🌻•Capítulo 26

《🌻》

Después de que lograra que el Señor Pinault firmara los contratos exclusivos. Hoseok le había dado un recorrido por toda la empresa, el hombre había quedado encantado, porque a pesar de conocer muchas empresas de publicidad, Hope Publicity era en definitiva, la mejor que había visto. Pero realmente le tomó desprevenido cuando Hoseok le contó que tenía planes en convertirla en Hope Enterprises, pues ya no sólo manejarían publicidad. Si no que también serían poseedores de una cadena de hoteles y centros comerciales que empezarían a ser construidos y otros comprados el año entrante. 

El hombre felicitó a Hoseok, por que a pesar de ser tan joven, sabía muy bien dónde invertir su dinero. 

Luego, Jung lo acompañó hasta la salida y se despidió de él con un fuerte apretón de manos y su usual: Fue un gusto hacer negocios con usted. Confíe en nosotros, no lo defraudaremos. El señor sonrió y le deseo éxito en sus proyectos futuros, para después retirarse. 

Se dio un momento para dar un enorme suspiro, sintiendo sus músculos relajarse agradablemente casi al instante. Se adentró de nuevo al edificio, y ya que iba en el elevador, sacó su celular, donde le envió un mensaje a Jungkook para así saber donde se hallaban él y Taehyung. 

Se confundió cuando recibió su mensaje que decía: "estudio 12". Enarcó una ceja, ahí estaba el set que Jin no quería que tocaran. ¿Qué hacían ahí? 

En fin, supuso que sólo le estaba mostrando cada lugar o tal vez Jin llamó a Jungkook, después de todo es su alfa. Solo esperaba que no hicieran nada indebido frente a su inocente Taehyung, porque algo le decía que esos dos —más bien tres— eran bastante pervertidos en su relación y no quería que mancharan la inocencia de su pequeño. 

Una vez llegó al piso correcto, se dirigió al lugar indicado. En el camino saludaba con una sonrisa a unos cuantos de sus empleados. Caminaba con su celular en mano, revisando su e-mail en tanto llegaba al estudio. Deseaba que Taehyung se encontrara bien y se sintiera cómodo en compañía de Jungkook. Pues su pequeño es muy tímido y le es difícil interactuar con otros, sobre todo si estos son alfas.

Pero cuando llegó al estudio se sorprendió de ver a varias personas ahí dentro. Al parecer ya habían empezado a trabajar en la sesión. Los modelos venían en camino desde el día de ayer así que en este momento ya deben de estar trabajando. 

Guardó su celular en su bolsillo, mientras buscaba a Taehyung con su vista. Pero no lo veía por ningún lado, tampoco a Jeon y eso lo hizo fruncir el ceño. Sacó nuevamente su teléfono y rápidamente texteó: Ya estoy aquí, ¿Dónde están?. A los pocos segundos recibió la respuesta de su asistente: En el área de los camerinos. 

—¿Camerinos?, ¿Qué hacen ahí? —murmuró para sí mismo, comenzando a escribir un nuevo mensaje: Jeon, envíame una foto de Taehyung para saber qué está haciendo y cerciorarme de que está bien. Voy para allá. 

Comenzó a caminar con paso firme, dedicando pequeñas sonrisas y asentimientos a unas cuantas personas. Su teléfono sonó al recibir un nuevo mensaje, y se detuvo en seco en cuanto miró la fotografía que Jungkook le había mandado. 

—¿Pero qué…? 

Jeon Jungkook:

Disculpe señor, no pude evitar todo esto. 

¿Qué habían hecho con Taehyung? 

