…

Separó sus rostros, no sin antes dejar un par de besitos en la bonita nariz y ver la bella carita sonrojada. El alfa hundió su rostro en el cuello de su amado, percibiendo el aroma de su chico con más intensidad. Paseó toda su nariz por ese lado, embriagándose del aroma a flores, vainilla y chocolate que su amado desprendía.

—Tu aroma… —inhaló una vez más. —tu aroma ha estado más intenso el día de hoy… 

—¿Eso es malo? —ladeó su cuello sintiendo nuevamente su piel erizarse, por las cosquillas que le provocaba la nariz de su mayor.

—No, es solo que- —se detuvo alejándose del cuello de su omega, para mirarlo a los ojos alternativamente. Tragó saliva con dificultad e inhaló y exhaló un par de veces al entenderlo todo. —Tu celo… tu celo se está acercando, Taehyung. 

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.


Traté de hacer un collage bonis de como era la fiesta sdghjkl espero les guste 💙


¿DE QUÉ LADO ESTÁN?
JAJAHDJAJ AMO LOS MEMES QUE ME HACEN EN SERIO AAAAAAAAAA Los encontrarán en nuestro grupo de WhatsApp y en la página de FB que mi precioso girasol Mel🌻 llamada "Pagina para darle amor a My Sunshine" denle likeee~

AAAAA HOLA MIS PRECIOSOS GIRASOLES~ ¿QUÉ LES PARECIÓ EL CAPÍTULO? Wuuuuhhhhh ¿Qué creen que pasará? ¿Qué les pareció el baile? Ay tuve complicaciones con este capítulo por eso tardé, lo siento:c

La canción que Hoseok y Taehyung bailaron se llama "For Life" y es interpretada por EXO. Puse el vídeo en la multimedia por si gustan escucharla💞

¡Cuídense muchísimo! AaaAaa sin más, me despido, espero les haya gustado el capítulo y les mando muchísimos besitos y abrazos y gatitos~ ¡Nos leemos en el próximo capítulo! No olviden que Sony los ama muchooOooOo🥺🌻💞✨❣️💓🌻💞❣️✨💓💞🌻❣️✨💓🌻💞❣️✨💓

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top