🌻•Capítulo 34
《🌻》
—Quiero verlo.
Hoseok juraría que sintió como su corazón se detuvo por un segundo. Esperaba algunas palabras de resentimiento por parte de Taehyung, contra aquel sujeto. Pero jamás se esperó, que su pequeño dijera que quería ir a verlo.
—¿Qué? —preguntó desconcertado. Esperando a que el omega se echara para atrás. Pero al no recibir respuesta alguna, todo estaba claro. —Taehyung, ¿Estás seguro?
Tenía miedo. Miedo de que ese tipejo hiciera sentir mal a Taehyung, que lo haga llorar, que lo hiriera con sus palabras. Después de todo, él nunca lo quiso. Desde que se enteró de su existencia, Taehyung siempre fue un estorbo para él. Que aún cuando nació, intentó matarlo, pero sus planes fueron frustrados, gracias a que la abuela Kim, llegó justo a tiempo y le estrelló una botella de vidrio en la cabeza.
Por supuesto que el alfa no se atrevería a decirle eso a su omega. Suficiente tiene con enterarse de que su propio padre mató a su madre, como para saber que también intentó atentar contra él.
Pero el simple hecho de imaginar, que la abuela, no hubiera llegado a tiempo… y ese tipo hubiera terminado con la vida de Taehyung, hace que su corazón se encoja, hasta el punto de doler y que las lágrimas amenacen con salir… jamás habría tenido la oportunidad de conocer a su pareja destinada, jamás habría podido ver esos preciosos y brillantes ojitos azules. ¿Que habría sido de su vida sin Taehyung? Sin su risa, sin su inocencia…
—Sí, quiero verlo —respondió con voz pequeñita, limpiando sus lágrimas.
—Pero… ¿Por qué? —estaba en conflicto con el objetivo de su omega. —Cachorro, él… —suspiró. —Él no es buena persona…
—Lo sé… —bajó la mirada, observando sus dedos moverse inquietamente. —Pero… quiero saber, por qué me quitó a mi mamá…
Taehyung tenía el derecho de obtener respuestas en cuanto a lo sucedido con su madre. Es un jovencito curioso y angustiado por todo lo que pasó. Y Hoseok no podía negarle su decisión, aún cuando el alfa sentía que era un completo error, el dejarle ir a hablar con su padre.
—Ay, Taehyung… —lo atrajo a sus brazos, dejando un besito en su sien. —Entiendo lo que quieres hacer… pero me preocupa tanto que ese sujeto te haga llorar con sus palabras…
—Pero todavía no quiero ir… —aclaró en un murmullo. Tenía que admitir que si le temía a su padre después de saber lo que hizo. Pero tenía que ser valiente si quería obtener respuestas.
—Ya veo… —acarició su espalda. —A pesar de que no me agrada la idea de que quieras verlo… te apoyaré en tu decisión y cuando te sientas listo, te llevaré a hablar con él… pero yo te acompañaré siempre. —deshizo un poco el abrazo. Movió unos mechones que cubrían los ojos de su omega, para luego dejar una caricia en su rostro con amor. —No pienso dejarte solo…
El omega asintió, volviendo a esconderse en el pecho de su alfa. A pesar de que se sentía triste por todo lo que pasó, saber que tenía el apoyo de Hoseok, le hacía sentir una bonita sensación cálida en su pecho, que lograba alejar un poquito esos sentimientos tristes…
🌻
La mañana del sábado había llegado. Era alrededor de las ocho de la mañana, cuando cierto omega comenzó a removerse en la cama. La noche anterior había bebido demasiado y un dolor punzante en su sien, comenzaba a fastidiarle.
Después de haber visto a sus alfas darse un buen beso, tenía que admitir que eso lo excitó, aún estando bajo los efectos del alcohol. Así que le pidió a sus alfas que lo llevaran a casa y así pudieran tener una buena noche. Pero, ¿Qué pasó en realidad?
A pesar de que a ese par le encantaba satisfacer a su omega en todos los aspectos, en esta ocasión no aceptaron sus insinuaciones de tener relaciones toda la noche. Pues SeokJin no se encontraba en sus cinco sentidos y no les parecía buena idea tener sexo con él estando ebrio. El omega, por supuesto que se enojó porque sus alfas no querían complacerlo, así que tomó una botella de licor que tenía guardada y comenzó a beber entre lágrimas de cocodrilo al sentir que ya no le gustaba a sus alfas.
