《🌻》

Iba caminando sigiloso por los pasillos de la empresa, sin dejar de mirar a todos lados. No quería encontrarse con ellos, no aún.

Sabía que lo estaban buscando, no los había visto en toda la mañana, pero seguía huyendo y escondiéndose de ellos. Era la hora de salir a comer, así que esta vez decidió por irse a comer fuera y no en el comedor de empleados, donde lo más seguro es que ambos estén ahí esperándolo.

Se detuvo en la orilla de una pared, asomándose a ambos lados de los pasillos, vigilando de que ninguno de los dos alfas viniera. Suspiró aliviado al no ver a ninguno, así que prosiguió su camino al elevador.

Presionó el botón para llamarlo, y en un par de segundos, las puertas estaban siendo abiertas. Apenas dio un paso adentro, chilló al verse siendo levantado por la cintura, adentrándolo al elevador.

—¡Chicos! — pataleó sintiendo el aroma de ambos alfas — ¡Namjoon, suéltame!

Fue soltado, observando con creciente pánico a los dos alfas frente a él. Trató de escabullirse, pero ellos no se lo permitieron y la puerta de elevador se cerró, comenzando a bajar y Jin soltó una maldición.

—Te estabas escondiendo de nosotros

—¿Yoooooo? — llevó una mano a su pecho fingiendo ofenderse. Jungkook y Namjoon lo miraron con los ojos entrecerrados. SeokJin bufó — está bien, está bien, sí, los estaba evitando

El omega llevó otra mano a su pecho, cuando el elevador se detuvo abruptamente. Sí, Namjoon había presionado el botón de emergencia que detenía el funcionamiento del elevador. SeokJin lo miró con el ceño fruncido.

—¿Por qué hiciste eso?

—No saldremos de aquí, hasta que terminemos de hablar

—¡Pero es hora de ir a comer! — pataleó como un niño — ¡tengo hambre! Podemos hablar después

—Entonces aclaremos las cosas rápido — el alfa mayor se cruzó de brazos. SeokJin bufó rodando sus ojos — Jungkook y yo sabemos desde hace tres días que tu celo se aproxima, para ser exactos: empieza mañana.

—¿Y qué hay con eso? — desvió su mirada

—Tienes que decirnos, con quién de los dos lo quieres pasar — respondió Jungkook bajito mirando sus dedos de manera tímida

—¿Qué? — alzó la vista observando alternativamente a ambos alfas — ¿Qué los hace pensar que quiero pasarlo con alguno de ustedes?

Los dos alfas se quedaron boquiabiertos. ¿habían escuchado bien?

—Tomo supresores y me encierro en mi habitación, sufriendo sólo mientras los dolores me atacan. Así lo he hecho siempre y lo seguiré haciendo — volvió a desviar la mirada incómodo

—Pero Jin, eso te puede hacer daño…  — el alfa más joven se preocupó

—Jungkook tiene razón, Jin. Ya no tienes porqué sufrir sólo, ahora nos tienes a nosotros… tomar tanto supresor te puede hacer un grave daño — Namjoon mordió su labio preocupándose por la salud de su omega

No era bueno que un omega tomara tantos supresores y pasara sus celos solo, siempre. Eso podría desencadenar en graves problemas de salud e incluso podría quedar estéril. Un omega no soportaría terminar estéril. Caería en depresión y su lobo se dejaría morir, así también logrando que el humano muriera. Y al parecer, Jin siempre ha pasado sus celos sólo y eso lo hace aún más alarmante. Además del uso constante de anticonceptivos, ya que cuando mantienen relaciones, al omega no le gusta que usen condón.

Todas las alarmas se encendieron en la cabeza de Namjoon. Lo mejor sería llevarlo al médico y para que le hicieran un chequeo.

—Chicos, por favor dejemos de hablar de esto y déjenme salir… — retrocedió un poco acariciando su brazo, sin dejar de observar una de las esquinas del elevador

—Jin… — el alfa más joven se sintió mal, así que estuvo a punto de presionar el botón y echar a andar de nuevo el elevador, pero Namjoon lo detuvo.

