-Narra Silver-

No esperaba menos de Amy. A primera instancia era notorio su tristeza ante el desdén de Shadow, pero ella lo conoce más que yo y es que, era imposible que la eriza no notara esa provocación y esa manera tan de él para ocultar sus emociones momentáneas, ¿Esperábamos a que la recibiera con los brazos extendidos y dándole mimos? Esas actitudes no serán adoptadas por el erizo, es muy complicado.

No han pasado ni cinco minutos cuando mis emociones crecen al limite. Me he alejado lo suficiente al ver la impaciencia de Amy en cada uno de sus golpes nada acertados hasta el momento pero, ni los de Shadow han sido tampoco correctos. Ella no ha dejado de entrenar en estos años, y dudo que él tampoco, así que...posiblemente la lleven parejos, o, ¿Shadow aun así sigue siendo más fuerte?

El martillo de Amy está funcionando para cubrir y desviar los ataques cuerpo a cuerpo que hasta el momento Shadow ha utilizado, parece que le cuesta mucho romper la defensa de la eriza siendo que...ella antes no tenia ni defensa. Todo se nota tan estratégico para ambos peleadores, estoy seguro de que Shadow no piensa acercarse y permanecer a corta distancia de Amy por miedo a un contraataque...que si ella está buscando eso, analiza con cuidado una guardia baja pero no la encuentra.

Los movimientos se hacen ya más rápidos, Shadow juega ahora con su agilidad y velocidad para derribarla, busca dar una patada en sus rodillas pero ella retrocede con una maroma, lanzando su martillo hacia el rostro para hacer que él también retroceda...y lo logra. Shadow sujeta el martillo por la cabeza pero Amy logra atraerlo hacia ella, no es bueno que su arma quede con el enemigo.

—Ocho minutos...y ni me siento satisfecha —expulsa mi compañera, jugando con el martillo.

—¿Has aprendido a contar? Me impresionas... —Su sonrisa maliciosa nunca cambia, y sus respuestas sarcásticas tampoco—, yo tampoco estoy satisfecho...estoy desilusionado.

—¿Y crees que yo no? Si ni siquiera estás intentando matarme —Una provocación de Amy que me podría consternar, pero no, ella sabe muy bien lo que hace—, ¿qué esperas?

Se finaliza la charla con un destello de él, ha usado su chaos control para aparecer detrás de ella, sujetando su martillo y alzándolo con la fuerza de ambos en un intento de asfixiarla y no serlo, por detrás con el mango de esa arma. Las quejas de Amy crecen, el forcejeo de los dos los tambalea y separan sus piernas para que ninguno sea derribado; Amy no tiene tanta fuerza como Shadow, parece que las lleva de perder, «¡vamos, Rose!»

La rosada se muestra más pálida y sus extremidades se ablandan, poco a poco sus brazos caen sin tener ya la fuerza con la que sujetaba su arma, y Shadow termina su acción soltando el martillo pero...que si ese ha sido su error. En el momento en el que sus brazos intentan volver a su costado, la eriza aparentemente moribunda reacciona, sujetando el martillo más firmemente y dando un giro sobre sus talones para soltar un mazazo horizontal en el costado del azabache y mandarlo rodar por el pasto unos dos metros.

—¡Estupendo engaño! —No evito decirle ese gesto asertivo, sonríe de lado en respuesta pero no pierde la concentración. Shadow ya está de pie otra vez, como si nada.

-Narra Amy-

Río para mis adentros, estoy feliz de esto, no de poder golpear a Shadow, sino de simplemente poder estarlo viendo. Cuando está en el suelo y comienza a recobrarse aprovecho para correr directo hacia él pero manteniendo la distancia. Ya que intentó matarme con falta de aire me toca intentar rebanarlo.

