-MANIC! MANIC! MANIC!- escucho a la multitud clamar mi nombre mientras toco mí solo de batería a gran velocidad como el puto amo que soy.

Cuando termino las guitarras comienzan a sonar junto al piano y la voz de mis compañeros suenan por los alta voces, yo sigo colocándole el ritmo a la canción disfrutando de lo que es mi mundo, mi batería y la música que puedo crear con ella.

Los gritos de las chicas y chicos de emoción se mezclan con otros que cantan la letra junto a los dos erizos vocalistas.

Cuando la canción termina los gritos se hacen más fuertes aún. Nos despedimos del escenario y bajamos de este directo al camerino tras bambalinas.

-ufff me duele la garganta- toma una botella y se la lanza al otro vocalista, un erizo de color marrón

-eso te pasa por estar todo el rato afinando sin tomar agua antes de salir al escenario jhon- dice el pianista, este es un lobo rojizo

-es cierto lo que dice fang- bebe agua el segundo vocalista

-calla Khorn- bebe agua también

-típico- digo negando yo, es verdad en la banda es típico verlos pelear, es parte de ser casi hermanos por compartir nuestro espacio personal

-tu no diga nada manic, que tú no sabes de esto porque no cantas- me señala

-claro, como digas- lo ignoro totalmente mientras me tiro al sillón y miro mi teléfono

En el encuentro a mi bello erizo color verde, encadenado a la cama con una pelota roja en su boca. Acerco la pantalla usando el zoom y acaricio su pecho donde tiene dos cicatrices en diagonal, puedo ver como se queja y se retuerce al sentir el toque.

-oye manic, siempre me he preguntado que tanto haces con tu teléfono, y no digas que chateas con fans porque esa no te la creo- dice jhon sentándose frente mía, los otros dos también ponen atención

Uff, que difícil librarse de estos.

-es necesario que lo diga?- alzo una ceja esperando respuesta, por desgracia es un sí, pongo los ojos en blanco, pero no puedo hacer nada, si no les digo algo me estarán molestando toda la gira y que molestia

-bien- resoplo –han escuchado de slave app?-

-la aplicación exclusiva?- dice khorn

-yo si he escuchado de esta- dice fang –es tan exclusiva que a pocos les llega un correo, no puedes encontrarlo te tiene que llegar, y no importa si eres pobre o si eres rico, mientras tengas un teléfono puede llegarte-

-exacto- asiento –a mí me llegó hace un tiempo- un año para ser exactos

-enserio?- dicen los tres

Yo asiento y les muestro la app, con scourge allí claro.

-wow, me das envidia pasto andante- chasquea su lengua el lobo

-pos gracias- río levemente aguardando el celular

-y que tan cierto son los mitos?-

-mitos?- pregunto dudoso

-sí, eso de que pueden salir del celular para atenderte y esas cosas?-

-ahhh, si es cierto- asiento

-no te creo-

-quieren pruebas?, scourge sal- en ese instante aparece entre pequeños pixeles el erizo verdoso de mi teléfono, al estar encadenado en la cama, aparece encadenado también afuera, pero las cadenas están sujetas a las patas del sofá.

-increíble- susurran los tres

-je, adentro scourge- y este desaparece

-me lo debes prestar alguna vez- dice jhon

-sueña- le saco la lengua, en ese momento llegan a tocar la puerta para darnos el aviso que nos toca de nuevo.

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Después del concierto llegamos al hotel donde nos quedamos para separarnos cada quien su habitación. Una vez dentro de la mía suspiro y saco mi celular sacando a scourge, este sale y aparece amarrado a la cama como estaba en la app. Sonrío y me retiro mi ropa para subirme sobre él, al verme se remueve como loco.

Yo solo puedo reír a su comportamiento, pero también lo disfruto, su forma rebelde de actuar es lo que me enloquece y excita a niveles mayores que cualquier chica o chico con quienes me haya acostado antes.

-hola scourgy, me extrañaste?- susurro acercándome a su rostro mientras le retiro la pelota, él me mira con cierto odio, realmente no me importa.

-te aré picadillo- gruñe

-si es que te dejo- acaricio su mejilla con uno de mis dedos riendo levemente mientras él trata inútilmente de escapar, dios lo ha tratado desde hace tiempo y no puede, pero es terco.

Comienzo a bajar y beso su barbilla mordiéndolo un poco para luego bajar a su cuello donde siempre le dejo una marca mía, especialmente de mis colmillos.

-aaah~- le muerdo con algo de fuerza dejando una nueva

-dime scourge que harás conmigo cuando logres liberarte?- susurro bajando y sentándome en su entrepierna

-ngh~ te romperé las piernas, te cortaré en muchos pedacitos y los repartiré por todos lados para que nadie te encuentre- jala las cadenas

Oírlo decir esas cosas me calienta, y quiero calentarlo a él, por eso comienzo a mover mis caderas en su entrepierna mientras escucho el veneno que expulsa

-aah~ deja de hacer eso- se mueve algo incómodo, la razón, su miembro está saliendo e irguiéndose

-no- sigo –dime que me harás scourge, quiero saber a qué me atendré si te llegas a soltar- mi miembro está comenzando a gotear, la necesidad de embestirlo comienza, pero me gusta hacerlo sufrir un poquito

-aah~ no hasta que aah~ te detengas- puedo ver como se sonroja peleando con las cadenas aún

Entonces me detengo quitándome de su entrepierna, sonrío y me coloco entre sus piernas, agarrando su miembro y masturbándolo a alta velocidad

-aah! Aah! Aaah!- se encorva y abre bien la boca para gemir, lo cual aprovecho y meto mi lengua –mmmh mmmh mmm!!- se retuerce tratando de escapar, pero no puede, es mío

Sigo masturbándolo y metiendo mi lengua por toda su boca, el sigue retorciéndose y quejándose o gimiendo contra mis labios

-MMMMMM!!!- se corre en mi mano, me separo de él, su rostro es toda una obra de arte –mal...maldito- jadea con su rostro sonrojado y sus ojos brillantes por las lágrimas acumuladas

No le respondo solo sonrío, muevo mi cadera y posiciono mi miembro en su entrada.

-no..no te atrevas- gruñe jalando de nuevo sus cadenas

-sabes que de todas formas lo are- sonrío algo perverso –porque eres mío- con eso dicho entro en el de golpe

-AH!~- se arquea de nuevo

-ngh eres apretado- respiro con fuerza mientras el sofoca mi miembro con su delicioso trasero

-ca..callate mierda! Te mataré lo juro!- se retuerce de nuevo

-je- tomo sus caderas y comienzo a embestir sin esperar nada, sin importarme que me maldiga y me diga como desea matarme, porque eso quiero, eso me excita.

Embisto como loco, no necesito coordinar nada, solo sentir el placer.

-aah! Aah! Aaah! Morirás!- sigue con su cantaleta

Pero sé que le gusta, su miembro me lo comprueba cuando se vuelve a levantar

-mmmgh aaah~- gimo leve mientras sigo embistiendo, el tiende a estrechar mucho su entrada y eso me da mucho más placer

-aah! Agh ya suela ah tame aah- sus alaridos de rabia se pierden entre sus gemidos, para luego no decirlos más, el volumen de su voz aumenta mientras más rápido y fuerte voy.

Por mi parte ya siento los espasmos en mi columna.

-ngh voy a- le doy una embestida más y me corro en su interior

-AAH! MALDITA SEA!- se encorva corriéndose el también, manchándose todo, realmente no me importa y me recuesto sobre el sin salir, jadeo un poco pero sonrío. Adoro tener sexo con este idiota.