—Dime por qué, no quieres pasar tu celo con ninguno de nosotros

Rodó los ojos — Simplemente, no quiero. Estoy acostumbrado a pasarlo solo siempre

—Pero te estás haciendo daño — insistía Namjoon sintiendo una presión en su pecho a causa de la preocupación

—Namjoon hyung, tiene razón. Te estás haciendo daño al tomar tantos supresores…

—Claro que no — bufó cruzándose de brazos

Namjoon se acercó al omega y lo estrechó entre sus brazos, y hundió su nariz en el cuello, aspirando su dulce aroma a cerezas. SeokJin se sintió confundido por tan repentino abrazo. Luego, su mano derecha fue firmemente tomada, recibiendo pequeños besitos.

El alfa peliplata se separó un poco y tocó el mentón del mayor con delicadeza, mirándolo a los ojos con ternura. —¿De qué tienes miedo?

SeokJin tragó y desvió la mirada — No tengo miedo de nada…

—Entonces, ¿Por qué nos evitas?, ¿Por qué quieres pasar todo esto sólo? — habló Jungkook, también sintiéndose mal

Jin mordió su labio, para después llevar su vista a ambos alfas que lo miraban muy preocupados. Su corazón se encogió.

—No sé… No sé cómo actuaría ante un alfa durante mi celo… es… es vergonzoso. Además mi lobo… me pide sentar cabeza, quiere cachorros, pero yo no — Jungkook y Nam lo miraron sorprendido — ¡No aún! —aclaró rápido— durante un celo es más seguro que quede en estado, y yo no me siento preparado todavía. Además de que tengo miedo… de que uno de los dos me marque y el otro s-se moleste y me deje… —lo último lo dijo bajito

Los dos alfas intercambiaron miradas, entendiendo todo.

Namjoon tomó al omega del mentón y unió sus labios en un necesitado beso. SeokJin no se resistió y correspondió con intensidad. Los besos en su cuello por parte de Jungkook no se hicieron esperar, en tanto dos pares de manos acariciaban su espalda, cintura y abdomen.

El pequeño espacio, se estaba llenando de feromonas de alfa y omega. El lugar comenzaba a calentarse. SeokJin se separó un poco de los labios del peliplata, tratando de tomar un poco de aire, comenzaba a sentirse sofocado y estar encerrado en un lugar tan reducido no ayudaba mucho.

Tomó un par de caladas, sintiendo los necesitados besos de Namjoon en el lado libre de su cuello. El omega no dejaba de jadear, se sentía demasiado bien. Mantenía su boca abierta, dejando escapar suspiros y jadeos. Comenzaba a excitarse. De repente su boca fue atacada nuevamente, pero esta vez fue el alfa más joven quien se apoderó de sus labios.

—Espero te quede claro, que ninguno de los dos tenemos planes de alejarnos de ti, Jin… —Namjoon murmuró, sin dejar de succionar el cuello del mayor — Te amamos…

Y después de escuchar eso, en sólo un instante… una explosión de feromonas, provocó que las pupilas de los dos alfas presentes se dilataran y detuvieran sus besos, para ambos sostener con poco de pánico a su ahora tembloroso omega.

—¡Jin! — el alfa mayor se asustó sosteniéndolo de la cintura

—É-Él entró en… en celo… — decía Jungkook completamente nervioso, tratando de no dejarse llevar por el montón de feromonas que ahora llenaban el reducido lugar

Sí, la presencia y toques de ambos alfas, provocaron que el celo se le adelantara un poco…

—Alfas… — llamó con voz trémula. Los dos lo miraron atentos, controlándose lo más que podían — Quiero que… quiero que los dos me marquen…

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Gruñó con molestia cuando el esponjoso peluche de pollito se había caído por quinta vez. Pataleó un par de veces y volvió a ingresar una moneda por la pequeña abertura.

La garra comenzó a moverse de nuevo y cuando esta, estuvo sobre el peluche que tanto quería, presionó el botón y vio como ésta bajaba y tomaba al adorable pollito. Comenzó a subir y el nervioso omega mordía sus labios, rogando mentalmente, por que el peluche no se cayera de nuevo.

—Por favor, por favor… ¡Sí!

¡Lo había logrado! Tomó al pollito de felpa entre sus brazos, completamente emocionado, sin dejar de sonreír por su gran logro. De verdad era bonito, suavecito y esponjoso.

Se volteó y sonrió aún más, alzando al pollito para mostrarlo a la persona que venía directo a él. —¡Mira Hobie!, ¡Lo logré!

