Estamos esperando gatitos.

Atsushi estaba sentado en la taza del baño, Akutagawa estaba sentado en el piso de azulejo del baño. – Oye, pero no es tan grave ¿no? No es el fin del mundo

-          Supongo que no, pero es que

La alama sonó, Akutagawa apago su celular, Atsushi trago saliva, suspiro, su mano temblaba mientras subía aquella prueba en su mano, la mira, sus ojos se llenaron de lágrimas, Akutagawa se levantó viéndola – hay por satán, es positivo

-          ¿Qué hacemos?

-          Pues, lo que tu quieras hacer

Atsushi tapo su rostro. – Ryunosuke...

-          Es que es tu cuerpo, aceptaré lo que tú quieras Jinko

-          Pero ¿tú que piensas?

-          ¿Qué puedo pensar? Le he arrebato la vida a muchos ¿Cómo podría opinar en algo así?

-          ¿tú quieres?

-          Yo... no lo sé ¿y tú?

-          Tampoco sé

Ambos salieron del baño, Atsushi no había parado de llorar y Ryunosuke estaba más que perdido. Miro a Atsushi quien intentaba limpiarse, pero volvía a llorar, se le acerco para tallar sus hombros y brazos – Atsushi... cariño ¿quieres tener al bebé?

-          No sé nada de bebés ¿Cómo tendríamos uno así de la nada? Ryunosuke tenemos saliendo apenas unos meses

-          Pues, tendremos más del año para cuando el bebé nazca – menciono algo divertido, Atsushi pudo calmarse – no tengas un ataque de pánico... Ven, te daré algo acido...

-          Gracias...

Fueron a la cocina, Atsushi se sentó en la mesa mientras el mayor busco unos dulces de goma de limón, se lo dio a Atsushi y solo así pudo calmarse, - Atsushi, en verdad, sabes que te daré todo...

-          Si, yo... Quiero hablar con la doctora Yosano, ¿podemos?

-          Claro, si ella acepta acercarse a mi

-          No te tiene miedo, nadie en la agencia, excepto Kyouka-chan, y creo que ya no mucho

-          Yo creo lo mismo, entonces ¿vamos?

-          Si, pero quiero que te termines tu gomita

-          Si...

Atsushi llamo con la doctora, quedaron de verse en una cafetería, Atsushi y Ryunosuke fueron allí, ordenaron mientras la esperaban, Atsushi pidió té para relajarse, Ryunosuke café, pidieron agua para Yosano, por suerte y llego Yosano. – Bien, me llamaron como algo urgente, ¿Qué paso? – pregunto al sentarse

Atsushi comenzó a temblar, Ryunosuke tomo su brazo – oye, tranquilo

-          ¿Qué les está pasando? Atsushi, nos pediste que entendiéramos tu relación entonces

-          Por favor no sea tan dura, está nervioso.

Atsushi volvió a llorar, miro a Yosano con lágrimas – Yosano-sensei, estoy esperando un bebé...

Yosano se sorprendió, - hay por dios... - expreso. Tomo algo de agua y respiro – bien, ¿Cuánto tiempo?

-          No lo sé, hicimos una prueba hoy

-          Salió positivo

-          Debemos ir al hospital, un examen de sangre será mejor – menciono – pero ¿Por qué me citaron entonces?

-          No sé qué hacer – dijo Atsushi – Ryunosuke dijo que me dará todo, me apoyará, pero...

-          Si, entiendo. Dime ¿Qué quieres saber?

-          No sé. ¿puedo hacer esto sin saber nada de bebés?

-          Si, puedes, tienes a toda la agencia para apoyarte, y tu novio

-          Ryunosuke tampoco sabe de bebés

-          Nos tienen – repitió – Si quieres tenerlo te enseñaré, a cargarlo, bañarlo, cambiarle el pañal, todo, después otros cuidados como tomar su temperatura, arroparlo

-          Comprendo... - menciono - ¿es difícil?

-          Es agotador, y hasta cierto punto difícil pero no es algo imposible.

Atsushi miro a Ryunosuke, esté también le miro, aunque se sentía preocupado, su mirada era tranquila – dime lo que quieras Jinko.

-          Qui-quiero ir al hospital, saber cuanto tiempo tiene, y... si está bien, y si está bien... Bueno

-          Entiendo. ¿vamos?

-          Si, claro

Ambos se levantaron, Atsushi seguía sentado, - ah, sí, voy

Akutagawa le dio la mano, Atsushi la tomo y siguieron a Yosano.

Llegaron al hospital, Atsushi tuvo un examen de sangre, y se quedaron sentados esperando. Ryunosuke consiguió unas galletas para Atsushi. Yosano fue a platicar con la enfermera, - Atsushi, ¿Qué hay en tu cabeza?

-          Bebés llorones y popo

Akutagawa intento no reír, para su mala suerte, una señora llego con su bebé, estaba dentro de su carriola dormido, Atsushi lo miro ligeramente – Nakajima Atsushi – lo llamo una enfermera.