Alza la guardia, freno y lanzo mi martillo de manera directa, es predecible que o lo esquiva o lo sujeta, pero cuando veo que piensa sujetarlo por el acomodo de sus brazos chasqueo y el filo directo a sus manos lo obligan a agacharse en el suelo, pegando su espalda al tronco y, quedando el hacha incrustada en el árbol. Suelto dos jabs, los esquiva por debajo y sigo soltando golpes para que no pueda levantarse. 

Una patada en el costado de su cara es la decisiva, pues sujeta mi pierna y la jala hacia él; caigo de cola pero uso mi otra pierna para golpearlo en el estómago. Uso mis manos para irme hacia atrás antes de que se lance encima de mí pero me gana en velocidad.

Con su puño cerrado intenta golpearme pero sólo acierta al césped por moverme hacia un lado. Sujeta mis brazos, forcejeo mientras él intenta controlar mis piernas pero parece que quiere darme un cabezazo y...dios que voy a hacer esto por estrategia.

Alzo mi pecho para acercarme a él... es el momento justo en el que baja su cabeza y así, atrapo sus labios. En el césped luego de ese contacto los dos caemos bajando las guardias porque seguimos el beso de manera muy apasionada. Admito que se siente tan bien...extrañaba sus labios tanto...

—Jamas bajes la guardia... —me separo murmurandole aquello. Rápidamente pego un rodillazo en su abdomen y se dobla atrapando el sucio engaño que le he dado. Me siento bien por venganza de hace dos años—. Esto fue por haberme engañado, y esto —Estuve a nada de darle el golpe con la palma estirada, pero iba a ser tan "femenino" que me dio el impulso de cerrar puño por coraje, dándole en toda la quijada—, es por hacer que me enamorara de ti, maldito Emo.

Le regreso la cara con otro golpe, se aparta de mí y yo me acomodo parandome al instante viendo como se tambalea por lo dos golpes que le he dado. No deja de sostenerse el mentón y cuando alza la cara, mirándome con cierta confusión en los ojos, noto sangre saliendo por debajo de su nariz y posiblemente ese golpe le haya dolido más a su orgullo.

No voy a detenerme; vuelvo a empuñar mi hacha y troto hacia Shadow que todavía tiene la guardia baja pero, alza su brazo extendiendo su palma hacia mí como si intentara detenerme...lo más curioso es que lo está haciendo. Quedo a un metro del erizo y deseo poder mover mis brazos para soltar un leñazo pero no puedo, no puedo mover mi cuerpo, ¿Silver ha usado su...?

Me elevo de golpe y suelto mi hacha expulsado un quejido casto, giro en el aire y de cabeza puedo ver que mi compañero albino está sumamente impresionado y asustado, «Eso significa que Shadow...»

—Gracias por desquitar tu coraje...se ve que te hacia falta —oigo la voz de Shadow abajo, intento girar para verlo pero sigo sin tener el control en mi cuerpo y sólo me muevo libremente—, pero ya pasaron los 15 minutos...esto ha terminado.

Finaliza sus palabras y noto menea sus mano izquierda hacia él, me atrae de golpe y me cacha con sus brazos en un golpe forzado por la rapidez. Bien si esto termino entonces...

Estuve a punto de responder a su afirmación cuando se aferra con extrañeza a mi cuerpo y sujeta mi mentón con fuerza, robandome un beso que me incomoda porque siento en sus labios lo grotesco que resultan ser sus pensamientos y sus ganas posesivas. Meneo los labios intentando acomodarme, y cuando lo hice, pego una bocanada forzada al sentir como mi estómago se comprime ante un golpe directo.

—...pero no deberías confiarte...el engaño puede ser un juego de dos... —No me suelta, me sostiene por la cadera mientras con una mano me toma del brazo, si fuera por mi me tiraría al suelo, pero él lo impide «maldito cabrón... » —...¿Acaso te dolió? Te has quedado muda...

—No due-le tanto co-como... tu indiferencia... —recobro la postura con cuidado y apretando su brazo con suma fuerza—, duelen más tus mentiras.

—jajaja que estúpida —Por fin logro apoyarme bien y empujo su mano para liberarme.