El alfa terminaba una llamada, y sonrió al ver a su hermanito tan entusiasmado. —¡Sabía que lo lograrías, cachorro! Estoy seguro de que a mi sobrinito le encantará — guardó su celular en su bolsillo

—No es para mi bebé — se rió bajito

—Oh… — colocó su brazo alrededor de los hombros del menor y caminaron directo a la puerta de salida del centro comercial, siendo seguidos por su guardaespaldas personal —¿Entonces para quién es?

—Para tu omega — soltó una risita traviesa al ver como Hoseok se sonrojaba — ¿Cuál es su nombre?

—Taehyung…

—Oh bueno, como tu ya le llevas un regalo — señaló la cajita con un celular nuevo — yo también quería llevarle algo. Espero que a Taehyung le guste

—Ya verás que sí, él se pondrá muy feliz…

•●•

Después de que Hoseok le dijera a su guardaespaldas, que ya se podía retirar, el par de hermanos se subió al auto del alfa y emprendieron su viaje a las afueras de la ciudad. En busca de esa bonita granjita, donde el dulce Taehyung se encontraba.

Quién por cierto, no se espera para nada que los dos hermanos lleguen. Sabe que Hoseok iría un día de estos, pero no sabe con exactitud, cuando. Y ese día llegó. Y probablemente sea una sorpresa para el pequeño omega.

Después de media hora, el viaje se había vuelto silencioso y tranquilo. Killer queen sonaba a un volumen bajo, pero perfecto para apreciar tan bella pieza musical. Hoseok conducía, mientras tarareaba la canción y Jimin miraba el paisaje por la ventana, en tanto dejaba caricias en su bello vientre.

—¿Hobie?

—¿Uhm? — lo miró un segundo para percatarse que el menor estuviera bien y después, regresó su vista al camino —¿Pasó algo?

—Tú… ¿Crees que yo le agrade? — preguntó pensativo sin dejar de mirar por la ventana

—Claro que sí — sonrió — No lo dudes, Taehyung es un chico muy dulce. Estoy seguro de que le agradarás mucho

—¿De verdad? — volteó a verlo con una enorme sonrisa — yo también estoy seguro de que él me agradará

—Ahh~ mi hermanito es un amor…

Jimin rió bajito, sin dejar de abrazar al suave peluche de pollito. Sin más, el viaje continuó tranquilo, durante quince minutos más. Pero la tranquilidad se esfumó, cuando Jimin se emocionó al ver la granja, ansiando llegar ya.

Cuando al fin llegaron y bajaron del auto, Hoseok sostuvo a su hermanito de la cintura con firmeza, cuidando de que no se tropezara o se cayera. Pues su tobillo aún no estaba cien por ciento recuperado y el camino estaba bastante irregular.

Jimin se maravilló al ver el lugar lleno de árboles y verde pasto por doquier. Los cantes de las aves se escuchaban por todos lados y no pudo evitar reprimir un chillido cuando vio el pequeño arroyo, lleno de limpia agua cristalina. Se rió bajito al sentir al alfa tomar con más fuerza su cintura cuando iban cruzando el puente de madera. Sabía que su hermano mayor tenía miedo de que se cayera.

Al terminar de pasar el puente, Hoseok miró con atención el arbusto junto al arroyo, esperanzado a que Taehyung estuviera ahí, pero no fue así. Suspiró y caminó aún sosteniendo a su hermanito, quien miraba a todos lados muy emocionado como si fuera un niño pequeño en un parque de atracciones.

—¿Hoseok? — esa voz…

El par de hermanos se volteó y lo vieron. Ahí estaba Taehyung con su típico overol y una camisa roja de manga larga abajo, con su tierno sombrerito de paja en su cabeza y en su mano traía un par de girasoles. Miraba al alfa con la boca abierta, muy sorprendido de verlo ahí.

Soltó con cuidado a su hermanito y de repente se sintió nervioso —Ho-Hola Taehyung…

—¡Hoseok! — soltó los girasoles, corrió el par de metros que los separaba y abrazó al alfa con fuerza, muy muy feliz.

Hoseok sintió sus mejillas calentarse, mientras pasaba sus manos por la cintura del menor con cariño, así también abrazándolo con fuerza. Aspiró con profundidad el dulce aroma que al que se estaba volviendo adicto cada vez más.

Sintió sus músculos relajarse al instante en que la encantadora fragancia inundó sus fosas nasales. Sintió tranquilidad, paz.