Hoseok se había quedado viendo la fotografía, cuando de inmediato el nombre de una persona  cruzó por su mente: —Jin… 

SeokJin en definitiva, es el mejor de sus publicistas, el que más se esfuerza y mejor trabaja. Pero también es el más necio de todos. Es insistente hasta no obtener lo que quiere. Pues hubo un tiempo en el que no dejaba de acosar a Jiminnie cada que iba a la empresa, pues quería que él fuera su modelo para cierta marca de labiales. Insistía en que Jimin tenía unos labios perfectos y encantadores, nada que ver con los de las y los modelos todos inyectados para lucir voluptuosos, no. Los de Jimin eran naturalmente gruesos y esponjosos, por eso Jin insistía porque sabía que estos quedarían perfectos para modelar labiales. 

Pero Jimin siempre se negaba, le daba mucha vergüenza. Hasta que finalmente se hartó de tantas insistencias, que terminó por aceptar, con tal de que dejara de perseguirlo como perrito faldero por todos los pasillos. ¿Qué pasó? La campaña fue todo un éxito, tal como SeokJin lo había predicho. 

Él tenía buen ojo en cuanto a que modelos elegir. Porque sabía que si estos aparecían en los anuncios, slogans, comerciales, etc etc, tendría muy buen recibimiento, y acapararía la atención del público. Poco le importaba si eran famosos o no, mientras a Jin le gustaran y le parecieran perfectos para la campaña solicitada, él los aceptaba. 

Hoseok sabía que Taehyung era hermoso, tenía una belleza inigualable, y qué decir de sus ojos, eran los más preciosos que había visto en toda su vida. Pero al alfa se le había olvidado por completo, decirle a Jungkook, que mantuviera a su omega alejado de Taehyung. Y bueno… al parecer lo encontró y ahora lo tiene casi listo para alguna sesión fotográfica. 

No podía evitar sentirse preocupado, pues Taehyung es un chico de campo, no está acostumbrado a nada de eso y tal vez el montón del reflectores, flashes y la atención de tantas personas en él no le agraden. Por que a juzgar por la expresión que tenía su precioso Taehyung en esa fotografía que su asistente le había mandado, lucía muy confundido. 

—¿Dónde está Tae-...? 

Se congeló en su lugar al verlo. Hoseok tragó sonoramente, en tanto parpadeaba varias veces, sin dejar de mirar al precioso omega frente a sus ojos. ¡Por Dios! Se veía tan malditamente bien, esa camisa roja de seda, su cabello perfectamente arreglado con suaves ondas en las puntas y ¡Dios!, ¿eso era brillo labial?. 

Le gustaba lo que veía, tanto que contuvo un gruñido en su garganta. Su lobo aullaba ansioso en su pecho, muy contento de ver a su omega. MÍO, gruñía una y otra vez. Hoseok había llevado una mano a su pecho tratando de calmarse y también de calmar a su desesperado lobo.

Sí, ese omega era suyo. Ese precioso y encantador omega era completamente suyo. 

Fue en un instante, donde los ojos de ambos conectaron. Y cuando el alfa menos lo esperó, ya tenía al bello omega, pegado  en su cuerpo cual koala. Hoseok parpadeó un par de veces, para darse cuenta de que Taehyung lo estaba abrazando con fuerza, con la mejilla pegada en su pecho. Solo le tomaron un par de segundos rodearlo también con sus fuertes brazos, sintiendo como su dulce aroma a flores y vainilla con un toque de chocolate, invadía sus fosas nasales y le hacía recobrar el sentido de donde se encontraba. 

—¡Taehyung!, ¿Estás bien, pequeño? 

El menor solo asintió en respuesta, cerrando sus ojitos, permitiéndose un tiempo para embriagarse del aroma a canela y roble del alfa. Necesitaba relajarse, se sentía un poco abrumado por todo lo que le hicieron, pues tener a tantas personas, tocando su rostro, cabello y acomodando sus prendas, sinceramente le había asustado. 

Tan solo quería ver a Hoseok y sentirse protegido a su lado. 

