Capítulo XXVII (+18)

-Narra Amy-

—Igual no nos vamos a dejar de ese canalla, no importa cómo pero esas esmeraldas se las vamos a arrebatar —Knuckles está completamente encabronado, no es para menos, no cuando te traicionan y se llevan artículos sagrados que debes proteger.

Todos están discutiendo y planeando. Silver es de los principales que, sorprendentemente, han tomado el mando y las decisiones luego del incidente hace unas horas en Oil Ocean. ¿Por qué? Ja, siente que él ya lo veía venir, que podríamos confiar pero no explícitamente...tengo una impotencia muy grande en mi pecho.

—Diría que una vez tengamos el resto de esmeraldas nos encarguemos de encontrar las de Shadow, de esa manera él no se nos adelanta —Oigo decir a Antoine, centrado y sin una emoción diferente como la que el resto tienen.

No he hablado ni opinado al respecto, tampoco es como que mis palabras fueran a ayudar ahora...estoy muy triste. Oír esas repulsivas palabras que escupen como si realmente Shadow fuera el peor erizo compuesto de artimañas y falacias, de malas formas y sentires...

No puedo aguantar el sentimiento de culpa y vulnerabilidad, no sabiendo que todo es una completa mentira encubierta por el bien de todos ellos...¿Acaso así se siente él cuando habla y nadie le cree?

¿Por tener un pasado tormentoso en el que, recae, pero por el bien ahora de tu futuro, ve por las mejores acciones?

Me duele la cabeza de haber llorado y mantenido el coraje dentro de mi boca. Inclusive los dedos y palmas me arden ante las múltiples veces que ya he estrangulado el aire simplemente... Por frustración...

...creo que estoy actuando bien después de todo.

—Ey, Rose, ¿Cómo está tu pecho? —Una silueta esbelta se aproxima al sofá en el que estoy, retirada de hecho de la platica que varios están llevando en el comedor.

No me di cuenta que hasta Scourge ya está aquí.

—Estoy bien, no...no me duele —No, para nada, esa pequeña cortada en el pecho no es ni para nada cercana a la que tengo en el sentimiento de amor y...¡ah! Que cursi soy—. No pasa nada.

—¡Ey! ¿En serio...pasó esto? —No recuerdo si Shadow me llegó a decir algo sobre confiar o no en Scourge, pero, vamos, ¿Cuando este animal ha ayudado a "los buenos"?

—Escucha, mantener baja la expectativa y entrega tu confianza a los chicos...tú no sabes nada —Un escalofrío recorre mi cuerpo con ello, ¡Uf! No había sentido una sensación tan más malévola por algo así—. Cuando tengamos más privacidad, hasta el mismo Shadow logrará explicarte.

—Wo, wo, entonces, ¿Te has involucrado con él...nosotros?

—¡Shu! Vamos, baja la voz y sé discreto —murmullo todavía más por lo bajo y, me pego más a su costado—. Sólo consolarme cómo "deberías" hacerlo.

—Con mucho gusto, rosita...♪ —El erizo no pierde el tiempo y me abraza agitando con su mano mi hombro, y yo, en forma casi voluntaria, me dejo caer en su regazo...

Vaya, no recuerdo haber estado tan pegada al esmeralda desde hace años, ni cuando conviví con él en entrenamientos.

—Amy... —Alzamos los rostros a la par, Sonic está ahí y no me he dado cuenta—. ¿Fiona te ha revisado ya esa cortada?

—Ya, ya lo hizo y, no dijo que era grave, solo la ha desinfectado.

—Se notaba profunda.

—No ha sido grave...no es nada, Sonic —suspiro pesadamente con un desaire agotado, incluso Scourge pasa su brazo por detrás de mi nuca y me acaricia la cabeza de forma melosa, es tan raro.

—No tiene muchos ánimos, seguramente lo notas.

—Lo sé, Scourge, pero aun así...

—Vamos, evitemos discutir ahora, ¿Sí? No, no es...no quiero —expulso fastidiada. Sonic me da la razón y se aleja dirigiendose con sus amigos.

—Bien, Amy, descansa, ve a...tu recamara, supongo —Un desgane de él me compadece, pero...¡Ash! Vamos Amy, tú necesitas seguir molesta.

Me levanto del lado de Scourge y decido ir con el resto a informar que se queden en la sala y en los cuartos de arriba. Silver ofrece su cama a Sally y a Bunny, con tal de que las chicas estén cómodas. Rouge dice ir a su departamento y que Knuckles o Tails pueden quedarse, «aja, qué casualidad » Aun así, parece que los chicos se organizan rápido y, yo con cautela me despido y tras un par de sonrisas apagadas advierto irme a dormir, sin que nadie me moleste.