Mierda, lo había extrañado tanto.

En cambio, Taehyung, sentía a su lobo revolotear de alegría en su pecho. Taehyung desearía quedarse así siempre con Hoseok, amaba su fuerte aroma a canela y roble, lo hacía feliz. Le hacía feliz tener a Hoseok a su lado. Le hacía feliz abrazarlo, le hacía feliz verlo.

Restregó su naricita por el cuello del alfa, una y otra vez. Se separó un poquito y tomó el rostro de Hoseok con ambas manos, mostrándole una deslumbrante sonrisa con ojitos brillantes. —¡Viniste!

—Vi-Vine… — las mejillas de Hoseok estaban rojas como un tomate. Taehyung estaba cerca, demasiado cerca. Sin evitarlo su vista dió con los gruesos labios del rubio y relamió los suyos. Pero el emocionado omega volvió a hundir su rostro en el cuello del mayor, logrando que suspirara aliviado, para alejar esos pensamientos de querer besarlo.

—¡Te extrañé mucho, Hoseok! — el dulce omega se removió inquieto en medio del abrazo. No podía estar quieto, no cuando la emoción lo invadía al tener a Hoseok ahí.

—Yo también te extrañé… — acarició su nuca. Cosa que hizo que Taehyung y su lobo se sintieran aún más felices.

Por otra parte, Jimin presenciaba todo muy muuuuy emocionado. Sacudía sus pies en el suelo, manteniendo fuertemente abrazado el redondo peluche de pollito, mientras dejaba escapar chillidos. ¡Su hermano y ese chico se veían tan bellos y tiernos juntos!

En su mente ya los veía felizmente casados y con un par de cachorros. ¡Ya quería ser tío!

El golpetear emocionado del omega embarazado, llamó la atención del omega más joven. El chiquillo se asustó, separándose rápido del abrazo, para esconderse detrás del alfa, mientras asomaba sus enormes y curiosos ojos por sobre el hombro del mayor.

Taehyung ni siquiera había notado la presencia de Jimin. Su mundo se redujo a Hoseok. Al verlo ahí no pensó en otra cosa más que abrazarlo, olfatearlo y decirle lo mucho mucho que lo extrañó.

—Oh, ¿Taehyung?

—¿Sí? — respondió sin despegar la vista del otro omega.

—Él es mi hermano menor — señaló con su mano — su nombre es Jimin y tenía muchas ganas de conocerte

—¡Hola, Taehyung! — se acercó más que emocionado al verlo salir detrás de su hermano. Sonrió enormemente que incluso sus ojitos desaparecieron, dando paso a un bello par de medias lunas — soy Jimin, ¡Oh! ¡y te traje un regalo!

Extendió el pollito se felpa al tímido chico. Un poquito avergonzado Taehyung volteó a ver a Hoseok, quien con un asentimiento de cabeza y una sonrisa lo tranquilizó, indicándole que podía tomar el peluche sin ningún problema.

—Jimin se esforzó mucho para traerte este bonito presente — decía tocando la espalda del menor

Taehyung tragó con un asentimiento. Relamió sus labios y con timidez, tomó al pollito entre sus manos. —O-Oh… — se sorprendió y sin más, sonrió —¡Es muy suave!

—¿Verdad que sí? — decía acariciando su vientre felizmente, cosa que llamó la atención del más joven.

—¡Es muy bonito! — mencionó Hoseok, colocando su mano en el hombro de Taehyung.

Pero Taehyung se quedó en silencio, viendo el redondito vientre de Jimin. Jimin se dio cuenta de la mirada curiosa del bonito chico y sonrió. —Hoseok, ¿Por qué tu hermano tiene su barriga tan grande?

El alfa se asustó, pues una de las cosas que a su hermano no le gustaba que le dijeran era que estaba más "rellenito" y obviamente con el embarazo había ganado unos cuantos kilos más, y su vientre iba creciendo cada vez más.

Pero se sorprendió, cuando escuchó a Jimin reír muy encantado con la actitud inocente del chico —¡Eres tan tierno! — Taehyung ladeó su cabeza confundido

—¿Comiste mucho? — preguntó con inocencia — Cuando como mucho, mi barriga crece un poquito

—No, Taehyung — Hoseok se carcajeó bajito por la ocurrencia del adorable omega.