—Señor Jung, déjeme explicarle- 

—No tienes que explicar nada, Jungkook —interrumpió sereno, en tanto acariciaba la espalda de su omega. —Sé cómo es Jin en estos casos

Jungkook hizo una mueca, dándole la razón a su jefe. Aunque le llamó la atención la manera en que el alfa mayor, abrazaba al omega contra su pecho, en tanto le murmuraba pequeñas preguntas, donde el menor lo miraba con ojitos brillantes y su mentón recargado en el fuerte pecho, mientras simplemente asentía con una pequeña sonrisa. a todo lo que el alfa le decía. 

Tiernos. 

—¡Ho-...! —estaba por mencionar el nombre de su jefe, entusiasmado de verlo ahí, pero su alfa lo había silenciado con un bajo shh, para después señalar al par de acaramelados. —Oh… 

SeokJin se apegó a su alfa golpeando su brazo con emoción al ver a Hoseok con ese precioso chico. Y sin que ninguno se diera cuenta, sacó su celular de su bolsillo y discretamente, les tomó unas cuantas fotografías. 

Hoseok y Taehyung estaban en su propia burbuja, olvidándose de todo a su alrededor, mientras sus ojos se mantenían conectados. Las preguntas del alfa variaban entre, ¿Estás bien?, ¿Qué más te hicieron?, ¿Te asustaste?, ¿Seguro que estás bien?. El omega simplemente respondía sus preguntas con dulzura, pues se hallaba feliz de tener a Hoseok allí. 

Luego, Taehyung le contó que había probado lo que era una malteada y que le había gustado mucho. Pero entonces llegó Jin y se besó en la boca con Jungkook. Ahí fue donde Hoseok abrió más sus ojos, asustado de que su omega presenciara eso. Pero Taehyung no le dio tiempo de hacer algún comentario, pues el menor continuó con su relato de que Jin lo había traído casi a rastras hasta este lugar, donde inmediatamente le tendieron varias prendas y le pidieron que se las pusiera. Justo después de salir del vestidor, lo sentaron en una silla frente a un espejo y comenzaron a tocar su cabello y su rostro. 

El omega no entendía mucho, pero sólo escuchar a Jin decirle que se vería muy bonito, lo calmó solo un poquito. 

Hoseok amaba tanto escuchar a Taehyung relatar lo que había hecho, se hallaba perdido en su voz y en sus preciosos ojos azules. Tanto que había olvidado que tenía al menor abrazado, sin dejar de acariciar con dulzura su espalda arriba y abajo. Sin evitarlo sonrió, llevando una mano a la suave mejilla, dejando caricias con su pulgar. —Te ves precioso. Taehyung… 

Y en un dos por tres, las mejillas de ambos se habían puesto rojas. La vergüenza saliendo a flote en el alfa, que le hizo desviar la mirada por lo que había dicho. En cambio, Taehyung había sonreído en grande, aún con sus mejillas sonrojadas, para después, volver a abrazar a su mayor, con la mejilla pegada en su pecho, dando una fuerte calada de su aroma favorito. 

—Ay no… Jungkookie, sostenme…

—¿E-Eh? —el joven alfa se alarmó, tomando de inmediato a su omega de la cintura, mientras lo inspeccionaba de arriba a abajo. —¿Qué te sucede? 

—Me desmayooooo —llevó una mano a su pecho dramáticamente, en tanto dejaba recargar su peso en su pareja. 

—¿Qué? —lo rodeó más fuerte con sus brazos, mirándolo a los ojos con preocupación y pánico creciente. —¿J-Jinnie? 

—No puedo con tanta dulzura, auxilio —señaló a los dos frente a él, mientras sacudía a su alfa de la camisa. —¡Míralos, Kookie! 

Entonces el menor se relajó, dejando salir el aire contenido, mirando a su omega con reproche. —Me asustaste… 

—Lo siento, bebé —besó su mejilla, para después acercarse al dulce par. —¿Hola?