Subo los escalones y término por abrir y azotar la puerta accidentalmente, ¡No era mi intención pero quedó bien! Ni yo pensé en tener una buena participación para esto. Al filo de la cama saco mi comunicador pensado y recordando... Suspiro con gusto y quiero llorar, ¡Quiero hacerlo! Más por recordar sus palabras y promesas que...joder, toda esta incógnita y esta nueva misión me está mostrando a un Shadow tan...emocional.

-Flashback-

—Lo vas a hacer, por el bien de ambos, vamos a separarnos.

—No, no, no, no, no vamos a hacer eso, no vamos a hacer eso, po-por favor...

—Te prometo que resolveré y sacaré todo a la luz para que tu y yo estemos juntos...Te lo prometo, Rose. Pero tienes que estar tranquila.

—No, n-no, yo qui-quiero estar contigo, y-yo voy a...

-Fin del Flashback-

La vibración entre mis manos hace que brinque con susto. Abro mis ojos volviendo al cuarto y observo que, unas extrañas coordenadas han llegado a la pantalla y...no.

No voy a esperar a averiguarlas mañana.

-Narra Shadow-

Escuchar un par de ululos posiblemente de aves en el bosque me tienen a la expectativa en la ventana de la cabaña.

Las dos esmeraldas las he guardado por debajo de la casa, justo en la caja fuerte que hay bajo la cama. Esa especie de trastero sabia que iba a ayudar para algo tarde que temprano aquí en la tierra.

Tengo el ligero presentimiento de que...este extraño misterio tiene que terminar antes de que las cosas se agraven. Estar pensando y divagando entre todo...cada circunstancia e interacción tiene que tener algo relevante...claro que lo tiene.

El aleteo de aves y el sonido fuerte del viento golpear las hojas hacen que salga de la casa, Ese ruido es provocado por algo o alguien...¿Ese gato otra vez? ¿Acaso puede volver a ser tan cabrón para...?

Cambio mi postura a una más confiada al ver un par de zapatillas femeninas de los arbustos. El cuerpo de Rose, con tranquilidad, sale completamente y se queda de pie observándome, puedo ver su par de ojos jade que, están irritados por fuera. Estuvo llorando seguramente.

Tras sus pasos, algo lentos y tímidos, extiendo mis manos hacia ella para que, en ataque, no lo piense tanto y se acerque a mí con un abrazo tan necesitado...como su hubieran sido esos dos años sin vernos.

—¿Qué ocurre...? —musito cerca de su oído, rodeando por encima de su espalda con mis manos en medio del cielo estrellado.

—En serio, ¿lo preguntas? —Alza la mirada compasiva entre un par de lágrimas—. No quiero esto...no quiero que...

—Ya te lo dije, Rose, basta —respondo con aire de fastidio ¡Agh! ¿Cómo hacer para mantener una estabilidad?—. ¿Por qué tienes que ser sentimentalmente vulnerable?

—No puedo soportar ver como no lo entienden... —Evade mi pregunta, ahogando su voz, pero...—...como te juzgan y te...ellos no te conocen, no saben lo que eres...¡No saben que eres magnífico!

—No me importa que ellos no lo sepan —Froto sus mejillas mirándola fijamente—. Mientras tú lo veas, es suficiente para mí.

De yo robarle besos dimos un brinco a hacerlo mutuamente. La frustración de sus labios me agradece tanto por estar ahí... ¿Cómo es que pasé a ser tan importante en su vida?

—No quiero que arriesgues por ellos...no lo vale —Oír aquello tras separarnos me consterna. Ello no es de la Amy que recuerdo—. Tu y yo podemos...¡por favor!, podemos resolverlo por nuestra cuenta y para nosotros.

—Ey, estás dejando que el rencor enaltezca tu egoísmos —Vuelvo a frotar su cuerpo, esta vez sus brazos y hombros—. Tranquila, deja de pensar en ellos.

—¡Es que no, Shadow! Ahora me doy cuenta...ahora veo eso que...que yo hice por mucho tiempo —Puedo sentir su pelaje erizarse ante las ideas que tienen y la adrenalina de los pensamientos quiere brotar de golpe—. No pienso dejar que...¡que se sientan orgullosos de sus palabras cuando son erróneas!

—No, Rose —Mantener esta firmeza, sin siquiera ponerme alterado está ayudando a que Amy empiece a bajar su impotencia. No sé qué ha oído en este rato, pero le ha golpeado fuerte en su forma de pensar—. No te estás comportando con juicio, deja de prejuiciar a tus amigos y sólo... respira y entremos a la casa —Sugiero abriendo paso hacia la puerta, abriéndola totalmente—. La temperatura baja mientras se aproxima la media noche.