—¿Entonces?

—Voy a tener un bebé — acarició su vientre por inercia — por eso mi barriga está así, porque aquí dentro, está creciendo mi bebé

—¿Un bebé? — repitió impresionado — ¡La hija del Señor Choi tiene un bebé! ¿Tu bebé será igual de pequeñito?

Se rió enternecido — Probablemente sí

Taehyung dio un par de saltitos emocionado, pero luego se detuvo con una gran duda en su cabeza — ¿Cómo llegó tu bebé a tu barriga?

—Pues verás, mi espo-

—¡Vamos al árbol de manzanas! — interrumpió un nervioso alfa de inmediato, intentando proteger la inocencia del pequeño omega.

Eso, por supuesto que llamó la atención de ambos omegas, sobre todo la de su hermanito, quien desde hace días traía un tremendo antojo de esas manzanas que Hoseok le había mencionado.

Antes de emprender camino a la colina, Taehyung dejó el bonito pollito se felpa a un lado de la puerta, ya que si lo llevaba allá, podría ensuciarse. Por otro lado, Hoseok había tomado en brazos a su hermanito porque sabía que se le sería complicado subir con un bebé en su vientre y un tobillo en recuperación.

Jimin comenzó a hablar emocionado cuando logró ver el frondoso árbol con muchas manzanas. Su hermano le decía que mirara el campo de girasoles, pero Jimin estaba más que nada interesado en devorar diez manzanas… o más. Si es que eran tan buenas, tal como Hoseok le había dicho.

Una vez sentados, Taehyung le extendió una manzana a Jimin y se rió al verlo tomarla como si no hubiera comido en semanas. Al instante en que dio la primera mordida, dejó salir un gemido de gozo al sentir tan dulce sabor en su paladar el jugo se escapaba por sus comisuras. El cachorrito en su interior se removió, al parecer también le había gustado.

—Eshtash shon lash mejoresh manzhanash que he probadooooooo~ — decía con la boca llena y sacudiendo sus piernas.

Taehyung y Hoseok soltaron una carcajada al mismo tiempo, cosa que los hizo mirarse y sonrojarse. —¿Qué estabas haciendo antes de que llegáramos? — Hoseok preguntó para hacer tema de conversación y no sólo escuchar a Jimin dar suspiros de gusto al comer

—¡Oh! — se sentó a su lado — estaba revisando que no hubiera algún ave herida por aquí. Me dan muchas ganas de llorar cuando encuentro a una lastimada y no pueden volar...

—¿Tú las ayudas? — preguntó impresionado

Asintió con una enorme sonrisa — ¡Sip! Las ayudo a recuperarse, y con ayuda de mi abuelita les pongo una venda en su alita lastimada, a los días se curan y ya pueden irse volando

—Oye, eso es genial. Eres muy amable, Taehyung… — el omega soltó una dulce risita y sus mejillas se tiñeron levemente

—Ah y también hay una ave, que perdió una de sus patitas, no sé como pero yo le ayudé a que no muriera… y casi todos los días viene a visitarme aquí mismo en esta colina — contó emocionado — ¡es mi amiga!

—Lo es, esa ave debe de sentirse muy agradecida de que la ayudaras — acarició su cabello con ternura

El corazoncito de Taehyung comenzó a latir a prisa al sentir las caricias en su cabello. ¿Por qué el toque del alfa lo hacía sentir así? De verdad comenzaba a pensar que había algo malo con su corazón.

Llevó una mano a su pecho y miró su sombrerito de paja en su regazo. Sus labios se curvaron en una sonrisita traviesa y terminó por colocarlo en la cabeza del alfa. Taehyung comenzó a reír porque había logrado su cometido.

—¡Tienes puesto mi sombrero!

—Oh… ¿Cómo llegó aquí?

—¡Yo fui! — se carcajeó cosa que llamó la atención de Jimin quien ya iba por su quinta manzana

—¿Y me veo guapo con el? — preguntó divertido e hizo unas cuantas poses, tal como si estuviera en una sesión de fotos. Taehyung comenzó a reír más fuerte tomándose de su barriga.

—Vaya… mi hermano luce como todo un granjero, ¿Verdad, Taehyung?

—¡Sí! — sobaba su barriga por tanto reír. Se dejó caer de espaldas en el fresco césped. Hoseok le siguió recostándose a su lado, colocando el sombrero en su pecho.