Ellos por supuesto, que trataban de hacerle entender que lo amaban demasiado, y que solo lo tocarían cuando él estuviera sobrio. Pero bueno, Jin estaba bastante ebrio y no podía comprender, simplemente se sentía rechazado por sus alfas que no se atrevían a tocarlo. Así que se encerró en el baño con su botella de licor a la mitad, para así darle rienda suelta a su llanto, mientras un par de alfas tocaban la puerta con desesperación, al sentir la enorme tristeza de su omega a través del lazo que compartían. De por sí, Jin era muy dramático en ciertas cosas, y con alcohol en su sistema, lo era aún más.
Pero a los alfas, les preocupaba que su omega se bebiera el solo esa botella de licor. No sabían cuánto alcohol podría soportar, de por sí ya venía ebrio de aquel bar y ahora continuar con esa botella de licor puro, de verdad los tenía de nervios. Ahora sabían que tenían que cuidar que su omega no bebiera tanto…
No fue cuando alrededor de las dos de la mañana, que Jin salió del baño y aún algo mareado y ebrio, fue y se acurrucó en medio de sus alfas, hasta finalmente dormirse rodeado de sus aromas.
SeokJin llevó una mano a su sien con una expresión adolorida. En tanto se regañaba mentalmente, por haber bebido tanto. Se sentó en la inusualmente incómoda cama, donde sus pies colgaban. Aún no abría del todo sus ojos, a su parecer entraba mucha luz por la ventana y eso solo hacía que su cabeza doliera más. —Maldita resaca…
—¿Jin? —lo llamaron al unísono. No tuvo que abrir los ojos para saber quiénes eran. Él reconocería sus voces y aromas donde sea.
Un par de manos se detuvieron en su muslo derecho, y el otro par de hallaba en sus hombros. —Bebé, ¿Cómo te sientes?. —Ese había sido Namjoon.
—¿Ya no te duele? —preguntó Jungkook angustiado.
¿De qué hablan?, se preguntó mentalmente, no entendiendo sus preguntas. No obstante, unas enormes náuseas llegaron tan rápido, que ni siquiera le dio tiempo de dirigirles palabra alguna a sus alfas.
—Ba-Baño… —musitó ahogado.
El par de alfas se alertaron instantáneamente. Uno de ellos lo empujaba de la espalda, mientras que el otro lo llevaba de la mano. Le ayudaron a inclinarse frente al inodoro, donde SeokJin, rápidamente se abrazó a la taza y vació su estómago. El omega estaba molesto consigo mismo, pues desde las fiestas universitarias, no se ponía así de ebrio, para al día siguiente vomitar hasta su alma.
Definitivamente se descontroló anoche. Tenía que agradecerles a sus alfas por cuidarlo y también disculparse por mostrarles esa horrible faceta suya. Así que después de estar un par de minutos pegado a la taza del baño, Jeon bajó la palanca, mientras Kim limpiaba su boca con papel sanitario.
—Chicos… lo siento… —murmuró intentando ponerse de pie. Rápidamente cada uno lo sostuvo de cada brazo. Lo llevaron al lavabo, ayudándole a enjuagarse la boca. —Me siento tan avergonzado… Creo que me pasé-... este no es mi baño.
SeokJin frunció el ceño, mirando a su alrededor. ¿Dónde se encontraba?. Miró a sus alfas buscando respuestas. Estos intercambiaron miradas y lo llevaron lentamente fuera del baño. Grande fue la sorpresa del omega al darse cuenta de que esa tampoco era su habitación. Y aún con el ceño fruncido, estos le ayudaron a sentarse en la cama.
—¿Qué hago en el hospital?... ¡No me digan que de nuevo me agarré a golpes con alguien en el bar! —exclamó con espanto.
—¿Qué? —dijeron ambos alfas al unísono.
—¿Estuviste involucrado en una pelea? —cuestionó Namjoon impresionado. El omega era toda una cajita de sorpresas.
