Capítulo LXII

-Narra Scourge-

El llegar ayer por la noche y no ver más que oscuridad acompañada de sollozos solidos y desgarradores tan contagiosos...jamás había oído a una hembra llorar así; el silencio tan profundo y que, sea invadido sin miramientos por una voz chillona pero que...en parte siempre ha sido alegre... ¡joder! No creí que realmente podría tomarle este valor a Rose.

Ahora, por la mañana, no encuentro la manera de enterarme de las cosas; quizá debería de simplemente actuar normal...después de todo no debería saber nada de lo ocurrido pero...joder como me está costando creerme estas mentiras tan pendejas. Como una fruta para saciar mi hambre matutina, dudo que sea el medio día, todavía es temprano y la calma y cierto aire fracturado en sentimientos y promesas se palpa.

Suspiro sentándome en la mesa y coloco mi celular sobre esta...tengo la noción de que recibiré una llamada pronto de parte de Fiona y si es así...seguro me da noción de la situación...Veo el martillo de la eriza en la mesa y los recuerdos regresan de hace dos días...

-Flashback-

No es hora de dormir. ¡andando, idiota! Es hora de que muevas tu culo... Un robot había derribado a Shadow con su garra metálica, me sorprende saber que tarda en reaccionar pero no puede estar grave...no debe.

Los robots cangrejo son más y más, hasta el punto de rodearnos una oleada de los mismos. Utilizo spin dash para atacarlos en colectivo y funciona pero no es suficiente.

La eriza comienza a gritar y yo no estoy en la cercanía de ayudarle...Shadow se levanta con pesadez del suelo y quiere acercarse a Amy pero de inmediato, unas explosiones cerca de su radio se muestran y el escombro junto con el polvo se alzan en compañía de un silencio que dicta muerte...que bien que esté equivocado en mi dramatismo.

Al igual que Shadow le sigue sorprendiendo Rose, eso mismo pasa conmigo, Amelia evitó que la explosión fuera catastrófica al crear una esfera de energía protectora girando su martillo con suma velocidad...«¿en qué momento esta niña ganó estas habilidades

Llegamos ambos machos a su lado y Eggman se nota furioso, pero tampoco es para tanto, nosotros no le hemos atacado en lo absoluto.

—¡Tu cabeza! ¿estás bi-? —La eriza nota la sangre escurrir de su nuca de Shadow pero él no le da importancia, este ignora e interrumpe sus palabras para que, mejor, él se preocupe por el estado de ella que, se nota algo agobiada y golpeada—. No es nada, en ese caso estamos igual —Bromea con él... a cambiado un poco.

Tampoco es para tanto, ahora protege tu espalda.

Para nada, es hora del siguiente y último paso.

La eriza se encarrera dejándonos estáticos, delante de ella se apoya y brinca con ayuda de un automóvil y su altura es tan sorprendente que sin soltar el martillo llega justo con Eggman y le proporciona un Hammer attack y no precisamente en la nave... ¡ugh! Hasta a mi me dolió.

Se sostiene por segundos en lo que podría ser el parabrisas para caer otra vez impulsada de la carcasa de la nave.

¡Rose Typhoon! —grita con éxtasis golpeando el suelo con su martillo. Una onda expansiva hace que cubramos nuestros cuerpos por impulso pero no hubo necesidad, pues sólo los robots faltantes fueron los destruidos sin afectarnos a nosotros...Pero, cuando la eriza se aparta por la onda suelta el martillo y este cae en pedazos al suelo. Parece que la fuerza a salido por cualquiera de los canales posibles y el martillo no la ha soportado.

Eggman gruñe en el aire sin apartar su palma del rostro, parece que el golpe de la rosada fue mas efectivo de lo esperado.

—Todos me las van a pagar...TODOS... —amenaza el doctor de manera intimidante y...perturbadora. Marcha sin decir algo más sobre su nave y nosotros no tenemos deseos de interponernos.

No me espero para sentarme en el suelo de manera suelta, me siento algo agitado pero no con exageración; Shadow no quiere copiarme así que solo se acuclilla a ras de suelo y sujeta con una de sus manos su nuca...ahora veo que la sangre permanece seca entre sus púas pero, su guante aún se ha empapado de frescura carmín.