Quiero que la paz y nada de tensión dejen de rodear los espacios personales que ambos tenemos; Amy está siendo afectada por todo esto y no sería inconveniente tan grande si solo ella supiera controlar y manejar tanta presión. Todavía le falta control en muchas cosas.

Cuando entro, el bochorno de la habitación es notorio y cierro dirigiéndome hacia la habitación para dormir, apagando la luz de la sala de estar. Ella por si sola parece saber el camino y, cuando llegamos, nos quedamos estáticos, cruzando miradas, compartiendo sensaciones a través de nuestras pupilas...

Seguramente ese deseo que ella no logra controlar, en otra circunstancia de tiempo pasado, me hubiera consternado en una cantidad sorprendente, pero ahora, para esta noche... Me siento en la gran necesidad y deseo de responder.

◇───────◇───────◇

Aviso: Lo siguiente descrito entra en categoría +18, que a la mayoría le sudan las advertencias, pero si realmente no te interesa o eres susceptible a estos temas sexuales, salta al siguiente capitulo en este punto, los detalles siguientes no son relevantes en la trama más que para menciones.
◇───────◇───────◇

-Narrador-

Ambos se acercan de forma casi espejo. El azabache sujeta las púas traseras de su acompañante con frenesí inclinándola hacia atrás, dejando su rostro expuesto a sus labios efusivos por explorar su cavidad y esa culebra intensa que no duda en entrelazarse con la de él...una adrenalina comienza a recorrer sus cuerpos por que sí, ambos saben que ha llegado el instante de conocerse.

—¿Cómo le haces...? —jadeó la eriza sin separarse de él, más por el agarre que él seguía sosteniendo sobre su cabellera que por gusto propio.

—¿Hacer qué?

—Imponente, decisivo...perfecto... —Era innegable ese helar recorrer su cuerpo ante lo que podía pasar, y es por eso, que no podía ya controlar sus ganas por volver a besarlo—. Haces que pueda... Sentirme tan bien cerca de ti...

Una vez vuelven a apartarse, Shadow ríe maliciosamente, con gusto, pegando lo más posible el cuerpo de Amy sobre el suyo, dejando que sus palmas sigan acariciando la cabeza clara de su pareja y bajen lentamente hasta su espalda baja. Amy no se queda detrás, pues también rodea al azabache por su nuca y, en acto de imitación, se aferra a las púas sin causar sensación visible en las facciones del erizo.

—No me cansaré de decirte que soy la forma de vida definitiva.

—Eso y que...eres todo un experimentado...¿No es así?

—Llegaron a decirme "basura que solo busca sexo" —La eriza expulsa un monosílabo dudoso, pero Shadow prosigue—. Que despechado y... ¿cierto?

—¿Crees que me siguen importando luego de lo comentado? Las críticas, las consecuencias de estos actos...las pérdidas... —Divaga con la mirada al techo, dejando pasar unos segundos—, ya no me interesa, todo se vuelve pasado y pasajero.

—Eso y que... —Toma aire una vez más el oscuro y, con serenidad y voz baja, acaba— no es negable lo evidente.

Ahora la pelirosa es la que empuja el rostro del azabache a ella, dándose otro beso apasionado.

—No me seguirás el ritmo así qué... —Un grito agudo emitido por Amy rompe el silencio ante la pérdida de ropa repentina. Shadow la despoja del vestido de un tirón por detrás, no le importó que el vestido se hiciera completamente añicos, ¿A ella le importó? Quizá, sólo poco—. Te voy a poner el ejemplo.

Usando sólo una mano pudo someter a Amy. En circunstancia rápida, ella no puede mover sus muñecas ya que Shadow las controla por detrás de su espalda y, aprovecha para acorralarla en la pared de esa recamara.

—Sé cuanto estás pidiendo tus deseos, esos tan descontrolados que me estás dejando ver —Continua diciendo Shadow en la nariz de la rosa, robándole espacio y suprimiendo el no tocarla, pues, no quiere ser agresivo, aunque por instantes lame cerca de sus labios—. Pero tengo que advertirte que esto no es como te lo dicen y describen en novelas, esto no sale bien ni tampoco es tan "lindo" a la primera.

—Ey, para "basura", nos estamos tardando —Era una intrépida en muchas cosas, y es por eso que la provocación ya era uno de sus fuertes. Aprendiendo siempre de su maestro—. No importa cómo salga...sólo, que se haga.