Silver se acerca a nosotros y me pasa de largo, quedando frente a Shadow con encaro raro que no logro entender.

—¿De donde sacaste esa habilidad? —pregunta eufórico Silver sin dejar de mirar a Shadow, este solo se limita a cruzarse de brazos.

—Tranquilo albino, sé perfectamente por qué regresaste a esta linea y porque los dos están aquí.

Miro de soslayo al par de erizos, Silver sabe todavía más cosas de esto que yo, y es por eso que no entiendo todavía las circunstancias. Shadow muestra sus palmas con cierta presunción y al poco rato se comienzan a iluminar no solo de tonos verdes como en una ocasión presencié, sino en tonos amarillos que dan mala impresión.

—Esta es energía Caos, no creas que una explosión me iba a matar —Oir eso me sugestiona y a la vez me produce escalofríos. No puedo evitar acercarme con suma curiosidad a él, mientras ahora controla esta energía como si la mandara de una mano a otra—. La energía alteró mi ADN, ahora no sólo puedo controlar la energía Caos como en inicio, sino que viaja por mi sistema formando parte de mí.

—Entiendo... —Silver aprueba las cosas como si le cuadrara a la perfección, pero a mí no—; ahora tiene sentido por qué nos serás de mucha ayuda para esto.

—¿Cómo es esto? No entiendo, ¿Silver, a qué te refieres con todo esto? —pregunto al no recibir alguna respuesta a mis dudas.

—El enemigo que enfrentaremos sirve de esa energía, fue a causa de la explosión caos —Enormes nervios presionan mi pecho—, él se alimentó de ella y si Shadow también la tiene entonces es una manera de poder contrarrestarlo.

—¿El enemigo surgió por la explosión Caos de hace dos años? —pregunto más concretamente, él asiente.

—Estos dos años me sirvieron para aprender a controlarla, también para no bajar la guardia y seguir con mi condición —complementa Shadow dirigiéndose a otro sitio, se aleja de nosotros—, y bien, ¿Sólo viniste a golpearme y reclamarme o a decirme algo más? —agrega Shadow dándose la vuelta para mirarme.

—Necesitamos que nos ayudes con esta amenaza que dice Silver —respondo ya más relajada—, es algo catastrófico y necesitaremos todo el apoyo posible.

—Bien, lo pensaré, ahora iré a la casa.

—Pero...

—¿Esperas que te invite a quedarte una vez más en mi casa de campo? —Apesar de que sus palabras fueron inesperadas realmente si lo deseaba en el fondo, pero sabia que contábamos con Rouge.

—S-si, quiero decir —balbuceo—, no lo esperaba. Aunque...

—Bueno ya, no necesitas invitación...siganme los dos —Y así fue, ayudo a Silver con mis cosas y caminamos detrás de Shadow, a pesar de que conozco un poco ya la ruta.

-Narra Silver-

Las cosas resultaron bien al final de cuentas, pero esas acciones finales de la pelea...¿besos sin compromiso para luego actuar como amigos en confianza? Este par de erizos es tan versátil...

Entramos a la casa, Amy no necesita presentación a la misma. Observo todo como un crio, el lugar es amplio, reconfortante y a la vez templado, los muebles y el sitio en general se ven limpios y en buen estado «Qué si Shadow resultó tener un buen gusto para el hogar»

—Es tarde, quizá debamos comer algo —Sugiere Amy, entiendo que esté agotada y con apetito pero...

—¿Recien llegas y te pones a dar ordenes en MÍ casa? —Ese comportamiento siempre tan hostil de él... ¿Cómo aprendió a soportarlo Rose?—, ¿Cuál es tu problema? —Toma de un pequeño refrigerador una lata y la abre.

—Oye he sugerido, no fue una orden directa —reprocha dejando las mochilas en el sofá—, y no, ya no tengo ningún problema, puedo convertirme en la nueva dueña de la casa, ¿no?