—U-Uhh… fue cuando iba en la universidad, tranquilos. —aclaró. Los dos chicos frente a él relajaron sus hombros. —Estaba algo pasado de copas y un alfa me tocó el trasero e intentó propasarse conmigo… así que le di un golpe en la nariz y él me regresó el golpe… no supe cuantos golpes nos dimos pero terminé en el hospital con la nariz rota… —contó avergonzado
Al parecer, a Jin le destinaron dos alfas, para que pudiera ser cuidado y protegido el doble. Porque era un omega muy extrovertido y en ocasiones descuidado. Namjoon y Jungkook negaron ante la anécdota de su omega, pero tenían que admitir que se sabía defender, no le tenía miedo a los alfas, aún cuando sabía que estos poseían más fuerza. Oh no, él no era un simple omega, sumiso y frágil. Su naturaleza no lo limitaba a nada.
—¿Ya me dirán qué hago aquí? Los siento muy nerviosos… ¿Acaso hice algo tonto anoche? —rascó su nuca. —Miren que no recuerdo mucho…
—¿En serio no recuerdas? —preguntó el alfa menor.
—Pues… —hizo una mueca. —Cenamos, bebimos… ustedes dos se besaron —se rió. —Pero a partir de ahí ya no recuerdo nada… de nuevo les pido disculpas si hice algo tonto.
—Pues… te molestaste con nosotros porque no quisimos tocarte, pero estabas ebrio, no podíamos hacerlo… —explicó Jungkook
—Luego tomaste una botella de licor de no sé dónde y te encerraste en el baño a llorar y a beber. —continuó Namjoon. —Estuviste ahí por más de una hora. Luego saliste aún desorientado y te dormiste.
—Okay… creo que no fue tan malo, pero, ¿Qué hago aquí? —insistió. —Me siento bien, no me duele nada. Quitando el dolor de cabeza y la horrible resaca, claro. —bufó.
Los alfas intercambiaron nuevamente miradas. Al parecer debatían algo y al omega comenzaba a desesperarle esa acción. Porque parecían saber algo pero se negaban a decírselo.
—¡Me están poniendo nervioso!, ¿Tengo alguna enfermedad mortal o qué?
—Bien, yo empiezo… —habló Jungkook primero, comenzando despacio. —A las seis de la mañana, te despertaste quejándote de un dolor… en tu abdomen bajo… creo que era muy fuerte porque comenzaste a llorar e incluso usaste tu chillido para llamarnos. —suspiró guardando sus manos en sus bolsillos. —Nos preocupaste tanto que mejor optamos por traerte al hospital.
—¿Me quitaron la vesícula? —se asustó, alzando su bata. Suspiró aliviado al darse cuenta que no había rastro de cirugía en su plano abdomen.
—No… escucha, SeokJin. —Namjoon suspiró una vez más, relamiendo sus labios. —Estabas teniendo un riesgo de aborto por todo el alcohol que consumiste anoche…
—¿Q-Qué? —su voz se hizo pequeña y palideció.
—Te hemos traído justo a tiempo, los médicos solucionaron todo. —aclaró Jungkook con rapidez al ver la expresión en shock de su omega.
—E-Entonces, y-yo…
—Sí… —tomó su mano. —tienes dos meses de embarazo…
🌻
Los días continuaron pasando, navidad estaba cada vez más cerca. Los ánimos de Taehyung habían ido mejorando poco a poco, sobre todo cuando Hoseok llevaba a su omega a caminar por la ciudad de noche. Pues al ser víspera de navidad, todas las calles estaban abarrotados de luces navideñas por doquier. Los adornos de navidad no faltaban por ningún lado y qué decir del enorme pino en el centro de la ciudad.
Taehyung se había entusiasmado tanto al verlo, decía que le parecía lo más bonito del mundo. Así que le pidió a Hoseok que le tomara muchas fotos frente a él. Y el alfa, más que encantado lo hizo. También le pidió al guardaespaldas que siempre los acompañaba, que les tomara una fotografía juntos.
Era la primera foto que se tomaban juntos, y Hoseok estaba más que entusiasmado por compartirla con el mundo. Así que sin contenerse más, la subió a su cuenta de instagram —cubriendo el rostro de Taehyung con un emoji, por supuesto. Aún no quería exponerlo.— le agregó un par de filtros, para finalmente, poner una sencilla descripción: te amo.
Seguramente los medios comenzarían a hablar de ello, confirmando sus sospechas de que se encontraba en una relación. Y Hoseok quería gritarle a los cuatro vientos, que salía con el omega más hermoso y encantador de todo el mundo… pero Taehyung no sabía lo que conlleva ser una figura pública, así que prefiere mantener su identidad en secreto… todavía. Porque tarde o temprano, será descubierto, pero mientras, más vale ir preparando al precioso ojiazul para ese momento.
