Phoebe

-Ya ha comido, despertará poco antes de que yo llegué, te dejo su pañalera, pero no creo que la llegues a necesitar-vuelve a asentir, me siento extraña de dejar a mi pequeña, pero lo he planeado todo, no pretendo tardarme más de dos horas, y ella recién se durmió.

-Todo estará bien, yo la voy a cuidar, además, tu tía no tarda en llegar.- me despido de ella y salgo de mi casa. Me subo al auto y me dirijo a la casa de Susan.

Durante el camino se escucha en todo el auto una música de fondo y hace que me relaje un poco, los nervios me están invadiendo, siento que algo va a pasar hoy, pero tengo la esperanza de que solo sea un mal presentimiento.

Al llegar a la casa de Susan está sale vestida con un vestido color salmón y unos tacones blancos, su característico peinado con unos rulos en el pelo. Entra al auto y me saluda, se percata de mis nervios y me pide que me relaje, en verdad espero que todo esté bien.

Nos detenemos en un semáforo, cantando una de las canciones de la radio, aún faltan cerca de 4 cuadras para llegar.

-¡Cuidado! - grita Susan a medio cruce, siento como un golpe hace que el coche derrape. Sudán se queja y yo golpeó el volante del coche con mi cabeza en repetidas ocasiones. Giro a ver a Sudán notando como aquel vestido estaba manchado de sangre y provenía de su muslo, al tener un vidrio en el mismo.

-Susan ¿Estás bien?

Susurro girándome a verla pero antes de hacer nada otro coche nos golpea por detrás, haciendo que mi cabeza se golpee esta ocasión con el vidrio de la ventana. La sangre en el cuerpo de Susan me impulsa para levantarme pero antes de lograr verla siento una punzada en la cabeza y mis ojos se cierran.

Narrador Omnisciente

Una de las personas que se encuentran en un local cerca del accidente llama a una ambulancia, no sabe dar muchos detalles, pero prometen en mandar una ambulancia al lugar lo más pronto posible. .

Muchos automovilistas han salido a ver qué es lo que ha pasado, el auto que impacto con el de Phoebe se ha ido. Y un señor saca a una señorita en vestido color salmón del coche, está completamente inconsciente y sangrando de su costado derecho; por otro lado una señora se acerco al cuerpo de Phoebe y está igual, a diferencia de que le sangra la nariz.

La ambulancia llega al lugar unos minutos más tarde; dos paramédicos atienen a casa una. A Susan le colocan un tubo para que puedan ponerla la. Bolsa de oxígeno y a Phoebe le conectan la máquina para resucitarla.

Ya en la ambulancia, han logrado que las dos tengan buen sonido cardíaco y gracias a las ventilaciones manuales respiran, pero en ningún momento despiertan.

-Hay que detener la hemorragia. Recibió un golpe en el costado derecho, seguro hemorragia interna y no olvidemos el pedazo de vidrio que le atraviesa la pierna..

-Estamos llegando al hospital, manténganla estable. .

Dylan

Termino finalmente de arreglar el papeleo del asunto Firtz y me recargo en mi silla, veo el reloj en mi computadora y marca las 12 de la día. Phoebe ya debió de haber regresado a casa con Mia. Decido llamarla, Un tono, dos tonos y me manda al buzón, lo intento un par de veces más y pasa exactamente lo mismo.

Me levanto de mi escritorio y camino por la oficina mientras continuo llamándole; llamo a su oficina pero nadie contesta, cuelgo de golpe y me paso las manos por el pelo frustrado ¿Dónde estás? El teléfono de mi oficina suena y lo levanto

-Dime, Rita

-Señor, disculpe que lo moleste, pero su reunión será en cinco minutos.

-Ahora salgo.

No podré concentrarme, Phoebe no contesta y no sé donde rayos está..

****

-¿Si? -contestó saliendo de la reunión, me extraño que fuese un número desconocido

-Dylan... Phoebe está en el hospital...

-Tranquila, tranquila. Dime que paso o en donde estás y me dirijo para allá.

-En el hospital donde nació Mia.

-¿Y Mia?

-Está con Karen.

-Llego en quince minutos.

-Lo lamento, mi novia está en el hospital. Tengo que irme ¿Podemos vernos otro día?- todos asienten y salgo disparado de allí a mí oficina, al llegar tomo las llaves de mi carro.

Cuando llego al hospital me estaciono en un lugar y corro hacia la entrada.

-¿En qué puedo ayudarle?- pregunta la mujer de la recepción.

-Vengo a ver a una persona que entró de emergencia hace un rato. De un accidente de tránsito.

-Sí, Phoebe y Susan. Piso tres habitaciones 45 y 58.

Llamó al elevador el cual no demora en abrirse y llevarme al piso. Al final del pasillo noto de espaldas a la tía de Phoebe junto a su hermana hablando con un doctor.

-Ambas pacientes están en coma... Solo queda esperar...

Un nudo se forma en mi garganta y niego un par de veces. Esto no puede estar pasando, Phoebe tiene una hija, ella la necesita y ahora, no... No puede ser este el final de la mujer que amo.