—¿Piensas decir algo importante o has venido a quitarme el tiempo?

—¿Dos años y sigues siendo un amargado, un grosero...un Emo?

—¿Y también dos años para que sigas siendo una niña reprimida, mimada y...débil?

—¡Agh! Eres...idiota...ya sé lo que quieres y con gusto lo complaceré.

—¿Qué dices...? ¿Estás...?

—Venga, vamos a divertirnos un poco.

◇───────◇───────◇

-Narra Silver-

Estamos listos en el teletransporte, Amy charla un poco con Tails en la espera de Rouge, ella también se irá con nosotros pero con el fin de ir a su departamento.

Me sorprende ver hasta a Kncukles ya pero Sonic...; no pretendo ver o crear esas escenas agresivas y de celos pero, ¿Qué luego de dos años y viendo a Amy desinteresada a vuelto a mostrarse celoso? ¿Qué pretende hacer ahora que Amy volverá a ver a Shadow? Espero que nada, Sonic no es de ese tipo de erizos.

—¿Listo, Silver? —habla captando mi atención Amy, afirmo con la cabeza mientras me despido con la mano de los Chaotix, Tails y Knuckles, aunque este último está ocupado reprendiendo a Rouge...qué cosas.

—No olviden llamarnos y mantenernos informados, por favor —replica el equidna, la eriza le responde afirmativamente.

Tomo a la eriza por un hombro y cruzamos a la par. Salimos en un dos por tres en una zona urbana y con lo que podría ser una "frontera". Esto es así, por este teletransporte es necesario presentar identificaciones y cosas así, no hay problema ni por mi ni por Amy y mucho menos Rouge. Tails se ha encargado muy bien de eso. 

—Bien, chicos, iré al departamento —Nos despide de un abrazo y nosotros correspondemos—, tienen mi numero, cualquier cosa...hablarme.

—Claro, Rouge; gracias —La murciélago le guiña el ojo en respuesta de la eriza y camina perdiéndose entre la gente. Seguro quiere volar pero es algo que no puede hacer aquí.

—Adelante, Amy, guiarme —hablo hacia ella motivado para evitar esa tensión por volver a verlo.

—¡Bien! Vamos... —Aguarda un segundo observándolo todo—, ¡por ahí! —Señala repentinamente y camina con velocidad hacia otro extremo, bien, es hora de iniciar.

-Narra Amy-

Un calor y una adrenalina crecen conforme indago entre las calles y las personas que cruzan frenéticas para ir a sus destinos. La gente está desatada y yo también, más por darme cuenta que estamos rumbo a la avenida por la que crucé más de cinco veces entre intentos por salir a la ciudad y por enloquecer en desesperación.

Silver sigue mi ritmo pero noto que le cuesta un poco, así que decido relajarme y caminar más lento; también varias personas me han mirado como si algo o alguien me persiguiera...estoy llamando mucho la atención.

—Lo siento, Silver, creo que estoy algo entusiasmada, es todo.

—jaja puedo notarlo, pero tranquila, tenemos la tarde así que...con calma —Esboza una sonrisa cálida y tranquila que me estremece y evita que siga tensa...¡uy! Lo necesitaba.

Atravesamos restaurantes, chozas, otros pocos negocios, etc. Poco a poco los edificios disminuyen y solo van quedando casas, y esto me entusiasma porque voy reconociendo el rumbo para salir a la casa de campo.

Veo hacia ambos lados y me sorprendo al ver a través de un cristal: un erizo verde con chaqueta negra, sentado en compañía de dos féminas de su especie pero más delgadas y aparentemente jóvenes que él... ¿Pero qué si es real lo que estoy viendo?

—No puede ser... —musito caminando con rapidez hacia la fachada del negocio para quedarme de pie mientras reviso si todo esto es real...

—¿Amy que has visto? —pregunta Silver siguiendo mis movimientos pero con mucha más relajación.

—Creo que Scourge está ahí dentro...en este restaurante.

—¿En serio? —Con suma indiscreción se asoma por el cristal, todas sus púas son notorias y mi tensión crece ¡Kya! ¡Pero qué hace! Lo jalo por las mismas de su espalda y sólo se queja y tropieza ante mi fuerza —¡Amy! ¡creo me ha visto!

—¡¿Qué!? —Voy a estallar, estas sensaciones tan revueltas me van a provocar nauseas—, ¡¿Ahora qué hacemos!?

—¿Y me lo preguntas? Tu has sido quien decidió quedarse aquí a ver si era o no —¡Qué es cierto! Pero no necesito que tenga razón.