Hoseok iba separando sus labios de la frente de su omega, para después mirar un poco avergonzado a su amigo. —Hola, Jin… —Taehyung también volteó a verlo con sus mejillas rojitas. SeokJin enarcó una ceja en tanto contenía una carcajada al ver a ambos avergonzados. 

—Quiero hacerles tantas preguntas, pero necesito a este pequeño de aquí, ya mismo 

El omega mayor había tomado al menor de su mano, arrastrándolo a un pequeño fondo en blanco, con varias cámaras y fuertes reflectores al frente. Taehyung se encogió en su lugar, llevando sus manos a su pecho, entrecerrando un poquito sus ojos, pues la fuerte luz le molestaba. 

—¡Jin! —llegó Hoseok al lado del omega. Colocó su brazo en su cintura y lo apegó a él, para esconderlo en su pecho. —Lo asustas. Él no está acostumbrado a nada de esto. 

—Sólo necesito tomarle un par de fotografías. —explicó colocándose detrás de una cámara. Jungkook se puso a su lado. —Quiero ver sus habilidades de modelaje

—Taehyung no es modelo, ¿Al menos le explicaste que es todo esto? 

—¡¿Qué?! —exclamó incrédulo. —¡Pero si es precioso!, ¡Es imposible que no haya modelado antes! 

—Pues no, no lo ha hecho. —aclaró su garganta. —Siempre te he permitido escoger con qué modelos trabajar, pero esta vez no te apoyaré en tu elección. Taehyung es mi responsabilidad, es muy joven y no me gustaría exponerlo de esta manera… 

—Quiero intentarlo… —mencionó bajito. El alfa miró al menor con sorpresa. —U-Uhh, creo que será divertido… 

—¡Sí! —SeokJin saltó en su lugar, hasta abrazar al de ojitos azules. 

—Pero… pero no te han dicho qué es lo que harás… —decía el alfa confundido por la decisión que su omega había tomado

Taehyung se rió al ser abrazado con tanto entusiasmo. —Tengo que hacer eso, ¿no?. —Había señalado al set que estaba a dos metros de ellos, donde se hallaban un par de modelos, siendo fotografiados una y otra vez. —Se ve divertido…

—Bueno… —rascó su nuca con una mueca. —si tu quieres intentarlo… 

🌻

La voz de SeokJin resaltaba entre todas. Trataba de que Taehyung se sintiera cómodo frente a la cámara, dándole pequeños cumplidos. Hoseok estaba junto al mayor, guiando a su omega. 

El alfa hacía unas cuantas poses sencillas a lado de la cámara, para que Taehyung lo imitara. Lo cual, hacía muy bien. Sólo le pedían que relajara su rostro u hombros, o que cerrara sus ojos, o que colocara en cierta posición sus brazos y manos. 

—Ahora, coloca el dorso de tu mano en el lado izquierdo de tu mentón, mirando levemente hacia arriba… no, no, baja un poquito… perfecto

—¿A-Así? —preguntó bajito acatando lo pedido. 

—Sí, así. —el omega ajustó el zoom de la cámara. —¡Dios! Tienes unas manos hermosas, ¿Hay algo en ti que no sea perfecto? 

Las fotografías siguieron por alrededor de media hora. Mientras Hoseok observaba a su omega encantado, por la manera tan rápida en que se había desenvuelto frente a la cámara. 

De verdad, SeokJin nunca se equivocaba. 

—Dios mío… 

—¿Qué?, ¿Qué pasó? —preguntó el alfa acercándose a su amigo, quien revisaba las fotos en la computadora. 

La pequeña sesión había terminado hace cinco minutos, mientras tanto, Taehyung se había ido a poner su propia ropa, para que después los estilistas lo desmaquillaran. El pequeño se sentía muy feliz por lo que había hecho. 