Me siento impresionado por el habla y la fácil soltura de lengua que Amy tiene sobre Shadow. Cualquier otro temería por su vida si dice algo grosero y sarcástico hacia él, pero ella, ni se intimida cuando dialoga con él... O al menos eso aparenta.

—Cuando te conviertas en mi mujer no te daré ni una dieciseisava parte de mis rings y mi dinero —habla Shadow empinandose la lata frente a Amy, hasta vaciar su contenido y estrujar el envase con su mano sin esfuerzo aparente—, primero yo me encargo de suministrar todo junto a mis pertenecías...y si amanezco muerto será por culpa de una interesada posesiva como tú.

Amy se limita a reír con sumo alarde, mientras desempaca algunas cosas y le da la espalda al azabache, decido hacer lo mismo, no quisiera que me toque algo de sus pláticas tan "comunes".

—Oye...ten —oigo desde lejos, me he ido a una silla de la cocina para no ver algo "inadecuado" no lo sé... Me siento ciertamente incómodo—, por fin tuve...la oportunidad de cumplir con ello.

—¿En serio?, si tanto deseabas cumplir con esa "autopromesa", ¿por qué no has venido tú tiempo atrás? Ya sabías y conocías parte de la ciudad.

—No tenía idea de que tú podrías estar aquí, o que podrías estar...ya sabes...

—¿Con vida? ¡hmph! Joder, Rose, ¿Acaso esos discos eran de fantasmas?

—¡Pero dejaste de traerlos! Yo pensé que tú ya no... —La voz de Amy dejó de ser audible por unos segundos, me sienta mal creer que estoy oyendo cosas que no debo...me siento metiche. Oigo nuevamente su voz, algo ahogada—. Temí por mucho tiempo en que...todo esto era tan absurdo...

—Veo que empezamos a tener esos "temores" al mismo tiempo...

Otro silencio nuevamente incómodo, «diablos, necesito una habitación... »

—Disculpen... —Me levanto de la silla entrando a la sala e interrumpiendo aquello de lo que hablaban—, ¿Vamos a dormir aquí o con Rouge?

—¿Te urge una habitación, Silver? —dice el dueño de la casa—. Arriba, la primera habitación de la derecha, ahí dormirás.

—Oye yo...ahí dormía —agrega Amy con vacilación y poco entendimiento. «¿qué...»

—"Dormía" bien dicho —, más sarcasmo—, estos días dormirás en mi cuarto, conmigo —¿sorpresa? Sí...pero vamos, a quién engañamos, era algo obvia esa respuesta.
Un corto silencio invadió luego de que dijera eso—. De acuerdo, suena mal, pero lo que menos quiero ahora es tocarla.

—¡Shadow!

—Bien, no es un rechazo, no necesito especulaciones de él ni de Scourge pero solo hay tres cuartos y dos ya están ocupados. No voy a dejar que duermas con Silver o con el "mete todas" de Scourge, así que te quedas conmigo.

Una orden a la que no hay por qué objetar.

—Y ahora, albino, ya puedes subir al cuarto y hacer lo que te plasca si no te apetece oír el posible "drama" que puede surgir... —«¿Cómo supo de..?» ok, igual era obvio, dudo que él quisiera que yo oyera lo que fuera que iban a hablar. Debería agradecer que me muestro respetuoso—; es mejor que tu te encierres a que ella y yo lo hagamos, las malas interpretaciones ya andan sueltas y es lo que menos deseo ya luego de ese tan "fantástico" encuentro que tuvimos, ¿No te parece?

—Sí, señor sarcasmo —Ruedo los ojos sin más vacilaciones y tomo la mochila pequeña que yo cargo—, luego nos vemos.

Atiendo las indicaciones, no fueron tan difíciles. Abro la puerta y en cuanto la cierro todo se aisla en esa habitación, aunque murmullo y voces a lo lejos se perciben pero son poco audibles. Lo que me interesa es solamente que ellos dos se arreglen y estén bien, una vez establecido eso, podemos iniciar a ser héroes.