Era rápido, ágil, astuto...no necesita de más manos para complacer a la joven damisela que tenía subyugada ante sus ojos, ¿tan frágil?...sabe perfectamente lo que ella quiere porque lo lee en cada fibra de su cuerpo, fingiendo ingenuidad cuando por dentro era toda una fiera que podía mostrar su fuerza; una rosa hermosa y frágil por sus pétalos pero con espinas recien maduras en un tallo grueso.

Y para él, noches así, tan dominantes, eran de volverse aburridas y monotonas en Shadow. Sabe que la actividad en ambos lados, no sólo en el hombre, pueden producir un mejor orgasmo, aunque...lo a de dejar pasar, lo va a sobrellevar, solo porque Amy quiere sentir su modo.

Ya habrá una segunda ocasión para que le toque a él.

Con su mano acaricia cerca de su intimidad y poco a poco nota que sus suplicas se vuelven grandes entre resoplidos discretos y gemidos vergonzosos; y es por ello, que el veteado se aparta y detiene de golpe, causando que Amy se resbale en la pared con la respiración agitada.

—Eres muy voluble y "fácil" para esto —habló Shadow mirándola y, acuclillándose en el suelo, recargando su mano en su rodilla—, vas a terminar rápido... No deberías de...

—Prometo que...que voy a aguant-tar hasta que tú... —La mano enguantada del azabache priva la sugerencia. Luego de retirarla, este decide hablar.

—No tienes que aguantar nada. Así termines antes que yo, no me importa —Sus manos vuelven a tomarla, Amy decide aferrarse hacia su pecho y, el azabache desvía los ojos hacia la fresca cortada que por el día le causó y que, por éxtasis, lame y comienza a pellizcar hasta su cuello con la boca.

No hay circunstancia que pueda detenerlos. Amy está entregada incluso al error, a que se den cuenta sus compañeros de que no está en la casa sino...con el enemigo, con el azabache inmundo y traidor que no sabe más que mentir.

Pero sí, todo sigue el clásico ritmo, ¿El coito? Terminaba siendo un deseo carnal que tarde que temprano iban a cumplir como cualquiera y que, como lo es por naturaleza, debía de disfrutarlo porque eso era, un disfrute.

Fraudulenta la noche, una hazaña que puede ser contada o incluso escrita. El calor se intensifica entre las paredes, el roce de sus cuerpos y la fricción de sus genitales era el deleite para aquél que pudiera imaginar una noche ideal. ¿Perfección? No existe, pero la buscan y amoldan a su antojo.

Y siendo completamente bisoña, una novicia perpetuada pudo alcanzar el premio deseado; y esa curva invade su rostro, compartiendola ambos. Ante tanto tiempo la clemencia de Shadow fue basta, pero no a la hora de poseerla; y no, no porque ella realmente lo pidiera en sus ojos cual jades brutos, sino porque él así lo quiso y así es su gusto en actos carnales como estos...la eriza tuvo que sentirlo de una vez por todas para borrar esa imagen creada de "la noche perfecta y de ensueños" porque, mientras ella tenía un dolor bastante intenso por debajo, el veteado era insaciable.

Sudorosa y agotada, a pesar de las pocas ganas que tiene por limitación de su cuerpo, recorren sus manos por todos los sitios que quiere y puede de su amado; entre sus púas oscuras, por debajo de la nuca, su pecho, ¡Ese pelaje! Ve como un par de estos se desprenden porque ella los arranca con éxtasis. Su abdomen, la cola, incluso la entrepierna, ella no pierde el tiempo así esté recostada. Cuantas veces su imaginación se volvió turbia, cuantas noches sus sueños le jugaron obscenidades, queriendo que él perdiera el control...fueron varias, y no evita sacar esos sentimientos encontrados cerca de su oído, mientras Shadow se recarga y goza de sus pechos. No ha de quitarse de encima y tampoco ha de salir.

La noche avanza, los minutos son intensos, muy intensos para ella; Amy se excita múltiples veces y ya ha alcanzado un par de orgasmos. Se imaginó en algún momento que tras la primera noche sólo él había de venirse y listo, pero no.

Las cosas no son así, y no terminarían así.































Buen día chicos, espero estén disfrutando el maratón hasta el momento.

No hubiera incluido lemon si no hubiera sido por nuestra condición que hice con Alice XD esperó goces, pilla :v/

¿Más explicito? No, para eso está "Y tus dedos en mi boca..." así que, ir a leerla si lo que quieren es algo lemon y explicito.

Sin más, nos seguimos leyendo ^^/

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top