Jimin miró como ambos chicos lucían tan adorables en su propia burbuja, que decidió alejar su vista de ellos y mejor continuó comiendo manzanas, para darles su espacio.

El rostro de Taehyung estaba un poco rojito, por lo tanto que había reído. Su pecho subía y bajaba, tratando de tranquilizarse. Suspiró y volteó su rostro, encontrándose con los ojos de Hoseok mirándolo fijamente.

Ambos estaban recostados en el césped, con sus rostros ladeados, cara a cara. Hoseok estaba hipnotizado por esos preciosos ojos azules que lo miraban con unos pequeños destellos en ellos. El alfa percibía la pureza e inocencia en esa dulce mirada. Y diablos, le encantaba.

A Taehyung le gustaban mucho los ojitos expresivos de Hoseok y su bonito color miel en ellos… Aunque a veces los veía dorados. Su mirada le transmitía paz y le hacía sentir cosas bonitas en su pecho y en su pancita. Un leve cosquilleo en todo su cuerpo, que él lo podría interpretar como un relajante.

Ambos lobos sacudían sus colas completamente felices y aullaban al unísono, al estar tan juntos.

Hoseok esbozó una pequeña sonrisa, sin despegar sus ojos de esos bellos orbes azules. Y Taehyung al verlo sonreír, hizo lo mismo. Inconscientemente, sus manos se iban acercando, como una especie de imán.

Sus corazones latían al mismo tiempo, al mismo ritmo. El palpitar resonaba en sus oídos. Sus manos se tocaron y ellos no dudaron en entrelazarlas con delicadeza, sintiendo una reconfortante calidez al instante.

Con su mano libre, Hoseok acarició la mejilla sonrojada de su omega, quien cerró sus ojos un par de segundos ante el tacto. En ese momento sólo eran ellos dos y nadie más, nada más importaba.

Taehyung abrió de nueva cuenta sus preciosos ojos, encontrándose de nuevo con la atenta mirada del alfa, quien no había despegado su mirada de él. Extrañamente su mirada no le incomodaba y podía sostenerla sin problema alguno, sintiendo las ya frecuentes cosquillitas en su barriga.

El rostro de Hoseok se iba acercando cada vez más, las cosquillas en su pancita y pecho aumentaron, cerró sus ojos… Y sintió un dulce beso en su nariz. El rostro de Taehyung se volvió rojo como una manzana, cuando abrió sus ojos y la encantadora sonrisa de mejillas ruborizadas del alfa lo recibió.

Ambas manos entrelazadas fueron levantadas lentamente, Hoseok plantó un delicado beso en la mano de su omega y susurró:

—Te quiero tanto, Taehyung…

Y Taehyung creyó que estaba por sufrir un infarto, su corazón comenzó a latir como loco, en el instante en que el alfa le dijo esas palabras.

Sí… Hoseok había caído enamorado de Taehyung. Por fin lo había aceptado, quería a ese chico… por no decir que comenzaba a amarlo.

Y Taehyung… Taehyung también había caído por Hoseok. Pero el inocente omega, no se daba cuenta…

Los ojitos de Taehyung se cristalizaron sin entender por qué. ¿Qué era ese reconfortante calor en su pecho? ¿Por qué tenía ganas de llorar? ¿Por qué su corazón latía así?

¿Por qué… quería tanto a Hoseok?

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¡yA SOMOS +17MIL! ¡MUCHÍSIMAS GRACIAS!💛🌻

¿Qué les pareció el capítulo? Ayyyy a mi me gustó mucho TuT ¡No se desesperen por el beso, por favor! Muy pronto llegará~ ¡Hoseok ya aceptó sus sentimientos! Y Taehyung aún no entiende los suyos... Nuestro bebé no sabe lo que es el amor~

Por cierto, ¿vIERON LO DE BTSWORLD? ¡Tendremos a un Taehyung granjero! Les juro que gRITÉ de la emoción, es preciosoTuT💛

B

ueno, sin más me despido~ ¡Muchas gracias por el amor que le dan a My Sunshine! Se los agradeceré SIEMPRE💛 ¡NOS LEEMOS EN EL PRÓXIMO CAPÍTULO! Los amomuchomuchomuchoooo~🌻💛🌻💛🌻💛🌻💛🌻💛🌻💛🌻💛🌻💛🌻