—Querido, no estás bien... —«¿querido?» no si sentir repugnancia ante ese mimo...—. Tu cabeza aun sangra...

—¿Y estarás sumamente bien? Porque yo no lo veo... —Un sarcasmo plácido es expulsado por el azabache y causa que la eriza se revise de arriba a abajo...

Sus ojos se nublan un poco y se deja caer en el suelo mientras pasa por uno de sus costados su palma, manchándose de sangre al instante también.

—Volveremos a la casa y será mejor que te rehabiliten, sin peros.

—Mejor en la casa, Shadow, también te pondré una gasa en la cabeza.

—Y a que me muerda un jodido perro. —digo sarcástico al ver que sólo se preocupan por ellos dos; no es que esté mal herido o algo pero me molesta tanto dulce en el aire.

-Fin del Flashback-

—Bastante raro que te encuentres tan temprano y sin estar viendo la televisión... —Aparece el erizo del que tenia algunas preguntas pendientes...pero tampoco deseo mucho que me las responda.

—¿Sabes algo?...n-no —mirando perdido mi durazno, me trabo y dudo en escupir mi oración, carajo—...no hubiera querido llegar por la noche para notar y respirar el ambiente tan cruel con el que me he hallado... —Parece que mi comentario le cae de peso; se sienta frente a mí y baja la mirada de igual manera meditando en lo sucedido...sé que le duele más que mí... Lo sé—. Quizá podemos...

—No hace falta —interrumpe con una voz resignada—, simplemente... Sigamos con esto. No importa ya en lo que la hemos cagado, estamos a punto de finalizar esto.

—Pero...esta Amelia... —Es increíble que me sienta así por ella, por alguien que me causaba una molestia tremenda como una piedra en el zapato pero que, ahora que he llevado más de cuatro meses conviviendo con esa eriza...no me cabe en la cabeza que sienta una extraña sensación de lastima y cariño.

—Oye, ¿en serio? ¿acaso ahora tú eres el tonto que quiere cambiar de dirección?

—Me agrada que aceptes que tu fuiste el primer tonto en echarse para atrás, porque sabes perfectamente que te encariñaste con ella...

—Basta, no diré nada al respecto...—¡Ja! Ahora tengo que aguantarme el que quiera evadir su culpa, ni crea que me lo trago—, y si fuera verdad, fue sólo una "recaída" ahora, seguimos en el plan y tú también lo harás.

Cuando quise reprochar la vibración del teléfono sobre la mesa me hace coger el teléfono y mirar la pantalla con frustración: la llamada de la zorra colorada ha llegado y Shadow se levanta de la mesa observando el piso de arriba, asegurándose de que Amy no esté por escuchar.

—¿Si, Fiona? —respondo con indiferencia, supongo que es la situación la que no me tiene tan contento y a gusto.

Juro que no creí que lo haría, en serio. Te veías tan seguro de que él estaba perdido y...

No importa, creerme, palabras mas palabras menos... —Dirijo una mirada de soslayo hacia el azabache que está interesado en lo que pueda informarme la mamífero—, ¿Qué a sucedido en estas horas?

...No cómo expresarlo...hasta a me cae de peso toda la situación.

Estoy igual, pero ya vamos por el último paso.

Lo ...bueno, posiblemente Rouge vaya en la tarde o la noche, se ha enterado muy temprano y hasta parece que se la ha creído de verdad...

Estúpida... —musita Shadow con molestia; aunque no lo diga sé que le irrita y molesta también toda la situación.

—Bien, al menos ya lo sabemos, solo espero no llegue y cague el plan. ¿otra cosa más que deba saber?

—...creo que no; yo quiero saber, ¿qué hago?

Bajo un poco el teléfono para hablar con Shadow sin expulsar palabra, él sólo mueve su mano hacia adelante expresando que vamos al siguiente paso.

—Es hora de que salgas de ahí, tienes la ubicación de Eggman ¿no? Ahora sólo queda informarle y agarrarlos en el punto débil.

¿Ubicación de Eggman? Yo no donde está ese gordo... -Su pausa me hiela la sangre, ¿cómo no lo va a saber? Era de saber que ella está más que informada del plan y de los siguientes pasos—, ustedes tienen que decirme donde está.