El chico se levantó y fue por sus papeles, Yosano también se acercó, tenía 5 semanas, Yosano les explico que podían pensarlo por dos semanas más, aun podían interrumpir el embarazo. Así que ambos chicos se fueron a la casa del mayor, allí vieron a Gin acomodando despensa. – Gin, llegaste temprano

-          O ustedes tarde, ¿paso algo? Creí que irías a la base

-          Si, pasaron cosas...

-          Gin, ¿puedes aconsejarme? – pregunto Atsushi

-          ¿paso algo malo Atsushi?

-          Siéntense, arreglaré la despensa mientras

Gin y Atsushi se sentaron, la chica llevaba su cabello suelto, sin mascara y solo su ropa de trabajo – verás... Gin, estoy... estamos, tu hermano y yo, estamos esperando un bebé. – explico. Gin tapo su boca sorprendida, pero sonrió, aun viendo a su hermano y cuñado con malas caras, se atrevió a preguntar

-          ¿debo felicitar o no? – pregunto confundida

-          Lo que salga de ti – dijo Atsushi. Gin se levantó, se acerco abrazando con fuerza a Atsushi y le sonrió

-          Estoy feliz, gracias Atsushi. felicidades y felicidades, hermano

Atsushi volvió a llorar y Gin tallo su espalda, - ya Atsu, eres un lindo tigrecito, llora, y llora. Tu cuñadita linda está para ayudarte en todo.

La verdad hablar con Gin había sido bueno, la hermana había dictado ser parte de todo, ayudaría en el cuidado, tiempos libres, compras compulsivas, todo, incluso, se había puesto a ver ropa para bebé y mamilas por internet. La pareja había ido al cuarto del mayor – te quedas está noche Atsushi

-          Si, es tarde – respondió sentado en la cama, suspiro profundo – Ryunosuke, ¿debemos tenerlo?

-          Mira, Atsushi, si yo no llevará la vida que tengo, lo pensaría dos veces, pero diría que lo tengamos. La vida que llevo es difícil, por eso no me siento capaz de opinar

-          ¿Por qué no? ¿puedes darme un ejemplo?

-          Por ejemplo, lo tenemos

-          Aja

-          Y a mi me pasa algo, a Gin también. Te quedarías solo con el bebé, claro, tendrías a la agencia, pero tú y el serían unidos de sangre únicamente, no habría "papá Ryu" o "tía Gin" y eso puede pasar siendo un bebe, un niño o un adolescente

-          Comprendo... Tiene sentido que sería difícil explicarle lo sucedido de ser el caso

-          Otro ejemplo. ¿Qué tal si quiere ser mafioso? ¿Qué tal si quiere cobrar venganza por mí? Meterse con alguien más, hay muchos factores de mi lado que afectan mi opinión. Por que pienso en su futuro, debo darle un futuro digno pero mi trabajo no es del todo digno... - argumento

-          Ryu... - le llamo acurrucándose en su hombro – solo tenemos horas de saber esto y tu ya estas planeando su universidad

-          Claro, debe ir a estudiar, ser alguien preparado y exitoso, aunque solo quiera música, aunque solo quiera arte, aunque solo quiera una administración o matemáticas, ingeniera o un astronauta, lo que el quiera, debe serlo.

Atsushi se quedo acurrucado, Ryunosuke lo miro y comenzó a tararearla una canción, tanto estrés sobre el cuerpo del agente termino dejándolo dormido, el mafioso acomodo al menor y sonrió – en verdad quisiera tenerlo, pero tu serías el más afectado... lamento dejar tal decisión en tus hombros, pero tampoco puedo obligarte a nada. – beso su frente – estoy de acuerdo con lo que decidas, te amaré por siempre...

Para finalizar su dialogo, se acercó delicadamente al vientre del menor el cual también beso, le quito la ropa de oficina a Atsushi y le dejo una más cómoda puesta. Tapo al menor y suspiro. Al salir de su habitación vio a su hermana – Gin ¿puedes echarle un ojo?

-          ¿saldrás a trabajar ahora?

-          Si, ya que falte en la tarde, haré ronda de madrugada

-          De acuerdo, yo cuido a mi cuñado

-          Eres la mejor Gin

-          Hermano

-          ¿sí?

-          Yo creo que, no nos pasará nada si somos conscientes de que debemos volver

Ryunosuke la miro, Gin le sonrió con lagrimas en los ojos, ambos hermanos se abrazaron con fuerza – gracias Gin

-          Gracias a ti hermano...

El mayor salió, Gin fue a echarle un vistazo a Atsushi – cuñadito... por favor, quédate con nosotros

Gin adoraba a Atsushi por muchas cosas, fue la luz de su hermano, fue su camino en la oscuridad, fue quien le ayudo a ella a abrirse como persona, creciendo juntos, superándose, y lo más importante, dándole un motivo superior a su hermano. Jamás desearía perder a Atsushi y ahora que tenían la oportunidad de ser una familia grande, Gin estaba motivada a cuidar la relación de su hermano.

...

Esta es una mini historia, tendrá varios capítulos pero en su mayoría serán cortos, espero lo disfruten, será algo soft para alegrarles los días.

¡Gracias por leer!