—¡Lo sé! Pero, ¿Si era él? —pregunto y él afirma—, quizá sepa donde está Shadow, parece ser que ellos trabajaban juntos para Eggman.

Una campanilla nos alerta y nos movemos con velocidad hacia las orillas casi traseras del negocio, para desaparecer del frente. Decido asomarme un poco y veo que, en efecto, es Scourge, ha salido por la puerta y se ha quedado a media acera. Busca algo con la mirada, es seguro que vio a Silver y posiblemente reconoció su cara...esperen, ¿Scourge conoce a Silver? ¿De donde?

Pienso aquello mirando el suelo y cuando alzo la mirada me topo con sus ojos claros, ¡Maldición! Regreso a con Silver pero es tarde para intentar arrepentirme. Me ha visto y si tanto le inquieta saber a quien vio se dirigirá hacia aquí atrás...esperen, ¡qué eso me ayuda!

—Silver, ahí detrás, en el bote, ¡rápido! —digo y me muevo, él no pregunta y hace lo que he dicho. Nos agachamos un poco.

Mi predicción me resulta certera. En cuanto veo que dobla la pared y camina por nuestra posición me abalanzo sobre él. Forcejeamos, no me sorprende que no sea de guardia baja, eso era imposible. Al final logro chocarlo contra la pared y una de sus manos la controlo a la altura de nuestros estómagos pero la otra si que la pego a la pared, por encima de su cabeza.

—Cuanto tiempo, idiota... —hablo de manera baja cerca de su rostro. Su sonrisa típica y característica...maldición no sé si decir que la extrañaba—, ¿Disfrutas tu cita doble?

—Pero que tenemos aquí... —Lo más poderoso y eficaz que tiene son sus ojos. De manera veloz examina todo mi cuerpo para mirar nuevamente mis lamparines y no miento si digo que me ha avergonzado, ¡Claramente es un morboso!—, Rose, estás más linda que cuando te conocí.

—Y tu igual de asqueroso.

—Tu cuerpo está más atlético y en forma...me gusta —Me aparto soltándole una bofetada, suelta monosílabo de queja pero ni eso le quita lo lisonjero—. Vaya, hasta duelen más tus bofetadas.

—No he venido hasta aquí a perder el tiempo contigo.

—No, si por eso me has acosado en el cristal en medio de mi comida—, reclama de manera burlona y sarnosa, acomodando su chaqueta por la pequeña "pelea" que acabábamos de tener—, que claro, es obvio saber por quien vienes, pero, ¿Por qué hasta ahora, rosita? ¿Dos años? —Termina por preguntar curioso.

—Ya habrá tiempo de que eso lo discutamos juntos, ¿Vale? —Sus ojos se abren intrigados, seguramente piensa qué es lo que él tiene que ver pero después de todo, si lo ocuparemos—, por ahora, y para que vuelvas a con tus acompañantes para que no se desesperen dime, ¿Donde...?

—La casa de campo, rosa, es hasta obvio, llevas buen camino —No ha existido necesidad de terminar más mi pregunta cuando él me suelta respuesta segura.

—De acuerdo, ¡aww! que amable eres —respondo de manera más melosa y el tuerce la boca, que ya sé que le choca y por eso lo hago.

—Oye, ¿y tu qué cuentas, albino? —Había olvidado por completo a Silver. Scourge lo mira de manera déspota y yo veo a Silver que está detrás mio, tranquilo, no ha interrumpido y dicho nada mientras yo hablaba con el erizo verde.

—Supongo que números, ¿no? —jajaja la pacífica voz y personalidad de este despeinado me caen bien. Scourge tuerce los ojos resignado y fastidiado y vuelve a por la acera.

—¡Te veo pronto, perverso! —grito, Scourge alza la mano con desgane y desaparece doblando la esquina. Que divertido.

—Silver, sigamos por allá, parece que llevamos un buen camino —El erizo asiente sonriendo y yo le correspondo.

-Narra Silver-

Las casas casi han desaparecido. La carretera se convierte en solo un largo sendero de concreto junto a árboles y arboles en la orilla. Amy está complacida por haber visto nuevamente a ese erizo, y también se nota entusiasmada porque estamos por llegar a esa casa de campo. Me tiene muy tenso pensar en si realmente Shadow estará dispuesto a esto...muy en el fondo, más que esa cuestión de los desastres, me preocupa saber que él ha perdido un interés por Amy, ¿Qué probabilidades hay de que Amy ha quedado completamente en el pasado y en el olvido para él, como una simple experiencia?