Iban caminando tranquilos por las calles llenas de luces. Habían bastantes personas pero por suerte ninguno los reconocía, cada quien estaba en lo suyo. Taehyung casi no hablaba, pero la manera en que sus ojitos brillaban al ver todas las decoraciones, era tan malditamente tierno.
—¿Taehyung?
Ambos se detuvieron ante el llamado. Dieron media vuelta, encontrándose con un hombre… desprendía todo el aroma a alfa, este lucía bastante sorprendido.
—Oh por Dios, ¡Si eres tú! —exclamó con sorpresa y emoción combinadas.
—¿MinHo hyung? —el omega abrió sus ojitos en sorpresa. Rápidamente su carita se iluminó. —¡MinHo hyung!
En menos de dos segundos, Taehyung se había lanzado a los brazos de ese alfa desconocido para Hoseok. Tenía que admitir que una sensación incómoda comenzó a surgir… ¿Celos?
—¡No me esperaba encontrarte por estos lugares! —exclamó abrazándolo con fuerza. —¿Qué estás haciendo aquí, pequeño?
Pequeño. Hoseok se removió incómodo.
—¡Oh! —se separó del abrazo para ir a tomar la mano de su alfa. —Vengo con Hoseok, me trajo a ver las calles, ¿Verdad que están muy bonitas?
—Hoseok… —ambos alfas se miraron. —Con que tú eres Hoseok…
Jung iba a decir algo, pero su omega se lo impidió. —¡Hoseok! MinHo hyung, es el hijo del Señor Choi
El alfa más alto, extendió su mano, para después estrecharla con el otro. —Un gusto, Choi MinHo… ¿Eres tú a quien mi padre le quebró la ventanilla de su auto?
—Jung Hoseok y sí… —rascó su nuca con una mueca al recordar aquella vez. MinHo se rió para aligerar el ambiente.
—Hyung, hyung —llamó el dulce omega dando un par de saltitos. Se acercó a su oído y le susurró algo. Hoseok hizo una mueca al verlos tan cercanos.
—¡¿Qué?! —casi gritó. Taehyung se cubrió la boca soltando una baja risita, mientras se acercaba a su alfa y se escondía detrás de él. —¡¿Cómo que él es tu pareja?! —el omega asomó sus ojitos. —¡Kim Taehyung!
Estaba que no se la creía. ¡Su padre jamás le mencionó que el adorable omega tenía pareja!. Con un bufido, miró a Jung con los ojos entrecerrados. Este se mantuvo firme, por supuesto que no se dejaría intimidar.
—Lo somos —dijo firme inflando su pecho orgulloso. —Taehyung es mi omega y yo soy su alfa.
MinHo tosió. ¡Su pequeño Taehyung tenía alfa!
—T-Taehyung… mi padre y Yoona están ahí dentro viendo los juguetes, ¿Te gustaría ir a saludar? —señaló la ventana del establecimiento detrás de él. Los ojitos de Taehyung se iluminaron al divisar al Señor Choi y a su hija.
—¡Sí! —saltó en su lugar y sin decir nada más, corrió dentro del establecimiento.
—¡O-Oye! —Hoseok ni siquiera alcanzó a detenerlo. Tuvo el impulso de correr detrás de él, pero un cuerpo un poco más alto que él se lo impidió. Aún así siguió a su omega con la mirada y una vez vio que se encontró con el Señor Choi, suspiró tranquilo.
Hoseok cruzó sus brazos en su pecho, manteniendo su expresión seria, al cruzarse con la mirada del alfa más alto. Definitivamente no se dejaría intimidar.
—Escucha… —comenzó MinHo. —Taehyung es como un hijo para mí. Más te vale que no juegues con sus sentimientos. Y si lo lastimas ya sea física o mentalmente, acabaré contigo.
Jung enarcó una ceja. Aunque a juzgar por el tono de voz que usó, iba muy en serio. —No tienes porqué preocuparte por eso, jamás me atrevería a lastimarlo.
—Más te vale. —bufó. —Taehyung es un jovencito muy dulce, libre de malicia, pero cuando mi padre me contó que comenzó a tener contacto con un alfa desconocido, me preocupé muchísimo. —mordió su labio desviando la mirada. —es tan inocente que temo que le hagan daño.