—Nosotros tampoco sabemos el paradero de Eggman —Ante aquello Shadow se nota alarmado, lo miro con esa misma alarma en mis ojos, reacciona con más atención a la conversación—, la última vez no dijo nada, con decirte que ni las esmeraldas le hemos entregado porque no nos ha dicho nada.

¿¡Qué!? Pero las esmeraldas tenían que estar ya listas con la Máster Emerald para hace dos o tres semanas... ¡entonces el plan va retrasado!

Soy el que ahora mantiene el silencio... No lo entiendo, no entiendo ahora en qué momento tergiversamos el plan todos...

Shadow me arrebata el teléfono y reacciono tarde, tampoco le doy mucha importancia.

—Vamos a aclarar unas cosas y después te llamamos, Fiona —habla Shadow con firmeza-, mantenernos al tanto de los movimientos de los chicos nada más.

A los pocos segundos cuelga y me regresa el teléfono y una vez más, estamos en shok.

-Narra Shadow-

Si tan sólo el dolor provocado por los acontecimientos de ayer hubiera desapercibido... Desapareció dándole paso a uno de rabia e incluso impotencia.

El gordo no me ha marcado desde la última vez, ¿por qué? Tampoco hemos encontrado nada de Fakir y las esmeraldas... ¿por qué? Y no e olvidado a la lata copia del Faker que no ha vuelto a hacer desastres... ¿por qué?

—¿Por qué?... —Pienso en voz alta mirando el piso, quisiera poder tener una explicación coherente a todo esto y...siento que comienzo a tenerla...pero el pensar en esta opción me abre un hueco en el estómago.

—Noto que estás preocupado, y ya, estuvo bueno de negaciones, ¿qué está pasando? —«tú también lo estás» pienso mirándolo de manera rápida...

—No lo sé Scourge, tengo una teoría que estoy queriendo sacar de la cabeza para evitar tener una mala pasada.

—Sea como sea no podemos avanzar de todas formas, ¿Cómo hacerlo si no tenemos nada de idea de lo que está haciendo Eggman?

—Decirme, si no tienes idea y nadie la tiene con respecto a Eggman, ¿no te preocupa saber qué está haciendo realmente? o mejor aún, ¿por qué no sabemos si estamos con él muy bien metidos? —. Hasta decirle me ha dado un espasmo en el cuerpo pero es verdad, él lo ha captado y se nota sorprendido y confuso a la vez...hasta parece que quiere soltar rabieta.

—No importa lo que haya pasado hace meses con él, parece que el plan ha cambiado y hemos sido excluidos. —sentencio caminando hacia arriba, no hay comunicación entre ambos ya y es intencional por la tensión que se ha liberado.

Llego al piso de arriba con las ganas de ver a Rose...si ha hecho una locura que no sea contra ella misma, es lo único que deseo. Pero la sorpresa me la he llevado ante la repentina abertura de la puerta sin siquiera todavía tocar.

Me quedo estático viendo su cuerpo recaído y pálido, los sentimientos se le marcan en el rostro; alza la cara para verme pero no se sorprende por estar fuera del marco de su cuarto, es completamente inexpresiva y ante el silencio, expulso:

—Rose, debes comer algo, ¿acaso lo hiciste?

—¿Crees que lo hice con esta cara y este dolor en el alma? —Abre más la puerta y veo de manera rápida el cuarto: es un completo desmadre lo que hay ahí dentro.

Suspiro mirándola con cierta recriminación—. Rose...

—No quiero hablar, Shadow, no quiero...no quiero nada...

Pasa de largo en bata y parece que se dirige al baño, «maldita sea con mi pútrida existencia» no tengo ni siquiera la cercanía o la voluntad de ayudarla...además, ¿Cómo hacerlo? Sólo me queda liberar y sacar todo secreto a la luz de una vez por todas.

—Y bien, si esto se ha salido ya de control, ¿qué haremos? —No noto el momento en que Scourge llega a mi lado para susurrarme aquello; Amelía azota la puerta del baño y me doy la libertad de poder hablar con el verde.

—Buscaremos a ese doctor, rastrearé la llamada de hace semanas que me hizo y si no lo hallo...

—¿Qué? —Su expresión es de locura, de sorpresa y hasta de terror por lo que vaya a responderle.

—...Me encargaré de sacar toda la verdad tras lo que hemos hecho.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top