Amy se desvía de la carretera para entrar de manera directa en el bosque, casi me sigo de filo por andar distraído. Va ya más lenta y relajada y eso, me supongo yo, es porque ya estamos por llegar y sus nervios han vuelto.

—¿Es realmente por aquí, Amy? —pregunto de manera ingenua para poder tener su atención.

—Si, lo es, más al fondo está la casa de campo...tenemos que encontrar otro cruce.

Fue más rápido de lo que esperaba. A pesar del basto follaje y de la inestabilidad de la tierra y el lodo nos apresuramos, siendo ella la que más rápido pudo cruzar...está eriza si que ya no es la misma.

En esta parte del bosque la tierra clara y el sendero más parejo denotan la presencia de un trabajo y por tanto, de una casa. Amy ya no está por delante sino a mi par, pero sin importar esa disminución del paso puedo sentir que está repleta de energía.

Se detiene de golpe, yo me adelanto un poco pero giro al ver que se ha quedado de pie viendo algunas copas de los árboles, ¿se ha acordado de algo?

—¿Amy? ¿Qué ocurre? —Le llamo, sin embargo sigue muy atenta y veo que sus oídos están crispados.

No interrumpo y mejor leo su lenguaje corporal. Sus manos se tensan, cierra las palmas y traga de manera forzada...segundos después da un fuerte respiro cerrando sus ojos y, libera su tensión con esa exhalación.

—¿Amy...? —Vuelvo a soltar con intriga.

—Silver, vamos por acá —Señala con su dedo entre unos matorrales y da media vuelta. No pregunto por qué, siento que no debo, pero...

—Vale —Es lo único que digo.

El sendero se vuelve más estrecho, pero existe un camino porque se nota alguien ya ha pasado por aquí. Veo a Amy sacar su teléfono y unos audífonos de su cangurera y se los pone con velocidad... pareciera que quiere concentrarse... ¿o quizá relajarse?

—Silver debemos correr, ¿mantienes el ritmo? —pregunta con voz alta al colocarse los audífonos, asiento con cierta alegría y ella inicia con un trote que mantengo enseguida, poniéndome a su altura y a la par iniciamos a correr más rápido.

-Narra Amy-

"And Ive lost who I am,
And I can't understand, 
Why my heart is so broken.
Rejecting your love 
Without love gone wrong 
Life less words,
Carry on."

Tenía un tiempo que no oía esta canción por producirme melancolía, ahora me han dado ganas de oírla pero, no me produce realmente nada.

"But i know,
All i know,
Is that the ends beginning"

Shattered tiene un ritmo lento que cautiva conforme se quiebra al finalizar la melodía, esta sin duda me está ayudando, me ayuda a querer correr más y más rápido.

"Who I am from the start,
Take me home to my heart,
Let me go, and I will run,
I will not be silenced.
All this time spent in vain 
Wasted years 
Wasted gain 
All is lost, yope remains, 
And this war's not over."

Me detengo poco a poco, Silver ha seguido mi ritmo y me ha aguantado bien, sin duda agradezco que me haya acompañado.

Me he desviado porque una corazonada y un viento extraño me tensaron, no sé como explicarlo, simplemente...bien, ahora lo entiendo.

Reviso el entorno, este sitio lo comienzo a recordar; camino un poco más realmente apreciando los recuerdos y retomando las vivencias...aquí es donde peleé con Shadow, ahora lo sé porque en unos troncos estoy viendo las flechas que esos arqueros nos lanzaron, interrumpiendo nuestro encuentro o, ¿debería decir, mi muerte?

Flashback

—Te advertí que no me buscaras, que no te entrometieras tanto conmigo, ¿¡te das cuenta en que problema te has metido!? —Me grita desde arriba; suelto un quejido por la presión que ejerce pero mantengo el rostro fruncido, soportando el dolor.

—¡Eres un erizo despreciables y malparido! ¡Nunca debí confiar en ti!, ¡nunca debí de hacerme ilusiones con un monstruo como tú! ¡jodete, Shadow! ¡Jo-de-te!  ¡TE VAS A JODER!— exploto en llanto por lo que acaba de decir, me duele el pecho y sé ahora que es por la decepción que me he llevado...ese dolor no se compara con el de mis costillas rotas...

—¡La que se va a joder eres tú cuando sientas mi mano atravesar tu pecho! —Me sujeta de la blusa y yo chillo por los movimientos; otra punsada en mi pecho me atormenta y lo único que mi cuerpo cansado puede hacer es moverse como loco para intentar safarse.

—¡Sueltame!