A su mente llegaron los recuerdos de cuando se enteró de la muerte de Suni. Por supuesto que le había dolido demasiado, ella era su pareja destinada, pero la perdió por culpa de su timidez cuando era un simple adolescente. Jamás se atrevió a acercarse a ella, mucho menos cuando vio lo enamorada que estaba del hijo de los Kang.
Hasta la fecha, seguía culpandose por su muerte, pues si no hubiera sido tan tímido, tal vez habría logrado que Suni se enamorara de él. Y actualmente ella se encontrara viva… Por eso, cuando conoció a Taehyung siendo un bebé, se prometió que cuidaría de él. MinHo lo vio crecer, incluso lo vio dar sus primeros pasos, y decir sus primeras palabras. También lo llevaba con él cuando recogía las cosechas y adoraba cargarlo sobre sus hombros.
No fue hasta que se casó con un precioso omega de nombre Taemin que lo flechó. Se fue de la granja de su padre para vivir en la ciudad, entonces logrando perder de vista al dulce omega de ojitos azules. Aún así, trataba de ir frecuentemente para allá. Él y Taehyung se llevaban de maravilla y se tenían un enorme cariño…
—Créeme que no le haré daño. —dejó caer sus brazos a sus costados. Para después meter sus manos en sus bolsillos. —Le prometí a YoungMi que cuidaría y amaría a Taehyung con mi vida, y eso es lo que haré.
🌻
Después de que MinHo le hiciera más preguntas a Hoseok, se sintió un poco más tranquilo de que Taehyung se quedara con él. No fue hasta que minutos después, el dulce omega salió de la tienda de juguetes, acompañado del señor Choi y su hija. Taehyung venía con sus ojitos acuosos y no dejaba de abrazar a la bonita omega.
Al parecer, Tae les había contado lo sucedido con su abuelita. Ya que ellos no estaban cuando pasó. Al parecer, el señor Choi solía irse a casa de su hijo en víspera de navidad, para no estar solo en su granja. Por esa razón, Taehyung no lo encontró la noche que fue a pedirle auxilio.
El viejo alfa, le tenía más confianza a Hoseok, además de que había estado charlando con YoungMi y al saber que ella lo aceptaba, él también terminó por hacerlo. Excepto MinHo, él aún no se encontraba muy de acuerdo con que Hoseok se hiciera cargo de Taehyung. Necesitaría conocerlo más…
Yoona, la hija menor de el señor Choi y hermana de MinHo, había abrazado y consolado muchísimo a Taehyung, diciéndole que todo estaría bien. Ella era una magnífica madre, así que sabía cómo consolar y trataba a Taehyung como a su hijo. Después de un rato, la despedida llegó. Hoseok intercambió números con aquel alfa, para estar atento a cualquier cosa sobre Taehyung. Luego, cada quien se fue por su lado.
El dulce omega se hallaba cabizbajo al recordar a su abuelita, pero a la vez se sentía feliz porque había visto al señor Choi, a MinHo y a Yoona… Hoseok plantó un besito en la mano más delgada, para después entrelazarlas. Entonces se dio cuenta de que Taehyung tenía más personas que se preocupaban por él, y eso lo hizo suspirar tranquilo.
Su pequeño no estaba solo.
Minutos más tarde, se subieron al auto. Hoseok pensaba en ir a visitar a su hermanito, tenía muchas ganas de ver a SeokGi, pero mejor prefirió partir a casa, pues Taehyung lucía muy apagado. Mejor lo llevaría mañana, al encantador omega, le encantaba sostener y alimentar a su pequeño sobrino… había aprendido muy bien.
E inclusive, lo encontraban dormido a su lado en ocasiones cuando terminaba de alimentarlo. Hoseok sentía que moriría de ternura, al solo imaginarse que en vez de SeokGi, ese fuera su propio cachorrito… suyo y de Taehyung.
Cuando al fin llegaron, el omega fue a ponerse su pijama y encendió la tv de la habitación de su alfa. Mientras tanto, Hoseok fue a darse una ducha.
Comenzó a cambiar los canales una y otra vez, al no encontrar que ver, nada captaba su atención, o solo quizás, su cabecita estaba en otro lado…. Abultó sus labios en un suspiro. Estiró su brazo alcanzando la almohada del alfa, para después abrazarla con sus piernas y brazos. Hundió su naricita en ella, percibiendo ahí el impregnado aroma a roble canela y manzanas.