—Hoseok, ¿De dónde sacaste a este omega? —se hallaba maravillado observando la pantalla

—¿Por qué lo preguntas? —preguntó confundido

—¡He descubierto a toda una joyita! —exclamó alegre de su hallazgo. —¡Tan solo mira estas fotografías!, ¡Son perfectas! 

Tenía razón. Las fotografías, cada una de ellas habían salido perfectas. Hoseok estaba sin palabras, Taehyung de verdad había salido demasiado bien en ellas. Su cabello y sus preciosos ojos resaltaban con una belleza inigualable.

—Este jovencito, es demasiado fotogénico. —decía sin dejar de ver las fotos que había tomado. —¡No hay ninguna en la que no haya salido bien! Incluso en las que no está posando o luce confundido, sale perfecto. 

No había duda. Taehyung tenía madera para modelo y esas fotografías eran la prueba. ¿Debería dejarlo entrar al mundo del modelaje? 

Está seguro de que a su omega le iría bastante bien, sobre todo si Hoseok se mantenía a su lado para protegerlo… Pero mejor tendría que hablarlo bien con él y explicarle todo lo que conlleva ser una imagen pública. Además de que la belleza de Taehyung llamaría mucho la atención, así logrando muchos contratos para ser la imagen de distintas marcas. Y a juzgar por lo bello que es de los pies a la cabeza, tendría oportunidad en cualquier campo, ya sea para lucir sus manos, su piel, sonrisa, sus ojos… Taehyung es bello por donde lo viera.

Además, tendría que hablarlo con su abuela. A pesar de que Taehyung es mayor de edad, él aún estaba a cargo de su abuelita, y no sería justo hacer esta clase de cosas a sus espaldas

—¡Hobie! —el encantador omega llegó hasta donde el alfa, y lo abrazó con entusiasmo, siendo correspondido de inmediato. 

—Hola, cachorro… —sonrió con dulzura pasando una mano por sus suaves cabellos y otra en su espalda. —¿Estás listo? 

Preguntó al verlo con su bonito suéter de rayas azules y blancas. Taehyung asintió, con su preciosa sonrisa cuadrada, logrando que el alfa sintiera un pinchazo en su corazón, por tan bella y adorable imagen frente a sus ojos. 

Un carraspeo hizo que ambos voltearan, donde se encontraron con el omega mayor, mirándolos con una ceja enarcada y brazos cruzados. —Se ven muy lindos juntos, ¿Por qué no me habías dicho que salías con alguien? 

Las mejillas de Hoseok se asimilaron al color de un tomate, mientras intentaba decir algo. —N-No estoy saliendo con nadie… 

SeokJin frunció el ceño. —¿Y él? 

—Bueno, Taehyung es… e-es… —miró al menor con nerviosismo. —Es alguien muy importante para mí… 

—Entiendo… —murmuró no muy convencido alargando la última letra. —Hace mucho que tu y yo no tenemos una buena charla, Ho… y creo que tenemos mucho de qué hablar… 

—Sí, lo sé… un día de estos te invitaré un café y hablaremos de todo lo que quieras… 

—Dalo por hecho, no lo vayas a olvidar. —miró a su alfa llegar con una malteada de chocolate. —Te mandaré un mensaje con el lugar, día y hora. 

—¿Qué? Pero si yo te iba a decir cuan-… olvídalo… 

Bufó al saber que con SeokJin no tendría opción. Jungkook le entregó la malteada a su pareja, regalandole un besito en la mejilla y Hoseok supo que era el momento para aprovechar y salir de ahí, antes de que Jin le dijera algo más… 

🌻

Tal como Hoseok había prometido, había llevado a Taehyung al cine —claro, después de desayunar—. El alfa le dio a elegir qué película ver, Taehyung sólo entendía que verían televisión en ese lugar. ¿Por qué mejor no iban a casa del mayor y veían ahí la película? 