Me azota contra el árbol más próximo y pone su antebrazo izquierdo contra mi garganta cortandome la respiración —Llegaste como una estúpida cualquiera, —veo con mi vista cansada como su mano derecha se ilumina entre colores amarillo-verdes —¡y ahora te irás a la mierda como la inútil que siempre fuiste!

Fin del Flashback

Un escalofrío me hace moverme y Silver toma mi hombro con cierto pánico, ¿Por qué?

—Amy, hay alguien por aquí, escucho sus pasos —Lo que ha dicho me hace recobrar la guardia, quito los audífonos por completo guardándolos junto al teléfono y pongo mis oídos alerta...

Plaf... plaf... plaf...plaf

Un andar suave entre las hojas...no puedo creer que...

Doy unos pasos más rápidos para cruzar una mata de arbustos espesa y salgo a otro sitio árido como el anterior...me quedo estática al encontrar al dueño de aquel andar sospechoso...

—Sh-Sha... —Silver me alcanza y yo me trago la lengua, no pude terminar de decir su nombre.

Escala con facilidad un árbol y parece está por marchar sino fuera que, de lo más profundo de mi ser, mi diafragma me responde.

—¡Shadow! —Sus piernas se doblaron a punto de pegar otro brinco, pero, al cabo de unos segundos, recupera la postura, girando hacia nosotros.

Estiro mi palma hacia atrás tomando el hombro de Silver, ejerzo cierta fuerza e intento calmarme pero no puedo; al menos el erizo albino no se queja. Mi corazón palpita muchísimo más rápido de lo que imaginé en un momento ante este encuentro, pero, no lo sé... ¡Maldita sea, Amy! ¿qué te sucede?

Con un esfuerzo grande miro su rostro, parece que verme a mi o a Silver no le inmuta en lo más mínimo, no le afecta, ¡¿Me seguiré preguntando cómo carajos le hace para estar tan sereno!?

—¿Piensas decir algo importante o has venido a quitarme el tiempo? —«Crack» no sé si ese ha sido el sonido de la ruptura de mi orgullo, de mi esperanza, o... ¡Qué sigo siendo igual de dramática!

— ¿Dos años y sigues siendo un amargado, un grosero...un Emo?  —Ni una sonrisa, ni una queja, ni ninguna expresión, ¿por qué? Esto me está preocupando...siento un extraño miedo en mi pecho.

—¿Y también dos años para que sigas siendo una niña reprimida, mimada y...débil? —¿Qué le pasa...? ¿Acaso espera que...? Bajo la cabeza para no verlo mientras unas palabras llegaron de golpe...unas palabras que en su momento también me dolieron y mucho...

«La gente no cambia porque se lo digan, por alguien...Sólo uno decide si cambiar o no.»

—No cambiarás nunca... ¿verdad?

—¿Por qué he de hacerlo si tú tampoco lo haces? —Esas palabras me hicieron volver a mirarle; suelto a Silver y doy un paso separándome por alguna razón; él baja del árbol de un brinco y camina un poco, pero queda todavía a unos cuatro metros de nosotros—. Sólo mirate, estás llorando...como siempre lo haces.

Mis piernas comienzan a temblar, siento frío en todo mi cuerpo; recuerdo claramente la primera frialdad con la que me topé cuando lo busqué y terminamos en el parque... Él encima de un faro, y yo...debajo...tan pequeña...él quiere que me sienta pequeña otra vez.

Flashback

Shadow ya no me dijo nada, seguió dando la espalda...pareciera que medita mis palabras, para luego escupir muy seguro:

—Si no me convences en quince minutos, pienso quitarte lo patético que te queda y eso es la vida.

Fin del Flashback

—¡Agh! Eres...idiota... —murmullo pasando mi antebrazo por mis ojos y dándole la razón a lo que dijo...unas lágrimas se me han escapado por sentir esa barrera y nada de empatía con Shadow—, pero, ya sé lo que quieres y con gusto lo complaceré.

—¿Qué dices...? —Mis palabras le sorprenden, se cruza de brazos con un rostro más interesado y divertido... — ¿Estás...?

—Venga, vamos a divertirnos un poco —expulso quitandome la cangurera y lanzando el resto de cosas a Silver. Él las atrapa y puedo ver sorpresa en sus facciones ante lo que estoy haciendo— ¿Qué te parece si me das quince minutos para lograr tener tu atención en el resto de día?

—¿Y si no te quito tu patética vida? —Sonríe con malicia, empiezo a reconocerlo.

—Sí, pero no ocuparé ni diez minutos, así que borra esa sonrisa.

—Ven y quitármela tú —Jamás sentí mi espíritu engrandecerse ante palabras tan provocadoras...esto será una verdadera prueba y una marea de recuerdos.