De esa manera, continuó haciendo zapping. Deteniéndose abruptamente, al encontrarse con una extraña escena de lo que parecía ser una película o una novela extranjera, pues esta tenía subtítulos…
Eran dos figuras masculinas las que al parecer discutían algo dentro de una habitación. Uno de ellos soltaba gruesas lágrimas mientras hablaba. —Sabes que ella no me interesa, son mis padres quienes me obligan a estar con ella porque no aceptan que a quien amo es a ti.
Entonces el otro que era más alto, lo estampó contra la pared, para después apoderarse de sus labios de una manera intensa y desesperada. Las mejillas de Taehyung se pusieron rojitas al ver la forma en que esos dos se besaban… le recordó a Jungkook y SeokJin.
Fue en un instante, cuando el más bajito había dado un salto, enredando sus piernas en la cintura del más alto, quien comenzó a masajear su trasero con descaro. ¡Santos cielos! Taehyung estaba con sus ojitos muy abiertos, incluso el pie que movía sin parar se detuvo, sobre todo cuando vio que se dejaron caer a la cama. Una música lenta, comenzó a sonar, y de repente solo eran suspiros y chasquidos lo que se escuchaba.
—¿Uh? —Taehyung se sentó en la cama, aún abrazando su almohada, con su mirada atenta a la pantalla. —¿Por qué se quitan… la ropa?
La ropa de ambos chicos se veía en el suelo. El sonrojo de Taehyung, se extendió hasta sus orejas, al ver a los dos chicos sin ninguna prenda en sus cuerpos. Rápidamente se cubrió los ojos cuando accidentalmente vio las pompis del que estaba arriba del otro.
"Te amo, te amo" se repetían entre jadeos, gemidos y besos. El sonrojado omega, entre abrió un poquito sus dedos… ¿Qué estaban haciendo?
Tragó saliva, cuando comenzó a sentir una extraña sensación en su cuerpo. Movió la almohada encontrándose con un bulto en su entrepierna. El calor subió nuevamente hasta sus orejas. ¿Qué era todo esto?.
Estaba por llevar su mano ahí y averiguar por qué se sentía así, pero la puerta del baño se abrió y por mera vergüenza, se cubrió con la almohada, reprimiendo un pequeño jadeo ante la presión.
—¿Taehyung? —el alfa había salido del baño con solo una toalla cubriendo su cintura y con otra más pequeña tallando su cabello. —¿Qué estás viendo?
El menor señaló la pantalla, y tragó al ver a Hoseok casi desnudo. Nuevamente se cubrió sus ojitos con muchísima vergüenza. Pues el alfa cuando se metió a la ducha, Taehyung estaba en la habitación de al lado, así que no se molestó en meter su pijama al cuarto de baño.
Pero lo que más sorprendió a Hoseok, fue lo que encontró en la pantalla. Un par de chicos, perdidos en el placer, completamente desnudos. Que aunque no se veían sus partes delanteras, la escena no dejaba de ser bastante erótica. Rápido tomó el control remoto y cambió de canal. Ahora comprendía por qué Taehyung estaba tan sonrojado.
—¿Cachorro? —comenzó despacio. —¿Estás bie-...?
La pregunta quedó al aire, pues el aroma a excitación llegó a sus fosas nasales.
—Hoseok… —habló bajito aún con su rostro escondido entre sus manos. —m-me siento raro…
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
ASDFGHJJKL Hola mis preciosos girasoles~~~ 🌻❣️ ¡¿QUÉ LES PARECIÓ EL CAPÍTULO?! ¿Qué creen que pasará con Tae y Hobi? Asdfghjk ¿O qué pasará con Namjoon, Jin y Jungkook? AaaAaa
Aún sigo llorando con We are bulletproff: the eternal & Zero o'clock ay🤧 ¿Cuáles fueron sus canciones favs del álbum?
Una cosa más: Bebés, cuídense muchísimo. Los amo mucho mucho❣️ ¡Nos leemos en el próximo capítulo! Les mando muchos besitos, gatitos y abrazos.🥺🌻❣️✨🌻✨❣️✨🌻✨❣️✨🌻✨❣️✨🌻✨❣️
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top