Estuvieron por alrededor de media hora, tratando de decidirse por la película más reciente de Spiderman o la de How to train your dragon. Al final se decidieron por Spiderman, a Hoseok le habían dicho que era muy buena, y no había tenido oportunidad de ir a verla. 

Una vez que el alfa había comprado las palomitas, bebidas y dulces, se habían sentado en unos de los sofás de la sala de espera. Afortunadamente sólo eran ellos dos y cinco personas más. Dos de ellas parecían ser pareja y los otros tres al parecer eran estudiantes, pues aún portaban su uniforme, tal vez decidieron irse de pinta o quizás salieron temprano, Después de todo, ya casi era medio día. 

Taehyung leía en una hoja, la sinopsis de la película, y a juzgar por su expresión, no entendía mucho de lo que trataba. —¿Tiene poderes de araña?, ¿Cómo? 

—Bueno, una araña le picó y le dio sus poderes… ¡Pero así no pasa en la vida real! —aclaró de inmediato ante la expresión en sorpresa del menor. —Es ficción, eso sólo sucede en las películas 

El alfa estuvo explicándole por alrededor de cinco minutos, lo que era ese super héroe, y que poderes tenía. Taehyung se había entusiasmado, tanto que ya quería ver todo con sus propios ojos. 

La charla se había detenido, cuando Hoseok recibió unos correos en su celular, y no tuvo otra opción más que responder. Mientras tanto, el omega se había quedado pensativo sobre lo que le había dicho Jungkook unas horas atrás. Tenía muchas preguntas que quería hacerle a Hoseok pero por alguna extraña razón, no se atrevía. 

El precioso omega, paseó sus ojitos por la sala mirando a las demás personas que estaban sentados en los otros sofás. Olfateó disimuladamente, distinguiendo varios aromas, así logrando distinguir que uno de ellos era alfa y los demás eran omegas tal como él. 

Sus ojitos azules, dieron con la pareja que estaba sentada muy junta en un sofá al fondo. Eran un par de chicos y el más alto tenía su rostro muy cerca del más bajito, quien sonreía con sus mejillas rojas. Taehyung también se puso rojito, al ver cómo unían sus labios repetidas veces, haciendo reír al más bajo. 

Mejor desvió su mirada a sus manos, recordando lo que Jungkook le había dicho: Nos besamos porque él es mi omega y yo soy su alfa…nos queremos mucho y estamos muy enamorados.

—Enamorados… —murmuró muy pero muy bajito

Volteó a ver al alfa, quien aun estaba muy centrado en su celular, escribiendo sin parar. Rápidamente, el corazoncito de Tae, comenzó a latir con más velocidad, cosa que lo hizo sentir nervioso. Siempre que lo miro, mi corazón comienza a latir muy rápido, cuando estoy cerca de él y lo abrazo o lo beso, mi corazón siempre se acelera. Inconscientemente tocó sus labios con una expresión desconcertada, y sin darse cuenta sus pensamientos fueron dichos en voz alta.

 —Un beso… Hoseok, ¿Has besado a alguien en la boca? 

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HOLAAAAAA MIS PRECIOSOS GIRASOLES! 💓🌻

asdfghjklñ capítulo un poco largo, lo siento mucho si quedó aburrido:( aaaaa pero espero que les haya gustado, ¿Qué les pareció? ¿Creen que Taehyung quiera entrar al mundo del modelaje? ¿Ya les dije que amo leer su teorías? Así que dejen sus teorías aquí TuT💗

Comenta aquí si ya quieres que nuestros bebés se den por lo menos un besito🥺 ya casi ya casi~~~

Y como siempre, les doy la bienvenida a todos los nuevos lectores, muchísimas gracias por darle una oportunidad a My Sunshine🌻 LES MANDO UN ENORME ABRAZO Y MUCHOS BESOTES Y NO OLVIDEN QUE SONY LAS AMA MUCHOOOOOOOOO💓💓💓 Nos leemos en el próximo capítulo~🥰💗

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