Capítulo 18
Narra Zee:
Si Saint sigue haciéndome este tipo de preguntas mientras estoy bebiendo algo, entonces moriré ahogado en su amor. Cuando me recuperé de mi casi asfixia, inmediatamente lo vi serio, me refiero a que esto no es un juego para mí, de verdad quiero pasar el resto de mi vida con él.
- Si continúas haciendo este tipo de preguntas mientras tengo una bebida en la boca, juro que terminaré ahogado.
- No te preocupes, ya no tienes que contestar.
Su rostro cambió de muy feliz a realmente triste, jamás vi las emociones de una persona cambiar así, eso fue doloroso para mí. Así que, agarré su mano, no me importaron sus súplicas de caminar despacio, estaba furioso en ese momento, lo llevé hasta la cabaña, cerré la puerta y lo puse contra esta.
- ¡Tú no tienes ni idea de cómo deseaba que mis palabras fueran ciertas, poder gritarle al mundo que eres mío y de nadie más...!
- Zee, pero...
- Sí Saint, deseo casarme contigo, amanecer a tu lado, convivir cada día por el resto de mi vida, tener hijos, un hogar, una familia; todos esos sueños, te incluyen, te volviste lo más importante...
Entre hermosas lágrimas, comenzó a besarme como loco, sus labios estaban invadiendo mi ser, él quería llegar mucho más lejos. Pero, lo interrumpí, rompí nuestro beso, no es que no quiera hacerlo, es solo que Saint no ha comido nada y tengo miedo que vuelva a desmayarse.
- Pensé que eres mío...
- Soy tuyo... Pero debes comer primero.
- No quiero comer, quiero estar contigo.
- Si no te sientas a comer, no te tocaré de nuevo.
Me hizo un gran puchero, pero gané, Saint se sentó a la mesa conmigo, comida ligera como ordenó el Doctor, a mí me era casi imposible concentrarme. Estaba riendo como idiota, mientras lo veía comer a grandes ansias, se notaba el hambre voraz que tenía.
Estaba comiendo fruta, pero lo acompañaba con todo lo que tenía enfrente, chocolate derretido blanco y café. Además de la jalea, miel, crema de maní; se veía tan hermoso, tierno y perfecto, hasta que noté, que tenía residuos alrededor de su boca.
- Saint... Yo...
- ¿Qué haces?
Levanté mi mano, llevándola directamente a su rostro, con mi dedo pulgar empecé a dibujar círculos y finalmente lo metí en su boca. Saint lo lame y succiona hasta que comienzo a ponerme duro bajo la mesa, así que me acerqué para limpiarlo con mi boca.
Mi lengua pasa rítmicamente por las partes sucias en su rostro, ese chocolate que estaba en su barbilla, solo lo hacía sentir más sabroso. Era un gran deleite hacer eso, tanto que ni siquiera me di cuenta el momento en que Saint se subió a horcajadas en mí y casi pierdo el control.
- Espera, Saint, yo solo quería limpiarte.
- ¿Acaso tienes miedo de que tu lengua pase por todo mi cuerpo?
- No te equivoques, algo más que mi lengua estará en tu cuerpo.
- Me tientas, me provocas, me seduces y me dejas con las ganas... Eso no es justo.
Es increíble que hasta haciendo pucheros se ve tan adorable, no puedo creer que todo él sea mío, y jamás permitiré que me lo quiten. En verdad, admito que no debí besarlo de esa manera, era ilusionarlo a qué haríamos muchas travesuras, pero quiero hacer otra cosa antes.
🔞🔞🔞⚠️Advertencia⚠️🔞🔞🔞
Narra Saint:
Tengo que estar bien loco para no querer levantarme, es decir, es delicioso sentirlo completamente endurecido solo por haber metido un dedo en mi boca. No quiero que me deje así, por eso lo besé con hambre voraz, estaba comiéndome sus labios y enredando mis dedos en su cabello.
Las manos grandes de Zee, se paseaban por mi espalda, trasero, muslos, podía sentir todo el deseo que tenía de llegar más lejos que esto. Y yo también lo deseo, quiero que me agarre de la mano, me arrastre a la cama y se entierre en mi interior con fuerza.
- ¡Saint, por favor! Si no te detienes, juro que te someteré.
- No tengas miedo Zee, ¡sométeme!
En ese momento, empezamos a arrancarnos la ropa con mucha desesperación, luego metí mi mano en su ropa interior, escucharlo gruñir por mí es asombroso. Entonces, saca mi mano de su entrepierna, y comienza a mover mis caderas rítmicamente, eso es aún mejor.
Cada roce de nuestros cuerpo me provocaba un estallido de placer impresionante, no quería que se detuviera, tanto que casi tengo un orgasmo en seco. De pronto se detiene, me quedo sorprendido, hasta que me hace levantarme, me da vuelta y baja el resto de mi ropa.
Me encuentro completamente desnudo, con mi torso sobre la mesa y él acariciando cada centímetro de mi piel ardiente. Luego veo cómo Zee mete sus dedos en el chocolate blanco, llenándolos en su totalidad antes de meterlos en mi boca. Instintivamente, los chupo hasta dejarlos mojados con mi saliva y él los lleva a mi entrada para meterlos, darme placer y dilatarme a su antojo.
- ¡Basta Zee! No me tortures...
- ¿Acaso no te gusta?
- Me gustaría más, que lo hicieras de una vez.
Fue cuando sacó sus dedos de mí para irse a la habitación, solo a él se le ocurre dejarme ahí con esas grandes ganas que tenía. Unos momentos después, salió de nuevo con la botella de lubricante en su mano, la aplicó en mi entrada y lentamente se deslizó dentro de mí.
Se supone que estoy convaleciente, pero no hay mejor medicina que el amor de Zee invadiendo mi interior, rápidamente me arrancó varios gemidos. Esta vez fue menos caballeroso, parece que deseaba mucho ser salvaje conmigo, la forma en que lo hace, tan ruda, me enloquece.
Pronto me encuentro suplicando por más, para que me castigue por el susto que le metí esta mañana, deseo todo de él. Empieza a hacerlo frenéticamente, muy fuerte, incluso susurrando cosas sucias en mi oído y eso solo me encendía más, hasta el punto de mi orgasmo.
Sin que me tocara, ensucié el piso bajo la mesa con mi semen saliendo en total descontrol, eso fue realmente asombroso. Con mi eyaculación golpeando cada centímetro de mi cuerpo y mis piernas temblorosas, Zee sale de mí unos segundos antes, para lanzar su carga en mi cuerpo estremecido.
- ¡Te amo Saint!
- Yo mucho más... Zee, llévame a la cama.
Obedeciendo a mi petición, me carga en sus brazos, mientras nos dábamos besos agotados, me acostó suavemente en la cama. Se acuesta a mi lado, llevándome a sus brazos, en esa hermosa posición, fue perfecto y fácil quedarme dormido; pero antes.
- Por cierto... ¿Quieres casarte conmigo Saint?...
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top